Pachi Marino - Historias de Hostel

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Pachi Marino

Historias de hostel / Pachi Marino. - 1a ed . - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Autores de Argentina, 2020.

Libro digital, EPUB

Archivo Digital: online

ISBN 978-987-87-0846-1

1. Cuentos. 2. Narrativa Argentina. I. Título.

CDD A863

Editorial Autores de Argentina

www.autoresdeargentina.com

Mail: info@autoresdeargentina.com

A mi mamá Ana, por darme tanto y hacer posible esta aventura.

A mi hermana María Amelia que siempre apoyó mis locuras,

a Fer y a mi sobrina Pierina que va a ser viajera como yo.

A mis tías, tíos, primos, primas, y a mi papá Juan Carlos

por hacerme formar parte de una enorme familia a la que quiero mucho.

A Popi, hermano de la vida y circunstancial socio comercial,

y a toda su familia por acompañar.

Cuando voy a una juntada, asado, u otra ocasión de encuentro social, suele aparecer alguien que en determinado momento me lo pide:

— Contá algunas historias del hostel. ¡Dale!

Y ahí arranco, despertando risas, asombro, intriga y muchas otras sensaciones. Normalmente, luego del relato, todo culmina con alguien sugiriendo:

—¡Tenés que escribir un libro!

De la primera solicitud, creo que no voy a zafar nunca. Es más, me divierte y me hace sentir “útil” en esos momentos. La segunda exigencia ha llegado a su ocaso. Son tiempos de pasar a papel historias de los diez años de nuestro querido Frankville Hostel.

A los huéspedes y a la gente que trabajó en Frankville durante todo ese tiempo: mi agradecimiento eterno. Cada día aprendí algo nuevo con ustedes. Si no aparecés en alguna historia, no te alarmes. No nos olvidamos de vos. Me di cuenta de que hay anécdotas curiosas, divertidas o emocionantes que se pueden contar en cualquier lado y que con el tiempo se volvieron fundamentales para levantar reuniones. Hay otras miles que no están escritas, pero quedarán bajo llave en el cofre de nuestra amistad.

Fotos, dibujos, publicaciones y alguna que otra perla extraída del libro de visitas complementarán la estructura de esta ópera prima bibliográfica. ¡Faa, qué importante sonó eso!

Por otra parte, este no es un libro para emprendedores, pero podría serlo. Mi experiencia como docente en la temática me sesga a describir situaciones, que pueden llegar a dejar algún tipo de enseñanza para quienes recién están por arrancar un nuevo proyecto. Por lo que, entre tanta historia, estarán camuflados ciertos contenidos que hacen referencia a dichos temas.

Esta es solo la crónica de lo acontecido en un hostel de la Argentina, en una determinada franja de tiempo y contada por uno de sus protagonistas. Lo que no significa que sean las únicas historias, ni que el hostel se haya sostenido sobre la base de quien las cuenta. Cada participante fue clave para la construcción de esta hermosa historia. Y si bien puedo ser partícipe de varias de las anécdotas a continuación, y me permito algunas licencias autobiográficas, esto fue posible gracias a un gran equipo que trabajó a la par. Y sobre todo por un socio que me cedió siempre esto de ser la “cara visible”, con lo que eso puede simbolizar para el afuera, cuando ambos laburábamos codo a codo. Entendiendo, quizás, que ese alto perfil , que seguramente alimentaba parte de mi ego, estuvo siempre a disposición de sumar a la causa grupal, porque pienso que alto perfil no es sinónimo de soberbia, ni bajo perfil es sinónimo de humildad.

Ni quiero imaginar la infinidad de situaciones similares, o aún más llamativas, que pueden haber vivido colegas, a quienes me encantaría sacarles algunas sonrisas y trasladarlos mentalmente a buenos viejos momentos vividos.

Los hostels son espacios mágicos donde conviven un sinfín de emociones, logrando que cada día sea diferente. Fueron diez años superintensos de aprendizaje constante, que nunca olvidaremos. Pero para colaborar con ello, entendí que estaba bueno escribirlo, y para cuando la memoria nos empiece a fallar, podamos recurrir a estos escritos que seguramente nos van a retrotraer hermosas sensaciones.

Como decía Ernesto Sabato: “Vivir consiste en construir futuros recuerdos”. Construimos algo único, y creemos que es hora de contarlo.

¡Bienvenidos a las historias de Frankville Hostel!

Agradecimientos

Agradezco sobremanera a las siguientes personas que aportaron para que Frankville sea un poco mejor y este libro sea una realidad:

Al staff, especialmente a Lucía Klein, Ronit Gossis, Ale Dettano, Santo, Rodri “El Guatón” Díaz, Arantza Cruz y Laurita Giménez, que fueron con quienes más tiempo compartimos el espacio. También formaron parte del equipo: Lula, Nacho, Justo, Juan Sebastián, Bebé, Tano, Iara, Ferchu, Marian, Barbie, Kata, Seba, Kosta, Mati, Gonzalo, Diego, Camila, Wally, Nati, Daiana, Mabel, Agustina, Eva, Morgane, Iván, Zul, Leo, Vane, Javi, Pame, Male, Luana, Pablo, Seba y Eri.

A Mariano Ricciardi, gran amigo y contador oficial, por bancarnos siempre desde los inicios, hasta hoy.

A Cachu Laplace, por estar siempre contagiando alegría en el hostel y por su participación en Frankville Radio, en hermosos momentos con Javi Batista y Manolo Tonelli. A Yiyo Cantoni, por apoyar esa causa desde donde esté, maestro.

A Nicolás Villarreal, otro hermano de la vida que fue nuestro artista oficial.

A nuestro querido Pori Rositto, por dejar hermoso un lugar que estaba en decadencia y ponerle onda a varias fiestas con sus bailes y atuendos particulares.

A Santi Cravero Igarza, por aportar su apoyo constante a Frankville y al turismo de la ciudad.

A Andrea Assenti del Río y al staff de Home Intercultural Learning, por colaborar con una ciudad más intercultural.

A Digna Martínez, por ser la huésped récord, viniendo todos los años desde que abrimos. ¡Te queremos, Digna!

A Olegario Ferrari, por ser el mejor profe de turismo de la facu, quien siempre nos puso como ejemplo.

A Martín Epeloa, por todas sus enseñanzas y anecdotario sobre la ciudad. Otro enfermo de La Plata.

A Joaco Hasperué, por ser el embajador oficial de la alegría de Frankville.

A Lía Gómez, Fede Ambrosis, Seba Hourçouripe y todo el team del FESAALP por participarnos cada año como hostel oficial.

A Nico Madoery, Mati Olmedo, Valentino Tettamanti, Tata Laxague y a toda la banda, por los Ciclos Concepto Cero. A Juli Olmedo y Juli Scwhindt, por bancarnos con el video.

A Euge y Pablo, por todos los diseños y la buena onda.

A todas las estudiantes del Instituto 8, que le dieron vida a nuestro espacio con mucho respeto y simpatía.

A nuestros amigos de siempre: el Gordo, Juampi, Gajo, Fede Vera, Bebote, Diego, Tomás, Agustín, Maro, Juan Martín, Urbi, Tori, Facho, Alejo, Osmar, Herny, Gero, Leopoldo, Canche, Bebote, Facundito, Chango, Nico Plot, Ale y Tini, que nos dieron una mano en distintas oportunidades, y cada uno a su manera se encargó de difundir el espacio con mucho orgullo, como si fuera de ellos.

A Paz Rossi, que mientras diseñaba cosas lindas para “Las Pulpas”, me ayudaba a redactar este libro.