Rodolfo Martínez - Sherlock Holmes y la boca del infierno

Здесь есть возможность читать онлайн «Rodolfo Martínez - Sherlock Holmes y la boca del infierno» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Детектив, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Sherlock Holmes y la boca del infierno: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Sherlock Holmes y la boca del infierno»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Dos detectives. Un mago. Y todas las legiones del Infierno. Sus caminos se han cruzado en el pasado, y volverán a cruzarse. Por un lado, Sherlock Holmes, el famoso detective, que parece haberse retirado para dedicarse a la cría de abejas. Por otro, Aleister Crowley, brujo y profeta autoproclamado como el hombre más perverso de su época. Una oscura noche tormentosa, en algún lugar de la costa de Portugal, Crowley pondrá en práctica un ritual que amenazará con derribar las barreras entre los mundos, y Holmes estará allí para impedírselo. Pero, ¿podrá Holmes soportar el dolor de la pérdida que será el precio de su triunfo? ¿Cómo seguir siendo la implacable máquina de razonar cuando la misma realidad escapa a la razón?
En esta nueva pieza de su obra holmesiana, iniciada con La sabiduría de los muertos y Las huellas del poeta, Rodolfo Martínez entrelaza las ficciones de Arthur Conan Doyle y H.P. Lovecraft para crear un universo particularísimo donde tienen cabida algunos de los personajes más entrañables de la literatura popular.

Sherlock Holmes y la boca del infierno — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Sherlock Holmes y la boca del infierno», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– Estoy bien, William -dijo, respondiendo a la pregunta que no llegué a formularle.

Asentí. La noche ya había caído por completo a nuestro alrededor y la tormenta estaba prácticamente sobre nosotros.

Bueno, Anni, si vas a llegar no hay mejor momento que el presente, me dije.

Capítulo IV. Los habitantes de las sombras

Pero debía de tener otros planes, porque pasamos un buen rato bajo la tormenta sin que nadie se acercara a la Boca del Infierno. Las horas se fueron arrastrando y, lentamente, el temporal empezó a morir. Lo hacía a regañadientes, como un mago de feria que no termina de creerse que el público no va a venir.

Pero al final, la tormenta terminó y sobre nosotros se abrió una noche despejada y cuajada de estrellas.

Vi que Adamson sonreía con la vista clavada en el cielo. El rostro de Holmes, como muchas otras veces, era un enigma indescifrable.

– Ya viene -susurró de pronto nuestro anfitrión.

Seguí el gesto de su mano. Sí, alguien se acercaba. Una figura menuda que se movía por entre las rocas con agilidad. No tardaría en llegar cerca de donde estábamos. Adamson se puso en pie y Holmes y yo lo seguimos.

Era una mujer, envuelta en un largo abrigo negro, y se dirigía hacia la Boca del Infierno. Había algo extraño en ella y enseguida me di cuenta de que llevaba las manos a la espalda y que no las movió durante todo el trayecto. A su alrededor… por un momento tuve la impresión de que había alguien más, pero la sensación pasó tan rápido como había llegado. Una sombra, me dije, un truco de la luz.

Llegó al borde de la Boca del Infierno; miró hacia abajo y no pareció muy complacida. Alzó de pronto la vista al oírnos llegar. No había sorpresa alguna en su rostro altivo.

– Me esperabas -le dijo a Adamson.

– Claro.

– Y tus acompañantes… Reconozco al detective, pero el otro…

– No importa, Anni. Están aquí para observar lo que pasa. No intervendrán.

Intercambié una mirada con Holmes y éste asintió en silencio.

– Humanos -dijo ella, encogiéndose de hombros-. Gusanos que no comprenden lo que tienen.

– Cierto -dijo Adamson-. En eso no son muy distintos de nosotros.

– Cómo te atreves. Cómo puedes decir eso. Tú mejor que nadie deberías saberlo. Lo tenías todo.

– No tenía nada.

– ¿Y qué tienes ahora?

– Lo mismo.

Ella meneó la cabeza, como si no comprendiera.

– Traidor -musitó.

– Quizá.

Guardaron silencio. Permanecieron así largo rato, callados e inmóviles, mirándose con la Boca del Infierno en medio de ellos.

– No tiene sentido seguir hablando -dijo ella.

– Entonces, ¿por qué lo haces? ¿Por qué sigues aquí?

Vi que se mordía el labio, como si no estuviera muy segura de qué respuesta dar. Tuve de pronto la sensación de que algo se movía a mi espalda, pero al volverme, no vi nada. Cuando miré de nuevo hacia Anni, me di cuenta de que sonreía de un modo feroz.

– Supongo que la respuesta que esperas es que he vuelto para estar completa otra vez. Que mis otras dos partes están aquí, atrapadas en medio de ningún sitio, sin poder volver, sin ser capaces de seguir adelante o dar media vuelta. Que he venido para reunirme con ellas. Para ser uno solo de nuevo. Y que entonces…

– Esto no es necesario -dijo Adamson-. Sé a qué has venido, Anni.

– No sabes nada.

– Es posible. Pero noto tus dudas. Y noto muchas otras cosas.

Vi que miraba a su alrededor y que detenía la vista aquí y allá, como si estuviera contemplando algo interesante. Anni se encogió de hombros.

– Esa parte no es más que un reflejo, ¿no es eso lo que esperas que diga? Un recuerdo.

Adamson sonrió con tristeza y meneó la cabeza.

– No, Anni. Eso es lo que tú eres; y creo que lo sabes. Un recuerdo de otra cosa. Un recuerdo que te ha infectado. Tú dirías que ha infectado a tu anfitriona; pero eres tú. Ya no puedes volver, porque en realidad nunca has estado aquí. Aunque saltes ahora y destruyas ese cuerpo humano, será para nada. Lo que eres… lo que eras no puede volver a ser. O, en cierto modo, no ha dejado de serlo jamás.

Anni alzó la vista y miró a Adamson con sorpresa.

– Te burlas.

– No. ¿Por qué debería? Nunca cruzaste a este lado, y lo sabes. Sólo enviaste información, recuerdos, pero nunca a ti misma. Sigues en nuestro mundo, tres y uno solo a la vez, esperando. O quizá debería decir que ella no saltó a este lado, que sólo envió sus recuerdos y que sigue en nuestro mundo, esperando. No eres quien crees que eres.

– ¿No volveré a serlo si salto?

– Si saltas… tus recuerdos se unirán a los de Wiggins y Crowley, sí. Y tendrán la fuerza suficiente para abrir la puerta otra vez. Y, es cierto, los fantasmas que seréis entonces pasarán al otro lado y serán asimilados. Quizá. Con mucha suerte. Pero tú, lo que tú eres realmente, habrá muerto.

– Pero no lo recordaré así.

– Tú no recordarás nada. Ya no existirás. Quien recuerde será otro. Otro que creerá haber sido tú. Por un tiempo.

– ¿Y si eso fuera suficiente para mí?

– No importa. No lo es para mí. Y creo que en realidad tampoco lo es para ti, y que lo sabes.

– Sé menos que tú. Y tú no sabes nada.

– Como te dije antes: «quizá». Pero sé lo bastante para saber que no quieres saltar al pozo donde te aguardan los fantasmas de tus antiguos socios. Que, aunque has venido hasta aquí, no lo has hecho por tu propia voluntad. Que no estás sola.

– Claro que lo estoy.

– ¿En un sentido ontológico? Es posible, pero no es algo que vaya a ponerme discutir ahora. -Pareció repentinamente cansado y, por un momento, dio la impresión de llevar miles de años sobre sus espaldas-. Diles a tus acompañantes que se muestren. Acabemos con esta farsa.

Pero Anni apretó las mandíbulas y volvió a bajar la vista. Sin embargo, Adamson tenía razón, porque no hizo ademán alguno de saltar a la Boca del Infierno. Se quedó allí, mirando hacia abajo, como si esperase que otro tomase la decisión por ella.

Adamson se volvió hacia el detective.

– ¿Los ve, Holmes?

– Mi vista ya no es lo que era, pero mis capacidades de observación no han menguado. Hay uno a cada lado de la señorita Jaeger y dos más tras ella. Y creo que unos tres o cuatro intentan acercarse a nosotros por detrás.

Adamson asintió.

– No está mal -dijo.

Miré hacia donde Holmes había dicho, tratando de comprender de qué estaba hablando. Anni estaba sola. No había…

Un momento.

No.

Pero…

Si apartaba la vista, durante un instante fugaz casi era capaz de ver algo, como una figura humana cuyo contorno estuviera roto, quebrado; pero si intentaba mirarlo directamente, se desvanecía. Me sentí mareado y me di cuenta de que Holmes me sujetaba por el brazo.

– Cuidado, William. No es un buen momento para perder el equilibrio.

– Lo siento, es que…

– Lo sé, es desconcertante hasta que te acostumbras. Cuando la sección Q me mostró los primeros prototipos hace un par de meses, me pasó lo mismo. Y no estaban, ni de lejos, tan elaborados como éstos. Alguien nos lleva una gran ventaja.

– Nadie, en realidad -dijo Adamson.

– Cierto -respondió Holmes con una sonrisa resignada.

Miré a ambos, sin entender a qué se referían.

– Te lo habría contado antes -me dijo Holmes-, pero con la situación de Carmen no me pareció el mejor momento. Tenías otras cosas en las que pensar. Nuestra sección Q lleva un tiempo trabajando en esto, pero veo que nuestros amigos ya han pasado de la fase de experimentación.

Fruncí el ceño.

– ¿Camuflaje?-pregunté.

Holmes asintió.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Sherlock Holmes y la boca del infierno»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Sherlock Holmes y la boca del infierno» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Sherlock Holmes y la boca del infierno»

Обсуждение, отзывы о книге «Sherlock Holmes y la boca del infierno» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x