Charles Sheffield - Entre los latidos de la noche

Здесь есть возможность читать онлайн «Charles Sheffield - Entre los latidos de la noche» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Город: Barcelona, Год выпуска: 1988, ISBN: 1988, Издательство: Ediciones B, Жанр: Фантастика и фэнтези, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Entre los latidos de la noche: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Entre los latidos de la noche»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

2010 D.C.
Sólo unos pocos seres humanos que habitan en las primitivas colonias en órbita en torno a la Tierra logran escapar a la hecatombe Nuclear. Deben iniciar el éxodo en busca de nuevos mundos lejos de la Tierra destruida.
27.698 D.C.
A estos mundos llegan los inmortales, seres con extraños lazos con la vieja tierra, que parecen vivir eternamente, que pueden recorres años luz en sólo unos días, y que utilizan sus extraños poderes apara controlar la existencia de los simples mortales. En el planeta Pentecostes, un pequeño grupo se prepara para encontrar a los Inmortales y enfrentarse a ellos. Pero en la búsqueda deberán transformase ellos mismos en inmortales y descubrirán una nueva amenaza que se cierne no sólo sobre ellos mismos sino sobre toda la galaxia.

Entre los latidos de la noche — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Entre los latidos de la noche», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Todos los monitores que había junto a la mesa funcionaban aún, pero ahora recibían datos telemétricos cuya fuente eran los pequeños sensores que tenía colocados en el cuerpo. Indudablemente aquellas señales pasaban a otro ordenador central, pero posiblemente aquél respondía sólo a las emergencias. Peron sintió que debería tener al menos unos pocos minutos antes de que sus acciones fueran controladas de nuevo. Se bajó de la mesa, recuperó el equilibrio y se dirigió a una de las dos puertas de la habitación.

La puerta conducía a un pasillo sin ventanas. Elección equivocada. Volvió sobre sus pasos y descubrió que la otra puerta conducía a una habitación más grande con una gran portilla transparente en un extremo. Peron se acercó y se asomó a ella.

Ciertamente había esperado algo distinto del paisaje normal del sistema Cass; tal vez las constelaciones familiares sutilmente variadas. Pero lo que estaba contemplando era completamente inexplicable.

Más allá de la portilla el cielo estaba cubierto por un débil brillo blanquecino. No parecía tener ninguna orientación, y en todas partes tenía el mismo brillo uniforme. No había estrellas, ni nebulosas, ni nubes de polvo estelar, ni galaxias. El Universo entero había desaparecido, perdido en un resplandor difuso.

Peron notó que la cabeza le daba vueltas. Estaba en el espacio-L, y éste era tan diferente de todo lo que había imaginado que no tenía ni idea de qué hacer a continuación. Si estuviera prisionero (así era como empezaba a percibir su situación a bordo de la nave), y se hallara en un entorno ordinario tal vez podría intentar algo. ¿Pero qué podía hacer aquí? No había nada en la ciencia de Pentecostés que indicara siquiera la posibilidad de eso. Sy, con muchos más conocimientos científicos que Peron, se habría reído de la idea.

Peron se sintió molesto por un momento. Si Sy estuviera aquí y viera hasta dónde habían llegado sus teorías…

El resto de la habitación carecía de muebles o de fuentes de información útiles. Había un juego de pequeñas puertas o paneles en la base de la pared, cada uno de sólo unos centímetros de altura, pero no pudo abrirlos. Se dio la vuelta para regresar al pasillo y recordó que tenía hambre y sed. Recordó la habilidad de la doctora Ferranti para conjurar cualquier cosa de la nada. (También tendría que pedirle a Sy que tratara de explicar eso.) ¿Podría funcionar también con él? No perdía nada con intentarlo.

—Orden. —Aunque estaba solo, se sintió ridículo. Lo que estaba intentando era imposible. Pero había funcionado antes. Estaba seguro—. Orden: Traedme una bebida.

Esperó, sintiéndose como un idiota. Para confirmar su impresión, no sucedió absolutamente nada. Lo intentó una vez más.

—Orden: Traedme algo de comer.

Nada. ¿Cómo podía haber funcionado? Tenía que haber estado sufriendo una alucinación para creer que Ferranti tenía poderes mágicos para que los objetos —ella incluida— aparecieran y desaparecieran al instante.

Peron acababa de llegar a esa conclusión cuando todo lo que le rodeaba cambió en un parpadeo. Durante un segundo se sintió completamente desorientado. Ya no estaba a la entrada del corredor, sino en una habitación con paredes amarillo pálido decorada con murales elaborados y pinturas de aficionados. Llevaba puestos los mismos zapatos que había usado antes de marchar a Remolino. Se encontraba sentado en una dura silla, con las manos firmemente apoyadas en sus brazos. Ante él había una larga mesa de metal plateado y en su superficie había una única carpeta naranja y una pluma.

Y tras la mesa, mirando con expresión ligeramente aburrida y definitivamente desdeñosa, había un hombre calvo y enjuto. Peron sintió instantáneamente aversión hacia él.

18

—Soy el capitán Rinker, al mando de esta nave —dijo el hombre—. La doctora Ferranti me ha dicho que se encuentra usted enteramente adaptado al espacio-L. ¿Es así?

—No lo sé. No siento dolor, pero desde luego no me siento normal.

—Eso se le pasará. ¿Algo más?

—Alguien parece querer que me muera de hambre.

—Es culpa suya. Cuando se despertó, podía haber pedido comida. En cambio, decidió husmear. —Rinker hizo un gesto a una pantalla de la pared que mostraba la habitación en la que Peron había recuperado el conocimiento—. Le estábamos observando. No le sentaría mal que le dejáramos sin comer una temporada. Pero tiene usted suerte. Las reglas no nos lo permiten. Orden: Traed comida y bebida apropiadas para el despertar.

Una bandeja apareció instantáneamente sobre las rodillas de Peron. El recipiente claro contenía el mismo líquido que había bebido antes, pero la comida de los platos le era desconocida. Había empanadas marrones con una textura granular, melaza rojo-anaranjada y lonchas blancas de suave consistencia cremosa. Rinker hizo un gesto hacia la comida.

—Adelante. Puede comer mientras hablamos.

Peron miró alrededor. No había nadie más en la habitación, y no había señal de que la puerta se hubiera abierto ni cerrado.

—¿Cómo pueden hacer eso?

—No puedo decírselo. Se le dará esa información en el Mando… si se le da. —Rinker señaló la pantalla—. Sus esfuerzos para usar el sistema fueron advertidos. Para evitar que pierda el tiempo en lo sucesivo, le advierto que cualquier otro esfuerzo de su parte en ese sentido será igualmente infructuoso. Déjeme también señalarle que no tengo ninguna obligación oficial de hablar con usted, o relacionarme con usted en ningún modo excepto para trasladarle sano y salvo al Mando. Pero quiero que sepa cuántos problemas han causado usted y ese loco de Wilmer.

Peron no pudo resistirse a probar la comida que tenia delante. Su cuerpo insistía en que había pasado semanas sin recibir alimento. Comió ansiosamente. Las empanadas tenían un parecido aceptable con el pan, y aunque la materia blanca no se parecía en nada al queso que Peron había esperado, no estaba mal. Miró al capitán Rinker, tragó la comida y habló.

—No puedo hablar por Wilmer, pero no ha sido culpa mía si he causado algún problema. Sin su ayuda, podría haber muerto en Remolino. No sé por qué me echa la culpa.

Rinker hizo un gesto de impaciencia con la mano.

—Se le clasificó como creaproblemas antes de salir del planeta, igual que sus compañeros de Remolino. Se les asignó a todos a la nave Eleanora para recibir allí adoctrinamiento especial y estar apartados de los otros participantes. En cuanto a Wilmer, se supone que estaba allí como observador, no como participante. He advertido varias veces del peligro de usar reclutas locales como observadores. Tienen demasiadas ataduras a su planeta y a su gente. Pero no me hicieron caso.

—¿Wilmer es un Inmortal?

Rinker se reclinó en su asiento y frunció el ceño.

—¡Ese estúpido término! —Su voz se elevó—. Nunca lo uso. Wilmer fue reclutado para nuestro grupo, sí. Y comparte nuestro espacio de vida prolongada. Pero nunca ha dejado el sistema Cass, y desde luego no sabe nada de nuestra misión principal. Ahora yo debo sufrir las consecuencias de su acción. Durante trescientos sesenta años suyos, he visitado Pentecostés y el sistema Cass. Éste es mi decimonoveno viaje. Y nunca ha salido mal nada. Tengo un historial perfecto. Se espera que triunfe, y eso es lo que me exijo a mí mismo. Pero gracias a lo que Wilmer hizo en Remolino, todo se ha perdido. Esta visita se ha convertido en un desastre. Los materiales que debería traer del grupo de la Eleanora se han quedado atrás; la selección y adoctrinamiento de reclutas ha sido pospuesta; y llevo conmigo seis pasajeros adicionales al Mando, todos los cuales están clasificados como problemas potenciales. ¿Piensa que debo considerarme feliz?

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Entre los latidos de la noche»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Entre los latidos de la noche» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Charles Sheffield - Godspeed (novel)
Charles Sheffield
Charles Sheffield - Higher Education
Charles Sheffield
Charles Sheffield - Marea estival
Charles Sheffield
Charles Sheffield - Proteo desencadenado
Charles Sheffield
Charles Sheffield - El ascenso de Proteo
Charles Sheffield
Charles Sheffield - Le guide dell'infinito
Charles Sheffield
Charles Sheffield - The Amazing Dr. Darwin
Charles Sheffield
Charles Sheffield - Resurgence
Charles Sheffield
Charles Sheffield - The Compleat McAndrews
Charles Sheffield
Charles Sheffield - The Spheres of Heaven
Charles Sheffield
Отзывы о книге «Entre los latidos de la noche»

Обсуждение, отзывы о книге «Entre los latidos de la noche» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x