águila.
▪ águila pechinegra. f. →guarro. ¶ (Geranoaetus melanoleucus) «Un águila pechinegra que no podía volar fue encontrada en Girón por un administrador del Parador Turístico El Chorro», En Girón rescatan águila pechinegra/El Tiempo, 07.02.2014. «Allí los turistas aprenden que las águilas pechinegras viven en las altas montañas de Sudamérica», Bajo las alas del Parque Cóndor/El Universo, 13.11.2005.
ah. interj. Expresa duda, interrogación. «-Tome, mi teniente. Ahí le va uno de yapa, ya sabe. -Este pendejo tiene ojo clínico, ¿ah? -exclamó el policía, mientras un hombre corpulento, de terno gris y gafas oscuras, se asomaba por la puerta», Adolfo Macías Huerta, El grito del hada, 2010. «Juliana y la Tigra escogían sus compañeros. - Bailamos ¿ah?», José de la Cuadra, Horno y repisas, 1932-1931.
ahuevarse. prnl. Acobardarse. (vulg) «Y yo que me abalanzo con la gillette y le digo aquí te hago la cédula en la mejilla y él que se ahueva y se pone como pato a pedirme perdón», Iván Égüez, Tragedias portátiles, 2004. «Ah, ya estás aquí mariconcito, pensé que te habías ahuevado», Galo Galarza, El turno de Anacle, 2001.
aire.
▪ mal aire. loc. n. (Sie) Enfermedad leve y pasajera cuyos síntomas principales son malestar general, dolor de cabeza, cansancio, náusea o vómito. (pop) ¶ Sinónimo: malaire, mal viento «Enfermedades provocadas por la influencia de la naturaleza, siendo las más comunes el mal de cerro o soroche y el mal aire o mal viento», Manuel Espinosa Apolo, Los mestizos ecuatorianos y la señas de identidad cultural, 2000. «Pero no pudo presentirle nada grave: unas calenturas, apenas, unas tercianas contraídas de antiguo o un simple mal aire al cruzar junto a un cementerio», Eliécer Cárdenas, Polvo y ceniza, 1979.
▪ sacar el aire. loc. v. Agredir mucho física o verbalmente [a alguien]. (coloq) «Bruce Lee, se miraba, probaba su sangre, y después con la mirada, le decía a sus oponentes, hasta aquí llegaron, prácticamente eran cadáveres, les sacaba el aire», Trabajo sin aire o pura pintura/Correo, 07.06.2016. «No pues, niñitos, ese que vuela por el aire y cuando aterriza nos saca el aire en su enlace nacional de los sábados no es la gripe porcina, sino otro virus bastante parecido», Ronda porcina/El Universo, 31.05.2009.
▪ sacarse el aire. loc. v. Esforzarse mucho. (coloq) Sinónimo: sacarse la madre «“Papá tuvo hasta tres trabajos, se sacaba el aire para sostener el hogar”, cuenta Alex, citando a su padre guayaquileño, actual Director de Deportes del Colegio Americano», Esteban Michelena, Pase al vacío, 2010. «Los chicos se sacaron el aire y en la última parte mucho más. Sí se vio el desgaste físico y emocional, se veía que era una competencia desleal», Bailando por “la bronca” de los sueños/Últimas Noticias, 17.11.2008.
ajicero. m. Recipiente en que se sirve el ají. «Ella se contentaba con decir: ¡Muchacho malcriado!, y se iba para la cocina a traer los ajiceros y los saleros, festejando en su interior las ocurrencias del preferido», Raúl Pérez Torres, Los últimos hijos del bolero, 1998. «Al lado de los comestibles, en la misma bandeja, hay un tarrito de lata con monedas. Y apenas más allá, el excitante ajicero de vidrio», Alfredo Pareja Diezcanseco, Baldomera, 1938.
ajumarse. prnl. Emborracharse. (pop) «El juego no es malo, lo que sucede es que al ajumarse se propasan», Eugenia Viteri, Cuentos escogidos, 1983. «-Ponga otro, carajo. -¿Quiere ajumarse? -Sí, quiero morirme. -¿A pura copa? ¡Bonito suicidio! Ahí tiene», Enrique Terán, El cojo Navarrete, 1940.
alaja. adj. →alhaja. «Harán las cinco de la tarde, el sol pega oblicuo dando un color alaja a los aleros y paredes de nuestra Cuenca de beatas y adobes», Vinicio Jáuregui, El bostezo/El Mercurio, 12.07.2004. «Luego los saludos, los abrazos de quienes se jactaban después: se dejó nomás abrazar, tan alajito», Gustavo Alfredo Jácome, Los Pucho Remache, 1984.
alamoreño, -ña. adj.-n. De la ciudad de Alamor (provincia de Loja). «Nos presentamos en el domicilio de Wilson Córdova Chalán, un alamoreño muy respetable, para rendirle un pequeño pero significativo homenaje», Reconocimiento a un hombre público “Wilson Córdova Chalán”/Crónica, 21.09.2015. «De su lado José Mina, ciudadano alamoreño, indicó que la gasolinera está cerca al pueblo», Alamor se quedó sin gasolinera/La Hora, 06.07.2013.
alauseño, -ña. adj.-n. De la ciudad de Alausí (provincia de Chimborazo). «Para asumir este requisito, la municipalidad alauseña organizó en el Coliseo Deportivo de la parroquia de Achupallas, la primera Asamblea», Rendición de cuentas en GAD de Alausí/Los Andes, 28.02.2016. «Para todo alauseño, el tren es parte de su vida, porque desde pequeño uno ha crecido con el ruido del ferrocarril y eso es lo que nos identifica», Un pedazo de Alausí en su hogar/El Universo, 20.12.2012.
alegón, -gona. adj.-n. [Jugador] que no acepta su derrota o la adversidad de su participación. (pop) «Les lanza la bola: “Oye, Omar no seas ‘alegón’, ya perdiste. Te toca”», Los choclos se cocinan en la clase de ‘mate’/Hoy, 28.10.2004. «Me pregunto cómo habrá sido jugar fútbol con Einstein. “Alegón” debe haber sido», Edwin Hidalgo, Oiga, pana, no se aburra/El Comercio, 06.03.2003.
alhaja. adj. Simpático, agradable. (pop) «Mi mami me había maquillado y peinado desde la madrugada (“por fin mija quiere verse alhaja”) y me vestí con un traje sencillo pero elegante», Alejandro Ribadeneira, Las traigo muertas, 2005. «Hacía de diablo el Juan Saquicela, un longote fiero, casi un mozo ya: y, de ángel, la Michita Pumba, indiecita alhaja», José de la Cuadra, Horno y repisas, 1932-1931.
alhajito, -ta. adj. Lindo, agraciado. (pop) «Ella es una jovencita uruguaya de 20 años, muy alhajita y muy cariñosa con su familia», Francisco Febres Cordero, En comer y rascar todo es comenzar/Hoy, 26.02.1996. «Esta va a volver locos a los hombres […]. –Ay qué alhajita –decían las comadres de aquellas tías beneméritas», Roberto Andrade, Pacho Villamar, 1900.
allanamiento. m. Acción y efecto de registrar un domicilio con una orden judicial. «Los allanamientos sin autorización no son raros, por otra parte, y en repetidas ocasiones menores de edad son recluidos en sitios de detención para mayores, y sufren agresiones y amenazas de todo género», Jaime Guevara, Lo que escribí en las paredes, 2004. «Por todos estos acontecimientos que iban sucediéndose, los jefes apresuraron las investigaciones y fijaron la fecha para hacer los ingresos, así se les llamaba a los allanamientos en los diferentes domicilios, entre éstos la casa del dirigente sindical Fausto Dután», Hugo España, El testigo, 1996.
allanar. tr. Registrar un domicilio con orden judicial. «Más abajo, en otro párrafo, decía que efectivos de la Policía allanaron la casa y no encontraron al Ministro que ya se había dado a la fuga», Ramiro Arias, Todo el sabor tropical, 2008. «Metían bulla los agentes y los guardias que me buscaban, removiendo montones de basura, abriendo cuartuchos, allanando cantinas», Eliécer Cárdenas, Polvo y ceniza, 1979.
aloja. f. →chicha aloja. «Aloja: Chicha de jora, la que se añade harina de trigo, jugo de guayaba y especias. Propia de la provincia de Tungurahua», Julio Pazos Barrera, El sabor de la memoria. Historia de la cocina quiteña, 2008. «Allí pasaban bebiendo mistela, aloja, vino “lágrima”, casi todo el día con la banda de músicos», Sergio Núñez, Juego de haciendas, 1936.
altoparlante. m. Altavoz. «Los altoparlantes monotonean en seis idiomas que los vuelos continúan demorados y que lamentan los inconvenientes», Raúl Vallejo, Acoso textual, 1999. «Un saxo lento que subía de tono surgió de los altoparlantes y se ampliaba en violines y pianos con los murmullos que nos decíamos al oído», Ramiro Arias, Lo inútil de la felicidad, 1999.
Читать дальше