John Hawks - El viajero

Здесь есть возможность читать онлайн «John Hawks - El viajero» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Современная проза, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

El viajero: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «El viajero»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Marcada por un sino implacable, había ocasiones en que Maya hubiera deseado nacer ciega e ignorante. Su infancia no fue la de tantas otras niñas de su edad, y Maya pronto se vio obligada a soportar duras pruebas. Su padre era uno de los últimos Arlequines, superviviente de una estirpe de guerreros protectores de los Viajeros que había sobrevivido a varios intentos de asesinato por parte de los mercenarios de la Tabula. Condicionada por su ascendencia genética, Maya tenía un único objetivo en la vida: proteger, con su propia vida si era necesario, a los Viajeros, seres humanos con la capacidad de saltar hacia mundos paralelos y de retornar a la dimensión terrestre con los conocimientos adquiridos en otros planos de la realidad.
Pero ¿por qué debía ella renunciar a una vida normal? Es más, ¿cómo podía aceptar que su propio padre optara por sacrificarla en nombre de un ideal tan extraño como maldito? ¿Acaso los ciudadanos de a pie, ignorantes de su propio destino, controlados por la Hermandad como si fueran animales condicionados, merecían tal sacrificio por su parte? Las dudas de Maya no la habían dejado en paz desde que se había enterado de una verdad que sólo aceptaría tras la muerte de su padre a manos de la Tabula. Entonces supo que había llegado el momento de actuar. Su misión: viajar a Estados Unidos y proteger a los hermanos Corrigan, los dos últimos Viajeros que quedaban sobre la faz de la tierra, y cuyo destino no era otro que el de cambiar los derroteros de un mundo demasiado corrompido.

El viajero — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «El viajero», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

– No me importa cómo se llamen. Encuéntreme uno. Quiero llevar un arma la próxima vez que cruce.

El general Nash asintió rápidamente, como si dijera: «Lo que usted quiera, señor Corrigan. No hay problema, nosotros nos encargaremos». Michael se recostó en su asiento. Se sentía con la confianza necesaria para plantear su siguiente demanda.

– Eso suponiendo que decida visitar los distintos dominios.

– Claro que los visitará -le contestó Nash.

– No me amenace, general. No sirvo en su ejército. Si quiere matarme, adelante. Perderá el elemento más importante de su proyecto.

– Si lo que quiere es dinero, Michael…

– Claro que quiero dinero, pero ése es un asunto trivial. Lo que realmente quiero es información. La primera vez que nos encontramos, usted me dijo que yo iba a ayudarles a culminar un gran adelanto tecnológico. Me dijo que entre los dos íbamos a cambiar la historia. Pues bien, ahora soy un Viajero. ¿Por qué debo soportar todos estos cables en mi cabeza? ¿Qué sentido tiene todo este esfuerzo?

Nash se acercó a la mesita auxiliar y cogió una galleta de chocolate.

– Venga conmigo, Michael. Tengo algo que enseñarle.

Los dos hombres salieron de la galería y caminaron hacia el ascensor.

– Todo esto comenzó hace ya varios años, cuando yo trabajaba en la Casa Blanca y desarrollé el programa Freedom from Fear. Todo el mundo en Estados Unidos iba a llevar un dispositivo conocido como «Enlace de Protección». Gracias a él habríamos acabado con el crimen y el terrorismo.

– Pero no funcionó -objetó Michael.

– En aquellos momentos, nuestra tecnología no era lo suficientemente sofisticada. Carecíamos del sistema informático capaz de manejar tanta información.

Cuando salieron del edificio, dos guardias de seguridad los siguieron a través del cuadrilátero del complejo de investigación. El aire era frío y húmedo, y densas nubes encapotaban el cielo nocturno. A Michael le sorprendió ver que se dirigían al Centro de Ordenadores porque allí únicamente se autorizaba la entrada a los técnicos especializados.

– Cuando asumí la dirección de la Hermandad -prosiguió Nash-, lo hice insistiendo en el desarrollo del ordenador cuántico. Sabía que sería lo bastante potente para resolver problemas complejos y manejar ingentes cantidades de información. Con una batería de ordenadores cuánticos podríamos controlar y monitorizar literalmente las actividades cotidianas de todos los habitantes del planeta. Puede que haya quien ponga objeciones, pero la mayoría de nosotros cederíamos parte de nuestra privacidad a cambio de mayor seguridad. Piense en las ventajas, Michael. Se acabaron las conductas desviadas. Se acabaron las sorpresas desagradables.

– No más Viajeros -añadió Michael.

El general Nash rió.

– Sí. Debo admitirlo. Deshacerse de la gente como los Viajeros formaba parte del plan. Pero todo eso ha cambiado. Ahora está usted en nuestro equipo.

Los guardias de seguridad permanecieron fuera del edificio cuando Michael y Nash entraron en el vestíbulo del Centro de Ordenadores.

– Un ordenador corriente funciona según el sistema binario -siguió explicando el general-. Al margen de su tamaño o potencia, sólo conoce dos estados de conciencia: 0 o 1. Los ordenadores tradicionales pueden trabajar a gran velocidad si se conectan en serie unos con otros. No obstante siguen limitados a esas dos posibilidades.

»Un ordenador cuántico está basado en la mecánica cuántica. Parece lógico que un átomo pueda girar arriba o abajo, es decir, 0 o 1. De nuevo estamos ante un sistema binario; pero la mecánica cuántica nos dice que un átomo puede estar arriba, abajo o en ambos estados al mismo tiempo. Por esta razón se podrían efectuar distintos cálculos simultáneamente y a gran velocidad. Dado que un ordenador cuántico utiliza conmutadores cuánticos en lugar de los convencionales, su potencia es inmensa.

Entraron en un cubículo desprovisto de ventanas, y una puerta de acero se cerró tras ellos. Nash apoyó la palma de la mano en un panel de cristal y una segunda puerta se descorrió con un siseo. Entraron en una estancia débilmente iluminada.

En su centro había un tanque de cristal sellado de unos dos metros de altura colocado sobre un recio pedestal de acero. Gruesos cables serpenteaban por el suelo desde el pedestal hasta una batería de ordenadores binarios situados contra la pared. Tres técnicos de bata blanca se afanaban alrededor del tanque de cristal como acólitos ante un altar. Sin embargo, cuando el general Nash los miró, salieron inmediatamente.

El tanque estaba lleno de un líquido espeso y verdoso que se movía y giraba lentamente formando remolinos. Pequeñas explosiones, como relámpagos, destellaban en distintas zonas del líquido. Michael percibió un zumbido y, en el aire, un olor como si alguien hubiera quemado hojas muertas.

– Éste es nuestro ordenador cuántico -dijo Nash-. Es un conjunto de electrones flotando en helio líquido ultracongelado. La energía que atraviesa el helio fuerza a los electrones a interactuar y a llevar a cabo procesos lógicos.

– Parece una pecera.

– En efecto. Sólo que los peces de colores aquí son partículas subatómicas. La teoría cuántica nos ha demostrado que, durante un brevísimo período de tiempo, las partículas de materia pasan a otra dimensión y después regresan.

– Igual que un Viajero.

– Y eso fue lo que ocurrió, Michael. Durante nuestros primeros experimentos con el ordenador cuántico empezamos a recibir mensajes de otra dimensión. Al principio no sabíamos qué ocurría. Pensamos que se trataba de un error en el software. Entonces, uno de nuestros científicos se dio cuenta de que habíamos recibido versiones binarias de ecuaciones matemáticas estándar. Cuando nos decidimos a enviar mensajes similares, empezamos a recibir otros que nos mostraron cómo crear un ordenador aún más potente.

– ¿Y fue así como construyeron esta máquina?

– Lo cierto es que ésta es nuestra tercera versión. El proceso de evolución ha sido continuo. Cada vez que mejorábamos el diseño, recibíamos información más avanzada. Fue como construir una serie de radios cada vez más potentes. Los sucesivos modelos nos permitieron escuchar más y mejor y recibir más información. Además, hemos aprendido otras cosas aparte de ordenadores. Nuestros nuevos amigos nos han enseñado el modo de manipular cromosomas y crear nuevas especies híbridas.

– ¿Y qué quieren? -preguntó Michael.

– Esa otra civilización lo sabe todo acerca de los Viajeros, y me parece que tienen un poco de envidia. -A Nash parecía hacerle gracia-. Están atrapados en su propio dominio, pero les gustaría visitar nuestro mundo.

– ¿Y eso es posible?

– El ordenador cuántico lo ha estado siguiendo a usted mientras cruzaba las barreras. Por eso le colocamos los electrodos en el cerebro. Usted es el explorador que nos proporcionará el mapa que nuestros nuevos amigos necesitan. Nos han prometido que, si usted logra cruzar a otro dominio, nos entregarán el diseño de un ordenador aún más potente.

Michael se acercó al ordenador cuántico y contempló los pequeños relampagueos. Nash creía comprender el poder en todas sus formas; pero de repente, Michael se dio cuenta de las limitaciones de la visión del general. La Hermandad estaba tan obsesionada por controlar la humanidad que no miraban más allá.

«Yo soy el guardián de la puerta -pensó Michael-. Soy yo quien controla lo que sucede. Si esa otra civilización quiere entrar en nuestro mundo, seré yo el que decida el modo en que vaya a ocurrir.»

Respiró profundamente y se alejó del ordenador cuántico.

– Muy impresionante, general. Juntos vamos a realizar grandes cosas.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «El viajero»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «El viajero» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


John Hawkes - Travesty
John Hawkes
John Hawkes - The Blood Oranges
John Hawkes
John Hawkes - Second Skin
John Hawkes
John Hawkes - The Lime Twig
John Hawkes
John Hawkes - The Beetle Leg
John Hawkes
John Hawkes - The Cannibal
John Hawkes
John Hawks - The Golden City
John Hawks
John Hawks - The Dark River
John Hawks
John Hawks - The Traveler
John Hawks
John Hawks - The GoldenCity
John Hawks
John Hawks - El Río Oscuro
John Hawks
Отзывы о книге «El viajero»

Обсуждение, отзывы о книге «El viajero» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x