Peter James - Una Muerte Sencilla

Здесь есть возможность читать онлайн «Peter James - Una Muerte Sencilla» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Una Muerte Sencilla: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Una Muerte Sencilla»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

A Michael Harrison pretenden gastarle una broma inolvidable en su despedida de soltero; algo que jamás pueda olvidar: enterrarlo vivo durante unas horas. Todo se complicará cuando sus amigos, que son los únicos que conocen el verdadero paradero de Michael, mueran esa misma noche en un accidente de tráfico. Abandonado a su suerte, el único enlace con el exterior será Davey, un chico retrasado mental que recogerá del lugar del accidente el watkie-tatkie con el que los amigos de Michael pretendían seguir en contacto con él. A la cabeza de las investigaciones sobre la desaparición se pondrá Roy Grace, un policía experto en desaparecidos. Paulatinamente, las pistas se irán entrelazando de forma confusa unas con otras: historias de amor y de celos, identidades falsas… Así pues, poco a poco, se va descubriendo que lo que, en principio, era una broma estúpida, puede que, en el fondo, tal vez, sea un plan tejido por oscuros motivos.
Peter James nos presenta en Una muerte sencilla a Roy Grace, un personaje brillante y atormentado, experto en resolver crímenes pero incapaz de enfrentarse a su propio pasado.

Una Muerte Sencilla — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Una Muerte Sencilla», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– ¿Uckfield? -dijo-. ¿Crowborough? ¿Ashdown Forest?

Miró inquisitivamente a los dos hombres. Ellos asintieron.

Harry Frame negó con la cabeza.

– No, no veo nada en esta zona, lo siento. Lo intentaré con otro mapa, de menor escala.

– Estamos bastantes seguros de que se trata de esta zona, Harry -dijo Roy Grace.

Frame negó con la cabeza rotundamente.

– No, el péndulo no me dice eso. Hay que ampliar la búsqueda.

Grace sentía que el escepticismo de Branson ardía como un volcán. Mirando el mapa nuevo, que mostraba todo el este y el oeste de Sussex, vio que el péndulo oscilaba formando un arco pequeño sobre Brighton.

– Está aquí -murmuró Frame.

– ¿En Brighton? Creo que no -respondió Grace.

Frame sacó un mapa a gran escala de las calles de Brighton y balanceó el péndulo por encima del mismo. Al cabo de unos momentos, comenzó a describir un pequeño círculo sobre Kemp Town.

– Sí -dijo-. Sí, está aquí.

Ahora Grace miró a Branson, como si compartiera sus pensamientos con él.

– Te equivocas, Harry -le dijo.

– No, creo que no, Roy. Vuestro hombre está aquí.

Grace negó con la cabeza.

– Acabamos de estar en Kemp Town. Hemos ido a hablar con su socio. ¿Estás seguro de que no es eso lo que ves?

Harry Frame cogió el brazalete de cobre.

– ¿Este brazalete es suyo? ¿De Michael Harrison?

– Sí.

– Entonces, está aquí. Mi péndulo no se equivoca nunca.

– ¿Puedes darnos una dirección? -preguntó Branson.

– No, una dirección no; hay demasiadas casas, pero es donde debéis mirar. Ahí es donde le encontraréis.

Capítulo 38

– Puto bicho raro -le dijo Branson a Grace mientras se alejaban con el coche de casa de Harry Frame.

Grace, absorto en sus pensamientos, estuvo un rato sin decir nada. Durante la última hora, por fin había dejado de llover, y algunos rayos de sol tardío atravesaban el tul de nubes grises que se había posado sobre el mar.

– Supongamos por un momento que tiene razón.

– Vamos a comer y a beber algo -dijo Branson-. Me muero de hambre; estoy a punto de desmayarme.

El reloj marcaba las 20.31.

– Buena idea.

Glenn llamó a su mujer desde el móvil. Grace escuchó la conversación de Branson. Parecía bastante encendida y su amigo acabó colgando a media llamada.

– Está cabreadísima.

Grace le ofreció una sonrisa comprensiva. No era tan tonto como para comentar la situación doméstica de otra persona sin conocerla.

Unos minutos después, en la barra de un pub situado en lo alto de un acantilado que se llamaba Badger's Rest, Grace sostenía un Glenfiddich largo con hielo y se fijó en que su compañero estaba apurando la pinta de cerveza, a pesar de que tenía que conducir.

– Entré en la policía -dijo Branson- para tener una profesión de la que mis hijos pudieran estar orgullosos. Mierda. Al menos cuando era guardaespaldas, tenía vida propia. Podía bañar a mi Sammy y acostarle y tenía tiempo para leerle un cuento antes de irme a trabajar. ¿Sabes lo que acaba de decirme Ari?

– ¿Qué? -dijo Grace, que miró los platos especiales de la pizarra.

– Me ha dicho que Sammy y Remi están llorando porque les había prometido que esta noche estaría en casa y les leería cuentos.

– Pues vete a casa -le dijo Grace con delicadeza, y lo decía en serio.

Branson se acabó la cerveza y pidió otra.

– No puedo, sabes que no puedo. No tengo un trabajo de nueve a cinco, joder. No puedo marcharme del despacho tranquilamente como un funcionario gilipollas y decir: «A la mierda, me voy temprano que mañana es sábado». Se lo debo a Ashley Harper y a Michael Harrison. ¿No?

– Debes aprender a distanciarte -le dijo Grace.

– ¿En serio? ¿Y cuánto exactamente me distancio?

Grace se acabó el whisky. Le gustó. Primero la sensación ardiente en la garganta, luego en el estómago. Levantó el vaso hacia el camarero, pidió otro doble, puso un billete de veinte libras en la barra y pidió cambio para la máquina de tabaco. Hacía varios días que no furriaba, pero esta noche, las ganas de fumarse un cigarrillo eran demasiado fuertes.

El paquete de Silk Cut cayó en la bandeja de la máquina. Rompió el celofán y le pidió cerillas al camarero. Luego, encendió un cigarrillo e inhaló el humo, agradecido, hasta los pulmones. El sabor era más que exquisito.

– Creía que lo habías dejado -dijo Branson.

– Y así es.

Le sirvieron la segunda cerveza y Glenn y él entrechocaron los vasos.

– Tú no tienes vida propia y yo estoy destruyendo la mía. Bienvenido a la profesión de policía. -Branson meneó la cabeza-. Tu amigo Harry Frame es un tipo extraño. ¡Menudo bicho raro!

– ¿Te acuerdas de Abigail Matthews?

– ¿Esa niña de hace un par de años? Tenía ocho años, ¿verdad?

– Sí.

– La secuestraron delante de la casa de sus padres. La encontraste dentro de una jaula en un hangar del aeropuerto de Gatwick.

– Nigerianos. La habían vendido a una red de explotación sexual infantil de Holanda.

– Fue un trabajo de investigación increíble. ¿No fue en parte por este caso por lo que te ascendieron tan deprisa?

– Sí. Salvo que nunca le he dicho a nadie la verdad de cómo la encontré. -Era el whisky quien hablaba ahora, y no Roy Grace-. Nunca se lo he dicho a nadie porque…

– ¿Por qué?

– No fue un trabajo de investigación increíble, Glenn, por eso. Fue Harry Frame quien la encontró, con su péndulo. ¿Vale?

Branson se quedó callado unos momentos.

– Y por eso crees en él.

– También ha acertado en otros casos, pero no voy proclamándolo a los cuatro vientos. A Alison Vosper y sus amigos mandamases no les gusta nada que no encaje en los procedimientos habituales. Si quieres hacer carrera en la policía, tienen que ver que juegas según las reglas. Tienen que verlo, ¿vale? En realidad, no tienes que jugar según las reglas, siempre que crean que sí lo haces. -Apuró el segundo whisky mucho más deprisa de lo que era su intención-. Pidamos el papeo.

Branson pidió langostinos rebozados. Grace escogió un plato cien por cien malo para la salud: lacón con dos huevos fritos y patatas fritas; luego, encendió otro cigarrillo y pidió otra ronda de bebidas.

– Bueno, ¿qué hacemos ahora, perro viejo?

Grace miró a Branson entrecerrando los ojos.

– Podríamos cogernos un pedo -dijo.

– Eso no va a ayudarnos a encontrar a Michael Harrison, precisamente, ¿verdad? ¿O se me escapa algo?

– No se te escapa nada, que yo sepa. Pero son las… -Grace miró su reloj-. Las nueve de un viernes por la noche. A menos que vayamos a Ashdown Forest con una pala y una linterna, no sé muy bien qué más podemos hacer.

– Tiene que haber algo que se nos escapa.

– Siempre hay algo, Glenn. Lo que muy poca gente entiende es la importancia tan grande que tiene el azar en nuestro trabajo.

– ¿La suerte, quieres decir?

– ¿Sabes ese viejo chiste del golfista?

– Cuéntamelo.

– Dice: «Qué raro, cuanto más practico, más suerte tengo».

Branson sonrió.

– Entonces, ¿quizá no hayamos practicado suficiente?

– Creo que hemos practicado suficiente. Mañana es el gran día. Si el señor Michael Harrison está gastando la madre de todas las bromas, mañana será el momento de la verdad.

– ¿Y si no es así?

– Entonces, recurriremos al plan B.

– ¿Cuál es?

– No tengo ni idea. -Grace lo miró entrecerrando los ojos por encima del vaso-. Yo sólo he salido a almorzar contigo. ¿Recuerdas?

Capítulo 39

Ashley, envuelta en su albornoz blanco, estaba repantigada en la cama viendo un episodio repetido de Sexo en Nueva York en el televisor de pantalla plana cuando sonó el teléfono. Se incorporó sobresaltada y casi derramó la copa de sauvignon blanc que tenía en las manos. El despertador marcaba las 23.18. Era tarde.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Una Muerte Sencilla»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Una Muerte Sencilla» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Una Muerte Sencilla»

Обсуждение, отзывы о книге «Una Muerte Sencilla» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x