P. Cast - Diosa Por Derecho

Здесь есть возможность читать онлайн «P. Cast - Diosa Por Derecho» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Diosa Por Derecho: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Diosa Por Derecho»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Aunque Morrigan fue concebida en medio de una mentira, y estuvo atrapada en un árbol durante toda su gestación, su nacimiento fue verdaderamente mágico. Después de aquel comienzo, pasó
los siguientes dieciocho años de su vida como cualquier chica normal de Oklahoma. Cuando descubrió la verdad de su origen, la rabia y la pena se apoderaron de ella y la llevaron de vuelta al mundo de Partholon. Pero allí, en vez de ser respetada como hija de la encarnación de una diosa, Morrigan se sintió como una intrusa rechazada. En su desesperación por formar parte de Partholon, se enfrentará a fuerzas que no podía comprender ni controlar por entero. Y pronto empezaría a sufrir el acecho de una extraña oscuridad…

Diosa Por Derecho — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Diosa Por Derecho», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– De la oscuridad nace la luz. De la piedra fluye el líquido. Sabemos que nuestra diosa atiende nuestras plegarias porque nos alimenta en el vientre de su propio cuerpo. Somos Sidethas. De la diosa somos. Y del poder de Adsagsona obtenemos el conocimiento. Danos luz, diosa.

Se produjo un suave sonido de chisporroteo, y el humo negro que se había formado en el cubo se disipó súbitamente. La savia quedó clara, brillante, como una gelatina transparente.

– Vuestro turno, Suma Sacerdotisa.

Morrigan se sobresaltó. Alzó la vista desde la savia recién bendecida y se dio cuenta de que todo el mundo la estaba mirando con expectación. Abrió la boca para decirle a Birkita que no, que no podía, cuando oyó las palabras «acepta tu destino», y con otro respingo, se dio cuenta de que quería bendecir la savia.

Morrigan quería ser Suma Sacerdotisa.

Para no tener la oportunidad de acobardarse, se acercó al segundo cubo e, igual que Birkita, elevó las manos por encima de la cabeza y comenzó a hablar con voz clara.

– De la oscuridad nace la luz. De la piedra fluye el líquido -dijo, recordando con facilidad las palabras. Sin embargo, se detuvo, tomó aire y señaló con las manos hacia abajo. Cuando habló de nuevo, recitó las palabras que le salían del corazón, en vez de lo que recordaba de la plegaria-: Escúchame, Adsagsona. Soy Morrigan, tu Portadora de la Luz, y tu Suma Sacerdotisa. Te pido que vengas a mí, luz imposible de la oscuridad impenetrable. Sólo una diosa podría darme el poder de crearlo.

Morrigan hizo una pausa mientras comenzaba a trazar dibujos con las manos sobre la savia del cubo. Del alabastro líquido comenzó a surgir una niebla oscura, que se intensificó bajo sus manos. Sin embargo, en aquella oscuridad, Morrigan sintió la chispa de una luz cristalina que ya se había hecho familiar para ella, como una amiga de la infancia, y cuando completó la bendición con las palabras «enciéndete para mí, por favor, diosa», el poder que surgió bajo sus manos no fue un chisporroteo suave. Fue una descarga de energía y luz que sorprendió incluso a la propia Morrigan.

– ¡Bendita sea Adsagsona! -gritó Birkita.

– ¡Bendita sea Adsagsona! -repitieron todos.

Morrigan miró a los dos jóvenes arrogantes y vio que ellos eran los únicos que no le daban gracias a la diosa. En vez de eso, la estaban observando a ella con los ojos entornados, inquisitivos.

Con un cosquilleo de poder en las manos, Morrigan arqueó una ceja y los miró con petulancia.

Capítulo 6

El resto de la mañana pasó rápidamente, pero Morrigan siguió el consejo que su abuelo le daba una y otra vez: «Si tienes la boca cerrada y escuchas, te sorprenderá lo que puedes aprender acerca de la gente que te rodea».

Así pues, una vez que los aprendices arrogantes se hubieron marchado, Morrigan se acomodó en uno de los asientos cubiertos de pieles. Brina se acurrucó a su lado mientras ella bebía té dulce y escuchaba. Naturalmente, el abuelo tenía razón. Si sonreía y asentía amable pero silenciosamente, la gente se olvidaba pronto de que estaba allí, o de repente tenía ganas de charla con ella. Como consecuencia, Morrigan aprendió varias cosas.

Primero, que muchas personas no respetaban a las sacerdotisas de Adsagsona desde que Perth y Shayla se habían convertido en los Señores del Reino de los Sidethas. Y era evidente que Shayla tenía mucho poder. A las sacerdotisas no les agradaba, pero estaba claro que pese a ello, temían a los Señores. También estaba claro que los Sidethas que no estaban al servicio de Adsagsona respaldaban a los actuales dirigentes, aunque no le cayeran bien a nadie. La gente era muy rica, y Shayla y Perth lo habían hecho posible.

Cuanto más escuchaba Morrigan, más se daba cuenta de que había caído en medio de una lucha de poder. Las Sacerdotisas no tenían nada en contra de que la gente viviera bien, pero creían que Adsagsona estaba siendo olvidada a causa de tanta ansia de riqueza, así que querían que la gente volviera a adorar a la diosa y recuperara el antiguo modo de vida sencillo. Fuera lo que fuera.

Aquella situación era doblemente incómoda, porque parecía que Shayla tenía tendencia a desterrar de las cuevas a todo aquél que le causara enfado. La palabra «destierro» se pronunciaba a menudo, en susurros, acompañada de escalofríos.

Así pues ¿en qué posición estaba Morrigan? Bien, claramente, las Sacerdotisas estaban entusiasmadas con su presencia, y Shayla, todo lo contrario. Bien. Justo lo que ella necesitaba. Verse en mitad de un tira y afloja.

Un poco después del mediodía, Birkita y dos Sacerdotisas que le habían sido presentadas aquella mañana, Deidre y Raelin, fueron a buscarla con una sonrisa de expectación y le dijeron que era la hora de bañarse y ungirse para el ritual. Morrigan se levantó de su asiento y las siguió hacia su habitación para someterse a los preparativos del ritual.

Después de un delicioso baño, las mujeres la secaron vigorosamente con una toalla y comenzaron a aplicarle un aceite con olor a almendra dulce en la piel. Morrigan se dio cuenta de que estaba comenzando a sentirse casi mareada de emoción.

¡Se estaba preparando para escuchar la voz de su diosa!

Morrigan, envuelta en la gruesa toalla y acompañada por las tres mujeres, fue a su habitación. Sobre la cama, había una prenda extraña hecha de una tela blanca como la luna, que brillaba bajo la luz de las estalactitas de selenita. Morrigan la acarició.

– Vaya, es como la seda, pero en realidad es cuero.

– Es piel de cabra, de las más finas, curtida por las manos de las Sacerdotisas de Adsagsona, teñida y bordada con los mejores diamantes por una Suma Sacerdotisa que fue a pasar su eternidad con la diosa hace décadas. Yo me puse esta prenda para mi primer ritual de la luna nueva, hace casi cincuenta años -explicó Birkita con una sonrisa de nostalgia-. Ojalá fuera joven y flexible para ponérmela otra vez.

Morrigan observó a Birkita. «Es igual que la abuela», pensó Morrigan, «no pesará más de cincuenta kilos».

– Oh, por favor. Tú todavía puedes ponerte esto.

Birkita se ruborizó, pero sonrió.

– Ya es hora de que haya una nueva Suma Sacerdotisa. Os deseo que lo llevéis durante muchos años -dijo.

Después, les indicó a Deidre y a Raelin que la ayudaran a vestir a Morrigan, y entre las tres comenzaron a envolverla en aquel suave cuero.

– Eh, eh… un momento. Debe de faltar una pieza. O dos. O tres -dijo Morrigan, al ver el resultado final en el espejo.

La pieza de cuero se le ajustaba al cuerpo y marcaba su delgada cintura y sus caderas amplias y curvas. Tenía aberturas a cada lado de los muslos, y ella no llevaba nada debajo. Pero lo que más le asustaba era que la prenda sólo llegaba hasta sus costillas, y le dejaba los pechos completamente al aire.

– Tenéis razón, lady Morrigan -dijo Birkita. Se acercó al armario y sacó otra prenda de cuero blanco-. Esto se añadió al traje ceremonial durante la última década.

Mientras lo decía, le puso la prenda sobre los hombros. Era una especie de capa que se abrochaba al cuello y tapaba la mayor parte de la desnudez de Morrigan.

«Mal… Está mal… Es blasfemo».

Morrigan oyó aquel susurro en la mente, enfadado y entrecortado, y Morrigan olvidó el azoramiento de verse medio desnuda.

– No está bien -murmuró mientras tocaba con un dedo la capa.

Las jóvenes Sacerdotisas se miraron con incomodidad, y miraron también a Birkita.

– ¿Qué ocurre? -preguntó Morrigan-. ¿Qué es lo que no sé?

– Durante generaciones, las Sumas Sacerdotisas de Adsagsona han mostrado su pecho desnudo durante los rituales. Es lo correcto, lo lógico -dijo Birkita con la voz tirante-. Si una Sacerdotisa se cubre el cuerpo ante su diosa, ¿qué más puede estar tapando? ¿La culpabilidad? ¿Deseos secretos? ¿Falta de sinceridad?

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Diosa Por Derecho»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Diosa Por Derecho» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Diosa Por Derecho»

Обсуждение, отзывы о книге «Diosa Por Derecho» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x