Carlos Fuentes - Los años con Laura Díaz

Здесь есть возможность читать онлайн «Carlos Fuentes - Los años con Laura Díaz» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Современная проза, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Los años con Laura Díaz: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Los años con Laura Díaz»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Un recorrido por la vida íntima de una mujer y sus pasiones, los obstáculos, prejuicios, dolores, amores y alegrías que la conducen a conquistar su libertad propia y su personalidad creativa. Una saga familiar, originada en Veracruz. Laura Díaz y otras figuras de la talla de Frida Kahlo y Diego Rivera comparten aspectos centrales de la historia cultural y política del país, y nos llevan a reflexionar sobre la historia, el arte, la sociedad y la idiosincrasia de los mexicanos. En esta novela, como nunca antes, Fuentes es fiel a su propósito de describirnos el cruce de caminos donde se dan cita la vida individual y la colectiva.

Los años con Laura Díaz — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Los años con Laura Díaz», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– España -rezaban a coro en las noches los padres y familiares de Raquel-, España, madre ingrata, expulsaste a tus hijos judíos que tanto te amábamos, pero no te guardamos rencor, tú eres nuestra madre muy amada y no queremos morirnos sin regresar un día a ti, España querida…

Raquel no se unía a la oración porque había tomado una decisión muy severa al año de inscribirse en los cursos de Friburgo. Se convirtió al catolicismo. Se lo explicó así a Jorge Maura:

– Me criticaron mucho. Hasta en mi casa me criticaron. Creían que me había hecho católica para evitar el estigma judío. Los nazis se organizaban para asaltar el poder. No cabía duda, en la Alemania de Weimar, quién iba a ganar en un país empobrecido y humillado. Los alemanes querían un hombre fuerte para un país débil. Les expliqué que yo no evitaba ningún estigma. Era todo lo contrario. Era un desafío. Era una manera de decirle al mundo, a mi familia, a los nazis: miren, todos somos semitas. Me hago católica por una diferencia fundamental con mis padres. Creo que el Me-

sías ya llegó. Se llama Jesucristo. Ellos lo siguen esperando y esta esperanza los ciega y los condena a la persecución, porque el que espera la llegada del Redentor es siempre un revolucionario, un factor de desorden y de violencia. En las barricadas como Trotski, en el pizarrón como Einstein, cámara en mano como Eisenstein, en la cátedra como nuestro maestro Husserl, el judío trastorna y transforma, inquieta, revoluciona… No puede evitarlo. Está en espera del Redentor. En cambio, si admites como yo, Jorge, que el Redentor ya vino al mundo, puedes cambiar el mundo en su nombre sin paralizarte ante la expectativa chiliástica, la esperanza del milenio que todo lo cambiará apenas ocurra.

– Hablas como si los herederos del mesianismo judío fuesen los progresistas modernos, incluyendo a los marxistas -exclamó Jorge.

– Es que lo son, ¿no te das cuenta? -dijo Raquel con premura- Y está bien. Son los que esperan el cambio milenario y entretanto su impaciencia los lleva, por una parte, a descubrir la relatividad, el cine o la fenomenología, pero por la otra parte los expone a cometer todos los crímenes en nombre de la promesa. Sin darse cuenta, son los verdugos del mismo futuro que tanto anhelan.

– Pero los peores enemigos de los judíos son estos nazis que se andan paseando vestidos de café y con sus esvásticas por todas las calles…

– Es que no puede haber dos pueblos elegidos. O son los judíos o son los alemanes.

– Pero los judíos no matan alemanes, Raquel.

– Ésa es la diferencia. El mesianismo hebreo se sublima creativamente en el arte, la ciencia, la filosofía. Se vuelve un mesianismo creativo porque de otra manera es inerme. Los nazis no tienen ningún talento creativo. Su genio es sólo uno: la muerte, son los genios de la muerte. Pero teme el día en que Israel decida armarse y pierda su genio creativo en nombre del éxito militar.

– Quizás los nazis no les dejen, como pueblo, otra salida. Quizás los judíos se cansen de ser las eternas víctimas de la historia. Los borregos.

– Ruego que no se conviertan nunca, a su vez, en verdugos de nadie. Que los judíos no tengan sus judíos.

– La iglesia católica no se quedaba atrás en cuanto crímenes, Raquelita. Recuerda que soy español, y tú, en cierto modo, también.

– Prefiero el cinismo de la iglesia católica al fariseísmo de la iglesia comunista. Los católicos juzgamos…

– Bravo por el plural obsesivo. Te beso, mi amor…

– No seas payaso, Jorge. Te digo que nosotros juzgamos los crímenes de la iglesia porque traicionan una promesa ya cumplida, que es una obligación: imitar a Cristo. Los comunistas en cambio no pueden juzgar los crímenes de su iglesia porque sienten que traicionan una promesa que está en el futuro. Que aún no encarna.

– ¿Entrarías entonces a una orden religiosa? ¿Voy a tener que convertirme en un Donjuán para seducirte en el convento?

– Oh, no bromees. Quietas las manos, Donjuán.

– No, si no hablo en broma. Si te entiendo bien, esa pureza cristiana implica una obediencia a la lección de Jesús que sólo se puede cumplir enclaustrándose en un convento. Get thee to a nun-nery, Rachel!

– No. Se debe cumplir en el mundo. Además, ¿cómo me voy a hacer monja después de conocerte a ti?

Habían seguido juntos los cursos de Husserl con una devoción casi sagrada. Estudiaban con el maestro, pero sin darse cuenta, porque Husserl encauzaba las cosas con discreción, con independencia de él, con estudiantes motivados por él pero libres gracias a las alas que él les regalaba.

– A ver, George, ¿qué quiere decir el maestro cuando habla de «sicología regional»?

– Creo que se refiere a la manera de ser concreta de las emociones, de los actos, del conocimiento. Lo que él nos pide es suspender nuestra opinión mientras no veamos todas esas evidencias como fenómenos originales, como él dice, «en carne y hueso»… Primero los ojos bien abiertos para mirar lo que nos rodea en nuestra «región», allí donde realmente estamos. Después, la filosofía.

Caminaban mucho de noche por la vieja ciudad universitaria a las puertas de la Selva Negra, explorando los costados de la catedral gótica, perdiéndose en los pasajes medievales, cruzando los puentes del Dreisam apresurado por unirse al Rin.

Friburgo era como una antigua reina de piedra con los pies en el agua y una corona de pinos y la pareja de estudiantes la recorría elaborando y reelaborando las lecciones del día, admirados él y ella -tomados del brazo primero, ahora de las manos- de que el propio maestro estuviese elaborando él mismo, nervioso y noble, con su altísima frente aclarando el ceño preocupado y las cejas ame-

nazantes, su recta nariz olfateando ideas y sus grandes barba y bigote cubriendo unos labios largos, tan largos como los de un animal filosófico, un mutante que saliese del agua nutritiva de la primera creación a una tierra ignorada, empeñado en dar voz a más ideas de las que caben en un discurso. Las palabras de Husserl no alcanzaban a la rapidez de su pensamiento.

Todos lo llamaban «el maestro». Desnudo ante los ojos de sus alumnos, les proponía una filosofía sin dogmas, sin conclusiones, abierta en cada momento a la rectificación y a la crítica del profesor y de sus alumnos. Todos sabían que el Husserl de Friburgo no era el de Halle, cuando inventó la fenomenología a partir de una simple propuesta: primero se acepta la experiencia, luego se piensa. No era ya el Husserl de Gotinga, centrado en la atención a lo que aún no es interpretado porque en ello puede residir el misterio de las cosas. Era el Husserl de Friburgo, el maestro de Jorge y Raquel, para quien la libertad moral del ser humano dependía de una sola cosa: reivindicar la vida contra todo lo que la amenaza. Era el Husserl que había visto desplomarse la cultura europea en la Primera Guerra Mundial.

– No entiendo, George. Nos pide reducir los fenómenos a la conciencia pura, a una especie de sótano más abajo del cual ya no hay nada reducible. ¿No podemos excavar debajo, ir más hondo?

– Bueno, creo que en ese sótano como tú lo llamas están la naturaleza, el cuerpo y la mente. Ya es mucho. ¿E doppo? ¿Adonde nos quiere llevar el viejo?

Como si leyese los pensamientos de sus alumnos gracias a sus ojos de águila, tan salvajemente contrastados con su tieso cuello de paloma, su plastrón, su chaleco cruzado por una leontina, su anticuada levita negra, sus pantalones con tendencia a colgarse sobre los botines negros, Husserl les dijo que después de la Gran Guerra, el mundo espiritual europeo se había desplomado y si él predicaba una reducción del pensamiento a las bases mismas de la mente y la naturaleza, era sólo para renovar mejor la vida de Europa, su historia, su sociedad y su lenguaje.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Los años con Laura Díaz»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Los años con Laura Díaz» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Carlos Fuentes - Chac Mool
Carlos Fuentes
Carlos Fuentes - En Esto Creo
Carlos Fuentes
Carlos Fuentes - Vlad
Carlos Fuentes
Carlos Fuentes - Hydra Head
Carlos Fuentes
Carlos Fuentes - Christopher Unborn
Carlos Fuentes
Carlos Fuentes - Instynkt pięknej Inez
Carlos Fuentes
Carlos Fuentes - La cabeza de la hidra
Carlos Fuentes
Carlos Fuentes - La Frontera De Cristal
Carlos Fuentes
Отзывы о книге «Los años con Laura Díaz»

Обсуждение, отзывы о книге «Los años con Laura Díaz» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x