Para reducir el daño relativo al consumo de drogas, las políticas tienen que ir más allá de la lucha contra la prevalencia, ya que los costos de las drogas varían de acuerdo con el tipo de droga, el modo de consumo, la cantidad de la ingesta y el grado de marginalización. Todo esto se considera en el uso sociocultural de los productos de las plantas psicoactivas. En la actualidad, la India está y ha estado alienada del uso de su materia prima en forma relevante y apropiada para suplir las necesidades locales. Existen restricciones para la manufactura de alcaloides y otros productos dentro del país, a pesar de las capacidades tecnológicas.
VI. Implementación del programa de demanda de drogas
La implementación de este programa no ha sido en su conjunto significativa. De acuerdo con el Consejo Económico de la ONU, el alcance de implementación del programa por los Estados Miembros en el período 2006-2007 no fue conforme al plan, bajo la categoría de Programa de Prevención sólo el 33% de las actividades fueron emprendidas, en el caso de actividades centradas en las consecuencias negativas sociales y en salud sólo el 28% fueron llevadas a cabo y 26% para tratamientos y rehabilitación. A pesar de la rala implementación del Programa de Demanda de Drogas, UNODC insiste en que su Programa de Reducción de Demanda de Drogas es el que ha estabilizado el consumo de drogas en todo el mundo. Los lugares del mundo donde el programa de reducción de la demanda de drogas ha sido implementado son América del Norte, Oceanía y Europa Occidental y Central, ¿no es el mundo un poco más grande?
VI.1 Gobernando desde la distancia
El objetivo de la UNODC al planear y ejecutar sus programas apunta a establecer uniformidad en la legislación, los conceptos utilizados, el proceso de documentación, los indicadores utilizados en la evaluación y en los recursos humanos involucrados en las distintas intervenciones. Esto contrasta totalmente con los mecanismos culturales de control en donde los grupos sociales inmediatos desempeñan un rol crucial y la documentación requerida se realiza a nivel local y se transmite oralmente. No hay costos indirectos y el deseo de tener una comunidad funcional hace que el proceso sea viable. Aún en el cambiante escenario actual es imposible que la vigilancia local sea un reemplazo viable.
La continua aseveración de que la implementación de las estrategias para la reducción de la demanda de drogas facilitará el tratamiento de los problemas inherentes a ésta y despejará el camino hacia un mundo libre de drogas, está llena de opciones irracionales e insostenibles. Tomemos a la India como ejemplo. Considerando el Informe Mundial sobre Drogas (WDR por sus siglas en inglés 2008), si la tasa de prevalencia de consumidores en Mumbai es 0,4%, entonces alrededor de 23.000 hombres serían consumidores de drogas. En la actualidad, cada centro cuenta con 15 camas dedicadas simultáneamente a la desintoxicación con tratamientos que duran 15 días. Así las cosas, alrededor de 1.440 consumidores podrían recibir cuidados en un año en cuatro centros en la ciudad de Mumbai. Lo que significa que para que los 23.000 usuarios de opiáceas consigan hospitalización para la desintoxicación al menos una vez en un año se requerirían sesenta centros de desintoxicación. Probablemente esta es la razón por la cual la UNODC promueve la sustitución de drogas como alternativa.
VII. La reducción de la demanda de drogas y la falta de responsabilidad
La gobernanza de los grupos locales supone una responsabilidad perdida con la interferencia de la distancia. La falta de responsabilidad/rendición de cuentas de las agencias de la ONU es evidente a partir de la cláusula inscrita en todas sus publicaciones: “El documento no está editado oficialmente”, con la cual se considera absuelta de toda responsabilidad. Por ejemplo el material de ayuda para capacitación (Ranganathan et al. 2002) del Ministerio de Estado y las Naciones Unidas viene con la siguiente cláusula: “No representa necesariamente la política oficial del Programa Internacional de las Naciones Unidas para la Fiscalización de las Drogas ni del Ministerio de Justicia Social e Integración del Gobierno de la India”. Esto ocurre con el material empleado para el desarrollo de recursos humanos del Proyecto AD/IND/99/60 (Reducción de la Demanda en todas las Comunidades en la India). La situación es similar en otros países de Asia. Mientras que las editoriales pueden tomar distancia en cuanto a su responsabilidad por el material publicado, las Naciones Unidas y el Ministerio de Justicia Social e Integración no son meros editores, sino que están abogando por un proceso de pensamiento en particular que afecta la vida de millones. Si se aplica las Naciones Unidas no sólo se están rehusando a asumir la responsabilidad por sus acciones sino que alientan a que otras agencias de gobierno hagan lo mismo.
VIII. Conclusión
Los tratados internacionales sobre drogas no son meras herramientas de control del comercio/uso de los productos de plantas psicoactivas, drogas semisintéticas y sintéticas, son también un medio de control global por un selecto grupo de naciones que instituyó la ONU a tal fin inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial.
Los Estados Miembros tienen un limitado margen de maniobra para considerar el desarrollo local y las realidades socioculturales en el proceso. La vinculación del tráfico de drogas con otras preocupaciones en el área financiera y de seguridad aumenta el ámbito de las Naciones Unidas para hacer caso omiso de la soberanía de los Estados no permanentes dentro del Consejo de Seguridad de la ONU, especialmente de los países en desarrollo. Para facilitar la adhesión los Estados Miembros fueron provistos de “fondos especiales” para satisfacer sus necesidades a través de acuerdos multilaterales. Dado esta realidad que administra el control de drogas los Estados Miembros no permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU necesitan considerar el panorama más amplio y volver a examinar la pertinencia de los actuales tratados y de sus procesos de adaptación. El fortalecimiento de los sistemas tradicionales de cuidado de la salud es otro tema transversal que tiene que ser considerado con carácter prioritario.
Los Principios de la Reducción de la Demanda de Droga y sus programas correspondientes todavía tienen que probar su pertinencia, distinto de su capacidad para cambiar el uso de drogas desde productos naturales hacia sustancias semisintéticas, sintéticas y productos farmacéuticos. El actual formato del programa de reducción de la demanda de drogas es limitado en cuanto a lo que tiene para ofrecer; la realidad triste y lamentable es el foco en el uso de programas de reducción de la demanda de droga para perturbar mecanismos socioculturales de control cuya efectividad ya está comprobada y que son la forma más pertinente, sostenible y efectiva en términos de costos, de minimizar el daño y administrar el consumo. Quedan sin respuesta algunas preguntas: ¿Qué le da a las Naciones Unidas el derecho inalienable para decidir y transgredir el derecho soberano de los Estados Miembros, el derecho sobre la materia prima dentro de sus territorios y su desarrollo? ¿Y el derecho de los Estados Miembros para mantener, alimentar y potenciar a las identidades culturales y al conocimiento local? ¿Y el derecho de los Estados Miembros a protegerse de la creación de la dependencia de los productos patentados a perpetuidad?
Bibliografía
Читать дальше