Estrella Correa - Trilogía completa Un gin-tonic, por favor

Здесь есть возможность читать онлайн «Estrella Correa - Trilogía completa Un gin-tonic, por favor» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Trilogía completa Un gin-tonic, por favor: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Trilogía completa Un gin-tonic, por favor»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Toda la trilogía en un solo volumen y con contenido inédito Atrevida, sensual, divertida, emocionante. Llena de sorpresas y engaños. Todo se une en una novela donde el amor inunda cada página, nada es lo que parece y las dudas rodean a una chica que lucha por sobrevivir cada día tratando de olvidar el pasado. Dani es una mujer trabajadora enamorada del arte y que, como todos, busca ser feliz. Le encanta salir de fiesta con sus amigas a pasarlo bien y en una de esas noches confusas conoce al enigmático y atractivo Alejandro Fernández, un empresario acostumbrado a triunfar y a conseguir todo lo que desea. Ninguno de los dos espera lo que sus corazones comienzan a sentir y, desde luego, tampoco lo que les depara el futuro al obligarlos a enfrentarse a lo que verdaderamente son. ¿Podrán superar todas las pruebas que el destino les depara? ¿Serán capaces de asimilar todo lo que ocurre a su alrededor? «Un gin-tonic, por favor» es el título de la primera parte de una trilogía que te hará reír y llorar a partes iguales. Una historia diferente, en la que encontrarás, no solo amistad y erotismo, sino mucho más. ¿Quieres saber qué? Adéntrate en la vida de estos personajes y no podrás parar de leer hasta conocer el final. «Una novela para reír, llorar y, sobre todo, pasa sentir. Ilusiona saber y leer a autoras con magia en la pluma». «Una montaña rusa que no te deja respirar. Una sorpresa tras otra. Magnífica trama».

Trilogía completa Un gin-tonic, por favor — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Trilogía completa Un gin-tonic, por favor», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

No sé si podré bailar mucho esta noche sin caer al suelo con los doce centímetros de tacón que llevamos. Me van a impedir moverme todo lo que quisiera, pero, si lo pienso, no es tan mala idea. Si bailo poco, no tendré tanta sed y no estaré tentada de beberme hasta el agua de la lluvia, literalmente hablando. Aún recordamos la noche en la que acabamos las dos tiradas sobre el asfalto con la boca abierta tragando gotas de lluvia. Fue una noche memorable, grandes momentos que guardo con cariño dentro del corazón. Una historia muy larga, ya la contaré. No quiero entretenerme ahora.

Se abre el ascensor y al salir del edificio vemos el coche negro todoterreno de Roberto. Nos pita y nos saluda con la mano indicándonos que corramos para no mojarnos. Está cayendo una buena, pero me resulta imposible correr con estos zapatos. Menos mal que me gusta llevar el pelo como si acabara de follar. Lo que se dice follar, no follo mucho, pero con que lo parezca me vale.

«Esa es la actitud».

Al entrar, nos saludamos con besos y abrazos. Roberto arranca y nos disponemos a recoger a Sofía. Tardamos un poco en llegar porque vive bastante lejos de nosotras. En Conde Orgaz-Piovera. Todavía en casa de sus padres, en una zona residencial bastante cara. Es una niña bien. Miento. Es una niña muy pija, pero está loca del coño. ¡Es genial! Muy divertida y, al igual que Sara, tiene un cuerpo y una cara de escándalo. Impresionante. Alta, rubia, con ojos azules y cuerpo de modelo. Es modelo. Demasiado delgada para mi gusto. Creo que yo soy la única normal de nuestro pequeño grupo. Un metro setenta, pelo castaño, ojos verdes, tez morena y sin muchas curvas, a excepción de mis pechos que, aunque no llegan a ser excesivos, tampoco son pequeños. Esa soy yo. Y un poco seca. No me gustan mucho las personas. Supongo que son las experiencias las que me han hecho desconfiar del ser humano. No sólo desconfío, además creo que el concepto humano no es el que mejor nos define.

Ya los cuatro en el coche, Sara empieza a contarles lo poco que nos acordamos de la noche anterior. Lo poco o nada. Eso me hace recordar que aún no sabemos cómo volvimos a casa anoche. La oscuridad del coche hace que asome un fugaz recuerdo. Cruza mi mente un leve olor a cuero y visualizo por unos segundos unos asientos oscuros... Sara inconsciente a mi lado... y unos ojos azules clavados en los míos.... Se me ponen los vellos de punta..., son intensos..., me darían miedo si no me excitaran tanto. Esa sensación dura solo un momento, pero tan intensa que me recorre todo el cuerpo.

—¡Dani, Dani! —me despierta Roberto de mi ensimismamiento—, hemos llegado. Baja con cuidado. El suelo está muy húmedo. No sé por qué os ponéis esos tacones. Nunca entenderé a las mujeres —me ayuda a salir del coche dándome la mano.

Roberto, ese amigo genial que toda chica desea tener, te cuida y te respeta, te escucha cuando lo necesitas y te mima más a menudo de lo que mereces. No es gay, si lo estáis pensando, ni siquiera lo parece. Para no desentonar con las dos modelos de Victoria's Secret que tengo al lado, tiene el cuerpo muy definido, debe medir casi el metro noventa, ojos color miel y un pelo rubio alborotado que lo hace parecer un chico malo. Fotógrafo, pero hace las veces de modelo cuando la oportunidad se presenta y le pagan bien. Además, también escribe para varias revistas culturales. Él me consiguió el trabajo en la galería. Ese que tanto me gusta y me da de comer. Piensa que debería pintar, no vender arte, pero todo llegará. Aún no estoy preparada para que el mundo vea mi trabajo, bueno, para eso y para escuchar una mala crítica. Sólo me falta mi hermano diciéndome: "Ya te lo dije, debiste estudiar Derecho, o Empresa, yo te hubiera dado trabajo, o te hubiera recomendado, pero decidiste estudiar Bellas Artes". Parece que lo estoy escuchando ahora mismo. Espera, no es mi imaginación, lo estoy escuchando ahora mismo.

Miro hacia la puerta del restaurante en el que tenemos reserva y lo veo.

—Qué bueno está tu hermano. Me lo follaría hasta matarlo —suelta Sara.

—No seas loba y deja un poco para las demás. Yo me lo tiraría ahora mismo, aquí, en medio de la calle. —Dice Sofía como si fuera lo más normal del mundo.

—Tranquila, nos lo tiramos las dos a la vez. Seguro que no pone ningún inconveniente. —Rompen en carcajadas.

Me consta que son capaces de hacerlo. Lo de follárselo en medio de la calle no estoy segura, pero lo de tirarse a un tío las dos a la vez, ya lo he vivido, en vivo y en directo. Más o menos como lo de esta mañana.

Al escuchar las carcajadas, mi hermano mira hacia nuestro grupo, me ve y viene hacia nosotros. Me da un beso en la mejilla.

—Hola, Dani. Buenas noches, chicas —les sonríe—. ¿Qué tal, Roberto? —le tiende la mano—. ¿Qué haces aquí? —se dirige a mí otra vez. Me aparta un poco del grupo para conseguir algo de privacidad. Mientras hablamos, he de contener la risa porque la jauría que hemos dejado, justo a la espalda de Fernando, está que se sale y sólo les falta meterle mano.

—Vengo a cenar —me pongo seria—. Igual que tú. Roberto ha reservado —le digo un poco a la defensiva porque sé que cree que este sitio es demasiado caro para mí.

—No hace falta que tengas aquí una de tus pataletas... —me doy la vuelta para irme, pero me coge del brazo—. Vale, perdona. No te pongas así —mira su reloj—. Tengo que dejarte. He de entrar, llego bastante tarde y este cabrón retorcido... —dice más para sí que para mí, pero he decidido que voy a picarle.

—¡Ah!, has quedado con el cabrón retorcido del que me has hablado, ¿cuál es el problema? ¿Te has encontrado con la horma de tu zapato? —cruzo los brazos.

—No te pases..., es complicado. Debo entrar —vuelve a mirar su reloj—, no me conviene cerrar este trato habiéndolo mosqueado.

Me da un beso en la mejilla y se aleja adentrándose en el local.

—Hasta luego, chicas —se despide de mis amigas obsequiándolas con su sonrisa de cerrar tratos, y no todos laborales. Qué cabrón, cómo sabe ganarse a la gente. Al fin y al cabo, forma parte de su trabajo.

Entramos en The Paris y lo encontramos repleto de gente. Todos vestidos con elegancia. Tenemos que esperar en la barra y allí nos tomamos unas copas mientras aguardamos mesa. Siempre he creído que lo de reservar implicaba no tener que esperar, pero esa regla aquí no cuenta. Cuando nos informan de que la mesa ya está preparada y nos acompañan a ella, yo llevo tres copas y media de vino. No me cuesta andar por esos pasillos estrechos, pero tampoco es coser y cantar. Roberto me da la mano.

Nos acomodan en una mesa pequeña, al fondo de la primera sala. Existe otra contigua mucho más exclusiva y tranquila donde debe cenar Fernando. No lo he visto desde que hemos entrado. Pedimos la comida y otra botella de vino. A la media hora no cantamos 'María, la portuguesa' porque no es sitio ni lugar, pero ganas no nos faltan. Cinco copas de vino después, necesito ir al baño. El lugar está un poco lejos, por eso llevo aguantando desde que nos sentamos, pero ya no puedo aplazarlo más, necesito ir, o esto va a parecer una comedia deplorable con un final muy poco digno. Me levanto y siento un poco de mareo. La jauría se ríe y Roberto se ofrece a acompañarme, pero le indico que no hace falta, sólo ha sido un traspiés.

—Estoy bien. No te preocupes. Necesito descargar —le digo agarrando sus hombros y pegando mi cara a su oreja, bajito y riéndome. Él me acaricia el hombro y posa su mano sobre mí.

De repente, siento un cosquilleo en el cuello junto a la nuca, baja hacia mi estómago y se instala allí. Es instantáneo. Miro hacia atrás y no veo a nadie observándome, pero tengo la sensación de que alguien está detrás.

Le doy un beso a Roberto en la mejilla y desaparezco de la sala. Me parece poco posible llegar a mi destino sin dar un tropezón o un batacazo haciendo el ridículo. Sería fácil montar un circo en esta pijada de restaurante, en realidad me divertiría un mogollón. Podría caerme a conciencia. Valdría la pena ver la cara de Fernando al advertir que su hermana ha perdido totalmente los papeles en un sitio donde deben conocerlo muy bien.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Trilogía completa Un gin-tonic, por favor»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Trilogía completa Un gin-tonic, por favor» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Trilogía completa Un gin-tonic, por favor»

Обсуждение, отзывы о книге «Trilogía completa Un gin-tonic, por favor» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x