Mándal Nández - Orgasmos Infinitos

Nada hace pensar que el autor, sea un dios, un mutante o que por la razón que sea, tenga unas capacidades sexuales extraordinarias y fuera del alcance del resto de los hombres.

En teoría, cualquier hombre que haga exactamente las mismas cosas que hizo el autor y de la misma forma o similar, debería conseguir los mismos o similares efectos en la medida en que sea persistente y regular en los ejercicios.

Pero no hay ninguna garantía de que todos los hombres puedan conseguir los mismos resultados en el mismo tiempo de realización del curso, ni siquiera siendo constantes en las practicas, pues estos descubrimientos son nuevos y no han sido probados (en el momento de escribir esto), en ningún otro hombre aparte del descubridor/inventor del sistema Orgasmos Infinitos.

No obstante, es la intención del autor someterse a investigación puntera lo antes posible para documentar de forma científica todos sus logros de forma clara, para poder replicar los resultados y facilitar con ello que todos los hombres, sobre todo los que sean más escépticos, crean en que su método es real y al alcance de cualquiera que se implique.

Es la intención del autor publicar dichas investigaciones a la mayor brevedad en este mismo curso, pues es un proceso lento y caro y su economía actual no lo permite en este momento. Es su intención financiar dicha investigación gracias a las ventas de este libro, aunque también se admite la colaboración de otras instituciones interesadas.

En cualquier caso el autor no se hace responsable si sus resultados no son los esperados en el plazo de tiempo que usted se había imaginado. Cada persona es distinta y su dedicación y constancia también, por lo que los resultados podrían variar.

Y si, existe una cierta probabilidad de que el autor, sí tenga, en realidad, capacidades extraordinarias únicas y que sus resultados no puedan ser conseguidos por ningún otro hombre del planeta, por lo que usted compra este producto bajo su propia responsabilidad, asumiendo todos los riesgos y aceptando no reclamar al autor por la no consecución de sus objetivos marcados.

Lo que he descubierto en muy adictivo. Lo sé de sobra. No pienso en otra cosa.

Y prefiero mil veces disfrutar de una sesión de orgasmos infinitos antes de ponerme a escribir sobre esto.

Este texto que otras personas escribirían en pocas horas, a mi me ha llevado años, por que lo hice en ratos muertos y en notas de texto de mi teléfono móvil.

Luego he tenido que sacar más tiempo para pasarlo al ordenador, editarlo, corregirlo y maquetarlo para poder publicarlo y reconozco que me ha costado bastante concentrarme en esta tarea e ignorar los deseos de iniciar una nueva sesión de Orgasmos Infinitos que me vienen continuamente.

Pero lo hago porqué no quiero que mis sorprendentes descubrimientos mueran conmigo y para que otros hombres puedan disfrutar de lo que para mí, ahora es lo mejor que me ha pasado en la vida.

Pero si te vuelves adicto a los orgasmos infinitos, no me digas que no te avisé.

Por cierto, ignoro si estos descubrimientos te pueden ayudar a mejorar tus relaciones sexuales con otras personas.

Yo personalmente no tengo pareja desde hace años y ni me lo planteo, por que mis últimas experiencias sexuales con otras personas fueron menos satisfactorias que masturbarme en casa y eso que fue antes de descubrir lo que intento difundir ahora.

Hoy en día no me interesaría, para nada, intentar tener relaciones sexuales con otras personas porque estoy convencido de que no se acercaría ni de lejos al placer que estoy consiguiendo cada día con mi sistema. Y encima de eso, reconozco que soy muy escrupuloso y encima la amenaza de pillar enfermedades venéreas, corona virus y otros patógenos pululando a sus anchas, se me quitan aún más las ganas.

Y siendo realista. A mi edad y que no me considero una persona guapa ni cachas y que no me atraen nada en absoluto las mujeres de mi edad, creo que tendría pocas posibilidades de seducir a las mujeres que a mi me gustan, salvo que fuese inmensamente rico, lo cual añadiría algunas posibilidades, pero no es el caso.

Eso no quiere decir que mi método no te ayude a tener más satisfechas a tus parejas sexuales, lo cual es más que probable, pues tus capacidades de aguante y resistencia aumentarían considerablemente si llegas a dominar las técnicas. Lo que quiero decir es que es probable que pierdas el interés por tener sexo con otras personas, cuando puedes disfrutar muchísimo más en solitario, tanto en cantidad como en calidad, duración y potencia. Y eso te puede ocasionar problemas familiares, divorcios, etc. Esa es la advertencia.

Usar mi sistema con la frecuencia suficiente como para dominar las técnicas puede hacer que te vuelvas adicto y ocasionarte problemas familiares e incluso económicos.

Pero a cambio, te puede proporcionar la libertad sexual y la gloria de sentirte casi como un dios y te prometo que merece muchísimo la pena.

Y si como yo, no tienes pareja, eres escrupuloso, tienes miedo de coger enfermedades venéreas, contagiarte con corona virus u otros patógenos que puedan estar activos o crees que eres feo o demasiado mayor como para ligar con las mujeres que te gustan, entonces no tienes nada que perder y sí mucho que ganar.

Primero de todo vamos a intentar diferenciar lo que son orgasmos y sensaciones. Como sensaciones, que yo suelo percibir y que más o menos soy capaz de explicar o diferenciar, están: picorcillos, hormigueos, palpitaciones, golpeteos, caricias, cosquillas, vibraciones, ardores, contracciones varias, presión, deslizamiento, succión, espasmos, convulsiones, sensación de estar colocado o saliendo de tu cuerpo y otras sensaciones que no puedo por ahora explicar de forma fácil, pero que, eso si, son todas muy placenteras.

Muchas de estas sensaciones se tienen al mismo tiempo. Algunas vienen y van y se suceden o alternan continuamente y otras son más esquivas o menos frecuentes.

Las contracciones por ejemplo, no son siempre iguales. Las he tenido muy rápidas, frecuentes y estables y en otras ocasiones bruscas, espontaneas e impredecibles. También las he tenido muy lentas, en forma de onda circular, que son muy agradables, pero que me supongo que no te podrás imaginar a que me refiero hasta que no tengas la suerte de sentirlas en ti mismo.

He tenido ademas, para que te hagas una idea varios tipos de contracciones diferentes al mismo tiempo, en diferentes zonas. No lo puedo explicar como es todo eso posible, por ahora, pero supongo que de alguna manera he encontrado la forma de controlar ciertos músculos, de forma que puedo estimularlos mas o menos a voluntad y por separado para que se contraigan con frecuencia de formas placenteras. Por supuesto aún no los domino por completo, pero cada vez soy capaz de conseguir más sensaciones distintas a cada cual más placentera y supongo que en eso seguiré mejorando con la práctica y no se hasta donde podré llegar, pero me conformaría con mantenerme donde ya he llegado, que es impresionante.

En resumen, consigo sensaciones extremadamente placenteras, desde el mismo principio de empezar la sesión. Esas sensaciones pueden ser en ocasiones y por poner un ejemplo, para que te hagas una idea, similares a una increíble felación o penetración al natural, pero multiplicada por 10.

Imagínate una vida hipotética en la que todas las veces que te han hecho una felación o que has hecho el amor, tenías puesto un condón 10 veces más grueso de lo habitual o 10 condones uno encima de otro. ¿Sentirías algún placer? Es posible, pero poco. Aunque si es eso lo normal, supongo que estarías acostumbrado a ello. Ahora imagínate hacer lo mismo sin esa capa tan gruesa aislando tu pene. ¿Cuanto placer sentirías? ¿Diez veces más? Pues si, a eso me refiero. El placer que yo siento con mi sistema es infinitamente más potente que el que yo haya sentido jamás mediante cualquier práctica sexual en solitario o con otras personas.