Fernando González - Pensamiento de un viejo

Здесь есть возможность читать онлайн «Fernando González - Pensamiento de un viejo» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Pensamiento de un viejo: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Pensamiento de un viejo»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Joven es, con fresquísimo rostro y delicadas maneras de adolescente, el novel autor, y muy suyos y como tales por él mismo declarados, los pensamientos que llenan las páginas del libro. Lo que hay es que el autor se cree prematuramente envejecido, y que quienes no le conozcan de vista se lo pueden imaginar en efecto, cuando lean, como sujeto de veras provecto, tanto por las extensas y variadas lecturas que descubre haber hecho, cuanto por lo mucho que ahonda cuando piensa, por la intensidad y diversidad de los sentimientos que revela haber experimentado o imaginado vivamente, por la sutileza que gasta cuando analiza, por lo fácil y correcto de su dicción general, por la segura posesión del estilo que se ha creado, por la destreza con que da forma a lo más abstruso o más sutil, y sobre todo, por el amargo pesimismo de su concepto sobre la vida y sobre los bienes que muchos creemos posible hallar en ella, así como por la faz de escéptico que pone cuando parece que va a dar con una verdad, siquiera sea ésta de las crueles y acerbas que, a fuer de pesimista, parecen atraerle y fascinarle.

Pensamiento de un viejo — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Pensamiento de un viejo», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

“Tú has gozado poco, sufre ahora poco”. Así es mi justicia: si grande el contento, grande la tristeza; si pequeño el contento, pequeña la tristeza...”.

El que tenga oídos para oír, que oiga.

Y el contento de ese mendigo es tan grande cuando logra despertar en alguien la compasión, es decir, cuando consigue igualar a otro con él, como grande es su tristeza en los momentos de desconsuelo...

Y tú —terminó el sabio, dirigiéndose al discípulo de la exclamación— juzgas del sufrir del mendigo, conforme al sufrimiento que esa llaga te produciría a ti...

Juzgas de las cosas, sirviéndote de criterio tu propio ser...

Cuando hayas rumiado bien estas verdades, ya no dirás: ¡Maestro! ¡Hay injusticia en la vida!

Y el maestro y sus discípulos se alejaron del mendigo de la llaga.

VIVIR...

El maestro habló a sus discípulos, diciendo:

Cada uno debe vivir y analizar sus experiencias: así resultará original el tesoro de sus verdades.

No hay dos personas idénticas, y, por lo tanto, jamás una verdad se presentará a dos por un mismo aspecto. A cada uno lo visitará de diferente manera, despertará en él distintos sentimientos, y el camino seguido será también diferente...

He aquí lo esencial: vivir nuestra vida y sacar de ella el tesoro de nuestro saber.

Pero la mayor parte de los hombres están atareados en la lectura de libros, sin preocuparse de leer su propia alma. Y esos son los que dicen: todo es viejo; todo se ha dicho ya.

En verdad os digo, amigos míos, que cada verdad tiene tantos aspectos como hombres hay, y que todo aquel que se estudie, llegará a ella por un sendero original, y serán originales también los sentimientos que despierte en su corazón.

Cada verdad debe estar teñida con nuestra propia sangre. Entonces la amaremos con un grande amor.

Estad atentos para recoger la imagen que la vida deje al pasar por vuestro ser.

Si cada hombre se estudiara más a sí mismo, y se preocupara menos de la impresión que en otros ha dejado la vida, descubriría que su visión del universo es distinta a la de todos los demás...

Y el maestro agregó, dirigiéndose a uno de los discípulos que trataba de imitar el estilo de Renan:

No imitéis tampoco el estilo de ninguno, por admirable que sea. Sería eso despreciar vuestra propia personalidad. En el yo debéis buscar la sabiduría, y el modo de expresar la sabiduría...

Así habló el maestro a sus discípulos.

ASÍ HABLÓ EL LOCO...

Toda interpretación de la vida es verdadera, porque indica la forma y modo que la vida toma en el ser que interpreta: es como el viento, que al penetrar en una caverna, produce distinto sonido que al insinuarse en un bosque.

La vida en sí no tienen ninguna significación; según sea el ser, así es la vida.

Cada filósofo da su forma y modo a la vida; sólo que dice, engañado por su orgullo, que así es siempre.

Si dejo caer mi mano sobre una hormiga, para ella el golpe será mortal, mientras que un elefante ni siquiera se dará cuenta de que lo he tocado; luego el golpe en sí es indiferente y sólo tiene significación relativamente al ser sensible, siendo además distinta según sea el ser.

Tampoco son las cosas conforme nosotros las vemos.

Para una hormiga será una montaña lo que para nosotros un pequeño guijarro.

Se juzga al no—yo conforme al yo , o, mejor dicho, éste es creador de aquel.

La misma lógica que rige nuestros razonamientos es una creación de nuestro yo .

El espacio y el tiempo tampoco son conceptos en sí, pues uno sólo tiene conciencia de la duración de sí mismo (la cual cambia según sea el estado de alma), y según eso juzga lo demás.

ASÍ HABLÓ EL SOLITARIO...

Aquel día fue un amigo a visitar al solitario.

Éste se alegró en gran manera, pues ya comenzaba a fastidiarse de tanto interrogar, de tanto hablar con su propia alma.

Momentos de charla amena y superficial, son precisos en la vida del pensador.

—¿Cuál es tu entretenimiento en esta soledad? —preguntó el amigo al solitario.

—Soñar. Esa es mi diversión. Desde que me estudio a mí mismo, lo que más admirado me trae es este constante mudarse de mi alma. La más pequeña variación atmosférica hace cambiar mi yo . Y cada nuevo cambio trae una nueva visión del Universo.

Esa es mi diversión. Soñar mundos; filosofar, pues ¿qué otra cosa, si no aquello, es filosofar?

Placer divino es este de crear mundos.

A veces pienso en los hombres que pasan la vida atareada, sin tener un momento de ocio para soñar, y me figuro que esos hombres no han sentido alegría...

No para todo hombre se hizo este entretenimiento.

En todos cambia constantemente el yo , pero no todos son capaces de llevar su alma hasta los últimos y más vagos sueños...

Fastidiarse durante los momentos de ocio es señal de incapacidad para conocerse a sí mismo; aquellos que odian el ocio son hombres serviles, poseídos del espíritu de la pesadez. Para ellos, su alma es como una estrella inaccesible.

¡Soñar! Esa es mi diversión. A veces, tirado a la sombra de mi árbol frondoso, contemplo las nubes. Me figuro una noviecita que formo de las nubes más blancas, más lejanas, y le cuento cuentos, decires que van saliendo de mi corazón...

DÉJAME IMAGINAR...

La niña iba creciendo en espíritu. Su padre le traía siempre, al volver de sus viajes, algún regalo: muñecas, cuentos de hadas y de brujas...

Mira —le dijo la niña al padre— cuando traigas algún regalo para mí, no me lo entregues sino después de algún tiempo. Yo pensaré: es un libro de cuentos, y los cuentos son así: érase un hada que quería mucho a los niños... Érase una princesita muy buena... Así imaginaré muchos cuentos, creyendo que esos son los que dice el libro que me traes.

Otras veces será una muñeca. Y yo pensaré: es una muñeca que sabe llorar... Es una muñeca... Y tendré muchos cuentos y muñecas, muchos regalos. ¡Y estaré tan contenta!

Cuando me entregas el regalo, me pongo triste. Ya no puedo imaginar. Ya no puedo pensar cómo serán los cuentos, ni cómo será la muñeca...

* * *

Tenéis razón al decir que esta niña es soñada. Oíd: estaba el solitario tirado a la sombra de su árbol, mirando las nubes. Formó, de las nubes lejanas, una figura de niña, y luego, le dio su propia alma.

¡La novia del solitario es su propia alma!

MI DÍA DE DIFUNTOS

Porque te fuiste amiga, he sentido en este morirse del día, que mi alma me pesa cada vez más...

Comenzaba a levantarse el misterio en la sierra. Era la hora en que nuestra alma se va tornando más y más pesada...

El niño sintió miedo, como si algo extraño fueran a contemplar sus ojos, y se acercó un poco más al padre...

¿Hablaría el niño para apartar la mirada de sí mismo? Tal vez. La palabra sirve para eso: para olvidar, para alejar un poco nuestro mundo interior...

Sí; pero era la hora en que el hombre tiene necesidad de cariños que le ayuden a llevar su carga de misterios, su gama de sensaciones... O quizá también, cariños a quienes mirar para no mirarse a sí mismo... ¡Tantas cosas! Y por esas tantas cosas dijo el niño a su padre:

¡Papá! ¿Cómo era la abuelita...?

El Padre. —Primero fue una niña sonrosada...

El niño. —¿Y después...?

El padre. —Después fue una viejecita blanca...

El niño. —¿Y después...?

El padre. —¿Después...? ¿Después? ¡Melancolía del recuerdo!

Y en aquella hora amorosa el niño experimentó la tristeza del irse de los cariños, y pensó que al irse todos tendría que cargar solo con el peso de su alma...

El niño. —¡Pobrecitos los viejos! ¿No, papá?

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Pensamiento de un viejo»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Pensamiento de un viejo» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Fernando González Candelas - La evolución, de Darwin al genoma
Fernando González Candelas
Ana María González González - El claroscuro catalán
Ana María González González
Fernando González - Don Mirócletes
Fernando González
Fernando González - El Hermafrodita dormido
Fernando González
Fernando González - Cartas a Simón 1950 – 1959
Fernando González
Fernando González - Los negroides
Fernando González
Fernando González - El maestro de escuela
Fernando González
Fernando González - Viaje a pie 1929
Fernando González
Manuel Fernández y González - La vieja verde
Manuel Fernández y González
Отзывы о книге «Pensamiento de un viejo»

Обсуждение, отзывы о книге «Pensamiento de un viejo» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x