Óscar Anibal Milovich - Mundo de Gigantes, Horizontes y Espejismos

Historias de noches de conquista y también de melancolía.

Así son los versos de un relato, de una poesía.

Las narraciones son como las olas del mar,

van y vienen, nunca se van definitivamente,

siempre están ahí en la mente, en el corazón.

El alma misma es la que se expresa mediante las palabras que juguetean entre los sentimientos y vaivenes de la vida.

Expresar es la habilidad de poder decir aquello que otros desean decir, leer o escuchar.

Palabras de amor, verdades y sueños.

Engaños y enredos amorosos envueltos entre rosas y espinas,

Entre letras, palabras y fantasías, baila el poeta y sus poesías.

Club de esperanzas rotas y alegrías perdidas. Desengaños eternos de un pueblo pendiente de una fábrica de humo, donde se trabaja, se ríe y se angustia hasta el agotamiento, donde las promesas son el alimento y el desaliento del día a día. Rumores e informaciones falsas que se mezclan con verdades, mostrando un tango llorón que perfora el alma.

Figuras y artistas, todos mezclados en la misma novela de un verso que no tiene fin, compiten con la muerte en las tribunas, en partidos del valetodo sin respeto ni honor.

El alma llora la desorientación del abandono por la educación extraviada. Mentes y cuerpos debilitados por el desamparo niegan el crecimiento y la carrera hacia nuevos horizontes. Atados a las dádivas por obligación o conveniencia de corazones y espíritus vacíos, de estadistas ciegos y sordos, desinteresados del dolor ajeno, tan solo utilizados para provecho propio. Mostrando amablemente amplias sonrisas.

Cubren a bajo costo las necesidades del desamparado… sabiamente manipulado.

¡El futuro sin perspectiva en el confín de la lejanía!

Amor, solo tú fortaleces mi corazón.

Solo tú permaneces a lo largo de mi vida más allá del tiempo.

En cada instante de alegría, y aún más, me has fortalecido en los momentos de angustia.

Eres el sostén de mi existir y el tutor que endereza los hijos que la vida nos regaló.

El techo que me cubre de la lluvia y el salvaguarda ante las tormentas.

Has grabado en mi interior cada uno de mis sentimientos, compañera de viajes y aventuras.

Solo tú, mujer, mi amada, llenas mi alma sin dejar espacio vacío.

Con tu presencia, las mañanas son más brillantes y por las noches, las estrellas son el adorno más bello junto a ti.

Como un jugador aposté al amor contigo y gané la vida. Hoy agradezco a Dios por nuestra unión hasta la eternidad.

Idólatras confundidos, creyentes alterados.

Solo los labios pronuncian el sonido del credo. Falsos ídolos impuestos dominan las mentes de corazones vacíos.

Mezclando la paz con la violencia, a Cristo con el Che y la verdad con la mentira.

Regalando migajas a la plebe confundida, logran así mover las masas sometidas.

Escasez de trabajo y alimentos regalados,

Abunda la pobreza y falta la educación,

Así es la canción, el fin de la sumisión,

Cantantes y artistas actúan su papel, la primera fila es su lugar, la presencia paga bien.

Risas, aplausos y abrazos. Ególatras puros, se alaban unos a otros, aliados en ganancias y engaños. Solo imágenes salvajes de telarañas engañosas que, en algún momento, por peso de verdad caerán.

Como el agua apaga el fuego, así, la luz de la verdad lo oscuro ha de iluminar.

El rey sale de sus aposentos a saludar a la plebe que lo adula ciegamente cual Dios salvador de todos los males. Detrás de la puerta, sus escribas transcriben las palabras que se han de transformar en los edictos, para cumplir por los aldeanos, que sus lacayos han de expresar como si fuesen bufones de su majestad.

Tras los muros del castillo se esconden los secretos más oscuros de la dinastía, sombras que opacan el brillo de sus torres.

El emblema de su escudo, deslucido por sangre de justos derramada, y el reino con sus tierras reducidas ante el avance de invasiones extranjeras.

Los escuderos del rey, cegados por una obediencia obtusa a todo entendimiento, llevan a ejecución dichos edictos que favorecen a aduladores y castigan a los rebeldes sin causa.

Los señores feudales, protegidos detrás de sus muros rodeados por el foso, viven sus vidas ajenas a toda justicia por ellos dictada. Brindan los unos por los otros, mientras se divierten con arlequines bien pagados por su actuación, ignorando sin piedad la hambruna de los vasallos que felices festejan por las migajas.

Lanza una pregunta en el espacio, y recaerá con nostalgia en el pasado con alegrías y tristezas, risas y llantos. Recuerdos, que juguetean en la mente y en el corazón, de tiempos salvajes en libertad.

Juventud que ha quedado atrás llena de búsquedas y encuentros.

Chicas, música y mariposas en la panza.

Imágenes que regresan junto a cada uno de los sentidos.

Grandes nombres con música.

Tu mágica y enigmática figura vuelve a mí como el deseo más profundo.

¡Mírame a los ojos y dime si ves lo que siento por ti!

Escucha mi corazón. Eres el motor de su latir. Solo tienes que saber escuchar. Acércate y siente mi calor, mi sangre fluye rápidamente con solo tenerte cerca.

Aunque tú ya no sientas lo mismo, sigues siendo el fundamento de mi vivir.

Lejos de mí existes, solo habitas en mi mente y ella sabe que tu sangre fluye por otro y que tu corazón late por él.

Solo deambulo en el desierto con la garganta seca, deseando la saciedad de tu amor.

Camino por las calles buscando otros rostros, otros ojos, que me hagan olvidar de ti, otros labios que me hagan olvidar tus besos. Pero solo encuentro cuerpos fríos, vacíos de sentimientos, entregados por el valor del dinero.

Seguiré mi vida escrita como un libro melancólico de una tragedia griega, buscando el amor con final incierto.

¡Aún vives en mi corazón!

Mira y escucha, solo eso, mira y escucha

Mira a tu alrededor y verás las cosas con claridad. No hables, solo escucha y podrás distinguir la verdad de la mentira.

Para ver, solo tienes que soltar tus emociones, alejarte del árbol que cubre el bosque y aprender a ver con el corazón.

Solo así puedes comprender la realidad.

Escucha y no hables, y distinguirás la falacia en los labios dañinos.

Porque si hablas, ensordecerás tus oídos con vanas palabras sin sentido. Y por estas, solo críticas hacia ti lograrás.

No intentes dar luz al que no quiere ver, solo repudio alcanzarás.

Solo calla y escucha, observa los movimientos, acciones y resultados de lo que te rodea, y la sabiduría vendrá a ti.

No opines, ya que tu opinión a pocos importará, pero con ella a muchos puedes molestar.

Solo exprésate con acciones, ya que ellas hablarán por ti.

Hoy brindamos con libertad. Ella es todo lo que esperábamos para nosotros: nos da las opciones para que elijamos lo que queremos hacer, nos otorga la comida, la opción de estudiar o hasta de trabajar. Nos deja ir al teatro o al cine, si es lo que nos gusta.

Libertad siempre sabe qué es lo mejor para nosotros, piensa por nosotros y cuenta con los mejores planes para nuestra vida.

Libertad me da opciones de vida. Estudio si lo creo necesario y trabajo cuando quiero.

Libertad me otorga lo que le pida, por eso la quiero. No me pide nada a cambio, solo fidelidad.