Robert Sawyer - Vuelta atrás

Здесь есть возможность читать онлайн «Robert Sawyer - Vuelta atrás» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Город: Barcelona, Год выпуска: 2008, ISBN: 2008, Издательство: Ediciones B, Жанр: Фантастика и фэнтези, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Vuelta atrás: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Vuelta atrás»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

La doctora Sarah Halifax logró descifrar y contestar el primer mensaje enviado por extraterrestres. Al cabo de treinta y ocho años, cuando ella es ya casi nonagenaria, llega la respuesta. Sólo Sarah es capaz de descifrarla, si vive el tiempo suficiente… Sarah y su esposo Don son sometidos a un costoso tratamiento de rejuvenecimiento (vuelta atrás). Don recupera la fortaleza física de sus veinticinco años, pero Sarah…
Sawyer ofrece de nuevo una interesantísima exploración ética y moral, esta vez a escala humana y también cósmica, sobre la vida y el papel de la tecnología en el desarrollo futuro del ser humano.

Vuelta atrás — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Vuelta atrás», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

—Bueno, pues… sí. Sí, supongo que así es.

La doctora Petra Jones era una mujer negra, alta e impecablemente vestida de unos treinta años. Aunque con los empleados de Rejuvenex… a Don le pareció que nunca se podía estar seguro de la edad. Era sorprendentemente hermosa, de pómulos altos y ojos vivaces, y llevaba rastas, un estilo que había estado de moda y desfasado varias veces ya. Había ido a hacerles la revisión semanal, como parte de su circuito de visitas a clientes de Rejuvenex en diversas ciudades.

Petra se sentó en el salón de la casa de Betty Ann Drive y cruzó sus largas piernas. Frente a ella había una ventana, una de las dos situadas a cada lado de la chimenea. Fuera, la nieve se había fundido; llegaba la primavera. Miró a Sarah, luego a Don y luego otra vez a Sarah. Finalmente dijo:

—Algo ha salido mal.

—¿Qué quiere decir? —preguntó Don de inmediato.

Pero Sarah simplemente asintió y su voz sonó llena de tristeza.

—No estoy volviendo atrás, ¿verdad?

Él sintió que el corazón le daba un vuelco.

Petra negó con la cabeza y las perlas entretejidas en sus rastas tintinearon levemente.

—Lo siento muchísimo —dijo, en voz muy baja.

—Lo sabía —dijo Sarah—. Yo… en el fondo, lo sabía.

—¿Por qué no? —exigió Don—. ¿Por qué demonios no?

Petra se encogió levemente de hombros.

—Esa es la gran pregunta. Tenemos un equipo trabajando en ello ahora mismo y…

—¿No se puede arreglar? —preguntó él. «Por favor, Dios, di que se puede arreglar.»

—No lo sabemos —respondió Petra—. Nunca nos habíamos encontrado con un caso como éste.

Hizo una pausa, al parecer para recomponer las ideas.

—Conseguimos alargar sus telómeros, Sarah, pero por algún motivo las nuevas secuencias finales son ignoradas cuando sus cromosomas se reproducen. En vez de transcribir su ADN hasta el final, la enzima duplicadora se detiene en seco donde solían estar los brazos de sus cromosomas. —Hizo una pausa—. Algunos de los otros cambios bioquímicos que introdujimos están siendo rechazados también y, una vez más, no sabemos por qué.

Don se había puesto en pie.

—Esto son chorradas —dijo—. Nos dijeron que sabían lo que estaban haciendo.

Petra se acobardó, pero luego recuperó el aplomo. Tenía un leve acento; de Georgia, tal vez.

—Mire —dijo—. Soy médico, no relaciones públicas. Sabemos más sobre senectud y muerte celular programada que nadie. Pero hemos realizado menos de doscientos tratamientos de rejuvenecimiento multidécada en seres humanos. —Abrió un poco los brazos—. Esto sigue siendo territorio inexplorado.

Sarah se estaba mirando las manos hinchadas, manchadas, de piel transparente, dobladas en su regazo.

—Voy a seguir siendo vieja.

Era una afirmación, no una pregunta.

Petra cerró los ojos.

—Lo siento muchísimo, Sarah. —Luego animó un poco la voz, aunque a Don le pareció que fingía—. Pero parte de lo que hicimos ha sido beneficioso y nada parece haber sido perjudicial. ¿No me dijo la última vez que estuve aquí que su incomodidad física diaria había desaparecido parcialmente?

Sararí miró a Don y entornó los ojos, como si tratara de ver a alguien que estuviera muy, muy lejos. El se le acercó y se quedó de pie a su lado, colocando una mano sobre su huesudo hombro.

—Deben tener alguna idea acerca de cuál ha sido la causa de todo esto —le dijo Don bruscamente a Petra.

—Como decía, estamos trabajando en ello, pero…

—¿Qué?

—Bueno, es que usted tuvo cáncer de mama, señora Halifax…

Sarah entornó los ojos.

—Sí. ¿Y? Fue hace mucho tiempo.

—Cuando revisamos su historial médico, antes de comenzar nuestra aplicación, nos contó usted lo de su tratamiento. Un poco de quimioterapia. Radiación. Medicamentos. Una mastectomía.

—Sí.

—Bueno, uno de nuestros expertos opina que puede tener que ver con eso, aunque no con el tratamiento que dio resultado y que usted nos contó. Lo que quiere saber es si probaron ustedes algún tratamiento sin éxito.

—Santo cielo —dijo Sarah—. No recuerdo todos los detalles. Fue hace más de cuarenta años y he intentado olvidarlo.

—Naturalmente —dijo Petra con amabilidad—. Tal vez deberíamos hablar con los médicos que la atendieron.

—Nuestro médico de familia de entonces hace mucho tiempo que murió —dijo Don—. Y la oncóloga que trató a Sarah tenía sesenta años. Habrá muerto también.

Petra asintió.

—Y no creo que sus antiguos médicos pasaran los historiales a los nuevos.

—Cristo, ¿cómo vamos a saberlo? —dijo Don—. Cuando cambiamos de médico rellenamos los historiales y estoy seguro de que autorizamos la transferencia de nuestros datos, pero…

Petra volvió a asentir.

—Pero eso fue en la época en que los historiales médicos estaban en papel, ¿no? Quién sabe qué habrá sido de ellos después de todos estos años. A pesar de todo, nuestro investigador descubrió que aproximadamente por esa época (a principios de siglo, ¿verdad?), se aplicaron algunos tratamientos contra el cáncer con interferonas aquí, en Canadá, que no estaban aprobados por la FDA estadounidense; por eso no sabemos mucho sobre ellos. Hace tiempo que desaparecieron del mercado; aparecieron medicamentos mejores en dos mil diez. Pero estamos intentando encontrar un suministro en alguna parte, para realizar algunas pruebas. El opina que ese tratamiento podría ser la causa del fallo del nuestro, posiblemente porque eliminó de manera permanente algunos virus comensales cruciales.

—Jesús, tendrían que haberlo estudiado con más atención —dijo Don—. Podríamos demandarlos.

Petra se envaró y lo miró, retadora.

—¿Demandarnos por qué? ¿Por un tratamiento médico por el que no han pagado y que no tiene ningún efecto adverso?

—Don, por favor —dijo Sarah—. No quiero demandar a nadie. No-Guardó silencio, pero él supo lo que había estado a punto de decir: «No quiero desperdiciar el poco tiempo que me queda en un pleito.» Don le acarició el hombro.

—Muy bien —dijo—. Muy bien. Pero ¿no podemos intentarlo otra vez? Tal vez con otra ronda de tratamientos. Otro intento de vuelta atrás.

—Lo hemos intentado con muestras de tejido de su esposa—dijo Petra—. Pero no funciona.

El sintió que la bilis le subía por la garganta. Malditos… malditos fueran todos: Cody McGavin, por meter en sus vidas aquella idea demencial; la gente de Rejuvenex; los malditos alienígenas de Sigma Draconis II. Todos podían irse al infierno.

—Esto es ridículo —dijo Don, cabeceando. Apartó la mano del hombro de Sarah y luego, con ambas manos a la espalda, empezó a caminar por el estrecho saloncito, la habitación que había sido su hogar y el de su esposa, la habitación donde sus hijos habían aprendido a gatear, la habitación que contenía tanta historia, tantos recuerdos… recuerdos que Sarah y él habían compartido, década tras década, buenos y malos tiempos, alegrías y sinsabores.

Tomó aire, lo dejó escapar.

—Entonces quiero que detengan también para mí el proceso —dijo, dando brevemente la espalda a las dos mujeres.

—Cielos, no —dijo Sarah—. No hagas eso.

Él se dio media vuelta y se acercó a ellas.

—Es lo único que tiene sentido. Nunca quise esto, para empezar, y desde luego no lo quiero si tú no lo consigues también.

—Pero es una bendición —dijo Sarah—. Es todo lo que habíamos hablado: ver crecer a nuestros nietos, ver a sus hijos. No puedo… no consentiré que renuncies a eso.

Él negó con la cabeza.

—No. No lo quiero. Ya no. —Dejó de caminar y miró directamente a Petra—. Desháganlo.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Vuelta atrás»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Vuelta atrás» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Robert Sawyer - Factoring Humanity
Robert Sawyer
Robert Sawyer - Relativity
Robert Sawyer
Robert Sawyer - Mindscan
Robert Sawyer
libcat.ru: книга без обложки
Robert Sawyer
Robert Sawyer - Far-Seer
Robert Sawyer
Robert Sawyer - Origine dell'ibrido
Robert Sawyer
Robert Sawyer - Wonder
Robert Sawyer
Robert Sawyer - Recuerdos del futuro
Robert Sawyer
Robert Sawyer - Factor de Humanidad
Robert Sawyer
libcat.ru: книга без обложки
Robert Sawyer
Antonio Gargallo Gil - Ya no hay vuelta atrás
Antonio Gargallo Gil
Отзывы о книге «Vuelta atrás»

Обсуждение, отзывы о книге «Vuelta atrás» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x