Carmen Gaite - Entre Visillos

Здесь есть возможность читать онлайн «Carmen Gaite - Entre Visillos» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Современная проза, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Entre Visillos: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Entre Visillos»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Entre visillos, Premio Nadal 1957, narra la vida en una ciudad de provincias, llena de rutina, conservadurismo e hipocresía. A través de la charla aparentemente banal de un grupo de muchachas, conocemos sus ocupaciones cotidianas, sus angustias, la insalvable tristeza que asoma tras el aburrimiento y la falta de imaginación. La presencia de Pablo Klein, llegado a la ciudad para ocuparse de la clase de alemán del Instituto, es el pretexto narrativo que centra la mayor parte de los sucesos de Entre visillos. Pablo, persona reservada y observadora, honesta y poco convencional, choca con el ambiente plano y conformista. Con recursos estilísticos bien cuidados y un enfoque directo y realista, Carmen Marín Gaite nos da este retazo de vida española pintado con las tintas de la desilusión, los imposibles, y las aceptaciones de una juventud condenada a ver pasar la vida entre visillos.
Entre Visillos, narra la vida en una ciudad de provincias -probablemente Salamanca llena de rutina, conservadurismo e hipocresía. A través de la charla aparentemente banal de un grupo de muchachas, conocemos sus ocupaciones cotidianas -los paseos y primeros noviazgos, las salidas del instituto, las sesiones de cines, los bailes en el Casino-, sus angustias, su temor a la soltería, la insalvable tristeza que asoma tras el aburrimiento y la falta de imaginación.

Entre Visillos — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Entre Visillos», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– No. Acabo de llegar de veraneo.

– Yo tampoco. No debe haber sido nada del otro jueves. La ganadería esa va de capa caída.

Goyita miraba a los grupos de chicas cogidas del brazo. Las veía cruzar de una acera a otra; separarse, juntarse, echarse a reir.

– Oye, ¿tú conoces a mi amiga Toñuca, una que es un poco pelirroja?

– ¿Pelirroja? No sé, no me doy cuenta.

– Sí, hombre; si me parece que fue ella quien nos presentó. Una así chatita, de buen tipo.

– Ah, sí, ya. ¿Qué es? ¿Que la estás buscando?

– Sí.

– Pues estará en el Casino, ¿Por qué no vas?

– ¿Al Casino? No, hombre. He bajado sólo un momento, ya ves, de trapillo. Todavía huelo a tren. Si no la encontramos en esta vuelta, me subo a casa.

La gente daba la vuelta al llegar a la última manzana de la calle donde se acababan los arcos de luces. El militar la miraba.

– Anoche no estabas tú en el baile, ¿verdad? No te vi.

– ¿Pero no te estoy diciendo que acabo de venir?

– ¿Venir de dónde?

– De San Sebastián.

– Ah, qué suerte, tú. Estaría estupendo.

– Si. Oye, ¿y el baile de anoche qué tal? ¿Divertido?

– Yo me fui temprano. Había demasiada gente. Esa amiga tuya sí que estaba. Oye, pues tú de San Sebastián vienes más guapa.

– ¿Y es el primero de noche que ha habido?

– Creo que sí. El del aeropuerto es a la semana que viene. Debe de estar bien. Anda difícil lo de las invitaciones con tanta gente como ha venido este año…

También, en casa, durante la cena comentaron lo mismo. Que cuánta gente. Que más gente que ningún año, que en ningún sitio se cabía. José María, el hermano, que acababa de volver del campamento, le contó que Toñuca tenía en casa unos franceses y que andaba todo el día con ellos de acá para allá. Que estaba muy moderna. Luego se puso a relatar sucedidos del campamento. De uno vasco que le llamaban Marco Bruto. Menudo elemento, de los buenos elementos de allí. El último día, que estaba un poco bebido, se subió a unos cajones y empezó a echar un discurso metiéndose con los militares. Madre, qué risa. Ponía la misma cara del teniente, y le imitaba igual, los gestos, todo. Goyita preguntó si era uno alto, con la mandíbula saliente. Ella le conocía. Acompañaba a Isabel Segarra por el invierno. Cuando en esto viene el teniente, y todos a hacerle señas para que se callara. Si es otro se la carga, pero.el tenía salidas para todo. Le vio y se queda tan fresco. Va y le dice. (Teniente, ¿le gusta a usted el circo?). A Pitilín, la pequeña, le hizo mucha gracia el nombre de Marco Bruto y la segunda vez que lo dijeron se le atragantó la comida de risa. Tosia y la madre le daba en la espalda golpes como azotes. Don Gregorio dijo que la juventud de ahora no tenía respeto por nada ni por nadie. Goyita miraba el borde de la sopera y el cucharón asomando. Le costaba trabajo pensar que estaba en casa. Se levantó sin tomar el postre y telefoneó a Toñuca. No estaba. Cenaba con sus amigos fuera de casa. Le dijo su madre que al día si-

guiente se iban en excursión a Toledo.

– Que no me llame ya. Dígale que he vuelto. Estoy cansada y me voy a acostar.

Tardó en dormirse. A la mañana siguiente, bastante temprano, la llamó la chica de Madrid. Salieron juntas. Por la tarde fueron al Casino. Era enorme la cantidad de caras desconocidas. El salón de té lo habían decorado en tonos amarillos. Se sentaron en la mesa de Mercedes, Isabel y chicas mayores. Hablaban de dos en dos con risas y misterios y casi no las hicieron caso. A la nueva la miraron con recelo. Goyita pidió un gináfizz y se puso a mirar los dibujos dorados de las paredes. Cantaba la anima-dora, una rubia muy llamativa, y hacía calor. Isabel, mientras se empolvaba la nariz daba pataditas en el suelo y cantaba también acompasándose con la voz del micrófono: (Imposible-yaás‚ que tu destino-nos separa-pero déjame amarte…). Le preguntó a Goyita que qué tal por Santander.

– Ha sido en San Sebastián donde hemos estado.

– Ah, creí que en Santander. En San Sebastián estuvimos nosotros el año pasado. Bueno, en Zarauz, pero íbamos mucho. Tú vienes bien morenita.

– Sí.

No las sacó nadie a bailar.

Cuando salieron, la de Madrid le dijo a Goyita que cuántas mujeres, que todo eran mujeres, que así era imposible ligar un plan divertido.

– Y luego estas amigas tuyas, no sé, son como viejas.

– ¿No te gustan?

– No sé qué decirte. Parecen de señoras las conversaciones que tienen.

– Mi más amiga no está hoy-se excusó Goyita-. La conocerás mañana o pasado. Ésta te encantará. Es un cielo.

A su descontento se empezó a añadir la responsabilidad que sentía de divertir a la amiga de Madrid. Al día siguiente la llevó a ver la Catedral.

– Impone. Es enorme de grande, una de las de más mérito de España, ya lo habrás oído decir.

Subieron a la torre y volvieron muy cansadas. A Goyita le apretaban los zapatos. En la terraza de un café de la Plaza Mayor se encontraron con Toñuca y sus amigos extranjeros. Se sentaron con ellos. Goyita en seguida notó que la de Madrid le era simpática a Toñuca.

– Mira que llevarla a ver la Catedral, mujer, a quién se le ocurre. La tenemos que divertir de otra manera. Con las ganas que tiene.

– Hija, si es que estoy despistada todavía; no sé ni siquiera la gente que hay; es un lío venir del veraneo tan tarde. No te centras-se excusó Goyita.

– Nada, nada, que no tiene perdón llevarla a ver la Catedral.

– Sí, verdaderamente -dijo la de Madrid-. A mí todo me parece igual lo que construían en aquel tiempo. Venga bóvedas y más bóvedas.

A uno de los chicos franceses le hacía mucha gracia lo de prisa que hablaba.

– Sus cabellos son rubios -dijo-. En cambio tiene mucha característica vivacidad española.

Hablaron de Madrid. Ellos iban a ir a Madrid después de las fiestas. Toñuca sabía algunas palabras de francés y servía de intérprete en los momentos de mucho lío. Se reía. Se reían todos menos Goyita, que estaba a disgusto. La de Madrid dijo que de Madrid al cielo, y que ella les acompañaría cuando fueran allí.

– ¿Tú qué prefieres, el ambiente bohemio o los sitios finos? Porque a los franceses a cada cual le da por una cosa.

Goyita antes de las dos se levantó y cogió su bolso.

– Pero, ¿te vas tan pronto?

– Ya sabes que a mi padre le gusta comer a punto.

– Mujer, estamos en ferias.

– Sí, pero él no mira eso.

– Bueno, mona, pues luego te llamo. A tu amiga la acompañaremos nosotros.

Le dolía la cabeza y se echó la siesta. Vino José María a hablar con ella un rato. Las había visto en la Plaza y le preguntó que quién era la chica nueva.

– Una amiga mía, ¿por qué?

– Porque está de fenómeno. Si me la presentas, te doy una noticia bomba.

– Anda, déjame en paz, ¿no ves que quiero dormir un poco?

– Pero yo no entiendo, ¿qué he dicho para que te enfades?

– Si no estoy enfadada, déjame.

– Entonces, ¿cuándo me presentas a tu amiga? Mira que la noticia que te doy a cambio es muy buena.

Goyita se quedó callada con los ojos en el techo, en las rayas de luz y sombra que proyectaba la persiana. Vio alargarse y borrarse la sombra de un vehículo que rodó en la calle. Luego otro detrás. Automóviles.

– ¿Qué es? Dímelo, anda, lo que sea. Valiente bobada será.

José Maria se puso a mirar un libro. La vio de reojo incorporarse sobre los codos:

– No es bobada. Bien que te importa.

– Deja eso ahora, no seas. Dímelo. Te presento a Marisol cuando quieras.

– Vaya, el nombre no está mal. ¿Me la presentas seguro?

– Que sí.

– Pues está aquí Manolo Torre.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Entre Visillos»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Entre Visillos» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Entre Visillos»

Обсуждение, отзывы о книге «Entre Visillos» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x