Robert Silverberg - Muero por dentro

Здесь есть возможность читать онлайн «Robert Silverberg - Muero por dentro» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Город: Barcelona, Год выпуска: 1988, Издательство: Martínez Roca, Жанр: Фантастика и фэнтези, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Muero por dentro: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Muero por dentro»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Muero por dentro es un clásico de referencia y una de las más inspiradas historias de su autor: en ella aborda un tema tan clásico como es la telepatía de manera sutil, ahondando en el lado oscuro del ser humano, rebosa soledad, devastación interior y sensibilidad.
Nombrado para el premio Nebula a la mejor novela en 1972.
Nombrado para el premio Hugo a la mejor novela en 1973.
Nombrado para el premio Locus en 1973.

Muero por dentro — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Muero por dentro», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Lamentablemente no disponemos de las cartas imaginarias que constantemente se dicta a sí mismo, pero que nunca envía. Estimado señor Kierkegaard: Estoy completamente de acuerdo con su célebre sentencia en la que comparar el “absurdo” con “el hecho de que con Dios todo es posible”, y que declara, “El absurdo no es uno de los factores que pueden ser diferenciados dentro del ámbito correcto de la comprensión: no es idéntico a lo improbable, a lo inesperado, a lo imprevisto”. En mi propia experiencia con el absurdo… Estimado señor Shakespeare: Qué acertadamente se expresa cuando dice, “No es amor el amor que al percibir un cambio cambia, o que propende con el distanciado a distanciarse”. Sin embargo, su soneto da por sentado algo que queda por probar: Si el amor no es amor, ¿qué es entonces ese sentimiento de proximidad que puede ser tan absurda e inesperadamente destruido por algo insignificante? Si pudiera sugerir otro modo existencial de relacionarse con otros, que… Como son momentáneas, el producto de impulsos vagos, y a veces incomprensibles, no podemos acceder de un modo satisfactorio a estas comunicaciones que Selig a veces produce a una velocidad de cien por hora. Estimado señor juez Homes: En la causa de Southern Pacific Co. contra Jensen, 244 E. U. 205, 221 (1917), usted falló: “Reconozco sin vacilación que los jueces legislan y deben hacerlo, pero sólo pueden hacerlo en forma intersticial; quedan limitados a movimientos molares y moleculares”. Debo confesar que esta espléndida metáfora no me resulta del todo clara, y …

Estimado señor Selig:

El mundo actual y la totalidad de la vida están enfermos. Si yo fuera médico y se me pidiera consejo, respondería: “Hagan silencio”.

Le saluda atentamente,

Soren Kierkegaard (1813–1855)

Además de todo esto, hay tres carpetas de grueso cartón beige que no están disponibles para la inspección pública, puesto que contienen cartas bastante más personales. Bajo los términos en que se firmó nuestro acuerdo con la Fundación David Selig, me está prohibido leer textualmente, aunque puedo parafrasear. Éstas son sus cartas a, y a veces de, las chicas que ha amado o ha querido amar. La primera data de 1950 y lleva en la parte superior en grandes letras rojas, la anotación NO FUE ENVIADA. Querida Beverly, empieza, y está llena de imágenes sexuales embarazosamente gráficas. ¿Qué puede decirnos de esta Beverly, Selig? Bueno, era baja, atractiva y pecosa, con pechos grandes y un carácter risueño; en clase de biología se sentaba delante de mí. Beverly tenía una desagradable hermana melliza, Estelle, que siempre andaba con el ceño fruncido y, por uno de esos caprichos de la genética, era tan chata como Beverly exuberante. Posiblemente por eso era por lo que fruncía el ceño tan a menudo. A su modo, amargo y sombrío, yo le gustaba a Estelle, y pienso que, a la larga, se habría acostado conmigo, lo que le habría hecho mucho bien a mi ego de 15 años, pero yo la detestaba. Parecía una imitación mal hecha y llena de manchas de Beverly, a quien yo amaba. Mientras la señorita Mueller hablaba monótonamente sobre mitosis y cromosomas, yo solía pasearme descalzo por la mente de Beverly. Acababa de perder la virginidad con Víctor Schlitz, el grandote y huesudo pelirrojo, de ojos verdes, que se sentaba junto a ella, y fui aprendiendo mucho sobre el sexo, con intervalos de 12 horas, al radiarme Beverly todas las mañanas su aventura de la noche anterior con Víctor. No sentía celos. Era apuesto, seguro de sí mismo y la merecía, mientras que entonces yo era demasiado tímido e inseguro como para acostarme con alguien. Por lo tanto, adueñándome de su secreto, viví su romance y empecé a imaginar que yo hacía con Beverly las cosas espectaculares que Víctor hacía con ella. Llegó un momento en que desesperadamente quise acostarme con ella, pero mis exploraciones de su mente me dijeron que para ella yo sólo era una especie de gnomo gracioso, una rareza, un bufón. Entonces, ¿cómo conseguirlo? Le escribí esta carta describiéndole con vívidos y sudorosos detalles todo lo que ella y Víctor habían estado haciendo, y le dije: ¿No te preguntas cómo sé todo eso, eh eh eh? Con lo que implicaba que era una especie de superhombre con el poder de penetrar en las intimidades de la mente femenina. Supuse que eso la haría caer directamente en mis brazos, desmayada de miedo, pero al pensármelo dos veces comprendí que creería que era un loco o un mirón, y que cualquiera de las dos cosas la haría apartarse de mí, así que no mandé la carta, me limité a archivarla. Una noche mi madre la encontró, pero no se atrevió a decirme nada, irremediablemente bloqueada como estaba en cuanto al tema de la sexualidad; lo único que hizo fue guardarla en mi cuaderno. Esa noche leí los pensamientos de mi madre y descubrí que le había echado una mirada furtiva. ¿Estaba escandalizada y turbada? Sí, lo estaba, pero también se sentía muy orgullosa de que su niño fuera por fin un hombre que les escribía cosas obscenas a las chicas guapas. Mi hijo, el pornógrafo.

La mayoría de las cartas archivadas en estas carpetas fueron escritas entre 1954 y 1968. La más reciente fue escrita en el otoño de 1974, después de lo cual Selig comenzó a sentirse cada vez más y más alejado del resto de la raza humana y dejó de escribir cartas, salvo en su cabeza. No sé cuántas chicas están representadas aquí, pero el número debe de ser considerable. Por lo general, estas relaciones eran superficiales, ya que, como saben, Selig nunca se casó ni tuvo muchos enredos serios con mujeres. Como en el caso de Beverly, con aquéllas a las que amó más profundamente no tuvo, por lo general, una verdadera relación, aunque era capaz de fingir amor por alguien que en realidad era una conquista tomada a la ligera. A sabiendas, a veces utilizaba su don especial para explotar sexualmente a las mujeres, en especial las que rondaban los veinticinco años. No se siente orgulloso de ese período. ¿No les gustaría leer estas cartas, fisgones repugnantes? Pero no lo harán, no pondrán sus garras sobre ellas. Además, ¿por qué les he invitado aquí? ¿Por qué les dejo curiosear entre mis libros, mis fotografías, mis platos sucios y mi bañera manchada? Seguramente estoy perdiendo mi sentido de la propiedad. El aislamiento me está asfixiando; aunque mis ventanas están cerradas, he abierto la puerta. Les necesito porque cuando miran dentro de mi vida, cuando incorporan partes de ella a su propia experiencia, cuando descubren que soy real, que existo, que sufro, que tengo al menos un pasado si no un futuro, entonces puedo aferrarme con más firmeza a la realidad. De modo que puedan irse de aquí diciendo: Sí, conozco a David Selig, de hecho, lo conozco bastante bien. Pero eso no implica que deba mostrarles todo.

¡Miren, aquí hay una carta para Amy! Amy que, en la primavera de 1953, me liberó de mi amarga virginidad. ¿No les gustaría saber cómo ocurrió eso? La primera vez siempre posee una fascinación irresistible. Bueno, joróbense: no tengo ganas de explicarlo. Además, tampoco es una historia demasiado interesante. Penetré en ella y acabé, y ella no; así es cómo ocurrió, y si quieren saber el resto, quién era ella, cómo la conquisté, inventen ustedes mismos los detalles. ¿Dónde está Amy ahora? Amy está muerta. ¿Qué les parece eso? La primera con la que se acostó, y ya la ha sobrevivido. Murió en un accidente de coche cuando tenía veintitrés años, y su marido, que me conocía vagamente, me telefoneó para avisarme, ya que en un tiempo fui amigo de ella. Aún estaba traumatizado porque la policía le había hecho ir a identificar el cuerpo, y Amy había quedado realmente destrozada, despedazada, mutilada. Como algo de otro planeta, así es como se veía, me dijo. Catapultada a través del parabrisas y hacia un árbol. Y yo le dije:

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Muero por dentro»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Muero por dentro» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Robert Silverberg - He aquí el camino
Robert Silverberg
Robert Silverberg - Rządy terroru
Robert Silverberg
Robert Silverberg - Poznając smoka
Robert Silverberg
Robert Silverberg - Yokel with Portfolio
Robert Silverberg
Robert Silverberg - Push No More
Robert Silverberg
Robert Silverberg - La porte des mondes
Robert Silverberg
Robert Silverberg - Morire dentro
Robert Silverberg
Robert Silverberg - Por el tiempo
Robert Silverberg
Pablo Paredes M - Los animales por dentro
Pablo Paredes M
Отзывы о книге «Muero por dentro»

Обсуждение, отзывы о книге «Muero por dentro» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x