Colleen McCullough - Las Mujeres De César

Здесь есть возможность читать онлайн «Colleen McCullough - Las Mujeres De César» весь текст электронной книги совершенно бесплатно (целиком полную версию без сокращений). В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: Историческая проза, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

Las Mujeres De César: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «Las Mujeres De César»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Las mujeres de César es el retrato de la ascensión de Cayo Julio César hasta los lugares más prominentes de su mundo, y comienza con su regreso a Roma en el año 68 a.C. En este libro Collen McCullough descubre al hombre que se enconde tras la leyenda. Y nos ofrece con gran maestría todos los datos y pormenores para que el lector decida por sí mismo. Tras El primer hombre de Roma, La corona de hierba y Favoritos de la fortuna, continúa el gran ciclo novelesco sobre la antigua Roma.

Las Mujeres De César — читать онлайн бесплатно полную книгу (весь текст) целиком

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «Las Mujeres De César», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

boni . Literalmente significa «hombres buenos». Se decía de aquellos que pertenecían a una facción ultraconservadora de dentro o fuera del Senado de Roma. A veces he utilizado el término de manera incorrecta en cuanto a su forma gramatical latina, porque resulta torpe utilizarlo siempre como sustantivo; de ahí que en algunas ocasiones lo haya empleado como adjetivo o como adverbio.

caballeros . Los equites eran los miembros de lo que Cayo Graco denominó la ordo equester. Bajo los reyes de Roma, los equites habían formado el segmento de caballería del ejército romano; en esta época los caballos eran escasos y costosos, lo que tuvo como consecuencia que el Estado dotase de caballos públicos a las dieciocho centurias originales en las que se agrupaban los caballeros. Cuando comenzó y fue creciendo la República, la importancia de la caballería romana disminuyó, aunque el número de centurias formadas por caballeros en la primera clase fue en aumento. En el siglo II a. J.C. Roma ya no tenía tantos caballos estatales, y los caballeros se convirtieron en un grupo social y económico que tenía poco que ver con los asuntos militares. Los caballeros ahora eran definidos por los censores solamente en términos económicos, aunque el Estado seguía proporcionando un caballo público a cada uno de los mil ochocientos equites de mayor categoría. Las dieciocho centurias de origen mantuvieron el número de cien caballeros cada una, pero el resto de las noventa y una centurias ecuestres (es decir, la primera clase) aumentaron hasta contener cada una muchó más de cien hombres. Estas setenta y tres centurias de mayor volumen estaban organizadas de una manera distinta de las Dieciocho; setenta de ellas eran de carácter tribal y había una centuria de seniors y una centuria de juniors por cada tribu. Al votar, a una de las Dieciocho nunca se le concedía la praerogativa; esto era exclusivamente para una de las centurias tribales de juniors.

Hasta el 123 a. J.C. los senadores eran también caballeros, pero ese año Cayo Graco separó el Senado como un cuerpo aparte formado por trescientos hombres. Era, en el mejor de los casos, como un proceso artificial; todos los miembros no senatoriales de familias senatoriales seguían siendo clasificados como caballeros, mientras que los propios senadores no sólo formaban parte de las tres centurias de senadores, sino que quedaban para propósitos electorales en las centurias que hubieran ocupado siempre.

El insoluble rompecabezas es: ¿quiénes eran los tribuni aerarii? Los ingresos exigidos para que el censo considerase a alguien caballero eran de cuatrocientos mil sestercios de ingresos, mientras que el tribunus aerarius exigía un censo de trescientos mil sestercios. Al principio yo creía que posiblemente eran funcionarios públicos -supervisores del Tesoro y cosas por el estilo-, pero después he llegado a convencerme de que Mommsen tenía razón. El apuntaba que había por lo menos dos escalones de caballeros de la primera clase: los que tenían un censo de cuatrocientos mil sestercios y los que lo tenían de trescientos mil sestercios; y los caballeros con menores ingresos eran los tribuni aerarii. ¿Significa eso que sólo los mil ochocientos caballeros que tenían caballo público poseían un censo de cuatrocientos mil sestercios o más? Yo también dudaría eso. Había miles de hombres muy ricos en Roma, y ningún censo podría dividir tan netamente un grupo con unos ingresos de otro en un punto de corte con cifras redondas. Quizás se tratase más bien de que un caballero senior dotado de caballo público había de tener por lo menos cuatrocientos mil sestercios de ingresos para propósitos de censo. Mientras que las otras setenta y tres centurias de la primera clase contenían una mezcla de caballeros plenos y de tribuni aerarii. Las centurias de juniors, es de imaginar, contenían más tribuni aerarii que las centurias de seniors. ¡Pero nadie lo sabe con certeza!

No había nada que impidiera que un caballero estuviera cualificado para tener el millón de sestercios (completamente extraoficial) necesario para convertirse en senador bajo el sistema antiguo, que era por lo que los censores se guiaban para suplir las vacantes que quedaban en el Senado; el hecho de que muchísimos caballeros no aspirasen a entrar en el Senado se debía puramente al amor que los caballeros le tenían a los oficios y al comercio, cosa que era fruto prohibido para los senadores, que sólo podían dedicarse a las tierras y a las propiedades.

caballo de octubre . En los idus de octubre (que era aproximadamente cuando finalizaban las campañas) se elegían los mejores caballos guerreros del año y se enganchaban por parejas a carros. Luego se celebraban carreras con ellos en el césped del Campo de Marte en lugar de hacerse en uno de los circos. El caballo situado a la derecha de los dos que formaban la pareja ganadora se sacrificaba a Marte en un altar erigido especialmente junto al curso de la carrera. Se mataba al animal con una lanza, después de lo cual se le cercenaba la cabeza y sobre ella se amontonaban pasteles pequeños, mientras la cola y los genitales se llevaba apresuradamente a la Regia, en el Foro Romano, y se dejaba que la sangre chorrease sobre el altar del interior de la Regia. Cuando acababan las ceremonias llevadas a cabo en torno a la cabeza cubierta de pasteles del caballo, ésta se arrojaba a dos grupos que competían por conseguirla, uno formado por habitantes de Subura y el otro por habitantes de la vía Sacra. Si ganaba la vía Sacra, la cabeza se clavaba en la pared exterior de la Regia, y si ganaba Subura, se clavaba en la pared exterior de la Turris Mamilia (el edificio más señalado de Subura). No se conoce el motivo que había detrás de todo esto y puede que los romanos de la República tardía sólo supieran que tenía alguna relación con el final de la temporada de campañas. No sabemos si los caballos de guerra eran públicos o no, pero quizás se nos perdone si suponemos que lo eran.

caballo niseano . La especie más grande de caballo conocido en la antigüedad. Su tamaño se desconoce, pero se cree que debía de ser por lo menos tan grande como la bestia medieval que llevaba a lomos a un caballero con armadura, ya que los reyes de Armenia y los partos confiaban en niseanos para transportar sus cataphracti (caballería ataviada con cota de malla de la cabeza a los pies, igual que los caballos). Procedían de la zona situada al sur y al oeste del mar Caspio, en Media, pero en la época de la República tardía había caballos niseanos en la mayor parte del mundo antiguo.

caballo público . Caballo que pertenecía al Estado, al Senado y al pueblo de Roma. Remontándonos hasta la época de los reyes de Roma, los gobiernos habían seguido siempre la política de abastecer a los mil ochocientos caballeros de las dieciocho centurias más importantes con caballos para montar durante el combate, teniendo presente que el origen de la Asamblea de las centurias era militar y que las centurias más importantes habían estado formadas por soldados de caballería. El derecho de estos importantes caballeros a tener un caballo público se tenía en alta consideración y se defendía con denuedo. Que un miembro del Senado, por el hecho de serlo, perdiera automáticamente su derecho a un caballo público es muy discutible.

calendas . El primero de los tres días que tenían nombre cada mes, los cuales representaban los puntos fijos del mes. Las fechas se calculaban hacia atrás a partir de esos tres días; calendas, nonas e idus. Las calendas siempre eran el primer día del mes. Estaban consagradas a Juno y en origen se habían hecho coincidir con la aparición de la luna nueva.

Campo de Marte . En latín Campus Martius. Situado al norte de las murallas Servias, el Campo de Marte limitaba al sur con el Capitolio y al este con la colina Pincia; el resto estaba rodeado por una enorme curva que describía el río Tíber. En tiempos de la República no era un suburbio habitado, sino que era el lugar donde esperaban los ejércitos hasta que se celebraba el desfile triunfal, donde se entrenaban los jóvenes en las prácticas militares, donde se encontraban los establos de los caballos que se enganchaban a los carros de carreras y donde se entrenaba a dichos caballos, donde tenían sus barracones los esclavos públicos, donde se reunía la Asamblea de las centurias y donde estaban los mercados de jardinería que rivalizaban con parques de recreo. En el vértice del recodo del río se encontraban los pozos llamados Trigario, lugar público donde los romanos iban a nadar, y justo al norte del Trigario había unos manantiales de agua caliente con propiedades curativas llamadas el Tarento. La vía Lata (vía Flaminia) cruzaba el Campo de Marte hacia el puente Mulvio, y la vía Recta cruzaba la vía Lata perpendicularmente.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «Las Mujeres De César»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «Las Mujeres De César» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Colleen McCullough - La huida de Morgan
Colleen McCullough
Colleen McCullough - El Primer Hombre De Roma
Colleen McCullough
Colleen McCullough - El Desafío
Colleen McCullough
Colleen McCullough - El caballo de César
Colleen McCullough
Colleen McCullough - Czas Miłości
Colleen McCullough
Colleen McCullough - Credo trzeciego tysiąclecia
Colleen McCullough
Colleen McCullough - Antonio y Cleopatra
Colleen McCullough
Colleen McCullough - Morgan’s Run
Colleen McCullough
Colleen McCullough - Las Señoritas De Missalonghi
Colleen McCullough
Colleen McCullough - 3. Fortune's Favorites
Colleen McCullough
Colleen McCullough - Sins of the Flesh
Colleen McCullough
Отзывы о книге «Las Mujeres De César»

Обсуждение, отзывы о книге «Las Mujeres De César» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x