Luis Vega-Reñón - La naturaleza de las falacias

Здесь есть возможность читать онлайн «Luis Vega-Reñón - La naturaleza de las falacias» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

La naturaleza de las falacias: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «La naturaleza de las falacias»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Las falacias son un fruto natural de nuestras interacciones discursivas. A juzgar por su mala prensa y su uso impenitente representan una especie de parásitos dañinos y afincados tanto en conversaciones privadas como en informaciones, deliberaciones y debates públicos. Vienen siendo también un asunto principal de la teoría de la argumentación desde su lejana fundación aristotélica hasta nuestros días. Pero, por cierto, combatirlas no constituye la razón de ser de la Lógica o, para el caso, del estudio de la argumentación.
El replanteamiento de las falacias resulta obligado por varios motivos. Este libro trata de responder a estas demandas sobre la base de una concepción comprensiva y holística del discurso falaz, fundada en lo que filosóficamente cabe considerar su naturaleza. La empresa es arri esgada y tiene visos de paradójica pues aspira a dar una idea global y relativamente unitaria de una naturaleza que no es simple ni es única, sino compleja y susceptible.
LUIS VEGA REÑÓN es Doctor en Filosofía por la UCM y catedrático emérito de la UNED (España).Ha sido profesor visitante en la Universidad de Cambridge (Reino Unido), UNAM y UAM (México) Universidad de Córdoba y UBA (Argentina), Universidad Nacional de Colombia, Universidad de la República de Montevideo, Universidad Diego Portales (Chile), entre otras. Fundador y director de la revista digital Revista Iberoamericana de Argumentación, así como responsable de programas y cursos de argumentación en estudios de máster y posgrado. Entre sus publicaciones sobre historia y teoría de la argumentación destacan La trama de la demostración (1999), Si de argumentar se trata (2003), Compendio de lógica, argumentación y retórica (coed. Paula Olmos) (2011), La fauna de las falacias, (2013), cuya edición actualizada y aumentada corresponde al presente volumen, Introducción a la teoría de la argumentación (2015), Lógica para ciudadanos (2017) y La argumentación en la historia (2019).

La naturaleza de las falacias — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «La naturaleza de las falacias», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

11Cf. mis libros (2003) Si de argumentar se trata, Barcelona: Montesinos, pp. 234-5; (2015). Introducción a la teoría de la argumentación. Problemas y perspectivas, Lima: Palestra, pp. 220-221.

12Recordemos el papel sociocultural de ciertos pares de opuestos como izquierda/derecha, estudiados hace tiempo por los antropólogos, o en un terreno cognitivo más concreto, el papel que las tablas de opuestos desempeñaron en unos primeros desarrollos del pensamiento griego, como la cosmología pitagórica o la teoría tradicional de los elementos. Puede verse a este respecto Geoffrey E.R. Lloyd (1966), Polaridad y analogía. Dos tipos de argumentación en los albores del pensamiento griego. Madrid: Taurus, 1987.

13En esta misma línea, investigaciones experimentales sobre el aprendizaje han mostrado que ciertos animales, tras una mala experiencia con determinados alimentos, descartan todos los que se ofrecen en análogas circunstancias: drástica medida que, si bien les depara más creencias o prevenciones falsas que verdaderas, puede contribuir a mejorar sus probabilidades de preservación y supervivencia.

14Ahora, al parecer, casi nadie se acuerda ya de Vaz Ferreira. Las primeras proyecciones de este punto de vista sobre el terreno de las falacias proceden de los años 90; cf. por ejemplo Sally Jackson (1995), “Fallacies and heuristics”, en F.H. van Eemeren, R. Grootendorst, J.A. Blair y C.A. Willard, eds. Procds. Third ISSA Conference on Argumentation, vol. II. Amsterdam: Sic Sat, pp. 257-269.

15El reconocimiento de casos de este tipo, bajo la forma de silogismos o refutaciones deductivas que resultan sofísticas en su contexto de aplicación, se remonta a Aristóteles (SE, 169b20-25). También cabe pensar, por poner otro ejemplo, en el uso de ciertas reglas deductivas clásicas como la que permite derivar una proposición cualquiera de una contradicción (“de una contradicción se sigue cualquier cosa”), con el propósito —así, infundado— de establecer una proposición concreta o una conclusión determinada. Valga recordar un famoso ejemplo medieval: “Sócrates corre y Sócrates no corre, luego tú estás en Roma”, que los lógicos de finales del s. XII empleaban para mostrar la validez de una regla y no, desde luego, para establecer el lugar donde alguien se encuentra —conclusión que sería obviamente falaz—.

16Aunque uno pueda transitar más o menos clara o confusamente entre los extremos del arco. Así como no se excluye la existencia de múltiples casos intermedios entre ambos extremos, el sofístico y el paralogístico, tampoco cabe excluir la de otros casos no infrecuentes en los que uno puede —e incluso a veces quiere— engañarse a sí mismo. Lo que no puede es hacerlo a la vez con plena deliberación y total inadvertencia: hallarse en uno y otro extremo al mismo tiempo. Todo esto supone cierta analogía de la idea de sofisma con una concepción clásica de la mentira, de raíz agustiniana, como luego veremos (en el § 4), y remite a la discusión abierta en torno al “autoengaño”, punto en el que ahora no puedo detenerme pese a su interés discursivo y cognitivo.

17Una observación de paso: vengo siguiendo la práctica habitual de referirme indistintamente a los agentes discursivos y a los argumentos como incursos en falacias. Sería más apropiado decir que un agente comete o incurre en una falacia, mientras que su argumentación contiene o consiste en una falacia. Pero supongo que esa práctica común es inocua y no representa una confusión mayor añadida.

18La necesidad de nociones y localizaciones claras es tanto más imperiosa en el momento actual de proliferación de los llamados “sesgos cognitivos”. Como muestra de cajón de sastre donde se amontonan sesgos, prejuicios y falacias, vid. el “Anexo: Sesgos cognitivos” del artículo “Sesgo” en Wikipedia.

19Las ilusiones inferenciales pueden considerarse una especie del género de las ilusiones cognitivas en la línea de las tratadas en Rüdiger F. Pohl, ed. 2004, Cognitive illusions: A handbook on fallacies and biases in thinking, judgement and memory. Hove (UK)/New York: Psychology Press.

20Philip N. Johnson-Laird y F. Savary (1999), “Illusory inferences: a novel class of erroneous deductions”, Cognition, 71: 191-229.

21Amos Tversky y Daniel Kahneman 1983, “Extensional vs. intuitive reasoning: the conjunction fallacy in probability judgment”, Psychology Review, 90: 53-68.

22Un estudio que contribuyó a la interpretación actual, más comprensiva, de esa presunta “falacia de la conjunción”, fue el de R. Hertwig y G. Gigerenzer (1999), “The ‘conjunction fallacy’ revisited: How intelligent inferences look like reasoning errors”, Journal of Behavioural Decisión Making, 12: 275-305.

23Cf. Luis Vega Reñón (2020), Fake news, desinformación y posverdad. Malos tiempos para el discurso público. Beau Bassin [Mauritius]: EAE.

24Tratado de Semiótica general, Barcelona: Lumen, 1977; p. 31 (cursivas en el original).

25Una caricatura de la suspicacia de este tipo es un famoso chiste recordado por Sigmund Freud en El chiste y sus relaciones con el inconsciente. Dos judíos polacos se encuentran subiendo al tren en una estación de Galitzia. “¿A dónde vas?” —pregunta uno. “A Cracovia” —responde el otro. “¡Qué mentiroso eres! —salta el primero— Si dices que vas a Cracovia es que quieres que crea que vas a Lemberg. Pero sé que la verdad es que vas a Cracovia. Así que, ¿por qué me mientes?”.

26Thomas L. Carson, Lying and deception. Oxford/New York: Oxford University Press, 2010.

27Vid. Warren Shibles, “A revision of the definition of lying as an untruth told with intent to deceive”, Argumentation, 2 (1988), 99-115.

28Sobre la idea clásica y su raíz agustianiana en De mendatio (h. 195-6), cf. Peter King, “Augustine: the truth about lies”, ponencia presentada a la UCLA Moody Conference on “Lies and Liars” (Feb. 14, 2004). Pueden verse desarrollos modernos en Jacques Derrida (1995), Historia de la mentira: Prolegómenos, Buenos Aires: UBA, 1997; Darius Galasiński, The language of deception, Thousand Oaks (CA) / London: Sages Publications, 2000; Kamila E Sip, Chris D. Frith et al., “Detecting deceptions: the scope and limits”, Trends in Cognitive Sciences, 12/2 (2008), 48-53.

29Vid. mi (2003, 2007), Si de argumentar se trata, pp. 183-4.

30Dariusz Galasiński 2000, The language of deception. A discourse analytical study. Thousand Oaks (CA). Sage Publications.

31Vid. José E. Burucúa y Mario Caimi, comps., Presencia de Ernst Goldhauer. (Actas del I Simposio Goldhauer, Buenos Aires 1997), Buenos Aires: Dunken, 1998; Quimera, nº 322, septiembre de 2010.

32Cf. John A. Barnes 1994, A pack of lies. Towards a sociology of lying. Cambridge, Cambridge University Press. Vid. sobre Agustín de Hipona y la tradición posterior, Sergio Pérez, La prohibición de mentir, México: Siglo XXI/UAM Iztapalapa, 1998.

Capítulo 3

¿Por qué hemos de interesarnos hoy por las falacias?

Llegados a este punto conviene reconsiderar la oportunidad y el propósito del presente estudio de las falacias. Puede que nuestras exploraciones iniciales nos hayan llevado al convencimiento de que hoy el tema de las falacias ya no tiene interés por dos motivos al menos. Bien porque nuestra tendencia al error y al engaño en el uso común del discurso nos es consustancial, nos acompaña en todos los lugares y en todos los tiempos. Entonces, ¿qué hace su estudio especialmente oportuno en un determinado momento, ahora pongamos por caso? O bien porque los argumentos falaces no solo son un mal pandémico, sino que, efectivamente, no tienen remedio. ¿Qué sentido tiene mortificarse con ellos? Procuremos sobrellevarlos con la resignación de quien padece un mal genético. Éstas son, a mi juicio, posturas no tanto escépticas como retóricas, y cabe oponerles la retórica contraria de un Alfred Sidgwick que —a finales del siglo XIX, recordemos— no se cortaba en absoluto al sostener que la razón de ser de la Lógica era precisamente combatir la Falacia, algo que, por entonces, a ningún lógico se le habría ocurrido. Asomados al campo de discusión abierto entre un extremo y otro, no estará de más detenerse a considerar brevemente las dos cuestiones apuntadas, la de la oportunidad y la del propósito del estudio de las falacias en nuestros días. En uno y otro caso nos vendrá bien, creo, una referencia contextual a su historia próxima. Su consideración también será útil para seguir reconociendo el terreno, al abrir un nuevo camino de aproximación complementario de las exploraciones ya practicadas.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «La naturaleza de las falacias»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «La naturaleza de las falacias» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «La naturaleza de las falacias»

Обсуждение, отзывы о книге «La naturaleza de las falacias» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x