IVÁN LÓPEZ CASANOVA
EDUCAR PARA LA PLURALIDAD
Por qué puede fracasar la educación familiar en la adolescencia
EDICIONES RIALP
MADRID
© 2021 by IVÁN LÓPEZ CASANOVA
© 2021 by EDICIONES RIALP S. A.,
Manuel Uribe 13-15, 28033 MADRID
(www.rialp.com)
Realización ePub: produccioneditorial.com
ISBN (edición impresa): 978-84-321-5350-1
ISBN (edición digital): 978-84-321-5351-8
No está permitida la reproducción total o parcial de este libro, ni su tratamiento informático, ni la transmisión de ninguna forma o por cualquier medio, ya sea electrónico, mecánico, por fotocopia, por registro u otros métodos, sin el permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si necesita reproducir, fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra.
EN LA BELLEZA AJENA
Solo en la belleza ajena
hay consuelo, en la música
ajena y en los poemas ajenos.
Solo en los otros hay salvación,
aunque la soledad sepa como
el opio. No son el infierno los otros,
si se los ve por la mañana, cuando
limpia tienen la frente, lavada por los sueños.
Por eso pienso mucho qué
palabra emplear, «él» o «tú». Cada «él»
es una traición a cierto «tú», mas,
a cambio, en un poema ajeno fiel
aguarda un sereno diálogo.
Temblor, 1985. Adam Zagajewski.
(Traducción de Ángel Enríquez Díaz-Pintado)
A mi familia querida, amplia, plural y preciosa:
Rafael, Chonín, Rafa, Juana, Carlos, Begoña, Iris, Reinaldo y Kity
ÍNDICE
PORTADA
PORTADA INTERIOR IVÁN LÓPEZ CASANOVA EDUCAR PARA LA PLURALIDAD Por qué puede fracasar la educación familiar en la adolescencia EDICIONES RIALP MADRID
CRÉDITOS © 2021 by IVÁN LÓPEZ CASANOVA © 2021 by EDICIONES RIALP S. A., Manuel Uribe 13-15, 28033 MADRID (www.rialp.com) Realización ePub: produccioneditorial.com ISBN (edición impresa): 978-84-321-5350-1 ISBN (edición digital): 978-84-321-5351-8 No está permitida la reproducción total o parcial de este libro, ni su tratamiento informático, ni la transmisión de ninguna forma o por cualquier medio, ya sea electrónico, mecánico, por fotocopia, por registro u otros métodos, sin el permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org ) si necesita reproducir, fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra.
CITA EN LA BELLEZA AJENA Solo en la belleza ajena hay consuelo, en la música ajena y en los poemas ajenos. Solo en los otros hay salvación, aunque la soledad sepa como el opio. No son el infierno los otros, si se los ve por la mañana, cuando limpia tienen la frente, lavada por los sueños. Por eso pienso mucho qué palabra emplear, «él» o «tú». Cada «él» es una traición a cierto «tú», mas, a cambio, en un poema ajeno fiel aguarda un sereno diálogo. Temblor, 1985. Adam Zagajewski. (Traducción de Ángel Enríquez Díaz-Pintado)
DEDICATORIA A mi familia querida, amplia, plural y preciosa: Rafael, Chonín, Rafa, Juana, Carlos, Begoña, Iris, Reinaldo y Kity
I. PRÓLOGO
II. ¿QUÉ ES EDUCAR PARA LA PLURALIDAD?
1. LA EDAD DEL CAMALEÓN Y DEL PÁNICO AL RIDÍCULO
A. Unas gotas de filosofía
B. Aplicaciones para la educación familiar para la pluralidad
C. Desafiando el ridículo: la belleza de ser alguien
2. EL ADELANTAMIENTO DE LA EDAD DEL PAVO
A. La tercera infancia
B. La preadolescencia
C. La adolescencia
3. LA EDAD DEL SÍ Y DE LA ESPERANZA
A. La persona como alguien pasivo
B. La comunicación: la familia como sistema abierto
C. El papel de la afectividad
III. ¿CÓMO EDUCAR PARA LA PLURALIDAD?
4. EDUCAR PARA LA BELLEZA
5. EDUCAR LA ATENCIÓN
6. LA EDUCACIÓN ESPIRITUAL
7. EDUCAR LA HERIDA NARCISISTA
8. LA EDUCACIÓN PARA EL AMOR
A. Educar para la entrega
B. Dos antropologías en colisión
C. Aprender a amar con el cuerpo
D. El camino del desamor
E. Educar para la complementariedad
9. EDUCAR LA INTELIGENCIA
A. ¿Somos cultura o tenemos cultura?
B. La ética como el arte del amor
10. EDUCAR LA VOLUNTAD
A. Neurobiología de las adicciones
B. La enseñanza ante el dolor
C. La enseñanza ante el fin
11. EDUCAR LA AFECTIVIDAD
IV. EPÍLOGO. EDUCAR PARA LA PLURALIDAD ES TRANSMITIR UNA IDENTIDAD FAMILIAR FUERTE
AUTOR
I. PRÓLOGO
LA EDAD DE LA SOLEDAD
Luego me dijo que bien mirado no hay gente mala;
nos parecen malos, pero lo que pasa es que están solos
y para gustar a los demás incluso hacen el mal.
Olga. Chiara Zocchi.
Amsterdam es muy bonita, la estoy descubriendo ahora que la veo con otros ojos, además de verla los viernes por la noche cuando salgo con mis amigos a hacer cosas que “antes no hacía”. Me he sacado una novia que vivía en La Haya y viene algunos findes por aquí, pero al final lo hemos dejado ya que era muy difícil continuar, ella en La Haya y yo en Bruselas. Me estoy buscando otra para no comerme el coco…, aventurillas pasajeras. Juego mucho al fútbol: ya estoy en un equipo. Estoy tocando la guitarra, aprendiendo canciones de los Red Hot Chili Peppers muy bonitas, etc. A los porros todavía no he llegado. Ya sabes que aquí es la leche: fin de semana, fiesta en casa de alguien (los padres de vacaciones), bebidas, porros, tías de una noche, comas, ambulancias y hasta el fin de semana que viene… “Pas mal!” (traducción: ¡no está mal!) Pues a ese estado no he llegado todavía. ¿Llegaré algún día? Por eso busco una novia (aventurilla) para que no se me ocurra hacer esas cosas que me atraen un montón…
¿Cómo podemos prevenir el fracaso de la educación familiar en la adolescencia? Transcribo un párrafo de una carta real que retrata la crisis vital de un adolescente —con algún dato modificado, nada más−. Años atrás, esto podía suceder al mudarse a un país diferente. Ahora ocurre siempre en alguna medida al transitar durante la adolescencia desde el cálido ámbito familiar hasta la compleja y heterogénea sociedad.
Me interesa la soledad del adolescente. Y escribo para que su padre y su madre aprendan a acompañarlo, acrecentando la comunicación y la proximidad familiar. Porque si no se sabe cómo abordar esa cercanía desde el punto de vista educativo, la formación familiar se resquebrajará al aproximarse la adolescencia, y los hijos cambiarán el nosotros de la familia por el nosotros de las vigencias juveniles impuestas social y comercialmente.
Me importa el abordaje educativo de algo a lo que todas las familias sin excepción asisten hoy al llegar sus hijos a la adolescencia: el contraste entre los valores del hogar y los valores sociales dominantes. Esto es lo que ocurre precisamente durante ese tiempo y contribuye, precisamente, a la soledad de los hijos educados en valores. Y, aunque parezca mentira, sobre estas cuestiones educativas, tal vez las más decisivas para que culmine la formación familiar, no he encontrado casi nada escrito con la atención que merecen.
Este trabajo se dirige a las familias normales con hijas e hijos normales, sin patologías especiales, pero chicos con dificultades, con adelantos y retrocesos. Porque me parece importante recuperar «el concepto de normalidad del desarrollo»[1], como propone la neuropsiquiatra infantil italiana Ceriotti Migliarese para diferenciar las enfermedades psicológicas de los normales avatares de los hijos, con sus avances y caídas, con sus éxitos y frustraciones, con sus aciertos e imperfecciones.
Sorprendentemente, abundan los bienintencionados libros para educar mejor, pero muchos se centran en exceso en lo patológico, y olvidan que buena parte de la eficacia educativa depende de ser capaces de formar para amar y comprender la pluralidad del mundo social y cultural. De hecho, en la mayoría de estos trabajos ni siquiera aparece referida esta circunstancia fundamental. Pero insisto, los hijos necesitan una formación familiar para que solidifique y complete su edificio educativo cuando aterricen durante la adolescencia en un complejísimo mundo social.
Читать дальше