Benjamin Alire Sáinz - La inexplicable lógica de mi vida

Здесь есть возможность читать онлайн «Benjamin Alire Sáinz - La inexplicable lógica de mi vida» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

La inexplicable lógica de mi vida: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «La inexplicable lógica de mi vida»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Sáenz explora las relaciones de un estudiante de bachillerato a punto de graduarse, en una historia de aprendizaje y crecimiento llena de calidez y compasión. Ha llegado el otoño y, con él, el último año de instituto. Según su inseparable Sam, para Salvador y ella empieza la vida. La universidad y la madurez son promesas a punto de cumplirse. Salvador sabe que todo va a cambiar, pero no sospecha hasta qué punto. Ya el primer día de clase se descubre pegando a un chico que ha insultado a su padre. Jamás había sentido esa violencia. ¿Habrán aflorado los genes del desconocido padre biológico? A golpe de desilusiones, conflictos y pérdidas, el mundo de Salvador y sus amigos se transforma vertiginosamente. Él desea reconstruirlo, en busca de una nueva lógica que explique su vida. En el camino dejará mucho atrás, pero también ganará. Aprenderá a identificar y vencer los miedos, y dará con una reconfortante certeza: el amor incondicional existe.

La inexplicable lógica de mi vida — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «La inexplicable lógica de mi vida», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Mientras caminábamos, insistía con los colibríes, y luego comenzó a recriminarme mi incapacidad crónica para escucharla. Y yo pensaba: Dios mío, cuando Sam comienza con los reproches, no hay quien la detenga . Me estaba regañando sin piedad. Al final tuve que interrumpirla; no me quedó más remedio:

—¿Por qué siempre buscas bronca conmigo, Sammy? No estoy burlándome. Además, sabes que no soy aficionado a los números. Los números y yo no nos llevamos bien. Cuando empiezas a hablar de cifras, me pongo bizco.

Como le gustaba decir a papá, Sam permaneció «inmutable». Comenzó de nuevo con los reproches, pero esta vez no la interrumpí yo, sino Enrique Infante. Se había acercado a nosotros por detrás mientras caminábamos. De repente, apareció delante de mí y se me echó encima. Me miró a los ojos y me clavó un dedo en el pecho.

—Tu padre es un marica.

Al instante, algo me sucedió. Una ola enorme e incontrolable me recorrió el cuerpo y se estrelló contra la orilla, que era mi corazón. De pronto perdí la capacidad de expresarme con palabras. No sé, jamás había estado tan furioso, y no supe qué me sucedía exactamente, porque la ira no era algo normal en mí. Era como si el Sal que conocía se hubiera marchado y otro Sal hubiera entrado en mi cuerpo y tomado el control. Recuerdo sentir el dolor de mi puño inmediatamente después de golpear el rostro de Enrique Infante. Todo sucedió muy rápido, como un relámpago, solo que el relámpago no provenía del cielo, sino de algún lugar dentro de mí. Ver toda esa sangre saliendo a borbotones de la nariz de otro me hizo sentir vivo. Esa es la pura verdad. Y aquello me asustó.

Tenía algo dentro que me asustaba.

Lo siguiente que recuerdo es estar mirando fijamente a Enrique mientras este seguía tumbado en el suelo. Había vuelto a ser el joven tranquilo de siempre (bueno, tranquilo no, pero al menos podía hablar).

—Mi padre es un hombre —dije—. Se llama Vicente. Así que, si lo quieres llamar de alguna manera, llámalo por su nombre. Y no es marica.

Sam se limitó a mirarme. Yo también la miré.

—Bueno, esto es una novedad —comentó—. ¿Qué ha pasado con el chico bueno? Jamás habría pensado que serías capaz de pegar a alguien.

—Ni yo —afirmé.

Sam me sonrió. Era una sonrisa rara.

Bajé la vista hacia Enrique. Intenté ayudarlo a incorporarse, pero él no iba a dejar que lo hiciera.

—Vete a la mierda —replicó levantándose del suelo.

Sam y yo lo observamos mientras se alejaba.

Se volvió y me hizo un corte de mangas.

Me quedé un poco aturdido. Miré a Sam.

—Es posible que no siempre sepamos lo que tenemos dentro.

—Es cierto —dijo Sam—. Creo que hay muchas cosas que encuentran un escondite en nuestro cuerpo.

—Tal vez esas cosas deban mantenerse ocultas —comenté.

Volvimos a casa despacio. Durante mucho rato Sam y yo no dijimos nada, y aquel silencio entre ambos resultó definitivamente perturbador. Por fin habló ella:

—Qué bonita manera de empezar el último curso.

Fue entonces cuando comencé a temblar.

—Oye, oye, ¿no te he dicho esta mañana que íbamos a arrasar?

—Qué graciosa —respondí.

—Oye, Sally, Enrique se lo merecía. —Me dirigió una de sus sonrisas; una de las tranquilizadoras—. Sí, claro, no deberías ir pegando a la gente. Eso es una mierda. Tal vez tengas a un chico malo muy dentro que está esperando a salir.

—No, ni de broma.

Me convencí a mí mismo de que solo acababa de pasar por un momento muy extraño. Pero algo me decía que ella tenía razón. O al menos un poco de razón. Agitado, así me sentía. Quizá Sam estuviera en lo cierto respecto a lo que escondemos dentro. ¿Qué más cosas se ocultaban ahí?

Continuamos el resto del camino en silencio.

—Vamos a Circle K. Te compro una Coca-Cola. —A veces bebía Coca-Cola; me reconfortaba.

Nos sentamos en el bordillo de la acera y bebimos nuestros refrescos.

Cuando me despedí de Sam en su casa, me abrazó.

—Todo irá bien, Sally.

—Sabes que llamarán a mi padre.

—Sí, pero el Señor V. es guay. —«El Señor V.», así llamaba Sam a papá.

—Sí —respondí—, pero da la casualidad de que el Señor V. es mi padre. Y un padre es un padre.

Todo irá bien, Sally.

—Sí —dije.

A veces estaba repleto de síes poco entusiastas.

Mientras caminaba hacia casa, recordé la expresión de odio de Enrique Infante. Aún oía el «marica» resonando en mi cabeza.

Papá… Papá no era esa palabra.

Jamás sería esa palabra. Jamás.

Luego se oyó un trueno, y comenzó a llover a cántaros.

La tormenta me envolvió, no era capaz de ver nada de lo que tenía delante. Seguí caminando, con la cabeza agachada.

Simplemente seguí caminando.

Notaba el peso de mi ropa empapada por la lluvia. Y, por primera vez en mi vida, me sentí solo.

Papá. Yo. Problemas

Sabía que tenía serios problemas. Muy, muy serios. Me había metido en un buen lío. Papá, que a veces era estricto, pero siempre atento, y que jamás gritaba, entró en mi habitación. Mi perra, Maggie , estaba echada en la cama junto a mí. Siempre sabía cuándo me sentía mal. Así que allí estábamos, Maggie y yo. Supongo que se puede decir que sentía lástima de mí mismo. También era una sensación rara, porque sentir lástima de mí mismo no era uno de mis pasatiempos. En todo caso, sería uno de los de Sam.

Papá cogió la silla de mi escritorio y se sentó. Sonrió. Conocía aquella sonrisa. Siempre sonreía así antes de tener una charla seria conmigo. Se pasó los dedos por su espesa cabellera canosa.

—Me acaba de llamar el director de tu instituto.

Creo que desvié la mirada.

—Mírame —me pidió.

Lo miré a los ojos. Nos quedamos observándonos durante un instante. Me alegró no ver furia.

—Salvador —dijo entonces—, no está bien hacer daño a los demás. Y de ningún modo está bien ir por ahí dándoles puñetazos en la cara.

Cuando me llamaba Salvador , sabía que se trataba de un asunto serio.

—Ya, pero no sabes lo que dijo.

—No me importa lo que dijera. Nadie merece que lo agredan físicamente solo por haber dicho algo que no te gusta.

Me quedé callado un buen rato. Finalmente, decidí que necesitaba defenderme. O, por lo menos, justificar mis acciones:

—Hizo un comentario de mierda acerca de ti, papá.

En otro momento habría llorado, pero seguía demasiado enfadado como para llorar. Él siempre decía que llorar no tenía nada de malo, y que si la gente lo hiciera más a menudo, el mundo sería un lugar mucho mejor. No es que él siguiera su propio consejo. Y aunque yo no estuviera llorando, se puede decir que estaba un poco avergonzado de mí mismo (sí, lo estaba); de lo contrario, no habría tenido la cabeza inclinada. Sentí los brazos de papá sosteniéndome. Luego, me apoyé contra él y susurré:

—Te llamó marica.

—Ay —respondió—, ¿crees que nunca he oído esa palabra? Y peores. Esa palabra no expresa ninguna verdad, Salvi. —Me cogió de los hombros y me miró—. La gente puede ser cruel. Odia lo que no comprende.

—No quieren comprender.

—Tal vez no quieran hacerlo. Pero debemos encontrar una manera de disciplinar el corazón para que su crueldad no nos convierta en animales heridos. Somos mejores que eso. ¿Acaso no conoces la palabra civilizado ?

Civilizado . A papá le encantaba esa palabra. Y por eso le encantaba el arte, porque civilizaba el mundo.

—Sí, papá —afirmé—. Lo entiendo, de verdad. Pero ¿qué sucede cuando un maldito bruto como Enrique Infante está siempre echándote el aliento en la nuca? Quiero decir… —Comencé a acariciar a Maggie —. Quiero decir que Maggie es más humana que la gente como Enrique Infante.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «La inexplicable lógica de mi vida»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «La inexplicable lógica de mi vida» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «La inexplicable lógica de mi vida»

Обсуждение, отзывы о книге «La inexplicable lógica de mi vida» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x