Unknown - i c40a5069f5c85ef3

Здесь есть возможность читать онлайн «Unknown - i c40a5069f5c85ef3» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Старинная литература, на английском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

i c40a5069f5c85ef3: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «i c40a5069f5c85ef3»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

i c40a5069f5c85ef3 — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «i c40a5069f5c85ef3», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Lo extra˜no es que el apoyo de Hermione lo hizo sentir tan confundido como las dudas de Ron. Ahora forzado a aceptar que la varita de sauco era real, ella sosten´ıa que era un objeto diabólico, y que la forma en que Voldemort hab´ıa tomado posesión de ella era repelente, sin ninguna consideración.

“Tú nunca podr´ıas haber hecho eso, Harry” dec´ıa ella una y otra vez. “No podr´ıas haber roto la tumba de Dumbledore.”

Pero la idea del cuerpo de Dumbledore asustaba a Harry mucho menos que la posibilidad de que podr´ıa haber malinterpretado las intenciones de Dumbledore mientras estaba vivo. Sintió que todav´ıa andaba a tientas en la oscuridad; hab´ıa escogido su camino, pero segu´ıa mirando hacia atrás, preguntándose si hab´ıa le´ıdo mal los signos, si no deber´ıa haber tomado otro camino.

De tiempo en tiempo, la cólera contra Dumbledore se desataba en él otra vez, poderosa como las olas que se cierran de golpe contra la roca bajo la casita de campo, cólera por que Dumbledore no le hubiera explicado todo antes de morirse.

286

CAPÍTULO 25. LA CABA ˜

NA PROTECTORA

287

“Pero, ¿Está muerto?” dijo Ron, tres d´ıas después de que hubieran llegado a la casa de campo.

Harry estaba mirando fijamente hacia fuera, sobre la pared que separaba el jard´ın de la casa de campo de la roca, cuando Ron y Hermione lo encontraron; lamentaba que lo hubiesen hecho, no ten´ıa ningún deseo de participar en su discusión.

“S´ı, lo esta. Ron, por favor, no empieces otra vez!”

“Mira los hechos, Hermione” dijo Ron, hablando hacia Harry, que continuaba mirando fijamente al horizonte. “El ciervo plateado. La espada. El ojo que Harry vió en el espejo...”

“¡Harry admite que podr´ıa haber imaginado el ojo! ¿No, Harry?”

“Podr´ıa haberlo hecho” dijo Harry sin mirarla.

“Pero tu no piensas que lo hayas hecho, ¿verdad?” preguntó Ron.

“No, no lo creo” dijo Harry.

“Ah´ı lo tienes” dijo Ron rápidamente, antes de que Hermione pudiera terminar. “Si no fué Dumbledore, explica cómo sab´ıa Dobby que estábamos en el sótano, Hermione.”

“No puedo... pero ¿Puedes explicar cómo nos lo pudo enviar Dumbledore si está metido en una tumba en Hogwarts?”

“¡No se, podr´ıa haber sido su fantasma!”

“Dumbledore no volver´ıa como un fantasma” dijo Harry. Hab´ıa pocas cosas de las que estuviera seguro ahora sobre Dumbledore, pero de eso si lo estaba. “Él habr´ıa continuado.”

“¿A qué te refieres con ’continuado’ ?” preguntó Ron, pero antes de que Harry pudiese decir más, una voz detrás de él dijo, “¿Aggy?”

Fleur hab´ıa salido de la casa de campo, su largo cabello plateado volando en la brisa.

“ Árry, a Gripóok le gustag´ıa hablag contigo. Ézta en la habitación máz peque˜na, dijo que no queg´ıa ser escuchado pog casualidad.”

Su disgusto con que el duende la enviara a entregar mensajes era clara; se la ve´ıa irritable mientras caminaba de vuelta a la casa.

Griphook les estaba esperando, como Fleur hab´ıa dicho, en el más peque˜no de los tres cuartos de la casa, en el que Hermione y Luna dorm´ıan por la noche.

Hab´ıa echado las cortinas rojas de algodón contra el luminoso y nublado cielo, lo que le daba al cuarto un resplandor ardiente que contrastaba con el resto de la aireada y luminosa casa.

“He tomado mi decisión, Harry Potter” dijo el duende, que estaba sentado con las piernas cruzadas en una silla baja, golpeando los brazos con sus largos y delgados dedos.

“Aunque los duendes de Gringotts considerarán esto una traición, he decidido ayudarte...”

“¡Eso es genial!” dijo Harry, una oleada de alivio pasó a través de él. “Griphook, gracias, nosotros le estamos realmente...”

“...a cambio,” dijo el duende firmemente “de un pago.”

Ligeramente desconcertado, Harry vaciló.

“Cuánto quieres? Tengo oro.”

“Oro no” dijo Griphook. “Ya tengo oro.”

Sus ojos negros resplandecieron; no ten´ıa blanco en los ojos.

CAPÍTULO 25. LA CABA ˜

NA PROTECTORA

288

“Quiero la espada. La espada de Godric Gryffindor.”

El esp´ıritu de Harry se desplomó

“No puedes tener eso” dijo. “Lo siento.”

“Entonces” dijo el duende suavemente “tenemos un problema.”

“Podemos darte alguna otra cosa” dijo Ron con impaciencia “Apuesto a que Lestrange tiene montones de cosas, puedes coger tu parte una vez estemos en la cámara.”

Hab´ıa dicho lo incorrecto. Griphook se sonrojó furioso.

“¡No soy un ladrón, ni˜no! ¡No estoy tratando de conseguir tesoros a los que no tengo derecho!”

“La espada es nuestra...”

“No, no lo es” dijo el duende.

“Somos Gryffindor, y era de Godric Gryffindor...”

“Y antes de que fuese de Gryffindor, ¿de quién era?” reclamó el duende, sentándose derecho.

“De nadie” dijo Ron. “Fue hecha para él, ¿no?”

“¡No!” gritó el duende, erizándose de ira mientras apuntaba un largo dedo hacia Ron.

“¡La arrogancia de los magos otra vez! ¡Esa espada fue primero de Ragnuk, al que se la robó Godric Gryffindor! ¡Es un tesoro perdido, una pieza maestra del trabajo duende!

Pertenece a los duendes. ¡La espada es el precio a mis servicios, tómalo o déjalo!” Griphook les miraba fijamente.

Harry miró a los otros dos, y luego dijo “Necesitamos discutir esto, Griphook, si le parece bien. ¿Podr´ıa darnos unos minutos?”

El duende asintió, pareciendo enfadado.

Abajo, en el vac´ıo salón, Harry caminó hacia la chimenea con el ce˜no fruncido, tratando de pensar en qué hacer. Detrás de él, Ron dijo, “Está bromeando. No podemos darle esa espada.”

“¿Es verdad?” preguntó Harry a Hermione. “¿Gryffindor robó la espada?”

“No lo sé” dijo desesperanzadamente. “La historia de los magos a menudo evita lo que estos han hecho a otras razas mágicas, pero no hay ningún informe que conozca que diga que Gryffindor robó la espada.”

“Será una de esas historias de duendes” dijo Ron “sobre como los magos estamos siempre tratando de terminar sobre ellos. Supongo que deber´ıamos sentirnos felices de que no nos haya pedido una de nuestras varitas.”

“Los duendes tienen buenas razones para que no les gusten los magos, Ron.” dijo Hermione. “Han sido tratados brutalmente en el pasado.”

“Los duendes no son exactamente peque˜nos conejos mullidos, ¿no?” dijo Ron. “Han matado ha muchos de los nuestros. Han peleado sucio también.”

“Pero discutir con Griphook sobre que raza es la más misteriosa y violenta no va a ponerlo más deseoso de ayudarnos, ¿no?”

Hubo una pausa mientras intentaban pensar en una solución al problema. Harry miró afuera hacia la tumba de Dobby. Luna estaba colocando lavanda de mar en un CAPÍTULO 25. LA CABA ˜

NA PROTECTORA

289

tarro de mermelada al lado de la piedra principal.

“Muy bien” dijo Ron, y Harry se volvió para verlo,

“¿Qué?”

“Le decimos a Griphook que necesitamos la espada hasta que estemos dentro de la cámara y que luego podrá tenerla. Hay una falsa dentro, ¿no? Las cambiamos, y le damos la falsa.”

“¡Ron, notará la diferencia mejor que nosotros!” dijo Hermione. “¡Él fue el único que notó que hab´ıa habido un cambio!”

“Si, pero podr´ıamos escapar antes que se de cuenta...”

Se acobardó ante la mirada que le echó Hermione.

“Eso” dijo silenciosamente, “es despreciable. ¿Pedir su ayuda, y luego traicionarlo? ¿Y

tú te preguntas por qué a los duendes no les gustan los magos, Ron?”

Las orejas de Ron se pusieron rojas.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «i c40a5069f5c85ef3»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «i c40a5069f5c85ef3» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «i c40a5069f5c85ef3»

Обсуждение, отзывы о книге «i c40a5069f5c85ef3» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x