El mito de Atamante y sus dos esposas, Ino y Temisto, que nos relata Higinio, en sus Fabulae I y IV respectivamente, hallará su paralelo en “Pulgarcito” ( Le petit poucet ) de Perrault cuando el ogro degüella por error a sus siete hijas dormidas porque Pulgarcito ha intercambiado las coronitas de oro de sus cabezas por los gorros de dormir de sus hermanos y suyo mismo 3. Para la cultura anglosajona, la asociación más próxima sería la del “Cuento del Mayordomo” ( The Reeve’s Tale ) de Geoffrey Chaucer, cuando el estudiante cambia el orinal de sitio, haciendo que la mujer del molinero se equivoque de cama a obscuras y se encame con él en vez de con su marido y, posteriormente su compañero se encame con el marido y le relate sus aventuras eróticas de esa noche con la hija del molinero al propio padre. Pero es dudoso que Perrault tomara a Chaucer como referente en detrimento de Higinio. Sí es posible que recordara el antecedente calcado por Chaucer: la Novena Jornada, Narración Sexta del Decamerón .
El cuento “Juan de la Fuente y Gaspar de la Fuente” (1ª ed., 1ª Parte, 1812, KHM 74 Von Johannes-Wassersprung und Caspar-Wassersprung ) puede compararse con el mito de los gemelos Anfión y Zeto, hijos de Zeus y de Antíope, si bien estos últimos no compartirán el gusto por la caza, no matarán a un dragón (lo hará otro hijo de Zeus, Perseo) ni tampoco rivalizarán por la misma esposa.
El fenómeno del canibalismo, que analizaremos en su lugar, se puede ver en el mito de Tántalo dando de comer a los dioses a su hijo Pélope. Todos ellos se dan cuenta del engaño, menos Démeter (que sólo puede pensar en la pérdida de su hija Perséfone) y sí se come el hombro izquierdo. Lo podemos comparar con “El enebro” (KHM 47 Van den Machandel-Boom ), “Hansel y Gretel” (KHM 15 Hänsel und Gretel ), el ogro antropófago de “Pulgarcito” ( Le petit poucet ) y la suegra-ogresa de “La bella durmiente del bosque” ( La belle au bois dormant ) entre otros.
Andrómeda, la doncella expuesta al dragón y salvada por Perseo, se recuerda en el cuento de los dos niños nacidos de beber de una fuente: “Juan- de la Fuente y Gaspar de la Fuente” (1ª ed., 1812, KHM 74 Von Johannes-Wassersprung und Caspar-Wassersprung ).
Debido a raíces animistas, la zoofilia abunda en la mitología. Los vemos, entre otros muchos, en Zeus (toro) y Europa, Zeus (cisne) y Leda, la mayoría de las veces con carácter fundacional de estirpe real o nobiliaria. En los KHM también son numerosos los ejemplos auténticos o simulados. Destaquemos “El príncipe rana” (KHM 99 (o 1ª ed., 2ª Parte, 1815, KHM 13) Der Froschprinz ), los seis hermanos de la heroína en “Los seis cisnes” (KHM 49, Die sechs Schwäne ) y “El príncipe cisne” (KHM 59 Prinz Schwan ), entre otros, como trataremos en su lugar (vid. 3.1.3.).
Dentro del ciclo homérico hay un par de ejemplos. El rapto de Helena por Paris se puede corresponder con el de la princesa que “El fiel Juan” (2ª ed., 1819, KHM 6 Der treue Johannes ) le lleva a su señor natural. El episodio de Polifemo se parece al que le narra el antiguo bandido reformado a la reina en “El bandido y sus hijos” (5ª y 6ª ediciones, 1843 y 1850, KHM 191 Der Räuber und seine Söhne ), mientras que la venganza de Odiseo contra los pretendientes de Penélope también se puede rastrear en “El rey de la montaña de oro” (KHM 92 (o 1ª ed., 2ª Parte, 1815, KHM 6) Der König vom goldenen Berge ) y, en menor medida, en “La boda de Dama Raposa” (KHM 38 Die Hochzeit der Frau Füchsin ).
2.3 EL REFLEJO DE LAS LEYENDAS GERMÁNICAS
Brynhild/Brünhild, dormida y rodeada de un muro de llamas por Odin/Wotan se parecerá, a su vez, a “La bella durmiente del bosque” ( La belle au bois dormant ). Al igual que el príncipe destinado a ser su consorte, solamente Sigurd/Sigfrît puede traspasar el cerco de fuego sobrenatural y llegarse hasta ella/conocerla carnalmente. Así nos lo recuerdan los Grimm en sus anotaciones filológicas a la KHM 50 Dornröschen . Los demás pretendientes o no pueden penetrar la cerca (en Perrault), o mueren de manera lamentable en el intento (en los Grimm). También hay un claro reflejo del encuentro entre Kriemhilt y Prünhilt ante la catedral de Worms en “El cantar de los Nibelungos” ( Das Nibelungenlied . 14. Aventiure. Wie die kuneginne einander schulten’, “De cómo se increparon las reinas mutuamente”) en “La doncella Maleen” (6ª ed., 1850, KHM 198 Jungfrau Maleen ) cuando Maleen, la novia verdadera, es capaz de mostrarle al esposo la joya que le ha colgado al cuello al contraer matrimonio canónico.
“Blancanieves” (KHM 53 Sneewittchen ) se puede entroncar genéricamente con el mito medieval de Genoveva de Brabante, en tanto en cuanto se da una heroína inocente, condenada a muerte, pero abandonada en el bosque por su verdugo. De manera mucho más específica, la podemos equiparar con la Cantiga número 15 de Alfonso X el Sabio: Cantiga Número 15 (fol. 23v a 26r). Esta es de como Santa María ayudó a la emperatriz de Roma a sufrir las grandes cuitas por las que pasó :
e mando a dos sus monteros que la sacasen fuera a un monte e que la matasen. E los monteros llevandola, pensaron de la desonrrar; e queriendo obrar su mala entençion, la santa dueña començo a llamar a Santa Maria a quien ella sienpre serviera que la veniese acorrer. E luego veniendo por y un conde, que con sus cavalieros andava a caça, oyendo las bozes de la santa dueña, veno la acorrer e sacola de poder de aquellos monteros. E dixol: “¿Señora quien sodes?”. E ella dixol’: “So una muger pobre e cuytada que de la vuestra limonsna he menester”. “Por Dios, señora”, dixo el conde, “esto fare yo muy de talante pero, señora, la condesa mi muger e yo avemos un fijo, e porque me paresçedes dueña de onrra e de bien, sy vos pleguyese (…) 4
2.4 EL REFLEJO DEL ANTIGUO TESTAMENTO
Si, por otro lado, buscamos paralelos con los libros bíblicos, el final de “Juan el Bobo” (1ª ed., 1812, KHM 54 Hans Dumm ) con la imputación de robo que le hace la hija al padre para escarmentarlo, reproduce el de José, cuando hace que su mayordomo esconda una copa de plata en los costales de su hermano Benjamín (Gn. 44, 2).
Las promesas o votos irreflexivos de un padre típicamente, pero no solamente, a la divinidad o a un numen, comprometiendo la vida o el bienestar de sus hijos se dan en múltiples culturas y se pueden retrotraer, en última instancia al episodio del juramento de Jefté (Jue. 11, 30). En los cuentos, podemos destacar “Piel de asno” ( Peau d’ âne) y, típicamente bajo diferentes formas, “La doncella sin manos” (KHM 31 Mädchen ohne Hände ), “La alondra cantarina y saltarina” (KHM 88 (o 1ª ed., 2ª Parte, 1815, KHM 2) Das singende, springende Löweneckerchen ) o “El rey de la montaña de oro” (KHM 92 (o 1ª ed., 2ª Parte, 1815, KHM 6) Der König vom goldenen Berge ) (cf. Uther 2013: 203-205, 232-235 y la recopilación enciclopédica contenida en Das Märchenlexicon ).
2.5 LOS REFLEJOS CULTURALMENTE COMPLEJOS
Como decíamos arriba, los mitos se reformularán una y otra vez en las diferentes áreas culturales. Muchos de ellos se pueden retrotraer, en última instancia, a prácticas animistas, por lo que The Golden Bough de Frazer sería nuestra referencia príncipe. Pero ello nos llevaría demasiado lejos y tampoco los autores modernos habrían de ser conscientes de ello. Por lo tanto, sólo mencionaremos un puñado de casos.
La recogida y recomposición de huesos para devolver la vida al muerto se puede retrotraer al mito de Osiris. Para la cultura germánica, la referencia más cercana se da en el mito de Thor, cuando revive las cabras recomponiendo sus huesos. En los KHM se refleja en “El enebro” (cf. KHM 47 Van den Machandel-Boom ) reviviendo al muerto y en las hermanas descuartizadas por el brujo y recompuestas por la más pequeña en “El pájaro del brujo” (KHM 46 Fitchers Vogel ). Casi en paralelo, Las Pelíades, engañadas por Medea, descuartizan y hierven a su padre en un caldero con el fin de devolverle la juventud y Árpad von Nahodyl Neményi (2015) nos aporta paralelos en la mitología germánica. La anciana de “El hombrecillo rejuvenecido” (KHM 147 Das junggeglühte Männlein ) se hace cocer por un herrero para volver a tener dieciocho años y, al igual que el tío de Jasón, morirá abrasada.
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