ETERNO AMANECER
La muerte es solo el comienzo
Javf MzEnriquez
ETERNO AMANECER
La muerte es solo el comienzo
© 2020, Javf MzEnriquez
©Primera edición 2020 Portable Publishing Group LLC, 30 N Gould St, Ste R,
Sheridan, WY 82801, Estados Unidos de América.
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ISBN: 978-1-953540-33-1
Impreso en México – Printed in Mexico
ÍNDICE
DULCE PLACER DULCE PLACER El frío llegó como una suave y delicada caricia, provocando el más placentero de los éxtasis. Mis ojos se abrieron dilatados por aquel placer frío y excitante que golpeaba una y otra vez dentro de mí, quemando y destruyendo cada célula, cada tejido. Aquel profundo dolor ardía con un fuego intenso que me sumergía en el más profundo de los abismos. De pronto se extinguió lentamente hasta desaparecer. Entonces me di cuenta de que ya no había nada dentro de mí, estaba completamente vacío, con el deseo infinito de sangre; y la vida, la vida se había ido.
ETERNO AMANECER
I SUCESOS EXTRAÑOS
II YA NO TE AMO
III PRIMER ENCUENTRO
IV PESADILLAS
V EL ÚLTIMO ATARDECER
VI DESPERTAR
VII EL RECHAZO
VIII NUEVO AMIGO
IX LA PRIMERA CAZA
X HOMICIDIO
XI LA DECISIÓN
XII EL ÚLTIMO ADIÓS
XIII EL TRANCE
XIV EL NUEVO COMIENZO
El frío llegó como una suave y delicada caricia, provocando el más placentero de los éxtasis. Mis ojos se abrieron dilatados por aquel placer frío y excitante que golpeaba una y otra vez dentro de mí, quemando y destruyendo cada célula, cada tejido. Aquel profundo dolor ardía con un fuego intenso que me sumergía en el más profundo de los abismos. De pronto se extinguió lentamente hasta desaparecer. Entonces me di cuenta de que ya no había nada dentro de mí, estaba completamente vacío, con el deseo infinito de sangre; y la vida, la vida se había ido.
A mis diecisiete años, a dos meses de cumplir la mayoría de edad, no me había detenido a pensar cómo iba a morir. Tenía muchos planes en mente para el futuro: terminar una carrera, viajar por todo el mundo, y mil cosas más; pero jamás me pregunté cómo iba a terminar mi vida, qué iba a provocar mi muerte. Una enfermedad, un accidente, un asesinato, etcétera. Jamás me lo había preguntado. Y ¿para qué? ¿Qué razón habría? No tendría ningún caso. Pero a veces la muerte anda tan cerca —acechando a su próxima víctima, como un cazador a su presa— que, cuando menos te lo esperas, cae sobre ti.
Sin que puedas defenderte, te deja inmóvil, roba tu último aliento; cierra tus ojos bajo una inmensa tranquilidad, relaja cada músculo, y no sabes que jamás volverás a ver la luz; que jamás volverás a ver a tu familia y a tus amigos, que no verás nuevamente brillar el sol o una noche forrada de estrellas. Pasarás a ser un dulce y tierno recuerdo en la mente de todos aquellos que te amaron. Volverás al polvo de donde un día naciste, te convertirás en nada.
Quizá en la más terrorífica de mis pesadillas había tenido algún encuentro cercano con la muerte. Quizá ahí había muerto de alguna forma extraña, pero no como iba a pasar en realidad, no como esa noche.
Vivir en un mundo de grandes avances tecnológicos aplicado hasta en la más simple de las actividades, en un mundo gobernado por el poder, un mundo que se autodestruye cada día, sin importarnos las consecuencias. Esto es fácil de entender porque es real y vives en él, pero vivir en un mundo oculto en la oscuridad, sumergido en una noche eterna, cuya existencia es imaginable mas no real, cuya adaptación y forma de vida son inhumanas, un mundo oculto en la historia, seres inmortales…
Pero sin un día descubres que ese mundo oculto ha existido desde siempre entrelazado con el mundo real, que esos seres inmortales si son reales y no una absurda teoría como la supuesta existencia de extraterrestres o vida en otro planeta. Si tuvieras que elegir entre ambos mundos, si tuvieras esa oportunidad, ¿Cuál elegirías tú? Pero si te arrebataran esa opción, esa única oportunidad y alguien más la eligiera por ti… ¿Cuál sería tu reacción?
ETERNO AMANECER
—“Perote, Veracruz. Pueblo situado a una altura de 2.400 metros sobre el nivel del mar, ubicado en las coordenadas 19° 34´´ latitud norte y 97° 15´´ longitud oeste. Su clima es frío-seco-regular, con temperatura media anual de 12 °C, con una precipitación anual de 493.6 mm.” Esta información está muy confusa. Latitud, longitud, grados, milímetros; no entiendo. No soy climatólogo.
—Deja de quejarte y continúa leyendo.
—“La vegetación predominante es de tipo aciculifolio y crasirosulifolio; compuesta por pinos, oyameles, encinos y sabinos. Hay exceso de tabaquillo. El llano está cubierto frecuentemente de pastos, magueyes, matorrales con izote, matorrales espinosos, etcétera. Su fauna…”
—¡Oh! Ahí viene lo interesante.
—“Su fauna, al igual que en todas las tierras frías y de elevadas alturas, aguarda a notables especies silvestres, como armadillos, ardillas, conejos, coyotes, gatos monteses y lobos.”
—¡Oh! Nada apetecible. Aquí moriré de sed.
—Creo que estaremos poco tiempo, después de todo.
—¡Oh, chicos! Conozcamos el lugar. Además por aquí cerca podremos encontrar algo más.
—Creo que hemos llegado, o al menos eso indica ese letrero: “Perote, Veracruz. Población: 61.272 habitantes”.
Estaba profundamente dormido, metido en el extraño sueño, cuando oí:
—Alexei, despierta. Ya es tarde.
Y el extraño sueño desapareció como nube de polvo cuando sopla el viento. Abrí los ojos y miré el reloj que estaba puesto sobre el buró, a un lado de la cama, nueve de la mañana.
—¡Rayos! Me quedé dormido —refunfuñé.
Es que el extraño sueño había ocupado gran parte de la mañana. Miré a través de la ventana los débiles rayos del sol que apenas se podían ver. El ambiente se sentía tenso y triste.
“Creo que regresan los días nublados”, pensé, y me dirigí al baño para lavarme la cara.
Mientras esperaba a que saliera el agua caliente, miré mi rostro en el espejo. De pronto, algo captó mi atención. El que se reflejaba en él no era yo, o al menos no al cien por ciento. Había algo diferente en mí. Mis ojos eran de otro color, la textura de mi piel se veía diferente; un ser atractivo y encantador. Digo, no soy un modelo de revista, pero tampoco estoy tan mal. De repente, vino a mi mente el extraño sueño que había tenido esa noche. Un sueño verdaderamente extraño. No soy supersticioso, pero mamá siempre hablaba del significado de los sueños. Nunca he creído en eso, simplemente pensé qué significaba todo esto, quiénes eran esas personas.
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