Jo Nesbø - Nemesis

Здесь есть возможность читать онлайн «Jo Nesbø - Nemesis» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Детектив, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Nemesis: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Nemesis»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Una cámara de seguridad muestra a un atracador en un banco de Oslo apuntando a un empleado. Le ha dado veinticinco segundos al director para que vacíe el cajero. Dispara. Ha tardado treinta y uno. A Harry Hole, el impredecible detective que ha dado fama mundial a Jo Nesbø, la imagen granulada del homicidio no se le va de la cabeza. Junto a la inexperta Beate Lønn deberá encontrar al asesino. Siguen la pista hasta un famoso atracador. Sólo que está en la cárcel. Además, Harry Hole tiene un gran defecto: nadie como él sabe crearse problemas y casi siempre huelen a alcohol. Cuando parecía que su vida privada había alcanzado la paz con Rakel y sus problemas en la comisaria estaban resueltos, amanece con una resaca que despierta sus peores pesadillas. Sólo recuerda la insensatez que cometió la noche anterior: atender la llamada y la invitación de Anna, una antigua novia, nada más. Lo peor es que Anna ha aparecido muerta esa misma mañana. Y él es el sospechoso, a menos que pueda aclarar y demostrar lo que ha hecho durante las últimas doce horas.

Nemesis — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Nemesis», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– Veintiuno.

Entonces se volvió sorprendido hacia Cathrine y, al hacerlo, se dio cuenta de que había un hombre a su lado. En un primer momento, le pareció que era negro, pero luego vio que llevaba un pasamontañas negro. El cañón del rifle AG3 que sostenía giró y se detuvo ante Elmer.

– Veintidós -gritó Cathrine con voz hueca.

– ¿Por qué aquí? -preguntó Halvorsen mirando con los ojos entrecerrados hacia el fiordo de Oslo, que fluía a sus pies.

El viento le alborotó el flequillo que aleteaba de un lado a otro de la frente. Habían tardado menos de cinco minutos en conducir desde el contaminado barrio de Grønland hasta Ekeberg, que sobresalía como una torre de vigilancia verde en la esquina sudeste de la ciudad. Bajo los árboles hallaron un banco con vistas al viejo y bello edificio que Harry seguía llamando la Academia de Marineros, a pesar de que ahora formaba a empresarios.

– En primer lugar, porque aquí se está muy bien -aseguró Harry-. Segundo, porque es buen sitio para enseñarle a un forastero algo de la historia de la ciudad. La silaba Os de Oslo significa colina y se refiere a la que tenemos aquí, Ekebergåsen, «la colina de Ekeberg». Y la sílaba lo alude a esa planicie que ves allí abajo -explicó señalando con el dedo-. La tercera razón es que contemplamos esta colina a diario y, por eso, es importante ver también lo que hay detrás, ¿no crees?

Halvorsen no respondió.

– No quería hablar de esto en la oficina -dijo Harry-. Ni en la tienda de Elmer. Tengo que contarte algo.

A pesar de la distancia que los separaba del mar, a Harry le parecía notar cierto olor a agua salada en las fuertes ráfagas de viento.

– Yo conocía a Anna Bethsen -confesó.

Halvorsen asintió con la cabeza.

– No pareces muy sorprendido -dijo Harry.

– Me lo imaginaba.

– Pero hay más.

– ¿Sí?

Harry se llevó a la boca un cigarrillo aún sin encender.

– Antes de seguir, debo advertirte que esto debe quedar entre nosotros, lo cual puede plantearte un dilema. ¿Comprendes? Así que si no quieres verte implicado, no te digo nada más y lo dejamos aquí. ¿Quieres que siga o no?

Halvorsen miró a Harry. Si se lo pensó, no invirtió mucho tiempo, pues asintió enseguida.

– Alguien me está mandando correos electrónicos a casa -dijo Harry-. En relación con esa muerte.

– ¿Alguien que conoces?

– No tengo ni idea. La dirección no me dice nada.

– ¿Así que por eso me preguntaste ayer sobre el rastreo de direcciones electrónicas?

– No tengo ni puta idea sobre estas cosas, pero tú sí. -Harry hizo un intento fallido de encender el cigarrillo entre las ráfagas de viento-. Necesito ayuda. Creo que Anna fue asesinada.

Mientras el aire del noroeste arrancaba las últimas hojas de los árboles de Ekeberg, Harry le habló de los extraños correos recibidos de un remitente que parecía estar al corriente de cuanto ellos sabían, e incluso de más. No aludió al hecho de que el contenido de los mensajes lo situaba a él en la escena del crimen la noche que Anna murió, pero mencionó la pistola que ella tenía en la mano derecha, a pesar de que la paleta, la fotografía del zapato y la conversación con Astrid Monsen revelaban que era zurda.

– Astrid Monsen me aseguró que nunca había visto a Vigdis Albu ni a los niños de la foto, pero cuando le enseñé la imagen de su marido, Arne Albu, en el periódico Dagens Næringsliv le bastó con una simple ojeada. Lo había visto varias veces recogiendo el correo. Venía por la tarde y se iba entrada la noche.

– Eso se llama hacer horas extras.

– Le pregunté a Monsen si sólo se veían entre semana, y me dijo que a veces venía a buscarla en coche algún que otro fin de semana.

– A lo mejor les gustaba variar un poco con excursiones a la verde campiña.

– Puede, salvo que el campo no estaría verde. Astrid Monsen es una mujer muy meticulosa y observadora. Me contó que nunca venía en verano. Eso fue lo que me hizo pensar.

– ¿Pensar sobre qué? ¿La posibilidad de mirar en hoteles?

– Quizá, pero uno también puede hospedarse en un hotel en verano. Piensa, Halvorsen. Piensa en lo más natural.

Halvorsen hizo una mueca acompañada de un gesto con el que indicó que no tenía sugerencia alguna. Harry sonrió y expulsó el humo con vehemencia.

– Tú mismo encontraste el sitio.

Halvorsen enarcó las cejas, sorprendido.

– ¡La cabaña! Por supuesto.

– ¿Verdad? Un nido de amor lujoso y discreto cuando la familia ha vuelto a casa, y los vecinos curiosos han cerrado las contraventanas. Y sólo a una hora de Oslo en coche.

– Y ¿qué? -preguntó Halvorsen-. Eso no nos dice gran cosa.

– No digas eso. Si podemos probar que Anna ha estado en esa cabaña, Albu, como poco, tendrá que dar explicaciones. No necesitamos mucho. Una pequeña huella dactilar. Un cabello. Un comerciante observador que de vez en cuando les llevara pedidos.

Halvorsen se frotó el mentón.

– Pero ¿por qué no ir directamente al grano y buscar huellas dactilares de Albu en el apartamento de Anna? Tiene que estar lleno.

– Porque dudo que quede alguna. Según Astrid Monsen, hará un año que, repentinamente, dejó de aparecer por allí. Hasta un sábado del mes pasado en que fue a buscarla en coche. Monsen lo recuerda muy bien porque Anna llamó a su puerta para pedirle que estuviera al tanto durante su ausencia, por si oía a algún ladrón.

– ¿Y tú crees que se fueron a la cabaña?

– Yo creo -dijo Harry arrojando a un charco la colilla humeante, que chisporroteó un instante antes de extinguirse- que existe una razón para que Anna tuviera esa foto en el zapato. ¿Te acuerdas de lo que aprendiste en la Academia de Policía sobre cómo asegurar pruebas técnicas?

– Sí, bueno, lo poco que nos enseñaron. ¿Y tú?

– No. Hay un maletín con el equipo estipulado en tres de los coches patrulla. Polvos, pincel y láminas de plástico para las huellas dactilares. Cinta métrica, linterna, tenazas, cosas así. Quiero que reserves uno de esos coches para mañana.

– Harry…

– Y llama antes a ese comerciante para que te indique cómo llegar hasta allí. Pregunta con amabilidad, para no levantar sospechas. Di que estás construyéndote una cabaña y que el arquitecto con el que trabajas te ha mencionado la de Albu como referencia. Que sólo quieres verla.

– Harry, ¿no podemos simplemente…?

– Tráete también una palanca.

– ¡Escúchame!

La subida de tono de Halvorsen espantó a dos gaviotas que, lanzando roncos chillidos, alzaron el vuelo rumbo al fiordo. Halvorsen fue contando con los dedos.

– No tenemos la hoja azul con la orden de registro, no tenemos pruebas que nos la faciliten, no tenemos… nada. Y lo más importante, nosotros, es decir, yo, no tengo toda la información. Porque no me lo has contado todo, ¿verdad, Harry?

– ¿Qué te hace…?

– Muy simple. No tienes un móvil lo bastante bueno. Conocer a la tía no es un móvil suficiente para que de repente infrinjas todas las normas y entres ilegalmente en la cabaña arriesgando tu puesto de trabajo. Y el mío. Sé que quizás estés un poco loco, Harry, pero no eres idiota.

Harry miró la colilla tnojada que flotaba en el charco.

– ¿Desde cuándo nos conocemos, Halvorsen?

– Hace casi dos años.

– ¿Te he mentido alguna vez en todo este tiempo?

– Dos años no es mucho.

– ¿Te he mentido alguna vez? Te pregunto.

– Seguramente.

– ¿He mentido alguna vez sobre algo realmente importante?

– No, que yo sepa.

– De acuerdo. Tampoco pienso mentirte ahora. Tienes razón, no te lo he contado todo. Y sí, estás poniendo en peligro tu trabajo ayudándome. Lo único que puedo decirte es que te meterías en problemas mucho más graves si te lo contara todo. Tal como están las cosas, tienes que confiar en mí. O no. Todavía estás a tiempo de dejarlo.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Nemesis»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Nemesis» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Nemesis»

Обсуждение, отзывы о книге «Nemesis» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x