Laia Andía Adroher - Solo tengo un plan A

Здесь есть возможность читать онлайн «Laia Andía Adroher - Solo tengo un plan A» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Solo tengo un plan A: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Solo tengo un plan A»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Regreso a casa después de seis años sin aparecer por el pueblo y estoy un poco asustada. He mantenido contacto con todos mis amigos, pero hace años que no sé nada de él y eso me aterra. Él, mi príncipe azul, mi hombre perfecto, mi futuro, mi todo… la distancia pudo con nosotros y no sé lo que me voy a encontrar. Claro que, si hubiese algún cambio, me lo habrían dicho, ¿no? A ver si me voy a topar con una sorpresa…No una, varias al parecer. No todo sigue igual, él me ha dejado en shock y no sé qué significa todo esto, hay un nuevo hotel en el pueblo y el dueño parece… bueno de esos que te dejan sin palabras pero que de su arrogancia los tirarías por el balcón, y mi mejor amigo está un poco extraño. Además, mi mejor amiga tiene novio y eso ya de por sí, conlleva muchos cambios.Creía que mi historia de amor tenía dueño, que mi final estaba escrito, estaba convencida de que las cosas sucederían como yo pensaba, pero ahora, al volver a casa, todo se tambalea y no sé qué decisión tomar.

Solo tengo un plan A — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Solo tengo un plan A», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Antes de regresar hemos podido darnos un gran baño en mitad de la nada. Aquí donde parece que nada importa. Donde las responsabilidades dejan de existir y parece que el mundo es mucho más sencillo que en la orilla. Aquí, tumbada en medio del mar, mirando el cielo cual estrella de mar, me siento feliz, o, al menos, finjo serlo. Es como si las preocupaciones desaparecieran, no hay ruido, no hay ajetreo, no hay nadie más que tú y el mar. Debo admitir que, después de eso, vuelvo completamente renovada. Creo que lo pondré en mi lista de planes para cuando necesite relajarme, lástima que ni mi hermano ni yo tengamos carnet para manejar el barco.

Una vez en casa, aprovecho para mi ritual de potingues, sacar toda la sal de mi cuerpo y evitar que me queden marcas de bronceado innecesarias. Sí, siento deciros que debo cuidar todos los detalles de mi piel o mi rostro, puesto que vivo de ello, así que no me queda otra que tomarme mi tiempo en estar siempre presentable.

—No he querido decirte nada estos días, pero sabes de sobra que debemos hablar, ¿verdad? —Aparece mi hermano por la puerta.

—Lo sé, y créeme que cuando esté preparada vendré a buscarte. De momento, solo me estoy haciendo a la idea.

—No lo juzgues, yo siempre he querido mantenerme al margen de los dos, pero no os hagáis más daño, cerrad el capítulo de la mejor manera posible. —Se acerca a darme un beso mientras le digo que si con la cara.

Nos entendemos con estos pequeños mensajes. Y tiene razón, siempre se ha mantenido al margen. No quiero que por mi culpa pierdan lo que tienen; y él, me imagino que mientras yo no sufra más de lo permitido, tampoco quiere quedarse sin amigo. Siempre hemos evitado conversaciones sobre nuestra relación, pero también entiendo que con el bombazo que ha sido lo de la boda, es momento de, al menos, tener a alguien que nos conozca tan bien a los dos. Con la mirada le he dicho que tendremos esa conversación más pronto que tarde, pero todavía no. Todavía estoy intentando entenderlo todo, convencerme de las cosas y averiguar cómo podré afrontarlo.

Después de ponerme un pelín más mona de lo que me han visto por aquí, porque si algo no voy a perder es mi faceta coqueta —a una le gusta lucirse para salir—, he venido a tomar algo al pub mientras debato si ir o no a la fiesta. No es algo que me apetezca especialmente, pero solo por mi estado de ánimo, porque sí que tengo ganas de estar con los míos un rato. De todas maneras, prefiero pasar antes por el pub, tomarme una cerveza tranquila y acabar de decidirme. Sé lo que estáis pensando, o no, pero en mi mente solo tengo una imagen, la de Álvaro y Teresa juntos, ya que me dijeron que a estas fiestas acude todo el pueblo y dudo que la señorita sea capaz de perderse una de ellas. Y para esa imagen no estoy mentalizada. No sé si lo estaré alguna vez, pero no por el momento.

—Sabía que te encontraría aquí. —Alejo se sienta a mi lado en la barra—. ¿Así pensabas tú escaquearte de la fiesta? —Me echa un vistazo de arriba abajo.

—¿Voy demasiado? —Tampoco me he arreglado tanto, a mi parecer; aunque sí, si consideramos el estilo que se lleva por aquí.

Su sonrisa me transmite muchas cosas, pero no sé si conozco todo lo que me está provocando. Él ha sido bastante fiel a su estilo, pero sí que lleva una camisa negra que le va que ni pintada. Supongo que estoy en el proceso de intentar fijarme más en todos los tíos que me rodean, o que se ha puesto más en forma durante este periodo que no nos hemos visto, pero Alejo está como un tren, y por mirar y contemplarlo que no sea.

—Tú siempre estás perfecta, ¿has pensado en mi propuesta? —Ya está poniendo su cara de seductor, y a mí, sorprendentemente, se me revuelven las tripas, o quiero pensar que son las tripas.

—¿Quieres que nos acostemos ahora? —Tengo que admitir que la cerveza me ayuda a destensarme.

—Cuando quieras —me sonríe—, pero me refiero a entrar como mi pareja.

—¿Qué me escondes? —Tanto interés tiene que ser por algo.

—Pues… me tiré a Rut hace dos semanas y no ha parado de agobiarme... hasta que le dije que estaba contigo. No se lo creyó hasta que Samu y Gorka se lo confirmaron. Tu visita solo ha hecho que sospeche que es verdad, debo agradecerte que aparecieses en el momento indicado, y como sabe que estás por aquí, hoy viene con la intención de comprobarlo.

—No vas a tener remedio nunca. Una cerveza, y seré la mejor novia del mundo.

Para eso están los amigos, ¿no? Para echarnos una mano en los peores momentos. Y si Alejo no ha querido ni repetir con Rut, tiene que ser uno de los malos. Rut no es del pueblo, pero ha pasado mucho tiempo por aquí, íbamos al mismo instituto, por lo que la tenemos vista. Es realmente guapa y está de muy buen ver, al menos como yo la recuerdo, y los tenía a todos locos. Sí, hasta a mi Álvaro; así que si solo fue un polvo rápido, o es de las malas en la cama o les falta química, porque si no, Alejo repetiría encantado. Sea como sea, no me importa que se me use como tapadera. Al fin y al cabo, Álvaro ha rehecho su vida y yo debería hacer lo mismo.

Una cerveza después, me siento ya achispada. Tengo que admitir que la cerveza suele afectarme más que mis grandes cocteles. Además, que no haya comido nada para cenar tampoco ayuda. Tengo el estómago cerrado y eso no es ninguna buena señal. Suerte tengo de que, al menos, al lado de Alejo me siento mucho más segura que si fuese sola. Llegamos y como bien mencionó él, cogemos una pegatina naranja. Representamos una pareja, sí, pero hay que ser precavidos, si aparece alguien que valga mucho la pena, todos sabemos qué sucederá. No hay que cerrar puertas. Vale, eso es una teoría válida para él, yo sé perfectamente cómo acabará mi noche.

Enseguida localizamos a nuestros amigos, todos ellos con la pegatina roja, incluso Vanesa, lo que demuestra que el camarero la tiene mucho más atada de lo que ella admite. Ya me gusta que haya encontrado alguien que quiera cuidarla. No es que lo necesite, pero sienta bien consolarse con que, si tú no puedes estar ahí, alguien ocupará tu lugar. Todos están enterados de la trama de Alejo, por lo que no hace falta dar muchas explicaciones sobre la tapadera que voy a representar hoy. Y Fede, que se ha percatado de nuestra llegada, ha tardado cero coma en ponernos una copa a los recién llegados.

Por fin me reencuentro con Tania y Raquel, y estar todos juntos hace que vuelva a años atrás, cuando probablemente todo era más sencillo y salíamos a quemar la noche sin preocuparse por nada más. Cuando me detengo a mirarlos a todos, parece que el tiempo no ha avanzado para nosotros. A veces tengo esa sensación, que mi edad va sumando años, pero en realidad yo me siento como si siguiera en mis veinte. No me doy cuenta de que el tiempo también pasa para mí. Quizás volver a casa me ayude también a madurar y a dejar de ser la niña que siempre he sido aquí. Dejar de creer que todo está como lo dejé y tomarme las cosas con una actitud más adulta.

—Veo que los rumores de tu relación con Jason son ciertos —me sorprende Álvaro.

—¿Cómo? —No sabía yo que fuese tan adicto a la prensa rosa, pero ahora no sé a qué viene su comentario.

—Tu pegatina muestra bien que tienes algo —la señala con el dedo.

—La tuya dice todo lo que necesito saber. —Claro está, roja es. Y sé que no debería entrar en ese juego, pero no me apetece discutir por tonterías.

De repente, creo que sucede a cámara lenta o yo lo siento muy despacio. Alguien me coge de la cintura depositando un beso en la parte de mi cuello que queda descubierta, lo que provoca que se me ericen casi todos los pelos de mi cuerpo, y, cuando giro mi rostro, el morreo que me espera me deja sin palabras. Tardo un poco en reaccionar, no sé si el alcohol, las ganas de dejarme llevar o el calor que me ha producido en todo el movimiento, son los responsables, pero la sensación que me ha provocado es espectacular. Lo he correspondido, notar el suave tacto de esos labios sobre los míos en un primer contacto ha hecho que se removiese todo mi estómago. Poco he tardado en abrirle paso y poder fundirnos en un beso apasionado. Hacía mucho tiempo que un beso no me despertaba tanto y hasta podría decir que mi corazón se ha disparado. Un beso que me ha sabido a poco y que me ha llamado mucho más. Lástima que al abrir los ojos reparo en que se trata, ni más ni menos, que de Alejo. «Rut a las tres», me susurra al oído y, aunque yo no logro verla, me ha vuelto a poner todo el vello de punta con ese susurro.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Solo tengo un plan A»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Solo tengo un plan A» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Solo tengo un plan A»

Обсуждение, отзывы о книге «Solo tengo un plan A» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x