José García Nieto - Poesía

Здесь есть возможность читать онлайн «José García Nieto - Poesía» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Poesía: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Poesía»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Con motivo del centenario del nacimiento del poeta, Fundación Banco Santander reedita esta antología de 1996 revisada, a la que se ha añadido un colofón de textos líricos en prosa —algunos inéditos— que proponen una mirada distinta a la figura del poeta y que de seguro deslumbrarán a los lectores con su aliento poético.

Poesía — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Poesía», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

mientras llega el mediodía.

Cómplice de tu alegría

subirá la zarzamora,

y en el viento, retadora,

serás la mágica espuela

que haga saltar la canela

de mi caballo, señora.

10

Por el surco va la yunta

con su rosario de días,

ensartando mediodías

en el testuz. Se barrunta

temporal. El cielo apunta

su amenaza. Llueve. En cada

piedra hay un verdor. Cansada

se abre la mano, contenta,

y en el yugo espera atenta

Castilla la adelantada.

OFRECIMIENTO DEL RÍO

Vengo erguido y bien lunado,

torres de luz arrastradas;

capitán de cien cruzadas,

soy clarín y brazo armado.

Traigo el árbol bien cortado,

el hacha de amanecida,

sollozos de despedida

hechos ya nada en mi espuma.

Traigo prendida la bruma

de mi carne bien mecida.

Ato ciudades, desgrano

cuenta a cuenta mi collar;

traigo un antiguo cantar

que juego de mano en mano.

Bajo de un cerro lejano

mi rodada sonería

y traigo esta sed tan mía

de arena y de caracola.

Voy doncel a nueva ola

con el agua amante y fría.

¡Ay, qué verdor me limita,

me cerca, me acerca, lleva!

La pasión que me subleva

me empuja en flor a mi cita.

Si he de llegar donde habita

mi amor, sin amor crecido,

destrenzado y distendido,

dejaré rizo y pujanza,

que voy clavado en la lanza

de mi acero florecido.

VIENTO EN LOS CRISTALES

«Anoche cuando dormía»

el viento mató mi sueño

bruscamente.

Y floreció un nuevo día

con un arcángel pequeño

por la nieve de mi frente.

¡Cuánto grito!

Aires, alas, irrumpieron

en mi silencio infinito.

¡Qué sonrisa

para mis labios trajeron

velas de viento y de prisa!

Anoche tuve el mensaje

de mi último amor en vilo.

Para subir el sigilo

de mi soledad sin traje,

torres blancas, frío hilo,

me ayudaron en mi empeño.

Viaje a vela por mi sueño.

CANCIONES

TRES CANCIONES DE MUERTE EN PRIMAVERA

MUERTO EN FLOR

Junto al árbol del amor,

sin yo saberlo, mi amada,

me lo mató el cazador.

Junto a la rama florida,

florida de flor morada,

me lo han matado, mi vida.

Al alba, junto a la flor,

sin pólvora y sin espada

me lo mató el cazador.

El cazador de luceros

lo mató una madrugada

sin halcones ni monteros.

Mi sueño mejor crecido

murió en la rama delgada

del árbol mejor florido.

Junto al árbol del amor,

sin otoño y sin nevada,

me lo mató el cazador.

LA NIÑA MIEDOSA

No quiero que vuelva el toro

que junto al agua del río

nubló mi pelo de oro.

Amigo, dile al vaquero

que el toro me ha dado frío

junto a la flor del romero.

Dile al toro que no vuelva,

que están escalando el muro

la mora y la madreselva.

A los panaderos, diles

que encierren al toro oscuro,

a la fuerza, en los toriles.

Que le lleven a la arena,

que suben a mis tejados

aromas de hierbabuena.

Para su tercera suerte

escalan ya mis costados

lirios de condena a muerte.

Que lo maten en el sol,

que está guardando mi pelo

en su hojita el caracol.

Que lo maten sin puntilla

al toro de terciopelo

que me ha asustado en la orilla.

EL GALGO

La rama del alhelí

le ha dicho a la encrucijada

que lo mató el jabalí.

A mi galgo de canela,

de fuego por la cañada

y tibio junto a la espuela.

El jabalí le ha dejado

la miel de media granada

dando muerte a su costado.

En la hierba estremecida

su carne está amortajada

de luna y lila florida.

Su carne pálida y yerta,

su carne yerta y clavada,

su carne clavada y muerta.

VERSOS DE UN HUÉSPED

Dedicatoria: A Luisa Esteban «La Reluces».

Otra: A Camilo José Cela, Charles David Ley y Martín Abizanda.

Te has quedado aquí, Luisa Esteban; conmigo y en mis versos. Y en las manos de mis amigos. También en los ojos de estos tres, cuyos nombres sirven de claveros a mi memoria, a tu memoria, Luisa Esteban.

Pequeña era tu casa, como lo es este libro, y allí cupo mi voz en la que te quedaste prendida sin remedio. Sin salida, Luisa Esteban, como nos vamos quedando en muchos rincones del mundo, en tantas y tantas de las innumerables salas de la tierra. Tú no lo sabrás nunca y, sin embargo, tienes ahí, por donde te mueves, mi gesto de señorito y mis pasos quedos a la madrugada; ahí donde tus hules pintados y tu San Antonio, tu enjalbegado vasar, tu falda tiesa y tu partido pelo. Déjame aquí, y en cambio, tu nombre alto, hondísimo, traspasando mi costumbre, el ir y venir irremediable de mi corazón al de los hombres.

LLEGADA

La luna de agosto viene

en hombros del Guadarrama.

Tus tejados, Luisa Esteban,

hace tiempo que la aguardan.

La luna parece un río

desbordado por Las Navas.

Quién me diera un San Cristóbal

que a la puerta de tu casa,

con un pino por cayado,

dulcemente me llevara.

¡Que me ahogo, Luisa Esteban,

en esta luna de agua!

Con un anillo en el cuello

me revolvía en tus sábanas

que aullaban en mis oídos

como el viento entre las ramas.

Por una tierra de lobos

me sorprendió la mañana.

HERMANO CASTILLO

Mi soledad es esto que ahora siento,

este silencio, esta quietud que apenas

deja un poco de música en mis venas,

un poco de razón al pensamiento.

Como tú, fortaleza, contra el viento:

yo sin brazos, tú puente sin cadenas;

sin ilusiones yo, tú sin almenas;

los dos memoria o labio sin acento.

Mi soledad es vernos en la tierra,

hincado yo también porque te clavas,

elevado en mi voz porque tú subes.

Tú como yo; los dos como esta sierra;

Ávila hundida aquí por esas Navas

y allí Gredos crecido entre las nubes.

SONETO DE LA NIEVE TODAVÍA

Mira cómo se quema el Guadarrama

en sus torres azules. Esa loma

tiene un poco de nieve, una paloma

que ha librado sus alas de la llama.

Qué desierta de pájaros la rama

donde a la luz mi corazón se asoma,

como un clavel de invierno sin aroma,

como un campo segado de retama.

Crezco de amor bajo este sol tendido,

y crecen las montañas imitando

el hielo que mi ardor no te ha deshecho.

Bajo un ave de nieve estoy vencido

y están sus alas frías coronando

una sierra de sangre por mi pecho.

SONETO EN «EL RISCO»

He encontrado a mi paso todavía,

aquí donde la tierra se reposa,

una rosa de piedra prodigiosa

que la mano de Dios colocó un día.

Le falta al corazón de cada cosa

el agua de la gracia. Se diría

que trajo solamente el alma mía

el río de su voz para esta rosa.

Nadie la ve, pero los hombres llegan

y liban en la miel que el sol derrama

y deja entre sus pétalos cautiva.

Brazos que luchan y ojos que se anegan

en el mar de Castilla, pura llama

con una isla en flor de roca viva.

HACIA SANTA MARÍA

El arrendajo, pato

de los aires, oscuro,

pasa. ¿Por dónde? Hay algo

que nos oculta el rumbo.

Y llora la resina

intermitentemente

por la amarilla herida

que tiene el pino verde.

A nuestro alrededor

sólo el vuelo y el árbol;

la garganta sin voz,

sin amigo la mano.

Pero Dios no está lejos.

Ya se anuncia. Sin prisas,

detrás de aquel otero

nace Santa María.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Poesía»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Poesía» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Poesía»

Обсуждение, отзывы о книге «Poesía» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x