Qiu Xiaolong - Muerte De Una Heroína Roja

Здесь есть возможность читать онлайн «Qiu Xiaolong - Muerte De Una Heroína Roja» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Muerte De Una Heroína Roja: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Muerte De Una Heroína Roja»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Shanghai, 1990, el asesinato de la joven Guan «Hong Ying», una celebridad política y estandarte nacional, se convierte en un caso delicado un año después de los acontecimientos de la Plaza Tiananmen. El recién ascendido Inspector Jefe Chen Cao se muestra poco convencido por la máscara de perfección de la heroína roja, entregada a la causa del Partido, sin amigos ni amante.
Muerte de una heroína roja es mucho más que una historia de detectives. Llena de contrastes, es una radiografía sutil de la China de la transición, captada a través de una multitud de historias particulares y una apasionante inmersión en su historia, cultura, tradición poética y gastronómica. Una magnífica iniciación a la China de hoy.
Galardonada con el Premio Anthony a la mejor primera novela y finalista del prestigioso Premio Edgar, Muerte de una heroína roja es la confirmación de uno de los escritores más interesantes del momento.

Muerte De Una Heroína Roja — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Muerte De Una Heroína Roja», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– ¿Qué es esto?

– ¿Qué?

Él le tocó el pie descalzo. Tenía una mancha de salsa en el dedo pequeño, y se la quitó frotando con los dedos. Ella se acercó hasta rozar su mano. Chen se fijó en el dedo del anillo. Se apreciaba una franja de piel más clara, donde antes había llevado la sortija de matrimonio. Se quedaron así, tomados de la mano. Mirando su rostro enrojecido, Chen creyó estar ante un libro abierto que lo invitaba a leer. ¿O acaso ya leía demasiado?

– ¡Todo es tan maravilloso esta noche! -suspiró Wang-. Gracias.

– «Lo mejor está por venir» -avisó él recordando un poema casi olvidado-.

Hacía tiempo que esperaba ese momento. La luz suave realzaba el perfil de sus curvas bajo la fina tela de su vestido. Parecía otra mujer, madura, femenina y seductora. ¿Cuántas mujeres diferentes habitaban en ella? Wang se meció hacia atrás, apartándose de él, y le tocó la mejilla. La palma de su mano era ligera como una nube.

– ¿Vuelves a pensar en el caso?

– No. En este momento, no.

Era verdad, pero ahora se preguntaba por qué le preocupaba tanto el caso de Guan. ¿Se debía a las emociones tan intensas que había puesto en juego? Quizá su propia vida personal era tan prosaica que necesitaba compartir la pasión de otros, o quizá anhelase un cambio drástico en su vida.

– Tengo que pedirte un favor -dijo Wang-.

– Lo que desees.

– No quiero que me interpretes mal -respiró hondo y luego calló un instante-. Hay algo entre nosotros, ¿no?

– ¿Tú qué piensas?

– Lo supe desde que nos conocimos.

– Yo también.

– Antes de conocerte ya era la prometida de Yang, pero tú nunca me has preguntado nada.

– Tampoco tú sobre mí, ¿no? -le tomó la mano-. No tiene mayor importancia.

– Tú tienes una carrera prometedora -dijo con una emoción que se transmitió a todos sus finos rasgos-. Es muy importante para ti…, y para mí también.

– Una carrera prometedora…, pues no lo sé-eran palabras que sonaban como un preludio, lo presentía-. ¿Por qué tenemos que hablar de mi carrera ahora?

– Lo tenía todo preparado para decírtelo, pero es más difícil de lo que pensaba. Contigo aquí, que has sido tan bueno conmigo, me cuesta más…, mucho más.

– Dímelo, Wang.

– Verás, esta tarde he ido al Instituto de Lenguas Extranjeras de Shanghai, y la escuela pide una compensación por lo que han gastado con Yang, ¿sabes? Una compensación por su formación, por su salario y por la cobertura médica de sus años en la universidad, o no podré conseguir el documento para mi pasaporte. Es una suma importante, veinte mil yuanes. Me preguntaba si pudieras hablar con alguien en el Departamento de Pasaportes de tu oficina. Es la única manera en la que podría conseguirlo sin el documento del Instituto de Lenguas Extranjeras.

– ¿Quieres conseguir un pasaporte…, para ir a Japón?

No se parecía en nada a lo que él esperaba.

– Sí, ya he presentado la solicitud hace unas semanas.

Para salir de China, Wang necesitaba un pasaporte. Así que debía presentar una solicitud autorizada con la aprobación de su unidad laboral, y debido a su matrimonio, aunque fuese puramente virtual, también necesitaba un documento de la unidad laboral de Yang. Quizá fuera difícil, pero no imposible. A veces se concedían pasaportes sin la autorización de la unidad laboral. La posición del inspector jefe Chen le permitía ayudarle.

– Entonces, ¿vas a encontrarte con él? -preguntó incorporándose-. -Sí.

– ¿Por qué?

– Ha conseguido todos los documentos para que me reúna con él. Incluso me ha conseguido un trabajo en un canal de televisión china en Tokio. Es un canal pequeño, no como aquí, pero relacionado con mi línea de trabajo. No hay gran cosa entre él y yo, pero es una oportunidad que no puedo desperdiciar.

– Pero también tienes una carrera prometedora aquí.

– Una carrera prometedora aquí -repitió Wang con una sonrisa amarga-, obligada a contar una mentira tras otra.

Era verdad, según la idea que uno tuviera del trabajo de un periodista en China. Como reportera del periódico del Partido, Wang tenía que informar sometiéndose a los intereses de éste, que siempre figuraban en primer lugar. Para eso le pagaban, no cabía duda.

– Aun así, las cosas aquí están mejorando -dijo Chen, que se sentía obligado a decir algo-.

– A este paso tan lento,, en veinte años podré escribir lo que quiera, cuando esté vieja y canosa.

– No, no lo creo -Chen quería decirle que ella nunca sería vieja ni tendría canas, no para él, pero prefirió guardar silencio-.

– Tú eres diferente, Chen -dijo Wang-. Tú sí que puedes hacer algo aquí.

– Gracias por decírmelo.

– Te han propuesto para asistir al seminario del Instituto Central del Partido, y puedes llegar muy lejos en China. No creo que yo pueda serte de gran ayuda aquí…, para tu carrera, quiero decir -añadió al cabo de un momento-, e incluso peor…

– Lo fundamental es… -prosiguió con voz pausada- que te marchas a Japón.

– Sí, me marcho, pero pasará algún tiempo, por lo menos un par de meses, antes de que pueda conseguir el pasaporte y el visado, y estaremos j untos… como esta noche -Wang levantó la cabeza y se llevó una mano al hombro desnudo con un gesto ligero, como si fuera a quitarse una de las tiras-. Algún día, cuando ya no estés interesado en tu carrera política aquí, quizá puedas reunirte conmigo allá.

Él se giró para mirar por la ventana. La calle a esa hora había cobrado vida con una multitud de paraguas de colores. La gente iba de un lado a otro y, quizá, también hacia diferentes destinos. Él creía que el matrimonio de Wang era un fracaso. Nadie podría destrozarlo, a menos que ya estuviera deshecho. En este caso la prueba era que el hombre había abandonado a su mujer, pero ella aún quería reunirse con ese hombre, y no con él.

Esa noche no se parecía en nada a lo que él esperaba, y tal vez, todo duraría un par de meses más.

El padre de Chen, un prestigioso profesor de neoconfucianismo, había enseñado a su hijo todas las doctrinas éticas. No había sido un esfuerzo inútil, y él no había sido miembro del Partido durante todos esos años por nada. Wang era la mujer de otro hombre, seguiría siéndolo. Eso lo decía todo. Había un límite que no podía franquear.

– Dado que vas a reunirte con tu marido -se giró para mirarla-, no creo que sea buena idea que nos sigamos viéndonos…, de esta manera, quiero decir. Seguiremos siendo amigos, eso sí. En cuanto a lo que me pides, haré todo lo que pueda.

Ella parecía atónita. Sin decir palabra, apretó los puños y luego ocultó la cara entre las manos. Él sacó con un gesto brusco un cigarrillo de su paquete y lo encendió.

– No es fácil para mí -murmuró Wang-, y no sólo para mí.

– Te entiendo.

– No, no me entiendes. He pensado en ello. No es justo…, para ti.

– No lo sé -dijo él-, pero haré todo lo posible por conseguirte el pasaporte -insistió-. Te lo prometo.

Era lo único que se le ocurría decir.

– Sé lo mucho que te debo.

– ¿Para qué están los amigos? -dijo, como si un invisible disco de frases hechas comenzase a sonar en su cerebro-.

– Entonces, me voy.

– Sí, es tarde. Te llamaré un taxi.

Ella levantó la cara, y en sus ojos asomó el destello de las lágrimas. Su palidez acentuaba sus rasgos. ¿Era aún más bella en ese momento? Wang se inclinó para ponerse los zapatos. Se miraron sin hablarse. Al cabo de un rato, llegó el taxi. Oyeron cómo sonaba el claxon bajo la lluvia. Él insistió en dejarle su impermeable, un impermeable negro de policía, una prenda sin forma con una capucha fantasmal.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Muerte De Una Heroína Roja»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Muerte De Una Heroína Roja» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Qiu Xiaolong - Shanghai Redemption
Qiu Xiaolong
Qiu Xiaolong - Enigma of China
Qiu Xiaolong
Qiu Xiaolong - Don't cry Tai lake
Qiu Xiaolong
Qiu Xiaolong - El Caso Mao
Qiu Xiaolong
Qiu Xiaolong - Seda Roja
Qiu Xiaolong
Qiu Xiaolong - A Case of Two Cities
Qiu Xiaolong
Qiu Xiaolong - When Red is Black
Qiu Xiaolong
Qiu Xiaolong - Red Mandarin Dress
Qiu Xiaolong
Qiu Xiaolong - The Mao Case
Qiu Xiaolong
Отзывы о книге «Muerte De Una Heroína Roja»

Обсуждение, отзывы о книге «Muerte De Una Heroína Roja» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x