Joe Hill - Cuernos

Здесь есть возможность читать онлайн «Joe Hill - Cuernos» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Cuernos: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Cuernos»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

¿QUÉ PASARÍA SI UNA MAÑANA DESPUÉS DE UNA BORRACHERA HORRIBLE, TE DESPERTARAS CON UNOS INCIPIENTES CUERNOS EN LA CABEZA?
La vida de Ig Perrish es un verdadero infierno desde que su novia Merrin fuera asesinada un año atrás, en un episodio que si bien le fue ajeno tendió sobre él un manto de sospechas que nunca pudo sacudirse.
Una mañana, después de una fuerte borrachera, se encuentra con unos cuernos creciendo en su frente. Con el pasar de las horas descubrirá que tienen un extraño efecto en la gente: les hace contarle sus más oscuros deseos y secretos. Así, Ig se entera de que todo el pueblo, incluso sus padres, creen que él fue quien mató a Merrin. Tras el desconcierto de los primeros momentos, Ig aprenderá a sacar ventaja de ser el mismísimo diablo…
Joe Hill, príncipe del terror y autor prodigio de la exitosa novela El traje del muerto, vuelve a ponernos los pelos de punta con esta extravagante, original e imaginativa historia, en la que todo es, aparentemente, extraño e inexplicable.

Cuernos — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Cuernos», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Al notar la mano de Lee en la nuca, Terry da un respingo, emite un sollozo ahogado y se aparta.

– Terry -dice Lee-, tenemos que decidir lo que vamos a decir.

– No tenemos que decidir nada. Necesito mi teléfono.

– Puedes llamar desde casa, si quieres.

Terry aparta a Lee con el brazo y camina hacia el porche. Lee tira el cigarrillo y le sigue, sin demasiada prisa.

– Si quieres llamar a la policía no pienso detenerte. Iré contigo a la fundición a encontrarme con ellos -dice Lee-. A enseñarles dónde está. Pero antes de que descuelgues el teléfono te conviene saber lo que voy a decirles, Terry.

Terry sube las escaleras de un par de saltos, atraviesa el porche, abre la puerta mosquitera y empuja la de entrada a la casa. Camina a tientas por el vestíbulo delantero. Si hay un teléfono ahí, no puede verlo en la oscuridad. La cocina está a la izquierda.

– Estábamos todos muy borrachos -dice Lee-. Nosotros estábamos borrachos y tú colocado. Pero Merrin era la que iba peor. Eso será lo primero que les diré. Que desde el momento en que se subió al coche empezó a entrarnos a los dos. Ig la había llamado puta y estaba decidida a demostrar que lo era.

Terry sólo escucha a medias. Se desplaza con rapidez por una sala de estar para invitados, y se golpea la rodilla con el respaldo de una silla. Recupera el equilibrio y se dirige hacia la cocina. Lee le sigue hablando con una voz increíblemente serena:

– Nos pidió que paráramos el coche para poder cambiarse de ropa y después nos hizo un numerito aprovechando los faros del vehículo. Tú no dijiste ni una palabra durante todo el tiempo, sólo la mirabas y la escuchabas hablar de lo que le esperaba a Ig por haberla tratado de aquella manera. Primero se enrolló conmigo y después te atacó a ti. Estaba tan borracha que no se daba cuenta de lo enfadado que estabas. Cuando te estaba metiendo mano se puso a hablar del dinero que podría sacarse vendiendo la historia de las fiestas privadas de Terry Perrish a la prensa amarilla. Que valdría la pena hacerlo sólo por vengarse de Ig, por ver la cara que pondría. Fue entonces cuando la golpeaste. Antes de que me diera cuenta de lo que estabas haciendo.

Terry está en la cocina, en la mesa con una mano en el teléfono color beis, pero no lo descuelga. Por primera vez se vuelve y mira a Lee, alto y musculoso, con su mata de pelo dorado pálido y su ojo blanco y misterioso. Apoya una mano en el centro de su pecho y le empuja con la fuerza suficiente para hacerle chocar contra la pared. Las ventanas tiemblan, pero Lee no parece demasiado afectado.

– Nadie se va a creer esa gilipollez.

– ¿Y qué van a creer entonces? -dice Lee-. Las huellas que hay en la piedra son las tuyas.

Terry coge a Lee por la camiseta, le aparta de la pared y le empuja de nuevo contra ella, sujetándole allí con la mano derecha.

Una cuchara se cae de la mesa y el sonido metálico que hace al rebotar resuena como una campanada. Lee le mira impasible.

– Tiraste ese porro gigante que te estabas fumando justo al lado del cuerpo. Y Merrin fue la que te arañó, cuando trataba de resistirse. Después de que se muriera te limpiaste con sus bragas. Están cubiertas de tu sangre.

– ¿De qué coño estás hablando? -pregunta Terry. La palabra «bragas» parece quedar suspendida en el aire, como la cuchara.

– La herida que tienes en la sien. Te la limpié con sus bragas mientras estabas inconsciente. Necesito que entiendas la situación, Terry. Estás tan metido en esto como yo. Quizá más.

Terry levanta la mano izquierda con el puño cerrado, pero se detiene. Hay una avidez en el rostro de Lee, una especie de expectación que hace que le brillen los ojos; su respiración es jadeante. Terry no llega a pegarle.

– ¿A qué esperas? -pregunta Lee-. Pégame.

Terry nunca ha pegado a otro hombre llevado por la ira. Tiene casi treinta años y jamás ha pegado un puñetazo. Nunca ha participado en una bronca de patio de colegio. Se llevaba bien con todos sus compañeros.

– Si me haces daño, yo mismo llamaré a la policía. Eso me dará todavía más ventaja. Puedo decir que intenté defender a Merrin.

Terry da un paso atrás, tambaleante, y baja la mano.

– Me largo. Deberías buscarte un abogado. Yo, desde luego, pienso hablar con el mío en veinte minutos. ¿Dónde está mi cazadora?

– Con la piedra. Y las bragas de Merrin. En un lugar seguro. No aquí, paré el coche de camino a casa. Me dijiste que recogiera las pruebas incriminatorias y me deshiciera de ellas, pero no las destruí…

– Vete a tomar por culo.

– … porque pensé que intentarías echarme a mí toda la culpa. Adelante, Terry, llámales. Pero te juro que si yo caigo tú caerás conmigo. Así que depende de ti. Acabas de empezar Hothouse. En dos días te vuelves a Los Ángeles a codearte con estrellas de cine y modelos de ropa interior. Pero adelante, haz lo correcto. Quédate con la conciencia tranquila. De todas formas ten en cuenta que nadie te va a creer, ni siquiera tu hermano, que te odiará para siempre por haber matado a su novia cuando estabas borracho y colocado. Quizá al principio no se lo crea, pero dale tiempo. Te esperan veinte años de cárcel, tiempo de sobra para darte palmaditas en la espalda por ser tan decente. Por el amor de Dios, Terry. Lleva ya muerta cinco horas, así que va a dar la impresión de que has intentado ocultarlo.

– Te voy a matar -musita Terry.

– Sí, claro -dice Lee-. Entonces tendrás que dar explicaciones sobre dos cadáveres. Pero vamos, tú mismo.

Terry se vuelve y mira con desesperación el teléfono que hay sobre la mesa, con la sensación de que si no lo descuelga y llama a alguien en los próximos minutos su vida se habrá terminado. Y sin embargo se siente incapaz de levantar el brazo. Es como un náufrago en una isla desierta, viendo un avión brillar en el cielo a doce mil metros de distancia y, al no tener manera de llamar su atención, ve alejarse su última oportunidad de ser rescatado.

– O -dice Lee- también podría haber pasado así: no hemos sido ni tú ni yo, sino que un extraño la mató. Es algo que pasa todos los días. Como las historias que salen en la televisión. Nadie la vio subirse a un coche. Nadie nos vio ir hacia la fundición. Por lo que respecta al resto del mundo, tú y yo volvimos a mi casa después de la hoguera, jugamos a las cartas y nos quedamos dormidos viendo la edición de las dos de la madrugada de Sports Center. Mi casa está justo en el extremo contrario del pueblo al de El Abismo, por tanto no hay razón para que pasáramos por allí.

Terry siente una opresión en el pecho, le cuesta respirar y, sin saber por qué, piensa que así es como debe de sentirse Ig cuando le dan sus ataques de asma. Es curioso cómo no es capaz de alargar el brazo para coger el teléfono.

– Pues ya lo he dicho todo. En resumen, es lo siguiente: puedes vivir tu vida como un tullido o como un cobarde. Lo que ocurra a partir de ahora es cosa tuya. Pero te aseguro algo: los cobardes se lo pasan mejor.

Terry no se mueve, no dice nada y es incapaz de mirar a Lee. El pulso le late desbocado en la muñeca.

– Te diré una cosa -continúa Lee, con voz de persona serena y razonable-, si te hicieran ahora mismo un análisis de sangre darías positivo en drogas. No te interesa acudir a la policía en este estado. Has dormido, como mucho, tres horas, y no piensas con claridad. Merrin lleva muerta toda la noche, Terry. ¿Por qué no te tomas la mañana para pensar sobre todo esto? Pueden tardar días en encontrarla, así que no te precipites y no hagas nada de lo que puedas arrepentirte. Espera a estar seguro de que sabes lo que quieres hacer.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Cuernos»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Cuernos» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Cuernos»

Обсуждение, отзывы о книге «Cuernos» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x