MIguel A. Palomino - ¿Qué le pasó al culto en América Latina?

Здесь есть возможность читать онлайн «MIguel A. Palomino - ¿Qué le pasó al culto en América Latina?» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

¿Qué le pasó al culto en América Latina?: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «¿Qué le pasó al culto en América Latina?»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

¿Qué le pasó al culto en América Latina? Es la pregunta fundamental con la que el autor analiza críticamente la realidad del culto evangélico en esta parte del continente. En esta tarea parte de una hipótesis de trabajo según la cual el fenómeno de la renovación de la alabanza ha generado un estilo de culto que ha incidido en la desaparición de las fronteras denominacionales en el mundo evangélico, hecho que, a su vez, ha producido lo que los estudios llaman «migración religiosa». Este análisis es complementado con una descripción panorámica del culto en las últimas cuatro décadas, centrándose en lo que actualmente se conoce como culto renovado.
El autor nos invita a pensar en el culto contemporáneo teniendo en cuenta nuestro trasfondo protestante; vale decir, los modelos litúrgicos que trajeron a estas tierras los misioneros procedentes tanto de Europa como de los Estados Unidos. El libro concluye con el esbozo de una teología íblica del culto como marco de referencia para entender la forma y la naturaleza de la adoración a Dios en el culto cristiano.

¿Qué le pasó al culto en América Latina? — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «¿Qué le pasó al culto en América Latina?», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Por su lado, el himnario cumplió un papel de “cons­trucción de fronteras”, como dicen los sociólogos. Estas fronteras religiosas, antes que dividir, daban identidad denominacional, pues uno podía identificar claramente a qué iglesia pertenecía un creyente tan sólo mirando su himnario. Por años, en los cultos sólo se cantaban himnos, pero, a partir de esta década, comienza a popularizarse un nuevo estilo musical llamado “coritos”, que Manuel Bonilla, Leslie Thompson, Bruce del Monte y otros músicos empe­zaban a promover en América Latina a través de la radio hcjb y otras emisoras locales.

El corito era una pieza musical corta comparada con el himno clásico (de ahí su nombre), escrita generalmente por autores latinos, quienes, en la gran mayoría de casos, prefirieron quedarse en el anonimato 13. La letra de los coritos era más testimonial que doctrinal, y tenían música y ritmo pegajosos haciéndolos fáciles de memorizar y cantar. El hecho de que no estuvieran escritos, hizo que se propagaran oralmente de iglesia en iglesia sin casi importar la denominación, escapando así del control del liderazgo conservador, receloso en preservar sus propios distintivos denominacionales. Pero cuando ellos detec­taban ciertos rasgos particulares, especialmente de la iglesia pentecostal, entonces retocaban un poco las letra para admitirlos en sus congregaciones. Esto sucedió, por ejemplo, con el corito Ardiendo en fuego, que se modificó en una línea de la segunda estrofa para poderse cantar en iglesias no pentecostales (la línea modificada aparece entre corchetes).

Ardiendo en fuego mi alma está,

Gloriosa llama me limpiará,

Oh, aleluya, mi alma ardiendo está.

Oh, Señor, quiero que ardas en mi ser,

Como la zarza quiero arder con tu poder.

En nuevas lenguas quiero hablar como señal

[A los perdidos ganaré como señal],

Que estoy ardiendo con el fuego celestial.

Quiero alabarte y adorarte sólo a Ti,

Como se adora en espíritu y en verdad.

Oh, Señor, quiero que ardas en mi ser,

Como la zarza quiero arder con tu poder.

La influencia de los coritos, pronto se hizo sentir en el culto. La congregación los cantaba acompañándolos con las palmas, panderetas y otros instrumentos musicales más nuestros, porque, al no estar escritos en partituras, los organistas no podían tocarlos. Esto hizo que los creyentes cantaran los coritos llevando el ritmo con sus cuerpos y rompiendo así la rigidez de la liturgia que hasta ese entonces había caracterizado a las iglesias no pentecostales. De su incursión en los cultos, los coritos luego pasaron a formar parte de los himnarios, aunque a manera de apéndice, tal como se puede observar en las ediciones publicadas en la década de 1970 de Himnos y cánticos del evangelio, Himnos de la vida cristiana entre otros. Durante la década siguiente, se popularizarían mucho más aún, haciendo que muchos viejos himnos perdieran vigencia.

Década 1970: Culto contemporáneo

En esta década, la iglesia experimenta la influencia de dos corrientes que se dieron en América Latina. Por un lado, la del Movimiento de Renovación Carismático, que afectó prácticamente todo el Cono Sur 14, y por otro, la de un fuerte nacionalismo que buscaba rescatar los valores culturales autóctonos de la región, en parte porque en esta década prácticamente todos los países latinoamericanos estaban bajo dictaduras militares.

Las iglesias, entonces, empiezan a cantar más himnos y coros de autores latinos que cancioneros como Corazón y vida y el Cancionero abierto (ambos publicados en Argentina) daban a conocer en sus ediciones. Además, tal vez por primera vez, las iglesias se animan a incluir cantos con melodías autóctonas en sus servicios. Algunos grupos folclóricos, como el Trío Mar del Plata de Argentina, Oasis de Chile, y Kerygma del Perú, ayudan a cambiar la con­cepción del uso de la música folclórica en la adoración y la evangelización. De esta manera, surgen muchos conjuntos musicales juveniles, los cuales terminaron desplazando a los dúos, tríos y cuartetos de los años pasados.

En un sentido, los cultos experimentan un cambio, pues buscan más participación de la gente, son más espontáneos, informales y, por lo tanto, un poco más largos. Asimismo, ahora usan más música moderna, acompañada con batería, bajo y guitarras eléctricas, algo nunca visto hasta ese entonces. A nivel de juventud, se comienza a sentir la influencia de los coros traducidos del inglés, como “Miro astros que mi Dios creó” (He´s Everything to Me) 15, de Ralph Carmichael, o “A Dios sea la gloria, de Andrae Crouch (My Tribute o To God Be the Glory) 16. Muchos de estos coritos fueron bastante populares; así ocurrió, por ejemplo, con “Una mirada de fe” y “No hay Dios tan grande como Tú”. El hecho de que el órgano —instrumento “oficial” en las iglesias en esos días— no se prestara tanto para tocar los coritos, llevó a que los jóvenes más y más tocaran la guitarra en los cultos (aun cuando en forma muy limitada, porque en muchos círculos era considerada un instrumento no propio para la adoración), lo cual propició controversias, pues los creyentes más conservadores temían que con la guitarra también se introdujeran a la iglesia otras costumbres “mundanas”.

Además de la música, se continuó enfatizando la predicación como la parte más importante del culto, manteniendo los domingos en la mañana el esquema de culto de adoración y edificación, el culto evangelístico los domingos en las noches, y el culto de oración a mitad de semana.

Década 1980: Culto televisivo o de entretenimiento

En estos años, la “iglesia electrónica” hace sentir su pre­sencia en nuestro continente 17. Se observa en las iglesias una tendencia a imitar el formato televisivo de los shows de ptl y Club 700. En esta década, también muchas con­gregaciones empiezan a comprar o alquilar teatros y cinemas para convertirlos en templos, fenómeno que ha continuado hasta el día de hoy 18.

Sin duda, esta modalidad hizo que algunas iglesias optaran por —y adoptaran—una liturgia de los medios que, según el comunicador peruano Rolando Pérez, muestra una apropiación significativa de la estructura del mundo del espectáculo. Pérez dice:

En el interior [de las iglesias], el decorado, la ubi­cación de los equipos electrónicos, el sonidista que controla desde una cabina de audio, el uso de los instrumentos musicales electrónicos, son apropiaciones directas de la tecnología de los medios, pero también de los propios símbolos de la industria audiovisual. Por otro lado, el modo en que el líder o pastor conduce el culto, sus movimientos cuidadosamente ensayados nos hablan de una “puesta en escena” del rito, lo cual modifica la tradicional ceremonia del culto evangélico. En este sentido, los cultos solemnes, los predicadores ceremoniosos o circunspectos, son reemplazados hoy por el pastor-animador, por la palabra estridente, por los aplausos y los cantos entonados con mucho ritmo 19.

Si bien esta observación es válida para un sector de la iglesia (los de corte neopentecostal y carismático prin­cipalmente), notamos que la gran mayoría no se identificó totalmente con este estilo de culto, sino que, más bien, para matizar sus servicios, prefirió tomar ciertos elementos como los aplausos, el modelo del pastor-animador, el reemplazo del clásico púlpito por una plataforma cargada de instrumentos, luces y equipos de vídeos y otros. De cualquier manera, no se puede negar que muchos ele­mentos propios de los medios masivos han sido incor­porados por muchas iglesias modernas; las cuales ahora tienen maquilladores, diseñadores, luminotécnicos, pro­ductores de música y TV, y hasta profesionales que hacen “casting” para seleccionar a los jóvenes (varones y mujeres) que se pararán a dirigir la danza en la plataforma durante los cultos dominicales.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «¿Qué le pasó al culto en América Latina?»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «¿Qué le pasó al culto en América Latina?» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «¿Qué le pasó al culto en América Latina?»

Обсуждение, отзывы о книге «¿Qué le pasó al culto en América Latina?» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x