Nathalie Braux - Los desafíos del jazz en Jalisco

Здесь есть возможность читать онлайн «Nathalie Braux - Los desafíos del jazz en Jalisco» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Los desafíos del jazz en Jalisco: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Los desafíos del jazz en Jalisco»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

En 2001, como consecuencia de la enfermedad y muerte del famoso pianista Carlos de la Torre, salen de la penumbra numerosos músicos de muy alta calidad en conciertos y homenajes. Sorprendida de que tanto talento permanezca oculto, la clarinetista y saxofonista francesa Nathalie Braux se promete contar la historia de estos grandes jazzistas. Un reto mayúsculo: sumergirse en las casi inexploradas aguas del jazz en Jalisco de los setenta y ochenta confrontan a la autora con una gran ignorancia y pobre documentación al respecto.Además de emprender una extensa revisión en la prensa de la época, recuperar programas de mano y pósteres, Braux entrevista a algunos de los más representativos maestros de la escena del jazz y jazz-rock, en encuentros filmados por Jorge Bidault. El resultado es una crónica fundamental para los entusiastas de los ritmos sincopados y para cualquier lector interesado por la cultura musical jalisciense.

Los desafíos del jazz en Jalisco — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Los desafíos del jazz en Jalisco», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Cool y hard bop. Oeste vs. este

Estas dos corrientes del jazz, cool y hard bop, son opuestas, parecen reflejar el periodo histórico atormentado de la Guerra Fría.

El cool jazz es un jazz introspectivo, distante, desilusionado, de los años cincuenta. Este nuevo estilo aterciopelado se produce mayormente en la costa oeste del país, o por lo menos este eslogan fue lanzado por la industria disquera para estimular la competencia entre ambas franjas del país. Muchos jazzistas van a aprovechar la ola de la música para cine y se irán a vivir a la costa oeste, donde pueden ganar bien grabando para las películas en el día y tocando jazz en la noche.

Es un sonido considerado como más “blanco”30 pero, sobre todo, —como, por ejemplo, la colaboración del dúo Gil Evans-Miles Davis—31 es un jazz “americano”, en el sentido de la mezcla de razas y estilos.

A la mitad de los años cincuenta, el hardbop es una reacción a la evanescencia del sonido y las melodías lánguidas: los músicos negros de la costa este dan otro brinco, tocando un jazz incisivo, nervioso, que reivindica como raíces el blues y el gospel. Algunos grandes saxofonistas del movimiento son John Coltrane, Cannonball Aderley y Sonny Rollins.

Esta época ve también la emergencia de otra corriente: The Third Stream, representada por John Lewis y Gunther Schuller. En esta se insiste mucho en la escritura musical, en un contenido sustancioso (que reacciona a las composiciones basadas en motivos repetitivos del hardbop), en el cual se experimenta con los elementos clásicos europeos (de la fuga al dodecafonismo) o con ensambles instrumentales inusuales como un cuarteto de cuerdas. ¿Utopía cultural? El movimiento anuncia los eclecticismos y estallidos del jazz de los años siguientes.

Free jazz. La percepción del instante

En efecto, el mundo del jazz se transforma en los años sesenta a la par de las tensiones sociales: ocupaciones silenciosas (sit in), marchas, discursos del pastor Martin Luther King, lucha armada de los Black Panthers, la idea de una república negra separada de los Black Muslims (musulmanes negros), difundida en los ghettos y los centros urbanos del norte y oeste del país. Poco a poco, con estas presiones, las leyes evolucionan para prohibir la segregación en todos los lugares públicos y para otorgar a los afroamericanos el derecho a votar. Si la cohabitación social y económica tiene ya un marco legal, la situación no está resuelta. En el jazz los músicos buscan la manera de liberarse de las ataduras del pasado, de modo que se reapropian los elementos de la cultura negra: blues, gospel y marchas en una música que aspira a la libertad.32

Se define el free jazz por muchas negaciones: desaparecen la necesidad de swing, la estructura armónica de un tema y un tiempo preciso y regular, en fin, todo lo que podría sonar comercial; la noción de “bonito” que entonces les hace recuperar todos los sonidos de efectos como gruñidos (growls) y slaps, ruidos y los elementos musicales que recuerdan al mundo urbano, África y otros continentes. Logran armar una música con melodías y figuras rítmicas que se entrelazan, con una gran energía e intensidad colectiva de llamadas, respuestas y reacciones que implican una gran escucha entre los participantes, de modo el estilo se acerca al estilo pictórico de Jackson Pollock, maestro del expresionismo abstracto.

El free jazz enfureció a los críticos blancos que avivaron las oposiciones entre los músicos de swing con los nuevos, pero los intelectuales y místicos apreciaron esta música del instante, cargada de tantas emociones. Se ha dicho que esta música es rara, difícil de escuchar, pero —por lo menos en aquellos años—, una multitud de aficionados asistieron a conciertos y festivales, y vendió muchos discos. Este movimiento, tan ligado a la agitación sociopolítica, la guerra de Vietnam, a las luchas anticolonialistas, las protestas de 1968 y el uso de drogas, marca también una apertura al mundo, y más que una ruptura, busca cómo incorporar todos estos nuevos elementos a la cultura negra.

Fusión. El jazz se hermana

En esta nueva etapa los jazzistas norteamericanos están más en relación con el exterior y fusionan las raíces musicales: se acercan a la cultura de Oriente Medio con las conversiones al islamismo, al mundo asiático por la guerra de Vietnam, a la música de la India, de América Latina, particularmente de Brasil, entre otras.

Se habían conocido varias fusiones anteriormente: la afrocubana del experimento del saxofonista Charlie Parker y el director de orquesta cubano Machito (1912-1984) y luego de Dizzie Gillespie con el gran conguero cubano Chano Pozo; Stan Kenton intenta fusionar el jazz y música clásica europea; Stan Getz y Charlie Byrd unen el jazz y la bossa nova brasileña. Las fusiones con la música antillana, cubana y la bossa nova tienen buenos resultados ya que comparten las raíces de las polirritmias africanas.

Pero hay una nueva fusión que viene a fascinar a los músicos que ven cómo los conciertos de rock juntan un enorme público de jóvenes que tienen poder económico y compran discos. Consideran que el rock de los años setenta es más interesante en sus melodías que el rock blanco de los cincuenta y sesenta, que para ellos resulta simplón. Entre tanto los grupos ingleses The Beatles y The Rolling Stones inspirados por Chuck Berry, Muddy Waters y John Lee Hooker, escriben sus propias melodías y/o tienen ritmos energéticos, rudos, y gracias a ellos, algo cambia en el rock: se comienza a usar para la protesta y la política. Los instrumentos se electrifican, aparecen los primeros aparatos electrónicos (sintetizadores) así como innovaciones en las técnicas de grabación, creando un sonido psicodélico, un ambiente alucinógeno y el acid rock.

Del rhythm’n blues, del soul y del funk toman el potencial rítmico, el lado festivo del blues y del gospel para la danza; los rockeros blancos van poco a poco a descubrir o redescubrir los grandes bluesmen negros.

La terminología del rhythm’n blues viene a remplazar la de los race records que aparecieron con el blues, término ya demasiado peyorativo y limitante para un mercado de consumidores muy fuerte. El rythym’n blues es el resultado del swing y del blues, con temas densos, melodías sencillas, rítmicas hostigadoras; el resultado: una música eficiente, seductora, aliada a las presentaciones energéticas, cargadas de erotismo y sensualidad. Este género evoluciona al margen del jazz. Louis Jordan, Dinah Washington, Chuck Berry, Fats Domino, Little Richard y el famoso Ray Charles son los héroes de este estilo musical en su primera etapa.

Los años setenta están marcados por las generaciones siguientes, en particular por James Brown; se hace una música más dura, electrificada, repetitiva, con secciones de metales que cincelan las frases, sin olvidar las características ya mencionadas del juego escénico. Aparte de James Brown, los representantes de estas generaciones son Otis Redding, Rufus Thomas, Aretha Franklin, Stevie Wonder, Dionne Warwick, Jackson 5 y Nina Simone.

El funk, al margen de la música disco, mucho más comercial y sencilla, es la ola siguiente de esta corriente representada por Kool and the Gang, Cameo, Earth Wind and Fire, hasta el Sound Systems de Herbie Hancock, Headhunters o Parliament, Funkedelic o algunas experiencias de Ornette Coleman o Miles Davis.

Al final la etiqueta rythm’n blues encapsula tantas cosas que uno se pierde un poco, y la etiqueta sirve más a la disquera que a los músicos. El tiempo ayudará a categorizar los grupos y solistas. Una vez más en la historia musical de Estados Unidos, los beneficios y la explotación financiera de este estilo benefician mucho más a los músicos blancos que a sus colegas negros.33

Después de la etapa del free jazz muchos jazzistas quieren relacionarse también con grandes multitudes y obtener el reconocimiento popular. Probablemente se encuentran confrontados con el business de la música, el concepto de la rentabilidad absoluta, la invasión de los medios audiovisuales, el star system, la restructuración de las disqueras, el marketing y una cierta estandarización de los productos, de modo que para mantenerse en este mercado de la música (el show business) deciden hacer una simbiosis entre un rock simple y un jazz sofisticado, tomando elementos de cada uno. Electrifican sus instrumentos también para ganar en poder de comunicación y enganchar a la audiencia cercana al rock blanco o a la música popular afroamericana.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Los desafíos del jazz en Jalisco»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Los desafíos del jazz en Jalisco» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Los desafíos del jazz en Jalisco»

Обсуждение, отзывы о книге «Los desafíos del jazz en Jalisco» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x