Nicholas Pileggi - Casino - Amor y honor en Las Vegas

Здесь есть возможность читать онлайн «Nicholas Pileggi - Casino - Amor y honor en Las Vegas» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Современная проза, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Casino: Amor y honor en Las Vegas: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Casino: Amor y honor en Las Vegas»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Frank Rosenthal, El Zurdo, tuvo algo de simbólica: como la traca final de una era en la historia de la capital mundial del juego, Las Vegas.
Rosenthal, formado en la escuela de las apuestas deportivas ilegales llegó, como otros muchos, a Las Vegas con el propósito de hacer olvidar su pasado y seguir trabajando en lo que siempre había hecho: ser jugador. La pequeña ciudad de Nevada, sumidero de esperanzas bajo una capa febril y brillante, era una verdadera mina de oro, ideal para quienes patrocinaron la mudanza de Rosenthal, como también la de su viejo amigo Tony Spilotro, tan amante del dinero como de la violencia. Ambos fueron símbolos de una etapa frenética, trufada de violencia e ilegalidades, marcada por los intentos de la Mafia de establecer su hegemonía sobre los casinos. Una ciudad sin sitio para el amor, por lo que éste -como el que sentía Rosenthal hacia Geri, su esposa- estaba abocado al fracaso.
Casino, basada en hechos reales es, más allá de una novela de ritmo casi cinematográfico, un fascinante documento sobre el mundo del juego, sus leyes y sus corruptelas. Amor y adulterio, negocio y delito se entremezclan en una obra intensa y original, reveladora y absorbente.

Casino: Amor y honor en Las Vegas — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Casino: Amor y honor en Las Vegas», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

«No podéis imaginaros el peso que me quité de encima pensando que me había librado de aquellos locos.»

En 1967 terminó el contencioso de Frank Rosenthal con el Estado de Florida, y lo ganó dicho estado. La Western Union interrumpió el suministro telefónico a Select Sports Service de El Zurdo - el golpe de gracia- y la compañía telefónica cortó la línea en su domicilio.

Rosenthal afirma:

Al volver a casa, lo primero que pensé fue que podía seguir apostando en Chicago. Pero me equivoqué. Llegué a dicha ciudad en el momento justo de iniciarse la temporada de fútbol americano y las cosas me iban bien, pero, a medida que iban transcurriendo las semanas, cada vez veía más claro que en lugar de Chicago donde tenía que estar jugando era en Las Vegas.

Tenía un ático en Lakeshore Drive de Chicago y las personas adecuadas en Las Vegas, que hacían las apuestas por mí, pero me sentía cada vez más frustrado.

Preguntaba al hombre que tenía en Las Vegas:

– ¿Qué han sacado de ellos en tal juego?

Es decir, ¿qué parte ha correspondido a los corredores de apuestas de Las Vegas?

El tipo que estaba a mis órdenes hacía la comprobación, me llamaba y me decía:

– Siete.

Yo respondía:

– Adelante.

Entonces se ponía de nuevo en contacto conmigo y decía:

– Ahora son seis y medio.

– ¡Santo cielo! -exclamaba yo-. Pues rápido, a por los seis y medio.

Dos minutos después, insistía:

– Ahora son seis.

– ¡Seis!

– ¿Qué quieres que te diga, Frank? Las posibilidades oscilan.

Y así sucesivamente, semana tras semana. Por fin, recuerdo un fin de semana que disfruté realmente con el juego. Conseguí ganar la apuesta, pero precisamente aquel día decidí que si pretendía ganarme la vida apostando en el deporte, no podía hacerlo a distancia. Tenía que ir a Las Vegas. Recoger los bártulos y trasladarme allí, donde pudiera permanecer sentado observando el número hasta estar dispuesto al ataque.

El día en que me iba, Tony tenía que recogerme delante del hotel Belmont, llevarme a casa de Fiore para despedirme de él y luego acompañarme al aeropuerto. Y, evidentemente, Tony llegaba tarde.

Buccieri, tenía una residencia de verano en el lago Geneva, Wisconsin. Quedaba aproximadamente a una hora en coche de Chicago. Era una propiedad inmensa, con caballos, jardines, un fusil y un campo de tiro, donde Fiore se distraía los fines de semana.

Finalmente apareció Tony, con más de una hora de retraso. Siempre llegaba tarde. Incluso llegó tarde a su propia boda. En serio. Pero retrasarse para ir a ver a Fiore era una estupidez, porque Fiore no soportaba tener que esperar.

En definitiva, Tony aparece con dos colegas. Uno de ellos ahora está en la cárcel. Era un tipo realmente peligroso. Un auténtico duro. Casi me atrevería a decir que era el peor hijoputa que había conocido en mi vida. En mi vida. En mi vida. Y estoy hablando de muchos conocimientos.

A mí me odiaba. Me odiaba de verdad. Con pasión. Odiaba a todo el mundo. Incluso odiaba a Tony, pero a él le tenía miedo. No creo que Tony supiera hasta qué punto le odiaba el tipo, pero yo sí lo sabía.

Tony le agobiaba, al tipo. «¡Haz esto! ¡Haz aquello!» Lo insultaba. Un día que Tony lo estaba atosigando, gritándole, pegándole codazos en el pecho, vi al tipo tan frustrado que empezó a pegar cabezazos contra la pared. Yo estaba allí. Lo vi. Tony se limitó a reír.

Cuando por fin llegamos a casa de Fiore, apenas quedaba tiempo para tomar un café. Creo que Fiore ya nos había dejado de lado. Había salido a montar a caballo. Tenía que volver y bajarse del caballo, de modo que dispondríamos tan sólo de unos minutos. Creo que más bien lo que quería era simplemente decir adiós. Nos abrazamos, yo me fui otra vez para el coche y nos dirigimos al aeropuerto.

Estaba cabreado con Tony por haber ido a buscarme tan tarde. Me jodió lo de Fiore e iba a perder mi puto avión para Las Vegas. ¡Vaya faena! En aquella época había muy pocos vuelos directos a Las Vegas desde Chicago.

El tipo no dice nada y se pone en marcha. Nos metemos en la autopista. Hay que puntualizar que Tony, como conductor, era extraordinario. Era uno de sus puntos. Circula a ciento cincuenta y algo la hora. Nos metemos en medio del tráfico. Sorteando automóviles. Yo, sentado a su lado, aterrorizado.

Lleva a los colegas atrás, aterrorizados. Y para colmo, aparecen las sirenas. La pasma.

En cuanto oí las sirenas, le dije: «¡Lo que faltaba! Ahora sí que pierdo el maldito avión».

Él, más tranquilo imposible. Me suelta inesperadamente: «¡Aquí no se pierde nada! ¡Cállate la boca!».

Las sirenas se oyen cada vez más cerca, pero él no reduce. Y ya tenemos a dos coches patrulla pisándonos los talones. Nosotros, a toda mecha. Conduce durante kilómetros por delante de los polis, esquivando coches, haciendo chirriar los neumáticos y repitiendo todo el rato: «No te preocupes. Llegas al avión. No te preocupes».

Por fin, siempre con los coches patrulla detrás nuestro, enfila la vía del aeropuerto y para el coche delante de mi terminal. Ordena a uno de los muchachos que vaya a facturar mi equipaje. Luego le dice al otro que suba y no permita que cierren la puerta de embarque.

El primero saltó del coche, se fue al principio de la cola con mi equipaje y cuando el empleado le dijo algo, él le respondió otra cosa y el otro se echó atrás. El otro colega de Tony se fue corriendo a la puerta de embarque y consiguió que no me la cerraran.

No podéis imaginaros el peso que me quité de encima al llegar al avión y despegar, pensando que me había librado de aquellos locos.

El Zurdo iba hacia Las Vegas y el mismo recorrido hacía su expediente policial. El Departamento de Investigación Criminal de Chicago iba a avisar a la policía de Las Vegas de que Frank Rosenthal, El Zurdo, de treinta y ocho años, un corredor de apuestas que tenía su camarilla, un ventajista, un individuo que había permanecido inactivo una temporada, estaba a punto de llegar. El Departamento de Investigación Criminal enviaría a Las Vegas, de forma rutinaria, los informes de los miembros del grupo y de sus socios, siguiendo un programa extraoficial de intercambio de información que llevaba años en funcionamiento. Se informó a la policía de Las Vegas de que Rosenthal, El Zurdo, había sido detenido por asuntos relacionados con el juego como mínimo una docena de veces, que no se le había declarado culpable en ninguna ocasión, que en 1961 se había negado a declarar en relación con el intento de soborno a un jugador de baloncesto de Carolina del Norte y se había acogido treinta y siete veces a la Quinta Enmienda ante un subcomité del Congreso que investigaba las posibles conexiones entre el juego y la mafia.

No llevo ni una semana en La Vegas y ya me aparecen en la puerta. Recuerdo que tenía la gripe. Era la pasma.

Les hice pasar.

– ¿Qué se les ofrece?.

– Está detenido.

– ¿Por qué?

– Robo -dicen.

– ¡Vaya estupidez! -respondo. Me sorprenden de verdad. Soy consciente de que no he hecho nada.

– No te pases de listo con nosotros -dicen, y me esposan. Me hacen salir por el vestíbulo del hotel, me llevan a la jefatura de policía y allí, directamente al despacho de Gene Clark.

Allí estaba Clark. El jefe de policía. Un témpano de hielo. Un individuo muy corpulento.

– La verdad es que no pareces tan duro como te pintan -me dijo.

– Estoy de acuerdo con usted, señor Clark -respondí.

– No me interesan lo más mínimo tus salidas sarcásticas -dice él.

– No tenía intención de practicar el sarcasmo -respondo.

Me doy cuenta de que hace un gesto a los agentes que me llevaron hasta allí y éstos salen del despacho. Me encuentro allí solo y esposado.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Casino: Amor y honor en Las Vegas»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Casino: Amor y honor en Las Vegas» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «Casino: Amor y honor en Las Vegas»

Обсуждение, отзывы о книге «Casino: Amor y honor en Las Vegas» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x