Javier Alonso Arroyo - Una escuela en salida

Здесь есть возможность читать онлайн «Javier Alonso Arroyo - Una escuela en salida» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Una escuela en salida: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Una escuela en salida»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Todos los fundadores de las diversas instituciones de Iglesia que se dedican a la educación parten de una mirada de fe sobre la realidad de niños y jóvenes, y desde ahí dan su respuesta. Esto fue así desde el principio para san José de Calasanz y sigue siendo así hoy en día. Y esa es la clave de lectura de este libro. Estas páginas recrean la experiencia fundacional de la escuela católica desde una perspectiva profundamente pedagógica. Javier Alonso, religioso, sacerdote y educador escolapio, propone que la escuela puede y debe llevar adelante su tarea educativa desde la clave de su origen: abrir los ojos a la realidad, sobre todo, de aquellos que sufren y necesitan nuestra respuesta. La «escuela en salida» es la que está al cuidado de los alumnos más débiles, la que abre sus puertas a la comunidad, la que da participación a todos y construye Iglesia. Es la que despierta en los alumnos una conciencia crítica ante las injusticias y les invita a comprometerse con los más necesitados. Es el espacio donde todos tienen la posibilidad de crecer, la expresión visible de la mesa de comunión del Reino de Dios. Este libro, que prologa Pedro Aguado, superior de la Orden de las Escuelas Pías, combina narraciones que invitan a la reflexión con desarrollos teóricos, pedagógicos y aportaciones bíblico-teológicas.

Una escuela en salida — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Una escuela en salida», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Entendemos la compasión como un sentimiento de responsabilidad ante el necesitado, con el sufrimiento ajeno fundamentado en la dignidad y finitud del hombre. Solo porque este posee dignidad, el hombre puede compadecer y ser compadecido. Y solo desde la dignidad y vulnerabilidad, desde la admiración y reconocimiento de todo hombre y del hombre concreto, la miseria, el sufrimiento y la opresión en él se consideran como una ofensa y engendran responsabilidad y compasión.

Reproducimos un hermoso relato de la vida de san Francisco de Asís que pareciera repetir la escena del samaritano y que ejemplifica bien su compromiso por cuidarlo:

En un recodo del camino vio Francisco a un leproso: uno de esos infelices que, por la ruptura total de comunicación entre sanos y contagiados, habían sufrido el despojo de todos sus derechos. Al ver acercarse a un jinete, el enfermo agitó su carraca y se puso de cara al viento, como siempre debía hacerlo al cruzarse con gente sana.

Y entonces Francisco bajó de su cabalgadura, se aproximó al leproso y, superándose a sí mismo, se llegó a él y le dio un beso.

Según narra también la biografía, tiempo después Francisco se fue a donde los leprosos. Se hallaban estos acogidos en el hospital de San Salvador, entre Asís y Santa María de los Ángeles. Allí, el hombre que antes, movido por la repugnancia, se tapaba la nariz al divisar de lejos las casetas de los enfermos, empezó a rodearlos de misericordia. Vivía con ellos y servía a todos por Dios con extremada delicadeza; lavaba sus cuerpos infectos y curaba sus úlceras purulentas...

El mismo Francisco reconocería más tarde, en su testamento, que al comienzo le pareció muy amargo ver leprosos. Solo venciéndose a sí mismo llegó a ser amigo, familiar y servidor de aquellos hombres y mujeres, a quienes en otro tiempo no daba limosna sin volver el rostro.

El joven Francisco descubrió en su encuentro con el leproso que lo plenamente humano es amar primero a los que nadie en este mundo quiere amar 23.

Suele identificarse la compasión solo con los primeros auxilios y una piedad lastimera que solo se preocupa de la atención de emergencia, pero que deja al pobre en un estado de dependencia respecto al que ayuda. Para Ortega y Mínguez, la compasión es algo más completo: «Es un encuentro con el hombre desposeído, con “toda” su realidad, a la vez que un compromiso político de ayuda y liberación que lleva a trabajar por transformar las estructuras injustas que generan sufrimientos y situaciones de dependencia y marginación» 24. En el próximo capítulo profundizaremos en los vínculos entre el cuidado y la justicia.

Emmanuel Lévinas ha reflexionado en profundidad sobre lo que sucede cuando nos encontramos con el «otro» herido al borde del camino. Este –el herido– se impone con su propia fuerza e implica una responsabilidad inexcusable que precede a todo consentimiento libre, a todo pacto o contrato. El «otro vulnerable» es quien hace surgir en el yo la conciencia, que, de entrada, es ya moral. La relación desnuda –cara a cara–, sin intermediarios, saca de su inercia al yo para referirlo de por vida al otro en cuya relación se encuentra el sentido.

El «otro» se revela y se impone a la existencia a través de la «epifanía del rostro». Antes de cualquier argumento racional, el «otro» está presente interpelándome y apelando a mi sentido de la responsabilidad. El «otro» exige ser reconocido en el mundo por el hecho de ser constitutivamente un ser indigente. Este «otro» se revela, se manifiesta, irrumpe en la existencia, se impone por sí mismo, se asoma como el ser que no es constituido por la razón.

En definitiva, la identidad de la persona se constituye desde la responsabilidad hacia el «otro vulnerable»:

De hecho, se trata de afirmar la identidad misma del yo humano a partir de la responsabilidad; es decir, a partir de esa posición o de esa deposición del yo soberano en la conciencia de sí, deposición que, precisamente, es su responsabilidad para con el otro. La responsabilidad es lo que, de manera exclusiva, me incumbe y que humanamente no puedo rechazar. Esta carga constituye una suprema dignidad del único. Yo no soy intercambiable, soy en la medida en que soy responsable: Yo puedo sustituir a todos, pero nadie puede sustituirme a mí. Tal es mi identidad inalienable de sujeto. En este sentido preciso es en el que Dostoyevski dice: «Todos somos responsables de todo y de todos ante todos, y yo más que todos los otros» 25.

A partir de la perspectiva abierta por Lévinas se puede desarrollar toda una pedagogía para la compasión tomando como punto de partida el encuentro con el «otro» vulnerable y herido que reclama cuidado y justicia.

En la misma línea, Prohaska reflexiona sobre el dinamismo del encuentro interpersonal como fuente de desarrollo humano. Afirma en su Pedagogía del encuentro 26que las personas pueden encontrarse en el espacio físico, el psicológico y el pneumático (espiritual); pero solo en el espacio espiritual se produce un verdadero encuentro entre las personas, que se da en libertad, gratuidad y desde el corazón de la propia existencia. La persona elige libremente tener un encuentro con el otro; en muchas ocasiones, el encuentro irrumpe en la vida sin planificarlo (gratuidad) y toca la propia experiencia personal (existencial). Si la persona pone su corazón en la relación, se abrirá un vínculo capaz de restaurar la dignidad herida del «otro». El encuentro humano que cumple con los rasgos de libertad, gratuidad y existencialidad tiene un efecto educativo; y esto solo se produce en el espacio espiritual, que es cuando damos sentido y profundidad a la relación.

El evangelio recoge experiencias de encuentro de Jesús con personas heridas en su dignidad: la mujer pecadora, la hemorroísa, el ciego de Jericó, el endemoniado. A Jesús le afecta la situación de la gente, de modo que no queda indiferente ante sus necesidades primarias. Brota de él un sentimiento de compasión que le lleva a realizar los milagros. En todos los casos, Jesús los mira con misericordia y les devuelve su dignidad con su cercanía y presencia.

Para el papa Francisco, el encuentro está ligado al concepto de «periferia». Afirma que «nos encontramos cuando salimos de nosotros mismos, de nuestro centro, y nos abrimos al otro precisamente allí donde el otro es diferente. El encuentro es aprender a recibir de todos, especialmente de los más pobres y de los más pequeños, de los que para el mundo no cuentan» 27.

«Hay encuentro con el otro cuando soy herido por el rayo de su ser, cuando soy tocado por su acción» 28; así pues –comenta el papa–, «acercarse a toda carne sufriente es abrir el corazón, dejarse conmover en las entrañas, tocar la llaga, cargar al herido; es también pagar los dos denarios y, finalmente, salir garante de lo que se gaste de más. Seremos juzgados en esto» 29.

Si el proyecto educativo quiere despertar el sentimiento de compasión y la responsabilidad social con los pobres, debe ofrecer experiencias para que los alumnos tengan un encuentro real con los excluidos de la sociedad y que toque su sensibilidad.

Según Ortega y Mínguez 30, la praxis de una educación para la compasión implica desarrollar las siguientes capacidades y emociones en los alumnos:

– El desarrollo de la empatía, que implica tomar conciencia del sufrimiento ajeno como algo injusto, asumir responsabilidades frente al otro y el compromiso de actuar para restaurar la dignidad perdida. A través de la relación empática, los alumnos establecen vínculos, se conmueven ante las necesidades de los demás y se entusiasman por el servicio.

– El desarrollo de las capacidades de comunicación, como son el diálogo, la escucha activa, la expresividad y la participación, constituyen una base necesaria para el aprendizaje de la comprensión empática en las relaciones interpersonales, relaciones que exigen ser de rostro humano, de aceptación y defensa de lo que es digno en la persona del otro.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Una escuela en salida»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Una escuela en salida» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


César Aira - Una novela china
César Aira
Vicent Alonso Catalina - Sobre una neu invisible
Vicent Alonso Catalina
Ana María Alonso Ramos - Una misión llama-da A.M.A.R
Ana María Alonso Ramos
Carlos Javier Morales Alonso - Tiempo mío, tiempo nuestro
Carlos Javier Morales Alonso
Javier Barraca Mairal - Bioestética y salud humana
Javier Barraca Mairal
Javier Zúñiga - Una dosis de melancolía
Javier Zúñiga
Javier Sánchez Lucena - La mujer silueta
Javier Sánchez Lucena
Irene Alonso Álvarez - No quiero ser una muñeca rota
Irene Alonso Álvarez
Javier Alonso López - La resurrección
Javier Alonso López
Отзывы о книге «Una escuela en salida»

Обсуждение, отзывы о книге «Una escuela en salida» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x