María Agustina Murcho - ¡Podemos comer de todo!

Здесь есть возможность читать онлайн «María Agustina Murcho - ¡Podemos comer de todo!» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

¡Podemos comer de todo!: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «¡Podemos comer de todo!»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

La alimentación no es un tema fácil de abordar, sobre todo, cuando desde los medios de comunicación y las redes sociales nos bombardean con tanta información.
Existen cada vez más mitos y modas sobre la nutrición, que hacen que las personas sean vulnerables a padecer trastornos alimentarios y caer en obsesiones de las que es muy difícil salir.
Necesitamos aprender a comer y dejar de lado las dietas crónicas que solo producen malestar general al prohibir lo que más nos gusta, además de crear un «efecto rebote», por el que el cuerpo recupera el peso perdido durante la etapa de restricción.
Este libro desmiente mitos que existen de hace años, pero también algunos más recientes, y ayuda a quienes se sienten presos de la comida y el cuerpo. También es una guía para padres y adolescentes, que deben conocer a qué información acceden sus hijos en las redes sociales.

¡Podemos comer de todo! — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «¡Podemos comer de todo!», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Entonces le surgió la idea de que hiciera una dieta excesivamente estricta, la cual me prohibía comer frutas o verduras, y mis cenas eran 2 salchichas light y media lata de paté, entre otras comidas absurdas y mínimas. Aun así no podía bajar de peso y mi mal humor crecía día a día por no poder comer una ensalada o fruta.

Cuando me di cuenta de que estaba entrando en un trastorno alimenticio, decidí dejar de asistir a su consultorio y volver a disfrutar de la comida.

Podemos comer de todo - изображение 20
Malas costumbres
El círculo dietaatracóndieta Imaginemos esta situación una persona está - фото 21

El círculo

dieta-atracón-dieta

Imaginemos esta situación una persona está siguiendo una dieta cumpliéndola - фото 22

Imaginemos esta situación: una persona está siguiendo una dieta, cumpliéndola bastante bien, pero un buen día no da más y ataca todo lo que hay en la heladera, la alacena y hasta en esos cajones donde guarda algún que otro dulce, que “no puede comer porque está a dieta”. Incluso antes de que termine semejante festín, siente culpa, pero no puede parar. Después, aún con más culpa, retoma la dieta. ¿Te suena? ¡Es el círculo dieta-atracón-dieta! Pero ¿cómo romperlo?

“La única manera de romper el círculo dieta-atracón-dieta es animándose a probar algo diferente”

La respuesta es fácil, pero ponerlo en práctica es difícil, porque obliga a probar algo nuevo, algo diferente de lo que se venía haciendo. Claramente, si se cae siempre en lo mismo, es que algo no está funcionando y hay que cambiarlo.

Si haces dietas restrictivas, vas a caer en lo conocido: el atracón, que luego viene seguido de una vuelta a la restricción y así vas a estar toda tu vida, pensando en comida y haciendo dietas: te vas a convertir en lo que las nutricionistas llamamos dietante crónico.

¿Qué podemos hacer para evitar esta situación? Estos tips pueden empezar a ayudarte.

Para aprender a comer, se necesita educación alimentaria. Esto lo realizamos los nutricionistas.

Probablemente digan enseguida: “Fui a varias nutris y me dieron fotocopia”. ¡OK, eso pasa por lo que expliqué anteriormente! Si te sucedió, si tuviste una mala experiencia, ¡no te desa­nimes! Cambia de profesional hasta dar con el indicado; ¡esto pasa en todas las áreas!

Si estás acostumbrado a restringir, al principio te va a costar aprender a comer, porque es normal que una persona con conductas restrictivas piense que por comer una golosina chiquita como colación o comer un plato de fideos ya va a engordar un montón. Aprender a comer lleva tiempo, esfuerzo, paciencia y sobre todo ¡constancia!

Nada sucede de un día para el otro. Cuesta como cualquier aprendizaje, y el aprender a comer es algo difícil, sobre todo por la cantidad de mitos, modas y desinformación que hay hoy en día.

Entonces, la única manera de romper el círculo dieta-atracón-dieta es animándose a probar algo diferente.

Les voy a contar algo muy interesante que comentó la doctora Mónica Katz una vez en un almuerzo en un programa de televisión.

Ella estaba hablando sobre la restricción y el deseo que genera y lo ilustró con una anécdota muy ejemplar. Resulta que una vez tuvo un paciente con sobrepeso, y uno de sus problemas era que no podía parar de comer un alfajor de X marca. Él se creía “adicto” a ese alfajor. Entonces, ¿qué hizo ella? Por empezar, le ordenó las comidas, los horarios y demás cosas que se hacen en consultorio, y luego le dijo que comiera después del almuerzo y de la cena un alfajor de esos... ¡Sí, dos en el día! Por supuesto, el paciente la miró raro.

¿Y qué pasó? Empezó a comerlos con menos frecuencia ¡y hasta bajó de peso! Ya no tenía esas ganas de comerlo como antes, justamente porque se lo permitieron: ya no era algo prohibido, ya no era un alimento “malo”.

Esto pasa con cualquier persona, lo veo a diario con mis pacientes.

Para evitar los atracones, picoteos y porciones grandes, lo mejor es legalizar el placer de comer.

Obviamente, para cada paciente es diferente. Si hay una patología, se tratará de otra forma, pero la anécdota del “adicto a los alfajores” es un ejemplo puntual para que vean cómo permitir algo hace que no lo deseemos tanto.

Mi objetivo es enseñar a comer y avanzar en la educación alimentaria, dar a entender que podemos comer de todo sin matarnos de hambre y sin privarnos. Esto es así porque la nutrición es un todo, no se trata solamente de nutrientes y calorías, sino que también abarca la salud mental, y terminar con las restricciones que provocan que deseemos más que nunca ese alimento “prohibido” es una herramienta fundamental para romper con ese círculo vicioso de dieta-atracón-dieta.

картинка 23En primera persona: Florencia, 20 años картинка 24

Hace algunos meses fui a una nutricionista súper top, muy recomendada en mi círculo de amigos. Ella aseguraba un descenso de peso rápido, que en 2 meses iba a bajar al menos 10 kilos.

Me prohibió las harinas (sin patología que lo ameritase), lo dulce (incluso el edulcorante), la banana, las carnes rojas, la papa, el choclo, el huevo… y podría seguir. Me decía que ser gorda estaba mal, y que ser flaca estaba bien. Que nadie quiere a las gordas, que en la vida no se llega lejos no gustando. Que si quería ponerme una bikini tenía que cumplir estrictamente. Que iba a pasarla mal al principio, y cito: “Como un adicto dejando la cocaína, pero una vez que dejes las harinas vas a sentirte limpia, ya que estas son el diablo”.

Salí de ese consultorio con la autoestima por el piso, pero decidida a cumplir la dieta. Y no duré ni dos meses. Bajé 12 kilos (que ya recuperé y con creces) y en el proceso me obsesioné tanto que hasta contaba calorías y anotaba lo que comía. Durante el día cumplía, pero a la madrugada vaciaba la heladera con una ansiedad que me daba miedo, como si no fuese yo, no tenía control sobre mí. Y la culpa al otro día era terrible.

Es el día de hoy, que con ayuda de mi psico estoy intentando controlar esa ansiedad. Dos meses me alcanzaron para vivir en un infierno obsesivo al cual no quiero volver nunca más. Me duele el daño que puede causar un “profesional”. Me duele la liviandad de hablar sobre “gordos” y “flacos“. Me duele ver que estuve al borde de haber caído en una enfermedad realmente seria.

Medios de comunicación

y alimentación

Estos son un pocos ejemplos de titulares que lamentablemente abundan y así - фото 25 Estos son un pocos ejemplos de titulares que lamentablemente abundan y así - фото 26

Estos son un pocos ejemplos de titulares que lamentablemente abundan, y así podría seguir. Todos los días, a toda hora, en revistas, televisión, internet, nos bombardean con frases de este tipo y con estos estereotipos.

Las personas crecemos recibiendo estos mensajes, que inconscientemente entran en nuestras mentes y nos hacen creer que si no tenemos unas medidas de 90-60-90 no somos lindas, no servimos para nada, y que ni siquiera podemos ponernos una bikini.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «¡Podemos comer de todo!»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «¡Podemos comer de todo!» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «¡Podemos comer de todo!»

Обсуждение, отзывы о книге «¡Podemos comer de todo!» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x