Mercedes Guerrero - La Última Carta

Здесь есть возможность читать онлайн «Mercedes Guerrero - La Última Carta» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Современная проза, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

La Última Carta: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «La Última Carta»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Sola y sin dinero tras el doloroso fracaso de su matrimonio, Ann Marie decide aceptar una propuesta de matrimonio por conveniencia. Jake, propietario de una plantación de tabaco en la pequeña isla de Mehae, no consigue superar la muerte de su mujer y ha decidido buscar una nueva mujer por un método algo anticuado.
Quizás por eso, el día en que ha de recoger a Anne Marie en el puerto de Mehae, cambia de opinión y envía un emisario con dinero por las molestias y para el pasaje de vuelta.
Ann Marie no sólo sigue sola, sino que se encuentra en un lugar extraño pero, como suele decirse, la vida siempre sale al encuentro y muy pronto va a encontrar no sólo esa vida propia que tanto anhela, sino un amor verdadero que irá creciendo entre playas de arena blanca, atormentadas palmeras y una horrible serie de asesinatos en cuya resolución se verá inmersa.

La Última Carta — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «La Última Carta», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– ¿Has publicado ya algo?

– No. No he tenido demasiada suerte; todo me lo han rechazado.

– Pues ahora tendrás mucho tiempo para emplearte a fondo.

– Voy a intentarlo, pero necesito concentración y estar muy relajada para que las ideas fluyan solas.

– ¿Cómo puedo ayudarte?

– Prestándome tu máquina de escribir. No me atrevo a cogerla de tu despacho porque me lo acabas de prohibir… -Sonrió con malicia.

– Te compraré una mejor. Tienes que empezar a partir de mañana mismo.

A la mañana siguiente, Ann se dirigió a la habitación que había elegido. Ordenó retirar los muebles y logró crear un ambiente acogedor colocando una mesa rectangular en la esquina frente a los ventanales y un sillón de cuero marrón. Allí era donde pensaba sentarse a escribir. En el centro de la estancia hizo poner una mesita redonda con una lámpara de pie con pantalla, y alrededor situó unas cómodas butacas. Era el lugar ideal para leer y contemplar el mar al mismo tiempo. Arrimó un sofá a la pared, junto a la mesa escritorio, y cubrió las paredes que quedaban libres con estanterías en las que colocó los libros que guardaba en una de sus maletas. Trasladó el equipo de alta fidelidad desde el salón principal y repartió portarretratos con fotos familiares por los muebles. Ahora la estancia tenía vida, su vida. La concepción de hogar de aquella sala significaba un punto de partida hacia el futuro.

Se tumbó en el sofá a leer las notas del cuaderno, pero el cansancio la venció y se quedó dormida. Jake la encontró sumida en un profundo sueño.

– Vamos, despierta. Si duermes ahora no podrás descansar esta noche -dijo, paseando los labios por su cuello, sentado en el sofá e inclinado sobre ella.

– ¿Es muy tarde?

– La hora de cenar. -Jake merodeaba ahora por su escote-. Pero podemos dejarlo para después.

– Cariño…

– Chissst… No te muevas. Tú sigue durmiendo… -susurró, pasando la mano bajo su falda.

Ann se dejó llevar por aquella suave excitación y le siguió el juego, sin abrir los ojos y gozando del placer que él le proporcionaba. Su respiración se alteró al contacto de sus manos, que moldeaban y recorrían su cuerpo. Esas sensaciones eran nuevas para Ann. Abrió los ojos y vio cómo la observaba, estudiando cada íntimo estremecimiento.

– Ven… -Jake se colocó sobre ella y la poseyó lentamente, compartiendo aquel instante de éxtasis.

– Esto no puede ser real -murmuró Ann. Estaban tumbados en el sofá, abrazados y medio desnudos, ebrios de placer.

– Tú tampoco lo eres -musitó él, mordiéndole el lóbulo de la oreja-. Esto es un sueño.

– Yo no quiero despertar…

– Pues yo sí. Lo siento pero estoy hambriento. -Sonrió, incorporándose y ofreciéndole la mano para ayudarla a levantarse-. Has transformado totalmente esta habitación. Me gusta, es acogedora. Puedes hacer lo mismo con el resto de la casa.

– Gracias. Si tú quieres, lo haré.

– Quiero.

– Necesito empezar a trabajar. Tengo una novela inacabada y debo escribir el final -explicó Ann mientras se dirigían abrazados hacia el salón.

– He encargado en el pueblo una máquina de escribir, pero hasta que llegue puedes usar la mía. A propósito, hoy he recibido una carta de Joseph y Amanda. Deberías escribirles y contarles todo lo que ha ocurrido para tranquilizarlos.

– Lo haré, y no debes preocuparte: seré benévola contigo -bromeó ella.

– En la carta, Joseph dice que tiene que localizarte para un asunto urgente sobre un contrato y una editorial. Habría que contestarles pronto.

– Puede que sea algún problema de la empresa donde trabajé antes de venir aquí. ¿Puedo leerla?

– Claro, está en mi despacho.

Ann leyó detenidamente la carta y cuando terminó esbozó una alegre sonrisa.

– Pues no se trata de ningún problema… Es de otra editorial. ¡Parece que quieren publicar mi novela! -exclamó sorprendida.

– ¿Qué novela?

– Una de misterio que escribí en Londres hace tiempo. Justo antes de irme le dejé el manuscrito a Amanda para que intentara publicarla. Me había olvidado por completo, porque estaba segura de que nadie le prestaría atención. Pero quieren que me ponga en contacto con ellos para firmar un contrato.

– ¡Eso es estupendo! Tenemos que celebrarlo a lo grande -dijo Jake entusiasmado, rodeándola por la cintura.

– Todavía no cantes victoria -contestó ella, tratando de mantener los pies en el suelo-. No espero que se convierta en un best seller, pero para mí significa mucho que vayan a publicarla.

Fue una cena agradable, brindaron con champán francés y charlaron animadamente mientras Ann, emocionada, le relataba a Jake los pormenores de la novela. Él la escuchaba complacido al ver el brillo de sus ojos, llenos de entusiasmo por el futuro que planeaban compartir.

– Sé que tienes mucho talento y vas a ser una escritora de éxito. Me siento muy orgulloso de ti.

Esas sencillas palabras provocaron en Ann un estremecimiento íntimo que jamás habría imaginado sentir. Nadie, excepto su madre en sus últimos meses de vida, le había dedicado un halago parecido, y concluyó que, definitivamente, Jake era el hombre con quien quería compartir el resto de sus días. Deseaba decirle que lo amaba tanto que su corazón iba a estallar -aunque sonara un poco cursi-, y que se esforzaría para que él nunca dejara de albergar ese sentimiento hacia ella. Pero en aquel momento era incapaz de articular una frase coherente.

– Gracias… Tu confianza es muy importante para mí.

Capítulo 29

La vida dio un vuelco para los dos a partir de entonces: Jake tenía al fin una compañera, una mujer joven e inteligente que amaba aquella tierra y lo amaba a él. Durante aquellos días, reflexionaba con Ann sobre el error cometido al juzgar sólo por su aspecto físico a la belleza que bajó del barco tres meses atrás. Jamás habría imaginado que tras aquella frágil apariencia se parapetase una fuerte personalidad, dulce y apasionada a la vez.

Por su parte, ella fue descubriendo a un hombre muy diferente al tipo duro e insensible que creía conocer. Jake Edwards era afectuoso, atento, protector, ardiente, y todos sus temores fueron desapareciendo con la misma rapidez con que el amor los iba uniendo. Por fin había alcanzado su meta: tenía un marido al que adoraba y que la hacía sentirse deseada, un hogar acogedor y una historia que escribir. Recordó su conversación con Amanda y al fin pudo decir: «lo tengo todo… ¡Soy feliz!».

La casa también empezó a cambiar. Ann le fue imprimiendo su sello con sus detalles personales, y se dedicó a redecorarla, cambiando de lugar algunos muebles y colocando plantas naturales en el interior, además de jarrones con flores frescas que aportaban un nuevo aroma a las estancias e inundaban de serenidad a sus habitantes, un flamante matrimonio que disfrutaba de su luna de miel mientras nadaba en el mar, charlaba animadamente y se amaba con ardor en las mágicas noches de aquel otoño, unido ya por unos fuertes lazos que hacían presagiar un futuro lleno de amor y estabilidad.

Aquella tarde, regresaban de la playa abrazados y se dirigían hacia el porche cuando divisaron la figura alta y rubia del administrador, que acababa de llegar a la mansión. Ann advirtió su mirada de desconcierto, y Jake se percató a su vez de la reacción de ella, que trató de separarse de él con cierto embarazo.

– Señor Edwards… hermana Marie… Buenas… buenas tardes… ¡Ejem!

Jake se quedó parado ante él, sin soltar la cintura de Ann, y lo miró con autoridad.

– Ya estás de vuelta. ¿Tienes algo para mí, Kurt?

– Sí… -contestó, tendiéndole una carpeta-. Le traigo los documentos de Lord Brown para que los revise. -Después, su mirada volvió a posarse sobre Ann, cuyo rostro reflejaba incomodidad, y que evitaba mirarlo.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «La Última Carta»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «La Última Carta» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «La Última Carta»

Обсуждение, отзывы о книге «La Última Carta» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x