22 Ibidem , passim .
23Peter Garnsey; Richard Saller. El Imperio romano ..., p. 103.
24Tasa media per cápita en personas con actividad física moderada, según estudios de la FAO hechos en los años noventa. Véase Vaclav Smil. Alimentar al mundo. Un reto del siglo XXI . Madrid: Siglo XXI, 2003, p. 271.
25Domenico Vera. « Panis ostiensis atque fiscalis : vecchie e nuove questioni di storia annonaria romana». En: Humana sapit. Mélanges en l’honneur de Lellia Cracco Ruggini , 2002, pp. 341-356.
26Peter Garnsey; Richard Saller. El Imperio romano ..., pp. 105-107.
27Mireille Corbier. L’ aerarium saturni et l ’ aerarium militare. Administration et prosopographie sénatoriale . Roma: École Française de Rome, 1974, p. 92 (la traducción es nuestra). Agradecemos a José Remesal que nos pusiera sobre la pista de este interesante documento.
28Mireille Corbier. L’ aerarium saturni..., pp. 99-100.
29Peter Garnsey. «Famine...», p. 27.
30 Ibidem , pp. 28-30.
31 Ibidem , p. 30.
32Lellia Cracco Ruggini. Economia e soccietá nell’Italia annonaria. Rapporti fra agricoltora e commercio dal IV al VI secolo d.C . Bari: Edipuglia, 1995 (la primera edición es de 1961).
33Los años de crisis de subsistencia en Roma son 309-310, 353, 359, 361, 376, 384-386, 388, 395-398, 408-410, 413, 455-463, 468 y 489-496 (Josep Maria Salrach. Carestías y hambres en la Antigüedad Tardía y la Edad Media , en preparación).
34Tenemos noticias de una veintena de años malos: 353, 378-379, 405-406, 411, 423, 432, 450, 450-452, 455-463 y 489-492 ( Ibidem ).
35Noticias de los años 411-412, 432 y 471-472 ( Ibidem ).
36La única noticia de la que disponemos, del año 409, la proporciona Idacio y es particularmente dramática ( Ibidem ).
37Años 382, 423 y 484 ( Ibidem ).
38Años 378-379 ( Ibidem ).
39Años 312-313, 353, 362-363, 368-369, 376-379 y 454-455 ( Ibidem ).
40Eusébe de Césaré. Histoire Ecclésiastique . Edición y traducción de G. Bardy. París: Éditions du Cerf, 1952-1971, 4 v., IX, VIII, 4-10.
41En este libro intentaremos demostrar que las hambres, llamadas naturales por sus causas, no por ello dejan de tener en alguna medida motivaciones históricas, es decir, sociales.
42Jordanes. Orígenes y gestas de los godos . Traducción de J. M. Sánchez Martín. Madrid: Cátedra, 2001, XXVI, pp. 134-135.
43Hydace. Chronique . Edición y traducción de A. Tranoy. París: Éditions du Cerf, 1974, 2 v., pp. 42, 46-49.
44Michel Rouche. L’Aquitaine des wisigoths aux arabes 418-781. Naissance d’une région . París: EHESS, 1979, p. 227.
45Las referencias que tenemos son de los años 362-363, 378-379, 409, 412, 468, 471-472 y 489-492 (Josep M. Salrach. Carestías y hambres ).
46John Boswell. La misericordia ajena , passim . No utilizamos aquí y en otras páginas el concepto de adopción y las formas adoptivo y adoptante en un sentido jurídico estricto, sino, en sentido amplio, para referirnos a la acogida y crianza de niños por familias que no eran los formadas por sus padres biológicos.
47Harlan Lane. El niño salvaje de Aveyron . Madrid: Alianza Editorial, 1994.
48John Boswell. La misericordia ajena , pp. 228-229.
49 Ibidem , pp. 106-108, y Nov. Val. XXXIII ( Codex Theodosianus , II, pp. 138-140).
50John Boswell. La misericordia ajena , pp. 237-238.
51 Codex Theodosianus , 1/2, p. 238-239 (V, 17, 1 i V, 17, 2; VI, 1, 4 y VI, 1, 6). No olvidemos que una ley de Honorio de 419 trata de los domini y patroni que en los años de carestía y hambre vendían sus esclavos y dependientes.
52Paulus Diaconus. Historia Langobardorum . Edición a cargo de G. Waitz. En: MGH. SRG . [48], 1878 (reed. 1988). I, 1; Jordanes. Origen y gestas ..., LVI, p. 283.
53Eusèbe De Césasé. Histoire Ecclésiastique ..., IX, VIII, 5; Jordanes. Orígenes y gestas ..., XXVI, pp. 134-135; Alfonso Corradi. Annali delle epidemie occorse in Italia dalle prime memorie fino al 1850 compilati con varie note e dichiarazioni . Bolonia: Forni Editori, 1972, vol. I, p. 51 (la primera edición es de 1863).
54Hieronimus. Epistulae , CXXVII, 12-13 ad Principiam . En: J.-P. Migne. PL . París, 1845, 22, col. 1094 (la traducción es nuestra).
55Lucien Musset. Las invasiones. Las oleadas germánicas . Barcelona: Labor, 1967, pp. 50-54.
56Lellia Cracco Ruggini. Economia e società ..., pp. 157-158, 165 y 171.
57Hay muchos ejemplos. Recordemos, entre otros, a las mujeres de la familia imperial, aprovisionadas por el Estado, alimentando a los ciudadanos de Roma durante el asedio de Ala-rico en 408: ZÓSIMO. Nueva historia . Traducción de J. M. Candau. Madrid: Gredos, 1992, vol. V, p. 39. Y también al patricio Ecdicio, un galorromano, que «confiando en el Señor», durante la gran hambre de 471-472 en la Borgoña alimentó a los pobres de la región, lo mismo que hizo el obispo Patiens de Lyon: Grégoire de Tours. Histoire des francs . Traducción de R. Latouche, París: Les Belles Lettres, 1996, vol. II, p. 24.
58Salvien de Marseille. Oeuvres. II. Du Gouvernement de Dieu . Edición y traducción de G. Lagarrigue. París: Éditions du Cerf, 1975, IV, 21; IV, 31; V, 17; V, 21 y V, 28.
59René Rémondon. La crisis del Imperio romano. De Marco Aurelio a Anastasio . Barcelona: Labor, 1967, p. 112.
60Symmachus. Q. Aurelii Symmachi quae supersunt . Edición a cargo de O. Seeck. En: MGH. SS ., 1883, Relationes , III, pp. 7-10 y 15-17.
61Ambrosius. Epistulae . Edición a cargo de M. Zeller. En: CSEL , 82, 1982, XVIII, p. 20-21.
3. TIEMPOS DE INVASIONES Y DE CONQUISTAS
TESTIMONIOS DE ÉPOCA GERMÁNICA
Dentro de las fronteras del Imperio romano en el siglo V las condiciones de la existencia empeoraron. Graves conflictos (guerras civiles e invasiones) perturbaron y no pocas veces destruyeron o bloquearon los ciclos productivos y el comercio en perjuicio, sobre todo, de las ciudades que dependían del suministro del campo. Esta ha de ser una de las razones, quizá la principal, por la que la vida urbana retrocedió y la sociedad se hizo más rural que antes. Está claro que en todas partes no pasó lo mismo ni en el mismo momento, pero ésta es una visión general válida para todo el Imperio, a excepción quizá del Próximo Oriente. En Europa Occidental, además, los invasores destruyeron la unidad política y, en su lugar, erigieron un conjunto de reinos pequeños con fronteras inestables, de ahí que las guerras, internas y externas, fuesen también o más aún la característica dominante en la Europa de los siglos VI y VII. En un cierto sentido se podría decir que la larga fase depresiva del Bajo Imperio, con sus crisis de subsistencia, tuvo su continuidad y se agravó en la época germánica. También de estas hambres los hombres, con sus conflictos, tuvieron parte de responsabilidad.
¿Cuántas hubo?
Para una época tan remota, la respuesta exacta no es posible, aunque continuamos estando más informados de Italia que del resto de Europa, 1de ahí que podamos dar una lista de años malos más completa para Roma y la península italiana que para el resto del antiguo mundo romano. En cualquier caso, las series de malas añadas y crisis de subsistencia de las que disponemos corresponden a final del siglo V (después de la caida del Imperio, en 476) y al conjunto del VI. En este período de ciento veinticinco años, hubo unos cincuenta (casi la mitad) de crisis de subsistencias (fallos en el abastecimiento, carestías, hambres) en Italia, ya sea en algunas regiones o en el conjunto de la península, Roma incluida. 2La vieja capital, donde las instituciones tradicionales (como la prefectura de la annona ) sobrevivían en declive, conoció en estos años no menos de dieciséis emergencias alimentarias. 3Del resto del Imperio estamos mucho menos informados, pero tenemos constancia de diez años malos, algunos de hambre auténtica (como el 585), en algunas regiones o en el conjunto de las Galias. 4Casi todos estos años son coincidentes con los de las crisis de subsistencias registradas en Italia. Sabemos también de algunos años malos en el norte de África (484, 526) y en Oriente (499-502, 548). Sin duda la realidad fue mucho peor, pero nos faltan las fuentes de información, situación que se ha de hacer extensiva al siglo VII, del cual tenemos noticias de graves hambrunas en Roma y quizá en toda Italia a principios de siglo (604, 608-615), una fuerte carestía en Oriente (618), siete años de sequía y hambre en Hispania (635-641) y un final de siglo crítico (677-691) con hambres en el norte de Italia, donde el clima fue adverso para la agricultura en 682, 684 y 690, tres años de sequía y hambre en Inglaterra en torno a 680, hambre en Hispania durante el reinado de Ervigio, también hacia el 680, y gran escasez en Siria, en 687. 5
Читать дальше