Julio Alejandro Pinto Vallejos - Luis Emilio Recabarren

Здесь есть возможность читать онлайн «Julio Alejandro Pinto Vallejos - Luis Emilio Recabarren» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Luis Emilio Recabarren: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Luis Emilio Recabarren»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Una nueva biografía de Recabarren, impulsor del movimiento obrero y fundador de la izquierda chilena contemporánea, contextualizada en su tiempo, que nos aporta elementos importantes de reflexión y contraste para el S. XXI.

Luis Emilio Recabarren — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Luis Emilio Recabarren», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Según dicha reseña biográfica, Recabarren habría nacido en Santiago en julio de 1876, tres años antes del estallido de la Guerra del Pacífico. Su padre, José Agustín Recabarren, es identificado por López como “empleado”, pero autores posteriores, al parecer siguiendo al escritor José Santos González Vera, lo clasifican junto a su esposa Juana Rosa Serrano como “pequeños comerciantes”, situando su residencia en Valparaíso 12. Lo propio afirma Fanny Simon, quien los cataloga como “gente decente” y los ubica en la “baja clase media” porteña, agregando que su padre alcanzó a realizar estudios médicos antes de contraer matrimonio 13. Cualquiera sea la versión correcta, es interesante constatar que la familia de Recabarren, sin ser precisamente adinerada, tampoco era de neta raigambre popular. Ello explica la posibilidad que tuvo el pequeño Luis Emilio de adquirir un grado significativo de instrucción formal, factor seguramente determinante en su posterior apego a la cultura escrita y al espíritu “ilustrado” en general.

Según su biógrafo Osvaldo López, sus escuelas fueron las de Santo Tomás de Aquino y La Campana, en Santiago, y la de San Vicente de Paul en Valparaíso, todas ligadas, por decisión de sus padres, a una Iglesia Católica que posteriormente sería blanco de algunos de los más fieros ataques de su pupilo. Según otro de sus biógrafos, Alejandro Witker, habría sido en la primera de las instituciones nombradas, ligada a los Padres Salesianos, donde Recabarren aprendió el oficio de tipógrafo, pero esa referencia no aparece corroborada en otras fuentes 14. Osvaldo López, inclinándose por una formación más práctica, lo hace ingresar a los once años como aprendiz a un taller de encuadernación, para desempeñarse posteriormente como tipógrafo en diversas imprentas, incluyendo la de El Mercurio en Valparaíso. Probablemente basada en testimonios orales brindados por sus hermanas, Fanny Simon atribuye este temprano ingreso al mundo laboral al abandono de la familia por parte del padre, lo que habría deteriorado sustantivamente su condición material 15. Fue el ejercicio de la profesión tipográfica, abrazada a tan temprana edad, lo que finalmente encasilló a Recabarren en la clase social a cuya emancipación dedicaría el resto de su existencia, pero manteniendo un nexo cotidiano con esa cultura ilustrada, hasta entonces patrimonio casi exclusivo de las clases dirigentes, que siempre consideró uno de los mayores logros de la humanidad 16.

Algunas biografías asocian a Recabarren con la guerra civil de 1891, ubicándolo ya en el bando balmacedista, donde según Osvaldo López habría sido “procesado por revolucionario y absuelto”, mientras que otras lo sitúan en el congresista, donde habría sido sorprendido repartiendo un periódico favorable a Balmaceda y se habría librado de un seguro fusilamiento solo en virtud de su escasa edad (quince años) 17. Fanny Simon, apelando al parecer nuevamente a las revelaciones orales de sus hermanas, entrega una versión algo más consistente, aunque también bastante novelesca. Según dicha autora, las simpatías conservadoras de su familia, demostradas por su formación en instituciones católicas, habrían hecho del joven Recabarren un decidido opositor al gobierno balmacedista. En ese contexto, habría impreso en compañía de un amigo un panfleto titulado El Opositor, el que habría intentado repartir entre las tropas gobiernistas. Sorprendido y procesado, su juventud lo habría eximido de un castigo mayor. Sin amilanarse, acto seguido habría procedido a enrolarse en el mismo ejército que antes había tratado de infiltrar, pero con la intención de desertar a la primera oportunidad para unirse a las fuerzas rebeldes. Aunque el fin de la guerra no le habría permitido llevar a efecto dicho plan, concluye la autora estadounidense, “su experiencia castrense había durado lo suficiente para distinguirse y obtener su ascenso a cabo” 18. De esta curiosa forma, siguiendo esta vez a Alejandro Witker, se habría verificado el “dramático” despertar de Recabarren a la lucha política.

Su ingreso formal y definitivo a dichas lides, en todo caso, se produjo tres años después, cuando pasó a formar parte del Partido Demócrata, en el que militaría ininterrumpidamente hasta 1912. Recordando esa decisión cuando ya se había distanciado de la colectividad, Recabarren decía haberse sentido “atraído por la propaganda que se hacía, diciéndose que se trataba de un partido que buscaba el mejoramiento de la clase trabajadora y que por esa razón todos los trabajadores debían prestarle su concurso”. “Yo creí que era un Partido Obrero”, añadía, “y por eso ingresé al lado de muchos otros obreros a ayudar a robustecer ese ejército que se llamaba Partido Demócrata” 19. El Partido Demócrata, en efecto, fue el primer partido chileno que se alineó explícitamente junto a los sectores populares, definiendo su objetivo central como la “emancipación social, política y económica del pueblo”.

Fundada en 1887 por jóvenes de clase media desencantados del Partido Radical y artesanos interesados en canalizar políticamente su crítica social, para la época en que Recabarren ingresó a sus filas, la colectividad se debatía en un dilema del que a lo largo de su existencia le sería imposible zafarse: defender sus principios de autonomía social o navegar las turbulentas aguas de las alianzas con los partidos oligárquicos que, tras la derrota de Balmaceda, hegemonizaron la vida política del llamado “Chile parlamentario”. La apertura política que acompañó la instalación de ese nuevo régimen efectivamente brindó al Partido Demócrata una oportunidad para insertarse en mayores espacios de poder, pero al precio de subordinarse, una y otra vez, a designios esencialmente ajenos a sus propios propósitos, y a los recurrentes vaivenes de un sistema caracterizado por la inestabilidad de sus combinaciones electorales. De hecho, el ingreso de Recabarren coincidió con la elección del primer militante demócrata, el abogado porteño Ángel Guarello, a la Cámara de Diputados. Tan auspicioso logro, sin embargo, había sido precedido por fuertes discusiones sobre la conveniencia o inconveniencia de entablar alianzas electorales con partidos “burgueses”, tensionando a la organización hasta el borde de la ruptura. Como se verá, esa agobiante y a la postre frustrante disyuntiva afligiría a Recabarren durante sus casi veinte años de militancia demócrata 20.

En un plano más personal, ese mismo año de 1894, cuando aún no cumplía los veinte, Recabarren se desposó con su prima Guadalupe del Canto, según Fanny Simon diez años mayor que él 21. De ella tuvo dos hijos, Luis Hermenegildo y Armando, de los cuales solo sobrevivió el primero. Algunas versiones sostienen que esa unión se disolvió rápidamente, según Alejandro Witker “por la incomprensión de la esposa a su compromiso político”. Sin embargo, estando detenido en ١٩٠٤ en la cárcel de Tocopilla, Recabarren se lamentaba de no haber sido autorizado para recibir a su esposa e hijo, “lo que más amo en la vida, todo el idilio de mi hogar”, pese a que habían viajado desde Valparaíso exclusivamente para verlo. Y se desahogaba así: “Al pensar en la crueldad de aquel dolor que yo imponía a mis seres amados sufrí, sufrí por la vez primera de mi vida, por ellos, no por mí” 22. Algunos meses más tarde llamaba a sus compañeros a fundar una nueva moralidad exclusivamente en base al “amor a la humanidad”, cuyo principio ejemplificaba a través de sus propios sentimientos hacia su familia: “Idolatro a mi compañera y a mi hijo” 23. Como se verá más adelante, la supuesta “incomprensión” de Guadalupe del Canto tardó casi veinte años en manifestarse, y la separación efectiva no se produjo hasta el traslado de su esposo a Iquique en 1911. Sin embargo, los reiterados y prolongados desplazamientos de Recabarren a distintas partes del país y del extranjero, casi siempre sin la compañía de su familia, seguramente fueron erosionando la relación de manera irreversible.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Luis Emilio Recabarren»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Luis Emilio Recabarren» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Luis Emilio Recabarren»

Обсуждение, отзывы о книге «Luis Emilio Recabarren» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x