Juan Manuel Martínez Plaza - La Pasión de los Olvidados:

Здесь есть возможность читать онлайн «Juan Manuel Martínez Plaza - La Pasión de los Olvidados:» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

La Pasión de los Olvidados:: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «La Pasión de los Olvidados:»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Una vieja vagabunda y aparentemente medio chiflada deambula sin rumbo de un lugar a otro. Ignorada y despreciada allá donde va todo parece indicar que se encuentra al final de su vida, a buen seguro gris, triste e insignificante. Pero la anciana esconde un asombroso secreto que nadie conoce, un secreto que un niño, tan corriente como cualquiera de nosotros a esa edad, está a punto de descubrir. La indigente es acogida por sus padres, personas piadosas y caritativas siempre dispuestas a ayudar a cualquier necesitado. Es entonces cuando una relación muy especial surgirá entre la misteriosa vagabunda y el menor de los hijos de esta familia.
La Peregrina, como así la llamarán a partir de entonces, se dispone a desvelar ante su nuevo y jovencísimo amigo la más fascinante de cuantas aventuras se hayan podido contar. La epopeya del Corazón Indomable, un periplo legendario del que ella formó parte mucho tiempo atrás y que la llevó a viajar hasta el mítico Planeta de los Dioses.
Este es el punto de partida de «La pasión de los olvidados», primera entrega de la saga del Corazón Indomable, una aventura épica futurista a caballo entre dos mundos muy distantes entre sí, pero unidos bajo el signo de una misma amenaza. Y lo único que se interpone entre ellos y su fatal destino es una leyenda, un leve destello de esperanza en el que ya casi nadie cree. Dicho destello terminará tomando forma de la mano de una insospechada heroína llamada Evgine, a la que conoceremos dando sus primeros pasos a través de una Europa desolada por la interminable guerra que enfrenta a la humanidad contra los implacables y todopoderosos guiberiones.

La Pasión de los Olvidados: — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «La Pasión de los Olvidados:», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Las consecuencias eran de esperar. A pesar de la terrible resaca y del inminente desastre, Ethan acudió puntual al encuentro con Louis en la antigua parada de metro de Plaistow. Éste último, sonriente y fanfarrón como siempre, lo recibió dándole un sonoro cachete en la mejilla. Resultaba obvio que para él era un pardillo.

- ¿Qué pasa tío? - gritó Louis -. Veo que estás muy decidido ¡Mira, por ahí viene tu hermano!

Ambos se giraron y Samuel apareció por entre los montones de basura y escombros que había en un gran descampado al lado de la estación ahora abandonada. Bajito, de aspecto un tanto nervioso, con su pelo rizado y claro y una sonrisa de oreja a oreja en el rostro. Él siempre sonreía, por duras que fueran las circunstancias por las que estuvieran pasando encontraba el momento para hacerlo y con eso lograba que Ethan se sintiera mejor.

- Veo que habéis madrugado los dos, las horas que son y ya por aquí - anunció al aproximarse -.

- Quizá sea porque las jodidas alarmas de bombardeo no dejan dormir a nadie, tío - replicó Louis chocándole la mano -. Ya lo han tomado por costumbre, luego muchas veces no pasa nada.

Los tres miraron hacia arriba con gesto sombrío, lejanos resplandores verdosos se vislumbraban en el norte, estallaban y se desvanecían sin solución de continuidad. Siempre era así desde hacía meses. Aquella oscuridad que casi nunca dejaba ver el sol había gobernado sus vidas desde siempre, las suyas y las de muchos otros antes que ellos, pero a pesar de eso resultaba difícil acostumbrarse a permanecer bajo su opresiva sombra. Más acostumbrados estaban en cambio al paisaje de Londres en aquellos tiempos, un horizonte de ruinas ennegrecidas y cráteres de impacto sobre el que se multiplicaban toda suerte de chabolas y otras construcciones improvisadas. Cualquiera que hubiese vivido en la ciudad antes de la Guerra la habría encontrado por completo irreconocible.

- ¿Por qué no nos dejarán en paz de una puta vez? - Samuel lanzó la pregunta al aire -. Ya no les queda nada que destruir.

- Yo que sé, siempre ha sido así - respondió Louis con gesto de hastío -. De todas maneras no importa mientras sigamos vivos. Que les jodan y ya de paso también que se jodan esas putas sanguijuelas de Dublín - luego cambió de tercio - ¡Bueno, dejémonos de monsergas y vamos a lo que realmente importa! Toma Ethan.

Con un gesto rápido y disimulado le tendió un pequeño sobre, Ethan se lo guardó en el bolsillo de su raída chaqueta.

- Ahí van dos mil quinientos créditos en bonos de la Alianza - susurró -. No me jodas y escóndelos bien, no vaya a ser que te los levanten. Me ha costado mucho más de lo que imagináis reunirlos, pero no ha habido otro remedio, a causa de las falsificaciones esa gente no acepta libras convertibles. Ya sabéis - esbozó una medio sonrisa -, es la moneda de los primos.

- De acuerdo Louis, no te preocupes - respondió el mayor de los hermanos -.

-Si la jugada sale bien sacaremos al menos cinco veces más - dijo el pelirrojo en tono confidencial -. Habrá que repartir, pero si lo hacemos bien podremos embarcarnos en operaciones de más envergadura. Los de Watford verán que tratan con profesionales. Aunque ahora no vaya a ser demasiado dinero miradlo como un primer paso.

- Eso ya lo sabemos tío - cortó Samuel riendo -, no nos calientes la oreja con otro de tus discursitos de mierda, ¡ni que hubiéramos nacido ayer!

- ¡No me jodas Samie! ¿De buena mañana y ya tocándome las pelotas?

Al momento ambos empezaron a fingir que peleaban. Era típico de ellos, Louis cogía a Samuel por el cuello y hacía como si diera ganchos de derechas, éste por su parte le castigaba los riñones mientras forcejeaba. Así podían estar durante varios minutos riendo y haciendo el tonto mientras Ethan los contemplaba pensando que se comportaban como críos.

- ¡Vamos tío, suéltame de una puta vez joder! - terminó diciendo Samuel un tanto cansado ya, Louis era más grande y corpulento que él y eso se notaba -.

- Bueno, espero que esto te sirva de lección - respondió éste jadeando ligeramente, después se dirigió a Ethan -. Será mejor que muevas el culo, nunca se puede saber si las líneas hasta Watford van a estar en servicio o no.

- Es posible que los soldados no dejen pasar a nadie, últimamente suele ser así.

- ¡Razón de más para que te largues ya! - le gruñó Louis para luego añadir -. Bueno, yo también me tengo que ir para ocuparme de otros asuntos. Es algo que ya os contaré, primero aseguraos de haced bien esto. Y tú Samie no olvides pasarte por el antiguo estadio del Arsenal. De hoy no puede pasar, ¿vale? Ya nos veremos si eso esta noche en el local de Charlotte, ¡hasta luego!

Y diciendo esto salió disparado como alma que lleva el diablo. En cuestión de segundos había desaparecido por entre el gentío que discurría por lo que una vez fue Plaistow Road, infinidad de almas errantes de aspecto miserable que parecían más muertas que vivas. Ahora Ethan y Samuel se habían quedado a solas, mirándose el uno al otro como no sabiendo quién debía hablar primero. Finalmente fue Ethan el que dijo:

- ¿Dónde estabas? Me he despertado y he dado una vuelta por el bloque, pero no te he visto.

- No podía dormir - repuso Samuel con voz queda -. A veces paseando por las calles de madrugada me siento mejor, no hay demasiada gente. Sólo las patrullas de mantenimiento y los rateros de siempre, aunque ahora al menos saben para quién trabajo y no se atreven a tocarme. Me he acordado de que habías quedado con Louis aquí, por eso me he pasado a ver qué tal.

- Tengo un problema bastante grande, Sam - se atrevió a decirle su hermano, pues no podía confiar en otra persona -. Menos mal que has aparecido.

- ¿De qué se trata hermanito? - preguntó Samuel, que siempre solía llamarle así a pesar de que él era el menor. Ya presuponía que tendría que solucionarle una vez más la papeleta de una forma u otra -.

- He perdido el puto papel donde había apuntado la dirección, el nombre del tío de Watford y todo eso - reconoció Ethan -. Tuve que dejarlo en algún lugar, pero lo he buscado por todas partes y no está. He mirado incluso en las habitaciones que ocupan los otros, pero ya sabes que aquello es una maldita pocilga donde es imposible encontrar nada ¡Estaba seguro de que lo tenía, joder, pero ahora no consigo recordar lo que había escrito!

- ¡Maldita sea Ethan! - escupió Samuel visiblemente irritado -. Siempre estamos en las mismas, ¿es que nunca puedes hacer nada bien, joder? No creo que fuera tan difícil, yo mismo vi como lo apuntabas todo en un papel bien grande. Y eso que primero perdiste el que Louis te había dado y tuviste que volver a preguntárselo ¡Si no te pusieras tan ciego siempre que paras por el local de Charlotte!

- ¡Oh vamos Sam, no… no creo que eso tenga nada que ver! Ha sido… ha sido cosa de puta mala suerte y…

Entonces su hermano le clavó una mirada incendiaria e inquirió:

- ¿Te metiste algo anoche?

- ¿Po… por qué dices eso? ¿Es que no confías en mí? Yo no…

- ¿Te metiste algo Ethan? - volvió a rugir Samuel - ¡Vamos contesta!

- Sabes… sabes que estoy limpio desde hace más de medio año ¡Lo sabes, joder! Sólo bebí un poco más de la cuenta, lo reconozco, pero tampoco perdí el control - hizo una breve pausa y adoptó un gesto lastimero -. Vamos Sam, sería incapaz de mentirte. No me metí nada anoche, lo juro, lo único que pasa es que la bebida que sirve esa condenada Charlotte parece más disolvente que otra cosa.

- Razón de más para no tomarla.

Ethan continuaba poniendo esa cara de cachorro desvalido que otras veces había dado resultado. Su hermano sabía que sin su protección estaría perdido, más bien parecía que nunca hubiera dejado de ser un niño.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «La Pasión de los Olvidados:»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «La Pasión de los Olvidados:» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «La Pasión de los Olvidados:»

Обсуждение, отзывы о книге «La Pasión de los Olvidados:» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x