Ursula Le Guin - Ciudad de ilusiones

Здесь есть возможность читать онлайн «Ursula Le Guin - Ciudad de ilusiones» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Город: Buenos Aires, Год выпуска: 1974, Издательство: Grupo editor de Buenos Aires, Жанр: Фантастика и фэнтези, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Ciudad de ilusiones: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Ciudad de ilusiones»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

El protagonista de esta dramática novela es un hombre maduro que se encuentra de pronto solo en una espesa floresta, y no puede llegar a saber de dónde ha llegado y quién es. Los ojos de este hombre no son humanos. Las gentes del bosque lo cuidan como si se tratara de un niño, le enseñan a hablar y le transmiten todo lo que saben. Pero nadie puede resolver el enigma de su pasado, y al fin él tiene que partir en una peligrosa búsqueda. Cuando logre llegar a la ciudad de Estoch, descubrirá su auténtica identidad y entrará en un peligroso universo.

Ciudad de ilusiones — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Ciudad de ilusiones», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

No cruzó ningún camino ni vio signo alguno de que seres humanos habitaran o hubieran llegado nunca cerca del río. Pero hacia el final de la corta tarde, una bandada de aves salvajes verdebroncíneas elevaron vuelo adelante de él y sobrevolaron el agua cacareando y gritando juntas en una algarabía de palabras humanas.

Un poco más lejos se detuvo pues creyó haber percibido olor de humo de leña en el viento.

El viento soplaba río arriba hacia él, desde el noroeste. Prosiguió, doblemente cauteloso. Luego, como la noche avanzara entre los troncos de los árboles y obscureciera las ya obscuras márgenes del río, en la lejanía, más allá de la costa agreste y poblada de sauces una luz parpadeó y se desvaneció y volvió a brillar.

Ya no fue ni por temor ni siquiera por precaución que se detuvo, inmóvil sobre sus huellas para contemplar el distante relumbrar. Aparte de su propio fuego solitario, era la primera luz que había visto en medio de la espesura desde que abandonara el Claro. Lo conmovió extrañamente, brillando lejana entre las sombras.

Paciente en su fascinación como cualquier animal de la selva, esperó hasta que la noche se cerniera completamente y luego se encaminó despacio y sin hacer ruido, a lo largo de la ribera del río, manteniéndose al amparo de los sauces, hasta que estuvo lo suficientemente cerca como para ver el cuadrado de la amarilla ventana con la luz del fuego y el pico de la chimenea por encima, cubierto de nieve, y el alero de pino. Imponente sobre la obscura selva y el río, brillaba Orion. El viento de la noche era muy frío y silencioso.

De vez en cuando un copo de nieve se desprendía de una rama y caía hacia las obscuras aguas teñido con la luminosidad del fuego mientras descendía.

Falk permaneció observando la luz dentro de la cabaña. Se acercó algo, luego se quedó inmóvil durante largo rato.

La puerta de la cabaña crujió al abrirse, y formó un abanico de oro sobre el obscuro suelo y desmenuzó la nieve en corpúsculos y lentejuelas.

—Acércate a la luz —dijo un hombre que se detuvo, al descubierto, en el dorado recuadro formado por la puerta.

Falk en la oscuridad de la espesura puso su mano sobre su pistola láser y no hizo ningún otro movimiento.

—Te escucho mentalmente. Soy un Auditor. Entra. No tienes nada que temer. ¿Hablas en este idioma?

Silencio.

—Espero que sí, porque no utilizaré la comunicación telepática. No hay nadie aquí, excepto yo, y tú —dijo la pausada voz—. Escucho sin intentarlo, como tú escuchas con tus oídos, y todavía te escucho allí, en la oscuridad. Ven y golpea la puerta si quieres entrar y refugiarte bajo mi techo.

La puerta se cerró.

Falk permaneció inmóvil durante unos momentos. Luego cruzó la breve distancia obscura que lo separaba de la cabaña y golpeó la puerta.

—¡Entra!

Abrió la puerta y entró a la luz y al calor.

Un anciano, de largo pelo gris trenzado sobre su espalda, estaba de rodillas frente al hogar avivando el fuego. No se dio vuelta para mirar al extraño, pero dejó su fuego despaciosamente. Después de un momento cantó en voz alta y lenta:

estoy solo y confundido,
confundido, desolado.
Oh, como en el mar, al garete.
Oh, sin puerto donde anclar…

La cabeza gris se volvió finalmente. El viejo sonreía; sus angostos y brillantes ojos recorrieren de arriba a abajo a Falk.

Con una voz que sonaba débil y vacilante porque no había pronunciado palabra alguna durante mucho tiempo, Falk respondió con la estrofa siguiente del Antiguo Canon:

Todo el mundo es útil,
pero yo estoy solo
y para nada sirvo,
forastero.
Sólo yo difiero de los otros,
pero busco la leche de la madre,
el camino…

—¡Ja, ja, ja! —dijo el anciano—. ¿Es cierto, Ojos Amarillos? Acércate, siéntate junto al fuego. Forastero. Sí, sí, sí… No cabe duda. Eres un forastero. ¿A qué distancia de la Tierra…? ¿quién sabe? ¿Cuánto hace que no te bañas en agua caliente? ¿Quién sabe? ¿Dónde estará la maldita marmita? Fría noche en el ancho mundo, ¿no es cierto? Fría como el beso de un traidor. Ya está: llénala con el balde que encontrarás junto a la puerta, ¿quieres? luego yo la pondré sobre el fuego, eso es. Soy un Thurro-sabio, veo que me comprendes, de modo que no encontrarás demasiado confort aquí. Pero un baño caliente es caliente, no importa si la marmita hierve por fusión de hidrógeno o por las llamas de los leños, ¿en? Sí, evidentemente eres un extranjero, muchacho, y a tus ropas no les vendría mal un baño, también, por más que sean a prueba de tiempo. ¿Qué es eso…? ¿Conejos? Bueno. Los asaremos mañana con una o dos verduras. Las verduras son algo que no se puede cazar con un fusil láser. Y no puedes cultivarlas en un zurrón. Vivo solo aquí, mi muchacho, solo y absolutamente solitario. Porque soy un gran, el muy grande, el más grande Auditor, vivo solo y hablo demasiado. No nací aquí, como un hongo bajo un árbol; pero con los demás hombres nunca pude lograr una comunicación de mentes; todo el barullo y el dolor, y la algarabía y el pesar y todas sus modalidades me dejaban en situación de tener que encontrar mi propio camino a través de cuarenta selvas diferentes. De modo que vine a vivir solo en la verdadera selva con las bestias a mi alrededor, con mentes pequeñas pero constantes. No hay mentiras en sus pensamientos. No yace el engaño en sus intenciones. Siéntate: hace mucho que andas y tus piernas están cansadas.

Falk se sentó en el banco de madera junto al hogar.

—Te agradezco tu hospitalidad —dijo, y estaba a punto de decir su nombre cuando el anciano habló.

—No tiene importancia. Puedo llamarte por una cantidad de nombres, lo suficientemente buenos para este lugar del mundo: Ojos Amarillos, Forastero, Huésped, cualquiera servirá. Recuerda que soy un Auditor, no un paraverbalista. No me interesan las palabras ni los nombres. No los quiero. Había un alma sola, afuera, en la oscuridad, lo sabía, y sé como mi iluminada ventana brillaba para tus ojos. ¿No es eso suficiente, más que suficiente? Y mi nombre es TodoSolo. ¿Entiendes? Ahora, arrímate, caliéntate junto al fuego.

—Estoy entrando en calor —dijo Falk.

La trenza gris del anciano saltaba contra sus hombros mientras se movía, ligero y frágil, al par que fluía su suave voz; nunca formulaba una verdadera pregunta, nunca hacía una pausa para dejar lugar a una respuesta. No tenía ningún temor y era imposible temerlo.

Ahora todos los días y noches de viaje a través de la selva se homogeneizaban detrás de Falk. No tenía que pensar en el tiempo, en la oscuridad, en las estrellas y bestias y árboles. Podía sentarse y estirar sus piernas hacia el brillante fuego, podía comer en compañía de otro, podía bañarse frente al fuego en una cuba de madera llena de agua caliente. No sabía cuál placer era mayor, si la calidez del agua que lavaba la suciedad y el cansancio o la calidez que lavaba su espíritu en este lugar, la absurda charla fugaz del viejo, la milagrosa complejidad de la conversación humana después del largo silencio de la espesura.

Admitía como verdadero todo lo que el anciano le decía, que era capaz de sentir las emociones y percepciones de Falk, que era un auditor de mentes, que practicaba la empatía. La empatía era respecto de la telepatía lo que la vista respecto del tacto, un sentido más ambiguo, más primitivo y más íntimo. No estaba sujeta a un refinado aprendizaje y control, en el grado de la telepatía; inversamente, la empatía involuntaria no era poco frecuente, aun entre los no ejercitados. La ciega Kretyan se había cultivado como auditora de mentes, pues tenía el don natural. Pero no era un don semejante a éste. No le llevó a Falk demasiado tiempo el tener la certidumbre de que el anciano advertía, de hecho, constantemente, y en cierta medida lo que su visitante sentía y experimentaba. Por alguna razón esto no le molestó a Falk, mientras que cuando se enteró de que la droga de Argerd le había abierto la mente para la investigación telepática se enfureció.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Ciudad de ilusiones»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Ciudad de ilusiones» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Ciudad de ilusiones»

Обсуждение, отзывы о книге «Ciudad de ilusiones» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x