Ted Dekker - Verde

Здесь есть возможность читать онлайн «Ted Dekker - Verde» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Фантастика и фэнтези, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Verde: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Verde»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

TAL COMO PREDIJERON LOS ANTIGUOS PROFETAS, un apocalipsis destruyó el planeta en el siglo XXI. Pero, dos mil años después, Elyon puso en el mundo a un nuevo Adán. Sin embargo, esta vez Dios otorgó una ventaja a la humanidad. Lo que una vez fue invisible, ahora se podía ver. Era algo bueno y recibía el nombre de… Verde.
Pero el maligno Teeleh aguardaba su oportunidad en un Bosque Negro.
Entonces, en el momento menos esperado, un joven de veinticuatro años conocido como Thomas Hunter se durmió en nuestro mundo y despertó en ese futuro Bosque Negro. Se había abierto una puerta para que Teeleh arrasara la tierra. Desolados por esa desgracia, Thomas Hunter y su Círculo juraron luchar contra el tenebroso azote hasta su último aliento.
Pero ahora el Círculo ha perdido la esperanza. Samuel, el amado hijo de Thomas Hunter, ha abandonado a su padre. Se ha unido a las fuerzas oscuras para iniciar una guerra final. Thomas se siente destrozado y busca desesperadamente la manera de regresar a nuestra realidad para dar con una esquiva esperanza que podría salvarlos a todos.
Entra en este relato apocalíptico, distinto a todo lo que has leído. Una historia que enlaza con la nuestra de una manera tan ¡impactante que te hará olvidar que estás en otro mundo.

Verde — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Verde», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Solo la última semana una de las más delicadas danzarinas del campamento, Jessica del Norte, había perdido a su hijo, Stevie, cuando este salió a cazar un venado con dos de sus amigos. Eran jóvenes y valientes, y su búsqueda los había internado en el bosque, donde asesinos de las hordas llamados guturales les cayeron desde los árboles y mataron a Stevie. Jessica había llorado todo un día hasta quedar ronca.

Los pensamientos giraban en la cabeza de Chelise a paso vertiginoso, resaltados por los gritos y los choques de espada. Ambos combatientes estaban jadeando y sangrando, aferrados ahora a un objetivo único: Sobrevivir.

Chelise debía detener esto, sin importar que tuvieran derecho a competir, como afirmara Ronin. Thomas debía parar esto antes de que uno de sus hijos resultara muerto. Eso dividiría el círculo. ¡Llevaría a más muertes!

Pero ella no sabía qué hacer.

Y entonces ya no importaba, porque en el lapso en que Chelise parpadeó, Marie estaba de espaldas, intentando agarrarse a algo. Había caído al tropezar con la pequeña grieta de una roca que bordeaba la piedra lisa.

Al ver la hendidura, Samuel se lanzó de frente. No fue tras la garganta de Marie-Es lo que ella habría esperado. En vez de eso, el pie derecho del muchacho hizo contacto con el mango de la espada y la lanzó dando vueltas por el aire.

Marie había quedado desarmada.

Un rugido salió de la multitud.

La mujer con ojos rojos le gritaba a Chelise.

Samuel puso una rodilla en el estómago de Marie, evitando con eficacia que ella se liberara con un giro. La espada golpeó ruidosamente la roca a dos centímetros del cuello de la joven, salpicándole la mejilla derecha con pedazos de piedra.

Ese resonante choque de metal contra roca silenció a la Concurrencia. Pero la noche no se apaciguó. Un lamento de amargo remordimiento cortó el aire.

Chelise había oído esto, solo una vez, tres años atrás cuando veintitrés mujeres y niños fueron degollados por guturales mientras los hombres buscaban a un pequeño perdido. Thomas también había oído aquel lamento, cayó sobre las rodillas, y clamó al cielo.

La esposa de Hunter se dio la vuelta, apabullada por el grito de angustia.

Thomas estaba de rodillas sobre un barranco de ocho metros detrás de Chelise, con los brazos extendidos, sollozando al cielo nocturno.

– Elyonnnnnn… Elyonnnnnn…

Durante prolongados segundos, el líder gimió de manera imperturbable, luchando por hallar aliento, temblando como un hombre que acaba de saber que han hallado muerto a su hijo en el fondo de un precipicio. Lágrimas le bajaban a raudales por las mejillas mientras lloraba. Por su Hacedor. Por sus hijos. Por el círculo. Por las hordas.

En todo el entorno del valle, la multitud se quedó pegada a la tierra, sobrecogida bajo este horrible sonido. Detrás Chelise, Marie y Samuel respiraban con dificultad, pero ya no había ruido de espadas oscilando.

– Se acabó -gimió Thomas-. ¡Se acabó!

– No -gritó Chelise.

– Nos has abandonado -clamó él al cielo; luego más fuerte-. ¡Nos has abandonado!

– No -volvió a gritar ella, rogándole que la oyera-. No, él no nos ha abandonado.

El pecho de Thomas subía y bajaba.

– No, Elyon no nos ha abandonado -gritó ella-. ¡No morí para esto!

Thomas bajó la barbilla y parpadeó. Parecía perdido, un caparazón del hombre le había llevado a la victoria a los poderosos guardianes del bosque de campaña en campaña, antes de que Qurong los superara. Chelise pensó por un momento que él se había perdido en la desesperanza, un hombre despojado de todo lo que una vez atesoró.

Los ojos de Thomas se aclararon lentamente y, tambaleándose, se puso de pie, mirando alrededor a la multitud. La mirada se le posó en su hijo y su hija. Marie aún yacía de espaldas, prensada por la espada de Samuel. Levántate -ordenó Thomas.

Samuel miró a su padre. No hizo ningún movimiento para renunciar a la ventaja ganada con gran esfuerzo.

– ¡Levántate! -bramó Thomas con voz cargada de ira, y pareció haber agarrado desprevenido a Samuel.

Lentamente su hijo quitó la espada y retrocedió. Marie rodó y se puso de rodillas. Luego de pie. Miraron a lo alto a su padre, heridos y sangrando.

– ¿Es esto a lo que hemos llegado? -preguntó Thomas-. ¿A una caterva de vagabundos dispuestos a volver a su propio cautiverio? ¿Desean volver a unirse a las hordas?

– Deberíamos matarlos, no unirnos a ellos -expresó en voz baja la mujer que había retado a Chelise, aunque muy bien pudo haber gritado. Thomas señaló con la mano hacia el horizonte. Matar es lo que ellos hacen. ¡Matarlos es unírseles!

Caminó por lo alto del barranco y, con cada pisada, Chelise sentía que le aumentaba el temor. No le gustaba la escena de desesperación que poseía a Thomas.

– ¿Son las hordas lo que quieren? ¿Han perdido su fe en la diferencia entre nosotros y ellos, no es así?

– No -respondió Mikil-. No, Thomas, eso es…

– ¿Están dudando que Elyon está aquí, entre nosotros? ¿Que sí le importa? ¿Que tiene algún poder? ¿Se preguntan si él ama a su novia del modo en que una vez la amó, si el Gran Romance no se ha vuelto más que cháchara de viejos alrededor de una fogata? ¿Es eso? -gritó su desafío.

– Thomas…

– ¡Basta! Ustedes tuvieron su oportunidad de defender sus corazones. Ahora es mi turno.

Las palabras enfriaron la noche. Él no se ponía así muy a menudo, pero Chelise lo conocía lo suficiente para saber que había tomado una decisión, y ninguna fuerza de este lado del cielo o del infierno la cambiaría.

– Mi propio hijo ha desafiado la mismísima estructura de nuestra manera de hacer las cosas, y ha metido a mi propia hija en una pelea a muerte. Bien. Entonces yo. Thomas de Hunter, padre de ambos y comandante supremo de este círculo, lanzare mi propio desafío.

Se puso en pie por encima de ellos, con las piernas extendidas al ancho de los hombros, los puños cerrados.

– Dirimiré este asunto de una vez por todas. Lo haré en mis propias condiciones. Veremos si Elyon nos ha abandonado. Todo hombre, toda mujer y todo niño del círculo sabrán si aquel que nos corteja, que dirige nuestro amor, es real o si no es más que charlatanería en boca de ancianos.

– Thomas, ¿estás seguro de que deseas hacer esto?

Pero él hizo caso omiso a William.

– Por este medio ejerzo mi derecho de aceptar este desafío de Samuel. ¿Aceptas? Samuel brindó una sonrisa cínica y levantó la mirada a través de sueltos mechones de cabello.

– Como quieras -contestó, luego añadió para crear un efecto-. Padre.

– Bueno. Entonces iré a las hordas y lanzaré mi desafío. Si Elyon es quien digo que es, sobreviviremos otro mes. Si no, entonces todos nosotros moriremos o nos convertiremos en hordas dentro de una semana.

Las palabras resonaron por el cañón. El fuego se estaba extinguiendo, por falta de madera. Un perro ladraba desde el campamento principal cien metros detrás del estanque rojo, donde todos habían sumergido sus copas para celebrar el amor de Elyon.

Ahora enfrentaban la muerte, y sentían pesadas las copas en las manos.

– ¿Escucho alguna objeción?

– ¿Cómo puedes arriesgar nuestras vidas de este modo? -algún tonto fue tan valiente que preguntó.

– ¡No hay riesgo! -tronó Thomas sobre las cabezas de ellos-. Si Elyon nos falla, debemos ser encostrados. Solo seremos como deberíamos ser. Si él nos rescata, concluiremos con seriedad esta celebración.

Una profunda respiración.

– ¿Alguien más?

Nadie se atrevió.

– Envíen nuestros más veloces corredores a las otras tres Concurrencias. Díganles que vengan. Viviremos o moriremos juntos como uno solo. ¿Está claro?

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Verde»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Verde» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Ted Dekker - Outlaw
Ted Dekker
Ted Dekker - Sanctuary
Ted Dekker
Ted Dekker - Mortal
Ted Dekker
Ted Dekker - Rojo
Ted Dekker
Ted Dekker - Negro
Ted Dekker
Ted Dekker - Blanco
Ted Dekker
Ted Dekker - Tr3s
Ted Dekker
Miguel Asturias - El Papa Verde
Miguel Asturias
Nicole Heuer-Warmbold - nur Tod und Verderben
Nicole Heuer-Warmbold
Отзывы о книге «Verde»

Обсуждение, отзывы о книге «Verde» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x