Julia Navarro - Dime quién soy

Здесь есть возможность читать онлайн «Julia Navarro - Dime quién soy» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Современная проза, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Dime quién soy: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Dime quién soy»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

La esperada nueva novela de Julia Navarro es el magnífico retrato de quienes vivieron intensa y apasionadamente un siglo turbulento. Ideología y compromiso en estado puro, amores y desamores desgarrados, aventura e historia de un siglo hecho pedazos.
Una periodista recibe una propuesta para investigar la azarosa vida de su bisabuela, una mujer de la que sólo se sabe que huyó de España abandonando a su marido y a su hijo poco antes de que estallara la Guerra Civil. Para rescatarla del olvido deberá reconstruir su historia desde los cimientos, siguiendo los pasos de su biografía y encajando, una a una, todas las piezas del inmenso y extraordinario puzzle de su existencia.

Dime quién soy — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Dime quién soy», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– ¿Y cómo es que lo conocéis, querida?

– Cuando regresamos a Berlín nos lo presentó un amigo, aún no había Muro… y una noche le trajo a cenar. Fue muy amable, y no me pareció un revolucionario peligroso. Pero de eso hace más de quince años.

– ¿Y quién era ese amigo que os lo presentó?

– Alguien que desgraciadamente ha muerto. Pero en todo caso vivía en Berlín Occidental. Hace unos años las cosas eran diferentes, los berlineses no estaban separados por ningún muro y la gente iba de un sector a otro… no era tan importante cómo pensara cada uno. Entonces los alemanes de este lado no se habían vuelto todos comunistas.

– Pues el profesor Konrad es ahora el hombre más buscado de Berlín…

– Lo encontrarán, seguro que lo encontrarán. -Amelia hizo esta afirmación con rotundidad.

– Bien, me alegro de que Friedrich no tenga nada que ver con los alborotadores. Ahora debo marcharme, la cena exquisita, como siempre, querida Amelia.

– Gracias, Iván.

– Cuidaos, mis queridos amigos, cuidaos.

Hasta que Iván Vasiliev no se marchó, no respiré tranquilo. Mi padre parecía desconcertado.

– ¡Qué raro! No sé, tengo la impresión de que Iván quería decirnos algo… Espero, Friedrich, que no tengas nada que ver con esos activistas de la universidad…

– No te preocupes, papá.

– Y tú, Amelia… no te comprendo. ¿Por qué le has dicho que conocemos a Konrad? Hace años que no lo vemos.

– Porque él ya lo sabe, o si no lo sabe, lo sabrá. Es mejor que vea que no tenemos nada que ocultar. Deben de estar investigando a todos los que conocen a Konrad y en algún momento alguien puede acordarse de que nosotros también lo conocimos.

Como todas las noches ayudé a Amelia a acostar a mi padre y luego me ofrecí para fregar los platos.

– ¿Qué ha pasado? -le pregunté cuando estuvimos solos en la cocina.

– Nada, sólo que has de tener cuidado.

– Ha dicho que han matado a Magda… aunque se ha referido a un informador… se trataba de ella, estoy seguro.

– Eso no nos concierne.

– Con un arma pequeña, de mujer… es lo que ha dicho.

– De eso ni tú ni yo sabemos nada y yo no tengo ningún interés en saberlo.

– Subiste a casa de Magda…

– No.

– Pero te vi entrar en el portal disfrazada de esa manera y tardaste en salir…

– Estuve vigilando, quería saber si salía de la casa alguien a quien no hubiéramos visto. Me marché porque no vi a nadie sospechoso.

– ¿No subiste a su piso?

– No, claro que no, ¡qué tontería! -me mintió.

– ¿Y adonde fuiste después…?

– A buscar a unos amigos que pudieran avisar a Konrad.

– Lo conseguiste.

– Parece ser que sí. Lo están buscando y aún no lo han encontrado.

Aquella noche tampoco dormí. No supe hasta unos días después que Konrad estaba en nuestro sótano. Y pasaron años hasta que Amelia me contó lo sucedido aquella tarde.

3

Durante unos días ni Max ni Amelia me permitieron ir a la universidad. Aunque me animaban a que hablara con mis amigos por teléfono para decirles que mi padre no quería que fuera. Todos sabíamos que los teléfonos estaban intervenidos, así que nadie decía una palabra de más, sólo preguntaban cuándo iría.

Una noche, cuando mi padre estaba durmiendo y yo tenía la luz del cuarto apagada, oí un ruido en la cocina. Me levanté pensando que sería Amelia quien se habría levantado a por un vaso de agua. Estaba en la despensa levantando la trampilla.

– ¿Dónde vas?

– Vuelve a la cama.

– Dime dónde vas -insistí.

– No te metas en esto. Vete a la cama.

– Por favor… confía en mí.

– Está bien, ven conmigo.

La seguí a través de la trampilla hasta el sótano. Luego descubrió el hueco y lo iluminó con la pequeña linterna. Allí estaba Konrad. Amelia colocó la escalera y bajamos los dos. Le abrace con alivio.

– ¡Estabas aquí!

– Sí, aquí estoy, convirtiéndome en un topo, creo que de estar a oscuras me voy a quedar ciego.

– He venido a decirte que mañana intentaremos pasar al otro lado. Garin nos ayudará. Albert ha estudiado los planos. Si todo es como asegura, estamos a unos cinco o seis kilómetros del otro lado, mejor dicho, de una salida de alcantarilla del Berlín Occidental. Allí te estará esperando.

– Si alguien ve entrar a Garin en esta casa… -Konrad estaba preocupado.

– Trabajamos juntos, no es tan extraño que pueda venir a cenar. Intentaremos que nadie le vea entrar. Habrá gente vigilando. En realidad llevan días haciéndolo para saber si la policía o la Stasi nos siguen los pasos. No han visto nada sospechoso. Parece que no estamos entre sus prioridades.

– Puede que te salve ser amiga de ese coronel de la KGB.

– No lo sé, en todo caso lo intentaremos mañana. Ahora come esto que te he traído y descansa.

Cuando regresamos a la cocina yo estaba alterado.

– De manera que tienes a Konrad ahí escondido y no me habías dicho nada.

– ¡Cállate, Friedrich! Esto no es un juego. Tú y tus amigos os habéis metido en un problema muy serio. Ya sabes que a algunos los han enviado a campos de trabajo. ¿Crees que no han hablado? Claro que lo han hecho, y habrán dado nombres, el tuyo entre otros. Por eso vino aquella noche Iván Vasiliev. Es él quien te ha salvado. Pensó que tu participación no era importante, que eras uno más del grupo de estudiantes rebeldes. Pero nos dio un aviso. No habrá más chiquilladas por tu parte.

– Tampoco han detenido a Use, y ella era la amiga de Magda.

– ¿Cómo iban a detener a la sobrina de un miembro del Comité Central? Además, Ilse no sabía nada, os había conocido el día anterior cuando Konrad os la presentó junto a Magda.

– ¿Su tío es miembro del Comité Central?

– Sí, ¿no lo sabías? Por esta vez os habéis librado los dos, pero no podéis volver a tentar a la suerte. Creen que Ilse se asustó en el último momento y decidió no ir a esa reunión. Es lo que ha mantenido su tío. Además, en los informes de Magda no había nada contra Ilse. Magda la utilizó como gancho para acercarse a Konrad. La KVP infiltró a Magda sabiendo la debilidad de Konrad por las mujeres guapas, pero no se interesó por ella, sino que parecía tener fijación por Use, de manera que Magda se hizo amiga de Use. La sondeaba para saber qué pensaba, pero Ilse no parecía muy preocupada por las cosas de la política, a su familia les va bien, son parte de la Nomenklatura. Pero Magda insistió tanto, que se dejó convencer para acercarse a Konrad. Él no desconfió de ellas, Magda fue muy convincente respecto a su rechazo al régimen, de manera que bajó la guardia y cometió un gran error invitándolas a participar en esa reunión en la imprenta donde se iba a reunir la plana mayor del comité de dirección de la oposición en la universidad y de los círculos intelectuales.

– ¿Y cómo sabes todo esto?

– Por un amigo.

– ¿Mi padre sabe algo?

– Tu padre no sabe nada ¿Es que quieres darle un disgusto? No, no le digas nada.

– ¿Han interrogado a Use?

– Le han dado un aviso, nada más.

– Mañana os ayudaré a buscar la salida de las cloacas.

– No, es mejor que te quedes en casa. Si tu padre se despertar a o alguien viniera…

– ¿Por qué nos traicionó Magda?

– No os traicionó, estaba haciendo su trabajo. Era una agente de la KVP. Llevaba dos años en la universidad intentando introducirse en los círculos de oposición. No tenía prisa, quería coger a la plana mayor de la organización, y a fe que estuvo a punto de conseguirlo. Si Konrad no hubiera actuado con tanta ligereza… pero siempre le han perdido las mujeres guapas como Use.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Dime quién soy»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Dime quién soy» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Dime quién soy»

Обсуждение, отзывы о книге «Dime quién soy» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x