Patricia Gibney - Las almas rotas

Здесь есть возможность читать онлайн «Patricia Gibney - Las almas rotas» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Las almas rotas: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Las almas rotas»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Dos muertes, una desaparición y un secreto que pondrá a todos en peligro. Una mañana de diciembre, Cara Dunne aparece colgada en su cuarto de baño. Va vestida de novia y todo apunta a que se trata de un suicidio, pero esa misma tarde la policía encuentra otro cuerpo, el de la enfermera Fiona Heffernan, frente al hospital del pueblo de Ballydoon. Fiona iba a casarse al día siguiente y también llevaba un vestido de novia en el momento de su muerte.La inspectora Lottie Parker intuye que estas muertes no son meros suicidios y, al comenzar la investigación, descubre otra pieza del inquietante puzle: la hija de ocho años de Fiona ha desaparecido. A partir de ese momento, Lottie se embarca en una búsqueda frenética por encontrar al asesino y salvar a la niña. Sin embargo, los habitantes de Ballydoon guardan un peligroso secreto, y cualquiera podría ser el culpable. «Con más de un millón y medio de ejemplares vendidos, Gibney es uno de los mayores fenómenos literarios del año.» The Times

Las almas rotas — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Las almas rotas», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

—Algo nuevo —contestó ella—. Pescado cocido en su jugo con salsa de ajo. La he hecho yo misma. La salsa, no el pescado.

—Suena genial —mintió Ryan—. ¿Dónde están los chicos?

Zoe hizo un gesto con la cabeza en dirección a la mesa. Ryan levantó el borde del mantel y descubrió a sus sobrinos sentados en el suelo con las piernas cruzadas.

—¿Qué tramáis vosotros tres?

—Estamos jugando —respondió Tommy, de cinco años.

—Al escondite —añadió Josh, de cuatro.

—Sí —afirmó el pequeño Zack, de dos.

—Bueno, pues os he encontrado. Venga, al salón. Seguro que están haciendo Sam el bombero.

Los tres salieron a gatas entre las piernas de Ryan y la cocina por fin quedó en silencio.

—He recogido el traje de la tintorería —dijo Zoe—. Está colgado delante de tu armario. —Contuvo una lágrima. Unos mechones de pelo, antaño rubio, le caían sobre los ojos y ella los apartó con el codo. Tenía ambas manos cubiertas de harina.

—¿Por qué estás triste? —preguntó Ryan.

—Oh, ya sabes. —Zoe se volvió hacia el fogón—. Mañana es tu día. Qué emocionante para Fiona y para ti. Pero, al mismo tiempo, no puedo dejar de pensar en el matrimonio desastroso de nuestros padres, y ya sabes que el mío no es… —Sorbió de nuevo—. Ya hemos hablado antes sobre esto, pero ahora creo de verdad que Giles tiene una aventura. Desde que nació Zack, nunca está en casa. Ni por un momento me trago que lo necesiten en el trabajo las veinticuatro horas del día, toda la semana. —Se limpió la harina de las manos en el delantal y encorvó los hombros.

Ryan sintió que se le rompía un poco el corazón por su hermana pequeña, sin poder contener, al mismo tiempo, una sensación de enfado.

—Zoe, tengo la intención de hacer que mi matrimonio funcione. Fiona y yo somos mayores de lo que tú eras cuando te casaste. Y más sabios, espero.

—Lo sé, pero tienes que estar seguro de ella al cien por cien.

—¿A qué viene esto? Nunca me habías dicho nada así.

—Es solo… Fiona es muy posesiva y decidida. Tú no. Eres un blando, en especial en lo que a ella respecta. Ni siquiera conoces a su familia.

—Tiene una hermana en Australia. No hay ningún misterio, así que deja de intentar encontrarlo.

—Nunca habla de sus padres o de su vida antes de venir a Ballydoon. Admítelo, Ryan, Fiona es un poco rara.

—Por Dios, Zoe, solo porque no es extrovertida y…

—Lo sé, pero hay algo… Aunque no puedo decir qué.

—Pues me caso con ella mañana, así que deja de pensar en excusas para que no te guste. ¿Vale?

Zoe se giró. Ryan captó el rastro de una sonrisa en la comisura de sus labios.

—Vale.

—Voy a darme una ducha. ¿Cuándo estará listo… eso?

—¿Eso? Quiero que sepas, Ryan Slevin, que eso es mi plato estrella de la semana. Un pez directo del mar.

—¿Lo has pescado tú misma?

—Listillo. —Zoe se rio—. También te he planchado la camisa buena. Para mañana.

—Eres la mejor hermana del mundo. —Le dio un abrazo, pero no tuvo el valor de decirle que había comprado una camisa nueva especialmente para la ocasión.

Cuando se separaba de su hermana, Ryan oyó el sonido del timbre.

—¿Esperas a alguien?

—Tal vez sea Fiona.

—¿La noche antes de nuestra boda? No lo creo. Sé que queremos una boda sencilla, sin mucho lío, pero más allá de lo que pienses de ella, en el fondo Fiona es muy tradicional.

Fue a abrir la puerta.

* * *

Mientras esperaba a que abrieran, Lottie observó los alrededores de la pequeña finca en el límite del pueblo de Ballydoon. Boyd se había marchado a Galway a toda prisa. Esperaba que no le ocurriera nada en las carreteras heladas; le había pedido que le enviara un mensaje cuando llegase.

La dirección que tenía de Ryan Slevin era una casa adosada perteneciente a la familia Bannon. La habían informado de que Zoe Bannon era la hermana de Ryan.

Kirby se paseaba por el camino, con su redondo rostro sonrosado por el esfuerzo.

—Odio dar malas noticias —sentenció.

—Es parte del trabajo —le recordó Lottie.

Se escucharon los gritos de los niños antes de que se abriera la puerta, y les llegó un penetrante aroma a ajo.

La inspectora le enseñó la placa al hombre que se encontraba de pie frente a ella.

—Hola, ¿es usted Ryan Slevin?

—Así es. ¿He hecho algo que no sepa? —El rostro del hombre se iluminó con una sonrisa divertida y Lottie se fijó en que tenía una mancha de harina en el pómulo bajo el ojo. Tuvo que resistir la tentación de mojarse el dedo y limpiársela. Pese a su altura, constitución y barba, y aunque Lottie sospechaba que debía de estar en la treintena, Ryan Slevin tenía un aire adolescente.

—¿Podemos entrar, por favor?

—Debe de ser algo serio. —Lottie oyó un deje pícaro en su voz. Alrededor de las piernas del hombre aparecieron tres cabezas pelirrojas.

—¿Quién es? —preguntó el más alto.

—Calla, Tommy. Vengan por aquí, por favor.

Una mujer apareció mientras se desataba un delantal sucio y apartó a los niños del camino.

—¿Qué sucede?

—Soy la inspectora Lottie Parker, y este es mi colega, el detective Larry Kirby.

Lottie avanzó esquivando a los niños y a su madre y siguió a Ryan hasta un salón que parecía una zona de juegos.

Había juguetes desparramados por todas partes y unos ruidosos dibujos animados atronaban desde el televisor. Los niños se marcharon con su madre y Ryan recogió los juguetes, los dejó en una pila junto al televisor y lo apagó.

Se sentó en un sillón desvencijado. Lottie se apoyó en el borde del sofá, y Kirby se hundió entre los harapientos cojines junto a ella.

—Bien, ¿qué querían de mí? —inquirió Ryan.

—Me temo que tenemos malas noticias, señor Slevin —dijo Lottie.

—Llámeme Ryan. ¿Qué malas noticias? —El hombre se removió inquieto y se enderezó.

—Está prometido con Fiona Heffernan, ¿es eso correcto?

—¿Fiona? Sí, así es. ¿Le ha ocurrido algo?

—Me temo que sí.

—¿Un accidente de coche? Oh, Dios. —Hundió la cabeza entre las manos. Lottie ya no le veía la cara—. Fiona odia conducir con mal tiempo. ¿Se encuentra bien? —Se puso en pie de repente—. ¿Puedo verla? ¿Está en el hospital de Ragmullin?

—Por favor, siéntese, Ryan. —Lottie detestaba esta parte del trabajo—. Las noticias son peores. Hemos encontrado a la señorita Heffernan esta tarde. Lamento decirle que ha fallecido.

Ryan se sentó, con ojos interrogantes.

—¿Qué? ¿Cómo? ¡Oh, Dios mío!

—No ha sido un accidente de coche. —La inspectora se fijó en las expresiones cambiantes en el rostro del hombre. Confusión. Incredulidad. Horror. Parecía genuinamente consternado.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Las almas rotas»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Las almas rotas» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Lisa Jackson - Almas perdidas
Lisa Jackson
Yrsa Sigurðardóttir - Ladrón De Almas
Yrsa Sigurðardóttir
Valentīns Kavskis - Zaļās rotas
Valentīns Kavskis
Khalil Gibran - Alas Rotas
Khalil Gibran
Patrizia Parolini - Almas Rom
Patrizia Parolini
Mario Andrés Mejía Guevara - Salvar el pueblo, gobernar las almas
Mario Andrés Mejía Guevara
Patricia Gibney - Los ángeles sepultados
Patricia Gibney
Arthur Machen - La casa de las almas
Arthur Machen
Emma Patricia Victorio Cánovas - El Perú Ilustrado. Semanario para las familias
Emma Patricia Victorio Cánovas
Отзывы о книге «Las almas rotas»

Обсуждение, отзывы о книге «Las almas rotas» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x