• Пожаловаться

Xinran Xue: Nacer mujer en China

Здесь есть возможность читать онлайн «Xinran Xue: Nacer mujer en China» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию). В некоторых случаях присутствует краткое содержание. категория: Современная проза / на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале. Библиотека «Либ Кат» — LibCat.ru создана для любителей полистать хорошую книжку и предлагает широкий выбор жанров:

любовные романы фантастика и фэнтези приключения детективы и триллеры эротика документальные научные юмористические анекдоты о бизнесе проза детские сказки о религиии новинки православные старинные про компьютеры программирование на английском домоводство поэзия

Выбрав категорию по душе Вы сможете найти действительно стоящие книги и насладиться погружением в мир воображения, прочувствовать переживания героев или узнать для себя что-то новое, совершить внутреннее открытие. Подробная информация для ознакомления по текущему запросу представлена ниже:

Xinran Xue Nacer mujer en China

Nacer mujer en China: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Nacer mujer en China»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Las voces silenciadas. Xinran Xue era presentadora de un influyente programa radiofónico chino cuando en 1989 recibió una carta angustiosa: una niña había sido secuestrada y forzada a casarse con un anciano que desde entonces la mantenía encadenada. Los hierros estaban lacerándole la cintura y se temía por su vida. Xinran obtuvo la liberación de la víctima, pero se percató de que un silencio histórico imperaba sobre la situación de las mujeres en su nación. Decidió difundir las historias de oyentes que cada noche llamaban a su programa. Esta iniciativa inédita tuvo por respuesta miles de cartas con increíbles relatos personales y convirtió a Xinran en una celebridad. Entre los numerosos testimonios que escuchó y dio a conocer, seleccionó quince para que integraran este libro. Nacer mujer en China es un relato colectivo revelador acerca de los deseos, los sufrimientos y los sueños de muchas mujeres que hasta ahora no habían encontrado expresión pública.

Xinran Xue: другие книги автора


Кто написал Nacer mujer en China? Узнайте фамилию, как зовут автора книги и список всех его произведений по сериям.

Nacer mujer en China — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Nacer mujer en China», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема

Шрифт:

Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

La doctora Yu y la enfermera Gao eran buenas profesionales sanitarias; rápidamente encontraron una medicina que solucionaría el problema. Ellas se tomaron dos pastillas cada una y a mí me dieron cuatro, tragadas con un poco de solución de glucosa. Los fideos que instantes antes habían despedido un aroma tan maravilloso fueron arrojados al váter. Intentaron convencerme de que no enfermaría.

Mi cabeza está llena de las moscas que tragué ayer. ¿Había roto sus huesos y aplastado sus cuerpos con mis dientes? ¿O me las había tragado enteras?

¡Dios mío! ¡Al menos he escrito una historieta divertida!

21de abril. Sirimiri

He decidido tener una mosca bebé como mascota.

El domingo pasado no tenía ningún gota a gota puesto, por lo que dormí hasta que me despertó un leve estremecimiento sobre la piel. Medio despierta, la pereza me impidió moverme y me quedé tendida pensando a qué se debería aquella sensación. Fuera lo que fuese lo que la había causado, seguía allí, moviéndose afanosamente arriba y abajo por mi pierna, pero no me asustó ni molestó lo más mínimo. Sentí como si un par de manitas me estuvieran acariciando dulcemente. Me sentí muy agradecida por aquel par de manitas y quise saber a quién pertenecían. Abrí los ojos y miré.

¡Era una mosca! ¡Qué horror! ¡Las moscas están cubiertas de suciedad y de gérmenes!

Pero nunca pensé que las patas de una mosca pudieran ser tan suaves y dulces al tacto, aunque estuvieran sucias.

Durante varios días estuve esperando aquellas «manitas», pero nunca volvieron.

Mientras me hacían una radiografía tras un preparado de sulfato de bario tomado por la mañana, me acordé súbitamente de la vez que visité el laboratorio del hospital y de los animalitos que los doctores criaban para sus experimentos médicos. ¡Podía criar una mosca limpia! Encontraría una mosca bebé y la mantendría en mi mosquitero.

25de abril. Nublado

Resulta muy difícil encontrar una mosca bebé. El mundo está lleno de moscas grandes zumbando por todos lados, que aterrizan sobre las cosas más sucias y malolientes, pero no me atrevo a tocarlas. Me gustaría pedirle consejo al doctor Zhong. Es experto en biología y sin duda sabrá dónde encontrar una cría de mosca. Pero si se lo pregunto, creerá que estoy loca.

8de mayo. Soleado

Estoy tan cansada, tan terriblemente cansada…

Hace dos días, finalmente, cacé una cría de mosca. Es muy pequeña. Estaba luchando por desprenderse de una telaraña en un pequeño manzano entre los matorrales que hay detrás de la cantina. Cubrí la mosca y la telaraña con una bolsa de gasa hecha de una mascarilla y me la llevé a la habitación. Cuando pasaba junto a la sala de tratamientos, el enfermero Zhang me preguntó qué había cazado. Solté lo primero que me vino a la mente: que era una mariposa. Luego corrí a mi habitación y me sumergí en la mosquitera. En cuanto estuve dentro, abrí la bolsa de gasa. Para mi sorpresa, las fibras de la gasa habían despegado la telaraña y la cría de mosca pudo moverse libremente. Pensé que estaría muy cansada y hambrienta después de haber estado atrapada durante Dios sabe cuánto tiempo, por lo que salí corriendo hacia la sala de guardia, robé un pedacito de gasa y lo empapé de glucosa. Luego corrí a la cocina y saqué un pedazo de carne de la cazuela donde guardaban los restos. Cuando volví a mi mosquitera, la cría de mosca no parecía haberse movido. Sus minúsculas alas se agitaban débilmente; parecía hambrienta y cansada. Envolví el pedacito de carne en la gasa azucarada y la acerqué suavemente a la cría de mosca. Sólo entonces oí el traqueteo del carro de la medicina. Era la hora del tratamiento de la tarde. Tenía que encontrar algo con lo que cubrir a la mosca; no podía permitir que la descubrieran. Me gusta coleccionar pequeños recipientes, por lo que me resultó fácil encontrar una caja con una tapa transparente donde meter la mosca y su «nido» de gasa. Acababa de conseguirlo cuando el enfermero Zhang entró con su carro.

El enfermero Zhang dijo:

– ¿Qué ha sido de tu mariposa? Veamos si es o no bonita.

– P… p… p… pensé que no era tan bonita y dejé que se escapara -mentí entre tartamudeos.

– No importa. La próxima vez te cazaré una que sea bonita -dijo él para consolarme.

Le di las gracias, aunque apenas podía esperar a que acabase y se fuese. Estaba preocupada por mi cría de mosca.

Resulta mucho más difícil cuidar a una cría de mosca que a un gatito. A todo el mundo le gustan los gatitos, por lo que, si tienes uno, hay mucha gente que se ofrece para ayudarte. Pero a nadie le gustan las moscas. Temo que alguien la mate o que se escape. No me he atrevido a salir a hacer ejercicio en los últimos días, porque tengo miedo de que la cría pueda tener un accidente. Me preocupa que los médicos y las enfermeras puedan ahuyentarla. Escucho sus pasos y saco el brazo del mosquitero antes de que les haya dado tiempo a entrar, para que puedan tomarme el pulso y la temperatura sin levantar la red. Así ha sido cada día durante los últimos días. Estoy realmente cansada.

De todos modos, es mucho mejor que dormir en casa. Además, mi cría de mosca tiene mucho mejor aspecto ahora. Crece muy lentamente, apenas parece crecer. Pero eso está bien, no me gustan nada esas enormes moscas de cabeza verde. La cría de mosca siempre aterriza sobre mí; me encanta notar esa agradable, a veces cosquilleante sensación sobre la piel. También me gusta cuando juega en mis mejillas, pero no le permito que me bese.

11de mayo. Soleado

No me han tenido que poner el gota a gota durante los últimos días. El doctor Zhong dice que me tendrán unos cuantos días más en observación y que me someterán a un nuevo tratamiento. No me importa lo que hagan, siempre y cuando pueda quedarme aquí y no tenga que irme a casa.

Mi cría de mosca es maravillosa.

Le he hecho una casa donde pueda estar segura y a la vez moverse: se trata de una cubierta de gasa, del tipo que utilizan en la cantina para cubrir la comida. El jefe de cocina me la dio porque le dije que llevaría puesto un gota a gota cada día y que no podría comer a las horas convenidas y que necesitaba algo para evitar que las moscas y los bichos se pasearan por mi comida. El jefe de cocina es una buena persona. Estuvo de acuerdo conmigo enseguida, e incluso me cosió una bolsita de gasa para que guardara en ella los boles y los cubiertos limpios. Y, de esta manera, la mosquita tiene su propia casa especial, pero lo más importante es que está muy segura allí dentro. Nadie puede siquiera imaginar que haya una mosca dentro de una cubierta antimoscas. Además, no me veo obligada a recurrir a la cantina en busca de comida para ella: puede disfrutar del arroz y las verduras conmigo.

Vuelvo a poder dormir en paz.

Hoy el día ha amanecido maravillosamente soleado. He metido la mosca en su casa, a los pies de mi cama, y le he pedido prestada la lupa a la vieja madre Wang para poder ver cómo come azúcar.

La mosca parece un anciano tras la lupa. ¡Es muy peluda! Me he asustado tanto al verla que he tenido que retirar la lente de aumento. No quiero verla tan fea. A simple vista es tan mona… Su cuerpo es minúsculo, es imposible dilucidar si es gris, parda o negra (a lo mejor es estampada); sus alas brillan bajo el sol como dos pequeños diamantes; sus patas son tan delgadas que me recuerdan a las de un bailarín; sus ojos son como pequeñas bolas de cristal. Nunca he logrado encontrar sus pupilas; nunca parece mirar nada.

Mi cría de mosca tiene realmente un aspecto divertido sobre la gasa azucarada: sus patas delanteras están constantemente ocupadas, moviéndose hacia adelante y hacia atrás, y ella no para de frotárselas, como si estuviera lavándose las manos constantemente.

Читать дальше
Тёмная тема

Шрифт:

Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Nacer mujer en China»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Nacer mujer en China» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё не прочитанные произведения.


Отзывы о книге «Nacer mujer en China»

Обсуждение, отзывы о книге «Nacer mujer en China» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.