Harlan Coben - Muerte en el hoyo 18

Здесь есть возможность читать онлайн «Harlan Coben - Muerte en el hoyo 18» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Muerte en el hoyo 18: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Muerte en el hoyo 18»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

El golf, precisamente, no es el deporte preferido de Myron Bolitar. Pero ahí está: presenciando entre bostezos el Abierto de Estados Unido. Es el mejor escaparate para un agente deportivo en busca de clientes. Y parece que va a tener suerte: Linda Coldren, número uno en la lista de ganancias en el circuito americano promete contratarle. Antes, sin embargo, tendrá que encontrar a su hijo, que ha desaparecido misteriosamente justo cuando el marido de Linda, Jack, parece que va a tener de nuevo la posibilidad de ganar el torneo. Win, para sorpresa de Bolitar, sin embargo, le va a pedir que no acepte el caso. Myron, por una vez, decide ignorarle y se lanza a la búsqueda de Chad. Muy pronto comprenderá que nunca debió de hacerlo. Descubrirá que un mundo de falsas apariencias, estafas, dolor y muerte, pero, sobre todo, obligará a Win a revivir su pasado, traumas de la infancia que no se olvidan jamás.

Muerte en el hoyo 18 — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Muerte en el hoyo 18», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Aquello iba a cambiar muy pronto.

Myron dio un salto y descargó todo su peso sobre la rodilla mala del Fugitivo. Éste abrió los ojos como platos y soltó un grito, que Myron acalló de inmediato de un puñetazo en la boca, para a continuación sentarse a horcajadas sobre él y hundirle el cañón de la pistola en la mejilla.

– Vuelve a gritar y eres hombre muerto -masculló Myron.

El Fugitivo permaneció con los ojos muy abiertos. De la boca le chorreaba un hilillo de sangre. No gritó. A pesar de todo, Myron estaba decepcionado consigo mismo. ¿Vuelve a gritar y eres hombre muerto? ¿No se le había podido ocurrir algo menos convencional?

– ¿Dónde está Chad Coldren? -preguntó.

– ¿Quién?

Myron metió a la fuerza el cañón de la pistola en la boca ensangrentada del Fugitivo, rompiéndole algún que otro diente y provocándole una arcada.

El Fugitivo guardó silencio. Era un tipo valiente. O quizá, sólo quizá, no podía hablar porque Myron estaba hundiéndole el cañón de la pistola hasta la garganta. «Afloja un poco, Bolitar.» Sin alterar un ápice a severidad de su expresión, Myron sacó despacio el cañón.

– ¿Dónde está Chad Coldren?

El Fugitivo jadeó e intentó recobrar el aliento.

– Lo juro por Dios, no sé de qué me habla.

– Dame una mano.

– ¿Qué?

– Dame una mano.

El Fugitivo levantó una mano. Myron agarró la muñeca, la hizo girar y dio un tirón al dedo corazón. Lo dobló hacia dentro y lo aplastó contra la palma. El chico arqueó la espalda a causa del dolor.

– No necesito un cuchillo -dijo Myron-. Puedo triturarlo y dejarlo hecho astillas.

– No sé de qué me habla -balbuceó el Fugitivo-. ¡Lo juro!

Myron apretó un poco más. No quería partirle el dedo. El Fugitivo volvió a arquear la espalda. «Sonríe un poco -pensó Myron-. Así es como lo hace Win. Apenas esboza una leve sonrisa. Quieres que tu víctima piense que eres capaz de cualquier cosa, que eres frío como un témpano, que hasta puede que disfrutes con lo que haces. Ahora bien, no quieres que piense que estás loco de remate, fuera de control, que eres un chiflado dispuesto a hacerle daño haga lo que haga. Hay que explotar ese punto medio.»

– Por favor…

– ¿Dónde está Chad Coldren?

– Oye, yo estaba allí cuando te atacó, ¿vale? Tit me dijo que me daría cien dólares, pero no conozco a ningún Chad Coldren.

– ¿Dónde está Tit?

– En su choza, supongo. No lo sé.

¿Choza? El neonazi empleaba una jerga callejera anticuada. Ironías de la vida.

– ¿Tito no suele quedar con vosotros en el Parker Inn?

– Sí, pero hoy no ha aparecido.

– ¿Tenía que ir?

– Supongo. Aunque tampoco es que hubiésemos quedado.

Myron asintió.

– ¿Dónde vive?

– Mountainside Drive. Al final de la calle. La tercera casa a la izquierda después de la curva.

– Como me estés mintiendo, volveré aquí y te arrancaré los ojos.

– No miento. Mountainside Drive.

Myron señaló con el cañón de la pistola el tatuaje de la esvástica.

– ¿Por qué llevas eso?

– ¿El qué?

– La esvástica, imbécil.

– Porque estoy orgulloso de mi raza, por eso.

– ¿Te gustaría meter a todos los judíos en cámaras de gas y matar a todos los negros?

– No vamos de ese palo. -Había más seguridad en la voz del Fugitivo; tenía el tema bien estudiado-. Estamos a favor del hombre blanco. No queremos que nos invadan los negros. No queremos que nos pisoteen los judíos.

Myron asintió.

– Te comunico que en estos momentos tienes a un judío encima de ti -dijo. En la vida, intentas obtener satisfacción de donde puedes-. ¿Sabes qué es la cinta aislante?

– Sí.

– ¡Caramba! Y yo que pensaba que todos los neonazis erais idiotas. ¿Dónde la tienes?

El Fugitivo entrecerró los ojos, como si en efecto estuviera pensando.

– No tengo.

– Qué lástima. Pensaba atarte con ella, para que no pudieras avisar a Tito. Pero si no tienes, tendré que dispararte en las rodillas.

– ¡Espera!

Myron empleó casi todo el rollo.

Tito estaba sentado al volante de su camioneta. Muerto.

Había recibido dos disparos en la cabeza, probablemente a quemarropa. Un espectáculo de lo más sangriento. Le habían destrozado la cabeza.

Pobre Tito. Sin cabeza y sin culo. Myron no rió. Una vez más se dio cuenta de que el humor negro no era su fuerte.

Conservó la calma, probablemente porque seguía actuando como Win. No había luces encendidas en la casa. Las llaves de Tito seguían puestas en el contacto. Myron las extrajo y abrió la puerta principal. Inspeccionó la casa y confirmó lo que ya había supuesto: allí no había nadie.

¿Y ahora qué?

Haciendo caso omiso de la sangre y la materia gris, Myron regresó a la camioneta y efectuó un minucioso registro. Desde luego, aquello no era lo suyo. Myron volvió a pensar cómo lo haría Win. No era más que protoplasma, se dijo. Sólo hemoglobina, plaquetas, enzimas y otras sustancias que le habían enseñado en las clases de biología del instituto y que ya había olvidado. El bloqueo mental dio suficiente resultado como para permitirle hurgar a tientas debajo de los asientos y en las hendiduras de la tapicería. Sus dedos tropezaron con montones de mugre. Bocadillos resecos. Envoltorios de Wendy's. Migajas de distintas formas y tamaños.

Uñas cortadas.

Myron contempló el cuerpo sin vida del Sarnoso y sacudió la cabeza. Demasiado tarde para una reprimenda, pero qué demonios.

Entonces dio con el tesoro.

Un anillo de oro. Tenía grabada una insignia de golf en la parte exterior y «C.B.C.» en el interior. Chad Buckwell Coldren.

Eureka.

El primer pensamiento de Myron fue que Chad Coldren había tenido la astucia de quitárselo y depositarlo allí a modo de indicio. Como en una película. El muchacho enviaba un mensaje. Si Myron hubiese interpretado su papel correctamente, habría negado con la cabeza, lanzado el anillo al aire y murmurando: «Chico listo.»

Sin embargo, el pensamiento que lo asaltó fue descorazonador.

El dedo amputado que habían hallado en el coche de Linda Coldren era un anular.

24

¿Qué hacer?

¿Ponerse en contacto con la policía? ¿Efectuar una llamada anónima? ¿Qué?

Myron no tenía la menor idea. Ante todo, había que pensar en Chad Coldren. ¿Qué riesgo supondría para el muchacho que avisara a la policía?

Ni idea.

Menudo lío. Se suponía que ya estaba fuera de aquel asunto, o que debería estarlo. Sin embargo, las circunstancias habían cambiado y no podía ignorarlas. ¿Cómo debía actuar ante el hallazgo de un cadáver? Y ¿qué debía hacer con el Fugitivo? Myron no podía abandonarlo maniatado y amordazado. ¿Y si vomitaba y moría asfixiado? ¡Por el amor de Dios!

«De acuerdo, Myron, piensa. En primer lugar, no debes (repite, no debes) llamar a la policía. Tarde o temprano alguien descubrirá el cadáver. Quizá si efectuaras una llamada anónima desde un teléfono público… podría dar resultado. Pero… parece mentira que no sepas que la policía graba todas las llamadas que recibe. Tendrían tu voz grabada. Tal vez podrías modificarla, hablar con una entonación más grave, añadir un acento o algo así. Espera, cuelga el auricular. Piensa en lo que ha sucedido en la última hora y analiza los hechos.»

Sin una razón convincente, Myron había entrado por la fuerza en la casa de un hombre, lo había agredido físicamente, amenazándolo de la forma más terrible, y lo había dejado atado y amordazado, todo ello para averiguar el paradero de Tito. Poco después de ese incidente, la policía recibía una llamada anónima y al cabo de un rato encontraba a Tito muerto en su camioneta.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Muerte en el hoyo 18»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Muerte en el hoyo 18» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Harlan Coben - Don’t Let Go
Harlan Coben
Harlan Coben - W głębi lasu
Harlan Coben
Harlan Coben - Motivo de ruptura
Harlan Coben
Harlan Coben - Tiempo muerto
Harlan Coben
Harlan Coben - Play Dead
Harlan Coben
Harlan Coben - Caught
Harlan Coben
libcat.ru: книга без обложки
Harlan Coben
Harlan Coben - The Innocent
Harlan Coben
Harlan Coben - Just One Look
Harlan Coben
Harlan Coben - Bez Skrupułów
Harlan Coben
Harlan Coben - Tell No One
Harlan Coben
Harlan Coben - Jedyna Szansa
Harlan Coben
Отзывы о книге «Muerte en el hoyo 18»

Обсуждение, отзывы о книге «Muerte en el hoyo 18» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x