P. James - Muerte en la clínica privada

Здесь есть возможность читать онлайн «P. James - Muerte en la clínica privada» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Детектив, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Muerte en la clínica privada: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Muerte en la clínica privada»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Cuando la prestigiosa periodista de investigación Rhoda Gradwyn ingresa en Cheverell-Powell, en Dorset, para quitar una antiestética y antigua cicatriz que le atraviesa el rostro, confía en ser operada por un cirujano célebre y pasar una tranquila semana de convalecencia en una de las mansiones más bonitas de Dorset. Nada le hace presagiar que no saldrá con vida de Cheverell Manor. El inspector Adam Dalgliesh y su equipo se encargarán del caso. Pronto toparán con un segundo asesinato, y tendrán que afrontar problemas mucho más complejos que la cuestión de la inocencia o la culpabilidad.

Muerte en la clínica privada — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Muerte en la clínica privada», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– El jueves 13 de diciembre fue directamente a su suite tras ser recibida a su llegada por el señor Chandler-Powell, la enfermera Holland y la señora Frensham. Todos dicen que estaba muy tranquila, aparentemente despreocupada y poco comunicativa. A la mañana siguiente, una empleada no residente, la enfermera Frazer, la bajó al quirófano, donde el anestesista la examinó, y a continuación la operaron. El señor Chandler-Powell dice que la intervención fue complicada pero se saldó con éxito. Rhoda Gradwyn permaneció en la sala de recuperación hasta las cuatro y media, cuando la devolvieron a su suite en el ala de los pacientes. Tomó una cena ligera y la enfermera Holland la vio en diversos momentos, y junto con Chandler-Powell a las diez, cuando la señorita Rhoda Gradwyn dijo que estaba a punto de dormirse. Rechazó un sedante. La enfermera Holland dice que la última vez que la vio fue a las once, y la encontró dormida. Fue asesinada por estrangulación manual; según la doctora Glenister entre las diez y las doce y media.

Dalgliesh y Kate escucharon en silencio. Benton temió estar dedicando demasiado tiempo a lo obvio. Echó una mirada a Kate, pero al no obtener respuesta prosiguió:

– Nos han contado varias cosas importantes que pasaron esa noche. La otra paciente presente, la señora Skeffington, estaba desvelada y fue al cuarto de baño. Quizá la despertó el ruido del ascensor, que, según dice, oyó a las once y media. Desde la ventana del dormitorio afirma haber visto una luz parpadeante entre las Piedras de Cheverell. Esto fue justo antes de medianoche. Se asustó y llamó a la ayudante de cocina, Kimberley Bostock, a quien pidió una tetera. Probablemente quería compañía, por breve que fuera, pero no quiso despertar a la enfermera Holland, que se encontraba en la suite de al lado.

– ¿Llegó a admitir esto cuando Kimberley y Dean le subieron el té? -dijo Kate.

– Desde luego parecía preferir a Kimberley Bostock antes que a la enfermera Holland -dijo Benton-. Lo cual a mí me parece lógico, señor. La señora Bostock no estaba segura de si la paciente podía tomar té, pues la operaban a la mañana siguiente. Sabía que debía consultarlo a la enfermera Holland. Dejó a Dean frente a la suite de la señora Skeffington, llamó a la puerta de la enfermera y asomó la cabeza.

– Dijo que oyó discutir -señaló Kate-. Chandler-Powell dijo que él y la enfermera estaban hablando. Sea como fuere, Chandler-Powell evidentemente cree que el hecho de admitirlo proporciona una coartada a él y a la enfermera Holland. Como es natural esto dependerá de la hora real de la muerte. El dice no estar del todo seguro de cuándo fue a la suite de la enfermera Holland, y ella también es sorprendentemente imprecisa. Al dejar la hora en unos términos tan inciertos, evitaban el error de fabricar una coartada para la verdadera hora de la muerte, lo que siempre es sospechoso, o de quedarse sin coartada. Es posible que, para cuando estaban juntos, uno de los dos, o ambos, ya hubiera matado a Rhoda Gradwyn.

– ¿No podemos ser un poco más precisos sobre el momento de la muerte? -dijo Benton-. La señora Skeffington dice que oyó bajar el ascensor cuando se despertó y antes de llamar para pedir el té. Dijo que serían alrededor de las once y media. El ascensor está frente a la suite de la enfermera Holland, al final del pasillo, y es moderno y relativamente silencioso. Sin embargo, hemos comprobado que es perfectamente posible oírlo si no hay otro ruido.

– Pero lo había -dijo Kate-. Por lo visto, anoche el viento soplaba con fuerza. Y si ella lo oyó, ¿cómo es que no lo oyó la enfermera Holland? A menos, claro, que ella y Chandler-Powell estuvieran en el dormitorio demasiado ocupados discutiendo para poder oír nada. O haciendo el amor, lo que no excluye la discusión. En cualquier caso, hay pocas esperanzas de que Kimberley se mantenga firme en su declaración.

Sin hacer comentarios, Benton prosiguió:

– Si hubieran estado en la salita, uno de ellos seguro que habría oído a Kimberley llamar a la puerta o la habría visto cuando la abrió un poco. Nadie reconoce haber utilizado el ascensor esa noche en ningún momento a excepción de los Bostock cuando subieron el té. Si el testimonio de la señora Skeffington es exacto, parece razonable situar la hora de la muerte en tomo a las once y media.

Benton miró a Dalgliesh, hizo una pausa y Kate retomó el hilo.

– Lástima que ella no pueda ser más concreta respecto a la hora en que oyó el ascensor y vio las luces. Si hay una diferencia significativa entre las dos cosas, más de lo que se tardaría, por ejemplo, en ir andando desde la puerta del ascensor de la planta baja hasta las piedras, entonces quizás haya dos personas implicadas. El asesino no puede estar bajando en el ascensor y llevando una linterna encendida entre las piedras al mismo tiempo. Dos personas, tal vez dos iniciativas distintas. Y si hubo connivencia, los obvios sospechosos son los Westhall. El otro dato importante es la afirmación de Dean Bostock sobre la puerta de la senda de los limeros, que no tenía el cerrojo echado. La puerta tiene dos cerraduras de seguridad, pero Chandler-Powell insiste en que la cierra cada noche a las once a no ser que algún miembro de la casa esté aún fuera. Está completamente seguro de que corrió el cerrojo como de costumbre, y de que por la mañana lo encontró corrido. Las primeras cosas que hizo tras levantarse a las seis y media fueron desconectar el sistema de alarma y comprobar la puerta.

– Y Dean Bostock verificó el cerrojo cuando se levantó a las seis -interrumpió Benton-. ¿Hay posibilidades de obtener huellas?

– Yo diría que ninguna -dijo Kate-. Chandler-Powell abrió la puerta cuando él y Marcus Westhall salieron a inspeccionar el jardín y el círculo de piedras. Y recordemos aquel trozo de guante. Este asesino no tenía intención de dejar huellas.

– Si damos por supuesto que ni Chandler-Powell ni Bostock mentían -dijo Dalgliesh-, y no creo que Bostock mienta, entonces alguien de la casa descorrió el cerrojo de esa puerta después de las once, para salir de la Mansión o para permitir la entrada de otro. O ambas cosas, claro. Esto nos lleva a la afirmación de Mogworthy de haber visto presuntamente un coche aparcado cerca de las piedras poco después de medianoche. La señorita Gradwyn fue asesinada por alguien que ya estaba en la casa aquella noche, un miembro del personal u otra persona que hubiera logrado entrar, o por alguien venido de fuera. Y aunque esta persona tuviera las dos llaves de seguridad, no pudo entrar hasta que el cerrojo estuvo quitado. Pero no podemos seguir hablando de una persona sin más. El asesino necesita un nombre.

En el equipo siempre se daba un nombre al asesino, pues a Dalgliesh le desagradaban muchísimo los habituales sobrenombres, y por lo común era Benton quien lo facilitaba. Ahora dijo:

– Normalmente decimos «él», señor, ¿por qué no una mujer para variar? O un nombre andrógino que valiera para los dos sexos. El asesino apareció de noche. ¿Qué tal Noctis… por o desde la noche?

– Parece adecuado. Noctis está muy bien -dijo Dalgliesh.

– Y volvemos al problema del móvil -dijo Kate-. Sabemos que Candace Westhall intentó convencer a Chandler-Powell de que no permitiera el ingreso de Rhoda Gradwyn en la Mansión. Si Westhall hubiera tenido intención de asesinar, ¿por qué disuadir a Chandler-Powell de admitir a la víctima? A menos, naturalmente, que se tratara de un farol doble. ¿Y no es posible que fuera una muerte sin premeditación, que cuando Noctis entró en esa habitación no hubiera pensado en el asesinato?

– En contra de esto, desde luego, está el uso de los guantes y su posterior destrucción -señaló Dalgliesh.

– Pero si fue premeditado -dijo Benton-, ¿por qué ahora? Al haber sólo otra paciente y estando ausentes todos los no residentes, el círculo de sospechosos es forzosamente más pequeño.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Muerte en la clínica privada»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Muerte en la clínica privada» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Muerte en la clínica privada»

Обсуждение, отзывы о книге «Muerte en la clínica privada» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x