¿Tiendes a estar demasiado conectado o desconectado de tus emociones?
¿Cuáles son las maneras en que puedes poner atención a sus emociones?
Cuidado relacional . Siempre nos sorprende cuando hablamos con estudiantes que solo tienen “amigos” para los cuales ejercen de cuidadores, y sin embargo una y otra vez nos encontramos con estudiantes que carecen de verdaderas amistades recíprocas. Parte del cuidado relacional consiste en cultivar relaciones en las cuales tú estás igualmente atendido, buscado, cuidado y nutrido como tú haces con los demás. Muchos de los lectores pensarán que esto es algo horriblemente desequilibrado, como si solo estuviesen “recibiendo” de la amistad particular, pero en realidad es simplemente más equilibrado de lo que han experimentado antes. Las relaciones recíprocas a menudo se identifican como aquellas en las que ambos participantes dirían que “obtienen el buen fin del trato” en la relación. Este tipo de relaciones llevan tiempo y propósito encontrarlas y cultivarlas, ¡pero está bien ser exigente! Tu vocación como ayudador te dará la salida que deseas para cuidar a los demás sin necesidad de nada; tus amistades no tienen por qué tener la misma estructura.
¿Qué es lo que me hace sentir incómodo de no ser el “ayudante” en una relación?
¿Qué persona en mi vida es un amigo recíproco?
¿Qué relaciones en mi vida no son recíprocas? ¿Hay algo que pueda pedir, hacer o cambiar que pueda facilitarles el equilibrio? ¿Hay algunas relaciones que necesito dejara un lado para poder avanzar en el cuidado relacional?
Cuidado espiritual . El cuidado del alma es muy importante en la vida del consejero. En su base, la consejería consiste en ser un conducto para que el Espíritu Santo trabaje en la vida de otra persona, y un buen conducto no puede echarse a perder o desintegrarse debido a la falta de su propio cuidado. Simultáneamente, el conducto necesita tener siempre en mente que el poder, el recurso y el cambio no provienen de su propio hacer sino de algo más grande. El cuidado espiritual personal permite que el consejero permanezca en un lugar de humildad y gracia, un lugar que está desbordado por el honor y el privilegio que supone caminar junto a otra persona, mientras que simultáneamente siente el peso de esa responsabilidad santa. Como cristiano, el cuidado espiritual personal incluye varios elementos que pueden ser resumidos principalmente por (1) participación en una comunidad eclesial y (2) participación en disciplinas espirituales.
La participación en una comunidad como la iglesia es algo a lo que todos los creyentes son llamados (Heb. 10:25), pero a menudo se descuida o minimiza porque puede ser confuso y contraproducente. En la participación en la iglesia obtenemos la enseñanza y el aporte de otros y tenemos la oportunidad de crecer relacionalmente y de encontrar amistades recíprocas. Al igual que en la elección de relaciones saludables, también es importante ser diligentes en la elección de una iglesia sana (que no perfecta). La iglesia a menudo cumple cuatro propósitos primarios: enseñanza, adoración, comunidad y servicio. En un mundo ideal cada iglesia haría cada una de estas tareas, pero la realidad es que cada iglesia practica más una de estas tareas que las otras. Nuestra sugerencia para ti es que consideres, a estas alturas del entrenamiento y desarrollo, la tarea que sea de mayor prioridad para ti en tu búsqueda de cuidado espiritual personal en este momento. Luego clasifica las otras tareas y procura una comunidad cristiana basada en esa lista. Así como los consejeros no pueden ser todas las cosas que el aconsejado necesita, ninguna iglesia puede ser todas las cosas para cada congregante. Pero si eres consciente de tus necesidades y prioridades espirituales, será más fácil que identifiques y te adhieras a la comunidad de la iglesia que te conviene.
Datos empíricos
Tan y Castillo (2014) echan un vistazo comprensivo a la literatura sobre el cuidado personal en lo que respecta a consejeros, pastores y capellanes. Los temas comunes encontrados a lo largo de los diversos estudios que Tan y Castillo revisaron incluyeron:
•obtener suficiente descanso
•pasar tiempo con amigos y familiares
•pasar tiempo solo
•encontrar y fomentar relaciones de apoyo
•recibir formación continua, supervisión y consulta
•establecer límites claros y consistentes, personal y profesionalmente
•obtener crecimiento espiritual
•obtener crecimiento personal
•ejercicio
•participar en pasatiempos agradables
•pedir y aceptar el apoyo de otros
•desarrollar una rutina o un ritual al salir de la oficina para ayudar emocional y mentalmente a dejar el trabajo en el trabajo
•mantener y fomentar el sentido del humor
Las disciplinas espirituales son simplemente cualquier actividad que se persigue intencionalmente con el propósito de profundizar tu relación con Cristo. La palabra clave aquí es intencionalmente —ya sea una disciplina de agradecimiento y celebración, de ralentizar el ritmo de la vida o de memorizar la Escritura, el punto es que estás participando deliberadamente en actividades que facilitan tu crecimiento espiritual. Las disciplinas pueden ser cosas que tienes en tu agenda, un calendario semanal, trimestral o anual, pero tienen una posición de prioridad en tu vida. Al final de este capítulo hay una lista de lecturas recomendadas sobre el tema del crecimiento y cuidado espiritual personal.
Sabbath . El sábado podría técnicamente ser incluido bajo el cuidado físico, cuidado emocional o cuidado espiritual. Debido a su significado, sin embargo, pensamos que era apropiado darle al sábado su propia sección. El sábado es la disciplina espiritual del descanso con propósito, y es algo en que la cultura occidental es particularmente pobre en la práctica. A pesar de que es uno de los Diez Mandamientos, el sábado a menudo es algo que tenemos en cuenta solo después de hacer todas las demás cosas que tenemos por delante. En cambio, el sábado es un regalo para las personas, no una carga (Mr. 2:27); es la manera en la que Dios nos recuerda que no solo está bien descansar, sino que es una necesidad. En su sentido más estricto, el sábado es un período de veinticuatro horas en el que el trabajo es intencionalmente puesto a un lado, recordándonos que la provisión viene de Dios y no de nuestros propios esfuerzos. En su esencia, el sábado consiste en cesar el esfuerzo, abstenerse de la ocupación que consume nuestra cultura y tomar un tiempo específico para reflexionar sobre nuestra dependencia de Dios. Te animamos a reflexionar con oración sobre el papel que el sábado necesita tener en su vida.
¿Cómo es el día de reposo en mi vida?
¿Qué temo que ocurra si de verdad practico el sabbath cada semana?
¿Qué espero que suceda si verdaderamente practico el sabbath cada semana?
Independientemente del dominio del cuidado personal, es de vital importancia para tu éxito y supervivencia como consejero la necesidad de atenderte y cuidarte a ti mismo como instrumento. No es egoísta, derrochador o débil tomar tiempo o usar los recursos para atender tus propias necesidades. Los consejeros solamente podrán dar aquello que tengan, y sin cuidado personal los recursos se secarán. Consideremos el cuidado personal como una forma de cuidar de manera indirecta pero poderosa a los aconsejados, al mismo tiempo que obedecemos y honramos a aquel que nos ha permitido servir en este papel.
APLICACIÓN EN LAS RELACIONES
El desarrollo de ti mismo como un instrumento terapéutico afecta no solo a tu trabajo con los clientes, sino también a la forma de acercarte a otras relaciones en su vida. Piensa en esto—crecer en tu autoconciencia, así como en tu capacidad para dar y recibir observaciones, es probable que afecte tus expectativas y deseos en las relaciones personales también. Considera la manera en que cada uno de los temas discutidos en este capítulo forman parte de tus relaciones personales:
Читать дальше