• Пожаловаться

Robert Sawyer: Vuelta atrás

Здесь есть возможность читать онлайн «Robert Sawyer: Vuelta atrás» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию). В некоторых случаях присутствует краткое содержание. Город: Barcelona, год выпуска: 2008, ISBN: 978-84-666-3781-7, издательство: Ediciones B, категория: Фантастика и фэнтези / на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале. Библиотека «Либ Кат» — LibCat.ru создана для любителей полистать хорошую книжку и предлагает широкий выбор жанров:

любовные романы фантастика и фэнтези приключения детективы и триллеры эротика документальные научные юмористические анекдоты о бизнесе проза детские сказки о религиии новинки православные старинные про компьютеры программирование на английском домоводство поэзия

Выбрав категорию по душе Вы сможете найти действительно стоящие книги и насладиться погружением в мир воображения, прочувствовать переживания героев или узнать для себя что-то новое, совершить внутреннее открытие. Подробная информация для ознакомления по текущему запросу представлена ниже:

Robert Sawyer Vuelta atrás

Vuelta atrás: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Vuelta atrás»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

La doctora Sarah Halifax logró descifrar y contestar el primer mensaje enviado por extraterrestres. Al cabo de treinta y ocho años, cuando ella es ya casi nonagenaria, llega la respuesta. Sólo Sarah es capaz de descifrarla, si vive el tiempo suficiente… Sarah y su esposo Don son sometidos a un costoso tratamiento de rejuvenecimiento (vuelta atrás). Don recupera la fortaleza física de sus veinticinco años, pero Sarah… Sawyer ofrece de nuevo una interesantísima exploración ética y moral, esta vez a escala humana y también cósmica, sobre la vida y el papel de la tecnología en el desarrollo futuro del ser humano.

Robert Sawyer: другие книги автора


Кто написал Vuelta atrás? Узнайте фамилию, как зовут автора книги и список всех его произведений по сериям.

Vuelta atrás — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Vuelta atrás», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема

Шрифт:

Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

—La verdad es que estaba en Huntsville —dijo Roger—. ¿Lo conoce?

—Claro. Bellos paisajes.

—Bingo. Mi hija vive allí. Dirige un hotelito. Y acaba de tener una niña, así que he ido a verla.

Don sonrió.

—Los nietos son maravillosos.

Roger lo miró intrigado, pero luego asintió.

—Sí que lo son, amigo.

—¿Ha estado antes en Canadá?

—Éste ha sido mi cuarto viaje, pero…

Su rostro, tan lleno de alegría cuando había mencionado a su nueva nieta, se entristeció, y Don pensó que quizás iba a decir que era probable que fuese la última vez. Pero lo que dijo fue:

—Es la primera vez que he ido solo. Mi esposa falleció el año pasado.

A Don el corazón le dio un vuelco.

—Lo siento.

—Gracias. Una mujer maravillosa, mi Kelly.

—Estoy seguro. ¿Cuánto tiempo estuvieron casados?

—Cincuenta años. Cincuenta años y una semana, en realidad. Es como si hubiera estado aguantando para llegar a ese día.

Don no dijo nada.

—¡La echo tanto de menos! —dijo Roger—. La echo de menos cada día.

Don escuchó a Roger hablar de su esposa y los buenos ratos que habían pasado juntos, y resistió la abrumadora necesidad de decir «lo sé» o «lo mismo me pasa a mí» o «es igual que pasaba con Sarah y conmigo».

Sin embargo, al final, Roger lo miró con una expresión avergonzada.

—Lo siento —dijo—. Supongo que me he puesto a divagar. Tendrá que perdonar a un viejo carcamal.

—En absoluto.

Roger sonrió. Tenía la cabeza redonda y muy poco pelo, y la piel áspera del hombre que ha disfrutado estando al sol casi toda su vida.

—Es usted un tío la mar de majo, por escucharme.

Don contuvo una sonrisa.

—Gracias.

—Bueno, amigo, ¿y cuál es su historia? ¿Por qué va a Oz?

—Lo cierto es que voy a Nueva Zelanda.

—¿La isla norte o la sur?

—La sur.

—Bueno, las dos son preciosas. Pero hay muchas ovejas.

Esta vez Don no contuvo su sonrisa. En cualquier caso, no podía decirle que había estado allí hacía casi sesenta años, y no sabía los suficientes detalles contemporáneos para hablar convincentemente de un viaje más reciente, así que se limitó a responder:

—Eso me han dicho.

—¿Qué lo trae a la tierra de los kiwis? ¿Negocios o placer?

—¿Sinceramente? Voy en busca de una chica.

Para su sorpresa, Roger le dio una palmada en la rodilla.

—¡Bien hecho, colega! ¡Bien hecho!

—Tal vez —dijo Don—. O tal vez no. Rompimos hace un año. Ella se fue a estudiar a Christchurch. Pero la he echado más de menos de lo que puedo decir.

—Ella sabe que va, ¿no?

Don negó con la cabeza y se preparó para que le dijeran que estaba haciendo el tonto.

Roger alzó las cejas.

—¿Quiere un consejito de un viejo?

—Son los mejores que conozco.

Roger ladeó la cabeza; presumiblemente esperaba una negativa a su ofrecimiento. Pero entonces asintió sabiamente.

—Está haciendo lo correcto. Las únicas cosas que lamento son las tonterías impetuosas que no hice.

Don sonrió.

—Es usted un hombre muy sabio.

Roger se echó a reír.

—Viva lo suficiente y también usted lo será, hijo.

44

Después de cambiar de avión, Don llegó por fin al aeropuerto de Christchurch a eso de las cinco de la madrugada, hora local. Odiaba tener que pagar una noche de hotel si no iba a alojarse hasta casi el amanecer, pero la alternativa sería intentar encontrarse con Lenore con aquella pinta desastrada, los ojos cansados y muerto de sueño. Ya le parecía bastante alocado lo que estaba haciendo.

Se inscribió en el hotel más barato que encontró on-line y tomó un taxi para llegar. Su habitación era más pequeña que las de América del Norte, pero tenía un balconcito. Después de lavarse un poco, se asomó. Aunque era verano, vio su aliento en el aire fresco del alba.

Casi todas las luces de los edificios cercanos estaban apagadas. Volvió a entrar en la habitación un instante, apagó la luz, salió de nuevo al balcón y dejó que sus cansados ojos se acostumbraran a la penumbra.

No puedes pasarte sesenta años casado con una astrónoma sin aprenderte algunas constelaciones, pero Don no vio casi ninguna familiar en aquel cielo sin luna, aunque había dos estrellas más brillantes que todas las demás. Alfa Centauri y Beta Centauri. Eran todo lo que podía recordar de su primer breve viaje a Australia hacía tantísimos años, excepto…

Escrutó el cielo y, sí, allí estaban, imposiblemente grandes: las Nubes de Magallanes, dos manchas contra la oscuridad. Se quedó allí en el balcón un rato, tiritando, contemplándolas.

Poco a poco empezó a salir el sol y el horizonte se volvió rosáceo y…

Y de repente hubo una cacofonía de cantos de aves: chirridos y trinos distintos a cualquiera que hubiera oído en Canadá. Un cielo desconocido, extraños sonidos de fondo: bien hubiese podido hallarse en un mundo alienígena.

Entró en la habitación, puso el despertador para que sonara al cabo de cinco horas, se acostó y cerró los ojos preguntándose qué le depararía el nuevo día.

Cuando se levantó, usó su datacom para comprobar su correo. Ahí estaba el habitual informe diario de progresos de Cody McGavin: todo iba bien con la fabricación del vientre. Las secuencias de ADN alienígena ya habían sido sintetizadas también en segmentos por cuatro laboratorios comerciales diferentes, y luego montadas mediante una versión de la técnica de secuenciación de genoma que se había empleado medio siglo antes para el primer mapa del genoma del Homo sapiens. Pronto, según decía McGavin, todo estaría preparado para empezar a cultivar los embriones.

Don había pensado en interceptar a Lenore cuando saliera de su apartamento o entrara en él; había resultado bastante fácil averiguar dónde vivía. Pero alguien podía interpretar lo que hacía como un acto de acoso; ella podía desconcertarse si aparecía allí por las buenas. Además, por lo que sabía, vivía con alguien, y no quería una confrontación con un novio celoso.

Y por eso decidió ir a verla a la universidad. Le bastó con unas cuantas preguntas a su datacom para descubrir que los estudiantes de astronomía tenían un coloquio. Antes de salir del hotel, sacó dinero del cajero del vestíbulo; recordó todas aquellas predicciones sobre una sociedad sin dinero en efectivo, pero también ésas habían fallado, sobre todo por el deseo de intimidad. Aunque el cajero le dio unos billetes flamantes, en ellos aparecía una versión mucho más joven del rey Guillermo que la de los billetes canadiense que él conocía; era como si Su Alteza Real se hubiera sometido a una vuelta atrás por su cuenta allí en las antípodas.

El taxi, conducido por un robot, lo dejó en la entrada del campus, junto a un gran cartel que decía:

NAU MAI, HAERE MAI KI TE
WHARE W'NANGA O WAITAHA

Palabras extrañas, texto desconocido. Pero en una piedra de Rosetta en forma de cartel paralelo, al otro lado del camino, ponía:

BIENVENIDOS A LA UNIVERSIDAD DE CANTERBURY

Un río atravesaba el campus, y él siguió por una de sus riberas hacia el edificio que le indicó un transeúnte, que albergaba el Departamento de Astronomía: una construcción de aspecto nuevo de ladrillo rojo semihundida en la falda de una colina. Cuando entró, empezó a buscar el aula, aunque le costó comprender la secuencia de números de las salas.

Se topó con el despacho del Departamento de Astronomía y asomó la cabeza por la puerta. Había un maorí de unos treinta años sentado a un escritorio, con el rostro lleno de intrincados tatuajes.

Читать дальше
Тёмная тема

Шрифт:

Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Vuelta atrás»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Vuelta atrás» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё не прочитанные произведения.


Robert Sawyer: Factor de Humanidad
Factor de Humanidad
Robert Sawyer
Robert Silverberg: Tiempo de cambios
Tiempo de cambios
Robert Silverberg
Danielle Steel: Joyas
Joyas
Danielle Steel
Robert Sawyer: Rollback
Rollback
Robert Sawyer
Отзывы о книге «Vuelta atrás»

Обсуждение, отзывы о книге «Vuelta atrás» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.