Acisclo Manuel Ruiz Torrero - Se necesita vigilante

Здесь есть возможность читать онлайн «Acisclo Manuel Ruiz Torrero - Se necesita vigilante» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Se necesita vigilante: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Se necesita vigilante»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Rafael ha dejado atrás su primera juventud. Mas maduro, comienza a plantearse un futuro junto a su novia Diana que se le antoja difícil, con pocas perspectivas de progreso. De manera fortuita, decide probar suerte en un mundo tan desconocido para él como es la Seguridad Privada, un hecho que le cambiará la vida. Una historia plagada de experiencias nuevas, dramáticas y anecdoticas, en la que nuestro querido Rafa intenta sobrevivir en constante controversia consigo mismo. Su entorno, sus miedos y su propia lucha interna, hacen de este relato «Se necesita Vigilante» un reflejo social de la época ( 1987-1993), donde el amor y la amistad se convierten en la piedra angular del protagonista.

Se necesita vigilante — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Se necesita vigilante», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

El reloj lo miraba cada cinco minutos, pero las manecillas parecían estar atascadas. De repente se vio absurdo, allí sentado mirando al infinito, con un calor insoportable, sin nada con lo que entretenerse, solo sus pensamientos. Era demasiado para él, hasta ese momento los trabajos que había realizado eran mucho más dinámicos, pero aquello era desesperante. Le entró un bajón considerable, no sabía si por el calor o simplemente porque no valía para aquello, el caso es que llegó a la conclusión de que ese trabajo no era para él y cuando le saliera otra cosa se iría.

Estaba tan pensativo que no se dio cuenta de que a lo lejos venían un camión y un turismo tocando el claxon de forma estridente, a gran velocidad. De repente, observó cómo frenaban bruscamente, justo en frente de la verja y se bajaban los dos conductores. El camionero con un palo en la mano (de unas dimensiones considerables), le propinó un estacazo en la espalda al otro conductor, éste a su vez, como si no le hubiese hecho nada, cogió un gran pedrusco y se lo lanzo al camionero impactándole en la espalda para, a continuación liarse a puñetazos y patadas. Estuvieron con la trifulca varios minutos, cuando se cansaron comenzaron a hablar sobre la “pirula que me has hecho”, “yo no, has sido tú”. Diez minutos después se dieron la mano, se montaron en sus respectivos vehículos y se marcharon.

Rafael lo estaba flipando, le pareció tan surrealista que se limitó a ser un simple espectador, sin saber qué hacer se limitó a contemplar aquella escena tan grotesca. Por un lado recordó todo lo que le habían enseñado sobre la autoridad que ejercían y todos esos argumentos teóricos, pero por otro, lo único que pensó era que si iba para allá lo que podía pasar era que pillara él. No los vio muy dialogantes cuando llegaron, ni siquiera le vieron a pesar de estar en un sitio visible, como para meterse en medio; “cuando se lo cuente a Diana no se lo va a creer” —pensó de inmediato—.

– Las veces que me lo habrás contado y siempre me hace gracia, papá. — Riéndose abiertamente ante los gestos de su padre.

– Yo ahora me rio, pero en aquel momento pensé que se mataban. – Contagiado por la risa de su hijo.

– Me hubiese gustado ver tu cara. — Sin parar de reír, imaginándose la escena.

– Pues cara de tonto se me quedó. — Provocando con su cara una risa nerviosa en su hijo.

– ¿No se te ocurrió llamar a la policía? – Más calmado después del momento simpático.

– ¿Cómo no fuera a voces?— Con su clásica ironía.

– ¿No tenías un teléfono? – Algo sorprendido.

– Para nada. Lo único que había era una silla y una mesa. No creo que hubiese servido de nada llamar con la silla. — Estallando en una carcajada.

– Madre mía papá, que cosas te han pasado. — Regalándole una mirada de cariño.

– No lo sabes bien.

Aquel episodio le sirvió a Rafael para salir del círculo negativo que había entrado, al pensar una y otra vez en lo ocurrido le ayudó que las horas pasaran más deprisa. La noche llegó y no tardó en oír un rugido de motor a lo lejos, muy estridente, poco después divisó unos faros que se dirigían hacia su posición. No tardó en comprobar que se trataba de su relevo, con satisfacción miró el reloj, también venía bastante pronto. Se trataba de un chaval con más experiencia que el resto de los compañeros, un Vigilante que llevaba unos años trabajando en la empresa y con el que Rafa pronto hizo buenas migas. Le dio las novedades, poca cosa, simplemente el episodio que había presenciado. Mientras que se ponía el uniforme, le preguntó sobre aquella profesión tan desconocida para él, aprovechando que contaba con cierta experiencia o al menos más que él. A pesar de lo poco hablador que a todas luces se veía que era, le contestó de forma contundente “aprovecha este tipo de servicios”.

No sabía que había querido decir con esa frase, pero todo el camino de regreso estuvo dándole vueltas, un camino que para no perder la costumbre volvió a convertirse en el martirio particular de Rafa. De nuevo se perdió y aunque su compañero llegó pronto, de nada le sirvió, él llegó tarde a casa de Diana, pero al menos llegó. Ella le estaba esperando impaciente sin sorprenderle la tardanza, incluso esperaba que llegara más tarde pues conocía a su novio y tenía prevista la demora. Mientras que cenaban le contó las peripecias de su primer día, atenta le escuchó toda la narración que compulsivamente le iba contando su novio. Se rieron con el episodio surrealista, sin terminar de creer lo que le estaba contando, pero ante todo, entendió lo que pasaba por su cabeza, simplemente le aconsejó que esperara a que le saliera otro trabajo que fuera de su agrado y después decidiera, algo que agradeció enormemente Rafael. Diana como siempre en su línea cerebral y práctica despejaba todas las dudas que le surgían.

El día siguiente lo afrontó con otro aire, algo más relajado al no tener que enfrentarse a la novedad de lo desconocido. Fue de nuevo con tiempo, en esta ocasión con menos margen, confiado en llegar a la primera, sin uniformar, con lectura y una radio que le dejó Diana. De nuevo se excedió en confiar que llegaría a la primera, volviendo a equivocar el camino pero con la buena suerte de retomarlo sin demasiada pérdida de tiempo y consiguiendo llegar dentro del margen aceptable. El segundo día fue bastante más ameno gracias a los entretenimientos que había llevado, lo que hizo que su mente no tuviese tiempo de tener pensamientos negativos, a pesar de no ayudar nada el calor aplastante que soportó.

Los días siguientes todo cambió, el movimiento era trepidante, se incorporaron operarios, se descargó mucha mercancía y todo tipo de maquinaria para comenzar la actividad en la empresa. Como había imaginado, se trataba de un gran almacén central, así como de diferentes obradores donde se confeccionaban alimentos variados, desde helados o pastelería, hasta cárnicas de una importante cadena multiespacio. Poco a poco se fue integrando en la dinámica de su nuevo trabajo; descubrió una faceta nueva en su vida, un principio de autoridad innata que una vez puso en práctica pudo comprobar los buenos resultados con gran satisfacción. Aunque no era nada novedoso en su día a día, sí que pudo experimentar la vital importancia que suponía en el mundo de la Seguridad. Sin gran esfuerzo conseguía mantener el control de las situaciones que se iban produciendo, relajaba los momentos de tensión, pero por encima de todo lo que más le reconfortaba sin duda, era la sensación de respeto que le transmitían la gente con la que trabajaba. No tardó en hacerse con una imagen, la imagen que quería transmitir, amable, pero serio, correcto, pero profesional, estableció unas pautas de seguridad que se vieron recompensadas en menos tiempo de lo que había pensado.

Transcurrido un mes, más o menos, se personó su jefe en el servicio como solía hacer de forma periódica, aunque en esa ocasión lo vio diferente. Notó que le observaba de forma mucho más detallada, le hacía preguntas sobre temas operativos que no solía hacer en otras ocasiones. La explicación sobre esa actitud la obtuvo antes de marcharse del recinto, cuando le preguntó si quería que le presentara a los exámenes para ser Vigilante Jurado.

Tendría que esperar a que pasase el mes de agosto para comenzar a mover todo el papeleo, entre ellos un certificado de penales, a las que tenía que acompañar una serie de certificados, escritos y documentos varios. No podía ocultar su alegría pues todo había sido más rápido de lo que había imaginado, teniendo en cuenta la situación de otros Guardas de Seguridad, entre ellos uno de sus compañeros, que llevaba esperando un año para ser presentado. No tenía ni idea de los criterios que seguían en la empresa para elegir a sus candidatos, quizá, pensó, era cuestión simplemente de caer bien, aunque su intuición le decía que tenían en cuenta otros factores que en ese momento no podía descifrar.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Se necesita vigilante»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Se necesita vigilante» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Se necesita vigilante»

Обсуждение, отзывы о книге «Se necesita vigilante» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x