Esteban Hinojosa Rebolledo - De día gaviotas, de noche flores blancas

Здесь есть возможность читать онлайн «Esteban Hinojosa Rebolledo - De día gaviotas, de noche flores blancas» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

De día gaviotas, de noche flores blancas: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «De día gaviotas, de noche flores blancas»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Lázaro tiene un sueño al que le teme, pero un sueño al fin. Ha escuchado cientos de veces que los sueños deben perseguirse aunque sospecha que esta vez tendrá que ser valiente. Primero, sin embargo, habrá de preguntarse dónde se consigue la valentía. ¿Detrás de las burlas de sus compañeros que no comprenden que a él le guste coser vestidos para sus muñecos? ¿Bajo la sombra fresca de los pasillos de la escuela donde a Lázaro le está prohibido jugar al elástico con las niñas? ¿O en casa, dentro de la sonrisa mortificada de su mamá y de su papá, que lo miran como si algo estuviera saliendo mal todo el tiempo?
Por suerte, Lázaro vive en un pueblo en el que el horizonte está compuesto por el mar, un río y una espesa línea de manglares donde las gaviotas se convierten en flores blancas al atardecer. Creer en la magia no es difícil, y mucho menos cuando se tiene amigos como los que Lázaro descubrirá entre las honestidades y atrevimientos de un callejón.

De día gaviotas, de noche flores blancas — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «De día gaviotas, de noche flores blancas», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

El olor de aquel cuarto comenzó a ponerme de buenas. ¿Qué había allá que produjera ese aroma? Era como si la esencia de las cosas para hacer manualidades: cartulinas, pinturas, cintas, listones, adhesivos y telas estuviera mezclada con la sal del mar, que estaba allí cerquita: nomás acabándose la calle hacia el sur y luego el río hacia el este. Porque en mi pueblo hay las dos cosas: mar y río. Mis dos olores favoritos son el de las cosas para hacer manualidades y el del mar, especialmente el de mi pueblo, porque además de ser salado tiene enrollada la esencia del manglar de agua dulce, que de tan verde es casi agria. Cuando acaba el verano y las papelerías sacan mesas especiales al malecón para atender a los montones de gente que en esa época se reúnen para comparar libros, forros, mochilas, papeles, lápices y todo lo que haga falta para la escuela, yo me siento en el cielo.

Cuando puse el vaso sobre la mesa, luego de vaciarlo por cuarta vez, me pareció que todo a mi alrededor estaba más claro. Y mucho peor. O bueno, eso creí al principio. Frente a mí, tenía a un pájaro gigante, o a una persona disfrazada de pájaro. O…

—Un pájaro. —Las palabras salieron de mi boca sin que yo se lo ordenara.

—Un pájaro no, corazón. Una pájara, si acaso. Y qué rudo. Deberías agradecérmelo primero, antes de dártelas de ornitólogo —me contestó la cosa rara.

Seguía sin comprender. No sabía que los ornitólogos son los científicos que estudian las aves. Es cierto que el miedo es a veces tanto que se vuelve parte del cuerpo, de la respiración, de la voz, y uno, de pronto, se cree que es muy valiente. Es un instinto que sirve para sobrevivir, según leí no sé dónde. Salté fuera del banquito en el que estaba y me acerqué a la cosa rara que se mecía de un lado a otro de la barra de la cocina. Preparaba un sándwich. Cuando me oyó acercarme, se dio la vuelta:

—Qué curioso, chamaquito. Me llamo MiauMiau. Dale, sacia tu curiosidad —me dijo.

Y mi curiosidad fue grande. Le di varias vueltas. Todo en MiauMiau era extraño y espectacular. Su vestido, muy ajustado, le llegaba hasta las rodillas, pero los brazos se los cubría completos. La tela estaba salpicada de lentejuelas doradas. La peluca rubia casi tocaba el techo. ¿Era tan alta? No. Bajé la vista al suelo y descubrí unas botas rojas altísimas, de tacón delgadito. Parpadeó mientras la miraba. Sus pestañas parecían abanicos que soplaban sonrisas. En cambio, sus labios permanecieron apretados, como si le molestara lo que hacía.

—Estoy un poco desplumada. Es este calor. Y tú, que la haces correr a una. ¿Dije desplumada? ¡Ay, madre! Cómo la confundes a una tú, chamaco. Si yo soy felina, no ave —me dijo poniéndome el dedo índice en la punta de la nariz—. Y bueno, ya basta. Quédate quieto. ¿Qué te pasaba? ¿Por qué corrías como un loco?

—No sé. Tal vez estoy loco —le contesté.

—Te llamas Lázaro, ¿verdad? Sí, de eso no hay duda. Quiero decir, acerca de tu locura. Pero hasta para correr así los verdaderos locos toman sus precauciones.

MiauMiau comenzó a fingir que corría. Lanzaba alaridos en voz bajita, como si se ahogara en llanto. Extendió los brazos, que me parecieron enormes, como las alas de una guacamaya (es que para mí seguía siendo un pájaro), sacudió la cabeza como esas muñequitas de porcelana que se ponen en los autos y me dijo:

—Nada más romántico que correr y llorar como una loca. Uno siente la vida así. Pero sentir la vida no es querer matarte, hijo. Una de dos: o te vas a hacer tus berrinches a la cancha de fútbol, en la noche, cuando no hay nadie. O te paras en las esquinas, te limpias las lágrimas, te fijas en que no venga ningún auto, y luego sigues corriendo. ¿Qué te parece?

Primero me había asustado ver tremenda cosa enorme sacudirse como si le diera un ataque. Luego me dio risa. Estuve de acuerdo con su consejo. No me interesó preguntar cómo sabía mi nombre; mi pueblo es un lugar pequeño donde todos se conocen cuando quieren.

*

Конец ознакомительного фрагмента Текст предоставлен ООО ЛитРес Прочитайте - фото 6

Конец ознакомительного фрагмента.

Текст предоставлен ООО «ЛитРес».

Прочитайте эту книгу целиком, купив полную легальную версию на ЛитРес.

Безопасно оплатить книгу можно банковской картой Visa, MasterCard, Maestro, со счета мобильного телефона, с платежного терминала, в салоне МТС или Связной, через PayPal, WebMoney, Яндекс.Деньги, QIWI Кошелек, бонусными картами или другим удобным Вам способом.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «De día gaviotas, de noche flores blancas»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «De día gaviotas, de noche flores blancas» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «De día gaviotas, de noche flores blancas»

Обсуждение, отзывы о книге «De día gaviotas, de noche flores blancas» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x