Brad Meltzer - Los millonarios

Здесь есть возможность читать онлайн «Brad Meltzer - Los millonarios» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Триллер, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Los millonarios: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Los millonarios»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Si supiera que no será descubierto ¿robaría tres millones de dólares?
Charlie y Oliver Caruso son hermanos y trabajan en un banco privado tan exclusivo que se necesitan dos millones de dólares para abrir una cuenta. Allí descubren una cuenta abandonada, cuya existencia nadie conoce y que no pertenece a nadie, con tres millones de dólares. Antes de que el estado se quede con el dinero deciden apropiárselo, sin saber que algo que hacen para resolver su existencia estará a punto de costarles la vida.

Los millonarios — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Los millonarios», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– ¿De qué diablos estás hablando?

– En el banco hacemos lo mismo cuando se trata de las cuentas importantes. Si estuvieses escondiendo un arma humeante en el centro de uno de los sitios web más importantes del mundo, ¿no enterrarías un par de minas terrestres para tener un poco de seguridad?

– Espera un momento, ¿o sea que ahora crees que se trata de una trampa? -dice Gillian.

– Lo único que digo es que deberíamos escoger con cuidado la contraseña correcta -le digo casi con indiferencia. Charlie me mira, sorprendido ante mi tono.

– Intenta con «Duckworth» -le digo.

Charlie teclea la palabra «Duckworth» en el teclado y luego pulsa «Enter».

«Fallo en el reconocimiento de la contraseña – Para imprimir este documento, por favor reintroducir contraseña.»

Mierda. Si este sistema es similar al que utilizamos en el banco, sólo tenemos otras dos oportunidades. Tres intentos y quedamos fuera de juego.

– ¿Alguna otra idea brillante?

– ¿Qué me dices de «Martin Duckworth»? -sugiero.

– Tal vez la contraseña sea algo estúpido, como su dirección -dice Gillian.

– ¿Qué me dices de «Arthur Stoughton»? -añade Charlie, recurriendo al primer nombre de la tira de fotos.

Gillian y yo le miramos. Cuando asentimos, teclea rápidamente «Arthur Stoughton» y golpea la tecla «Enter».

«Fallo en el reconocimiento de la contraseña – Para imprimir este documento, por favor reintroducir contraseña.»

– Juro que meteré el pie a través de la jodida pantalla -se queja Charlie.

Sólo nos queda un intento.

– Intenta el nombre del tío con la hendidura en la barbilla -digo.

– Inténtalo con el número de la cuenta de mi padre en el banco -sugiere Gillian.

– Inténtalo con «Gillian» -digo, mi voz y mi seguridad absolutamente vacilantes. No soy el único. La desesperación se instala en el rostro de Charlie. El sabe lo que nos estamos jugando-. «Gillian» -repito.

Charlie se frota la mejilla con los nudillos. La idea no le apasiona ni mucho menos. Sin embargo, no hay tiempo para discutir.

Volviéndose hacia Gillian, estudia sus penetrantes ojos azules y busca la mentira. Pero, como siempre, la mentira no aparece.

– Inténtalo -insisto.

Charlie mira el teclado, escribe la palabra «Gillian» y está a punto de pulsar «Enter». Pero, por alguna razón, justo cuando las yemas de sus dedos rozan la tecla, se detiene.

– Venga, Charlie.

– ¿Estás seguro? -pregunta con voz temblorosa-. Tal vez deberíamos…

– Sólo tienes que apretar la jodida tecla -le digo, inclinándome hacia el teclado y pulsándola yo mismo.

Los tres nos quedamos hipnotizados ante la pantalla, esperando la respuesta del ordenador.

Se produce una pausa larga y vacía. A la distancia puedo oír a alguien que hojea una revista. El aparato de aire acondicionado produce un leve zumbido… el chico del porno se ríe tontamente… y para sorpresa de todos nosotros, la impresora láser ronronea suavemente.

– No puedo creerlo -dice Charlie cuando sale la primera página de la máquina-. Finalmente nos han dado un respiro.

Con una amplia sonrisa que le ilumina el rostro, salta de su silla, se lanza hacia adelante y coge la página de la impresora. Pero cuando la tiene en las manos, la sonrisa se desvanece en sus labios. Sus hombros se hunden. Miro la hoja que tiembla en sus manos. Está completamente en blanco.

Ambos nos volvemos hacia la pantalla del ordenador justo a tiempo para ver que la cuenta de Duckworth se vuelve lentamente negra. Hemos entrado en el campo de minas.

– ¡Charlie…!

– ¡Estoy en ello! -dice. Coge el ratón y pulsa todos los botones que tiene a la vista. No hay forma de detenerlo. Casi ha desaparecido.

– ¡Consigue la dirección de la página web…! -grito.

Nuestros ojos se clavan en la dirección que aparece en la parte superior de la pantalla. Yo me encargo de la primera mitad; Charlie memoriza la segunda.

Gillian está perdida.

– ¿Qué estáis haciendo?

– ¡Ahora no! -le digo, haciendo un esfuerzo por memorizar mi parte.

La pantalla parpadea y aparece una nueva imagen. Son los Siete Enanitos y un botón rojo que dice «Directorio de la Compañía». De vuelta al principio. Pero al menos seguimos en el sitio interno de los empleados.

– Charlie, ve a…

Antes de que pueda acabar la frase, Charlie ya está allí, activando ansiosamente el botón de «Directorio». En la pantalla aparecen cientos de fotografías de la compañía. Charlie repite la operación que ha realizado minutos antes y comienza a pasar las pantallas hasta llegar a la sección «Imagineering». Igual que antes, encuentra el rostro del hombre negro con la barbilla hendida. Igual que antes, activa el cursor sobre el rostro. Pero, esta vez, no sucede nada. La fotografía ni siquiera se mueve.

– Ollie…

– Tal vez debas examinar las cuatro fotografías -sugiere Gillian.

– Pulsa otra vez -insisto.

– Ya lo he hecho. Pero es inútil -dice Charlie presa del pánico.

– Incluye la dirección.

Charlie me pasa el teclado y se aparta del ordenador mientras yo tecleo la primera mitad de la dirección memorizada. Luego él añade la otra mitad. En el instante en que pulsa «Return», la pantalla pasa a una página completamente nueva.

– Está bien. Aún estamos dentro… -dice mientras aguardamos a que la imagen se cargue. Y, por un segundo, todo parece indicar que Charlie tiene razón. Pero cuando la página aparece finalmente, mi estómago da un vuelco. Lo único que se ve en la pantalla es un fondo absolutamente blanco. Nada más. Sólo otra página vacía.

– ¿Qué diablos es esto? -pregunto.

– Ha desaparecido…

– ¿Desaparecido? Eso es imposible. Vuelve hacia atrás.

– No hay nada que hacer -dice Charlie-. No está aquí.

– ¿Estás seguro de que has escrito la dirección correcta? -pregunta Gillian.

Charlie vuelve a comprobar la dirección.

– Esto es exactamente lo que nosotros…

– No ha desaparecido -insisto-. No puede haber desaparecido.

Paso junto a Charlie y me dirijo al ordenador más cercano, quitando del teclado el cartel de «Fuera de servicio».

En pocos segundos me encuentro ante la página de Disney.com: «Donde la magia vive Online».

– Todo lo que necesitamos es volver a empezar -digo con mi mejor acento de Brooklyn.

– Ollie…

– No hay problema -le digo, ya a mitad de camino de mi objetivo. Gillian también dice algo pero estoy demasiado ocupado examinando las biografías de los ejecutivos de la compañía.

– Ollie, ha desaparecido. No hay forma de que puedas encontrarlo.

– Sé que está aquí, sólo una página más.

Cuando logro encontrar la pirámide de la corporación, en la pantalla aparecen las fotografías de una docena de empleados. Por segunda vez voy en línea recta hasta Arthur Stoughton, coloco el cursor en su sitio y activo la fotografía. Cuando no sucede nada vuelvo a pulsar el ratón. Y una vez más. La foto no se mueve.

– Es imposible -murmuro. Tratando de no perder la calma busco la fotografía del banquero pálido. Luego paso a la imagen del pelirrojo. Pero, nuevamente, no sucede nada.

– Venga… por favor -imploro.

Levantándose de su silla, Charlie apoya una mano sobre mi hombro.

– Ollie…

Miro la pantalla, hundido en mi silla. Tengo los codos apoyados en las rodillas.

– ¿Por qué no podemos tener nunca un momento de respiro? -pregunto, y mi voz se quiebra.

Es una pregunta retórica a la que Charlie no puede responder. Mantiene la mano apoyada en mi hombro y comprueba la pantalla. Apenas si puede soportarlo. No le culpo. Hace cinco minutos teníamos todo lo que Duckworth había creado. Y ahora -mientras mi hermano y yo permanecemos con los ojos pegados a la pantalla- no tenemos absolutamente nada. No hay ningún logotipo del banco. Ninguna cuenta oculta. Y, lo peor de todo, ninguna prueba.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Los millonarios»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Los millonarios» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Brad Meltzer - The Zero Game
Brad Meltzer
Brad Meltzer - The First Councel
Brad Meltzer
Brad Meltzer - The Inner Circle
Brad Meltzer
Brad Meltzer - The Tenth Justice
Brad Meltzer
Brad Meltzer - Dead Even
Brad Meltzer
Brad Meltzer - The Millionaires
Brad Meltzer
Nuevos Millonarios 2K19 - La ruta de la verdad
Nuevos Millonarios 2K19
Elena Ortiz Jiménez - Donald Meltzer, vida onírica
Elena Ortiz Jiménez
Отзывы о книге «Los millonarios»

Обсуждение, отзывы о книге «Los millonarios» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x