R. M. Carús - El Alfabeto del Silencio

Здесь есть возможность читать онлайн «R. M. Carús - El Alfabeto del Silencio» — ознакомительный отрывок электронной книги совершенно бесплатно, а после прочтения отрывка купить полную версию. В некоторых случаях можно слушать аудио, скачать через торрент в формате fb2 и присутствует краткое содержание. Жанр: unrecognised, на испанском языке. Описание произведения, (предисловие) а так же отзывы посетителей доступны на портале библиотеки ЛибКат.

El Alfabeto del Silencio: краткое содержание, описание и аннотация

Предлагаем к чтению аннотацию, описание, краткое содержание или предисловие (зависит от того, что написал сам автор книги «El Alfabeto del Silencio»). Если вы не нашли необходимую информацию о книге — напишите в комментариях, мы постараемся отыскать её.

Hemos olvidado qué somos. Nos percibimos como entes perecederos, incompletos, desamparados, impotentes, aislados, sujetos a fuerzas extrañas. Al haber impuesto tales ideas de nosotros sobre nosotros mismos hemos caído en una suerte de avanzado alzhéimer espiritual.
El Alfabeto del Silencio es un libro lleno de maravillosos cuentos, reveladoras meditaciones guiadas y claros textos explicativos cuyo objetivo es avivar tu naturaleza olvidada, facilitar el retorno a lo extraordinario latente en ti.
Lo expuesto en estas páginas forma parte de la enseñanza Universal, del mensaje del Amor contenido en el núcleo de las principales tradiciones espirituales como el budismo, el taoísmo, el sufismo, el misticismo o el advaita vedanta y se basa en especial en la práctica de Un Curso de Amor y Un Curso de Milagros como camino de unión con lo esencial en uno mismo y con toda la vida. Sobre todo, surge del hondo contacto con el Ser del que parte la única guía.
Aun así, las palabras más elocuentes son las que nunca se pronuncian, porque la realidad última no puede ser expresada. Por eso el recuerdo de qué eres se manifiesta a través del único silencio posible, el silencio interior. En nosotros existe un gran remanso de seguridad, dicha, Unión, belleza, sabiduría. Despertar consiste en regresar allí, precisamente a donde te acerca esta bella obra, escrita de manera no dogmática, práctica y amena.

El Alfabeto del Silencio — читать онлайн ознакомительный отрывок

Ниже представлен текст книги, разбитый по страницам. Система сохранения места последней прочитанной страницы, позволяет с удобством читать онлайн бесплатно книгу «El Alfabeto del Silencio», без необходимости каждый раз заново искать на чём Вы остановились. Поставьте закладку, и сможете в любой момент перейти на страницу, на которой закончили чтение.

Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Cuando presenciamos el mar, un objeto o a un semejante, no estamos presenciando el mar, el objeto ni a ese semejante. Sin embargo, a la superficie del mar la llamamos «mar», a nuestras opiniones sobre alguien las llamamos «semejante», y a nuestra idea del mundo la llamamos «mundo». Cuando nos encontramos frente al océano, no estamos asistiendo al océano, sino a nuestra idea de océano. Cuando hablamos con un semejante, no estamos hablando con un semejante, sino con nuestra idea de él. Cuando afrontamos cualesquiera circunstancias, estamos afrontando nuestra interpretación de ellas. Cuando actuamos en el mundo estamos actuando sobre nuestra percepción.

Nunca actuamos sobre la realidad, sino sobre nuestra idea de la realidad. Cómo la hayamos forjado determinará nuestra noción del entorno y por ende nuestra manera de actuar sobre él.

Lo que llamamos mundo, pues, es el conjunto de nuestras ideas, un grupo de pequeños conceptos cerrados, una colección de objetos mentales, un ámbito infinito convertido en un esquema estático y severamente limitado. En ese trueque nos perdemos la maravillosa inmensidad, tanto material como incorpórea, oculta detrás. El mundo que percibimos no existe. Aquello que existe es algo mucho más vasto, mágico e insondable.

¿Cómo acceder a él? El primer paso es sencillo. Consiste en recordar que tras la superficie existe el fondo. Eso es suficiente para comenzar a ver. Haz la prueba, y observa si todo no comienza a conocerse de una manera asombrosamente distinta.

Comprender

Cuando el mar se agita aparece una ola. Algo destaca, salta y se desprende adquiriendo un color y una forma diferenciada. El razonamiento percibe el océano como una cosa y la ola como otra distinta. Para poder distinguirlas da a cada una un nombre diferente. Puede incluso llegar a analizar la masa de la ola, la velocidad a la cual se mueve, su aceleración, su amplitud, las fuerzas intrínsecas al desplazamiento, su constitución interna, el fenómeno por el cual se forma la espuma, el rozamiento que ejerce sobre el fondo marino. Así le es posible llegar a entender detalladamente la ola. Pero si soslayara el hecho de que la ola es realmente el océano manifestándose en una forma concreta, que ambos son el mismo elemento, que forman una unidad y que esencialmente no son diferentes, habría perdido completamente su significado. Habría entendido la ola aisladamente, pero no habría comprendido nada.

Podríamos equiparar la ola con lo físico y su realidad oceánica con lo etéreo; igualmente, los objetos de nuestro entorno son ondas surgidas de un gran mar impalpable tendido en su raíz.

Entender y comprender pueden parecer términos equivalentes. No obstante comprender posee un sentido adicional: también significa abarcar, unir.

Al empeñarnos en escudriñar independientemente cada elemento a nuestro alcance, dejamos de comprender el todo. El raciocinio y los sentidos captan la fachada del entorno desmembrándola en partes sueltas y considerando cada una por separado. Al hacerlo se pierde el sentido esencial de Unidad. Los objetos, los acontecimientos se perciben como olas desconectadas de un gran océano.

Para comprender no es necesario elaborar, sino simplemente advertir, notar lo que Es sin añadir ni quitar nada, presenciar cómo la ola se forma por un movimiento de la superficie oceánica y cómo, cuando pierde su forma, vuelve a disolverse en aquello de lo cual surgió y que nunca dejó de ser. A partir de ahí, subordinado a la comprensión, el estudio aislado de cualquier fenómeno es un maravilloso ejercicio intelectual capaz de añadir gran riqueza a la experiencia; por el contrario, cuando se antepone a ella, es motivo de una formidable confusión.

El cristal quebrado

Imagina que un día comenzaras a ver todo a tu alrededor con aspecto roto, como si alguien hubiese tomado fotografías de cada cosa, las hubiese despedazado y hubiese descolocado los recortes. Supón que al mirarte a ti mismo te vieses de la misma manera. Sin duda serías presa de un gran temor. En caso de que esa percepción se prolongara durante mucho tiempo, probablemente ese miedo se atenuaría, aunque quedaría latente en ti, y acabarías tomándolo como la manera normal de vivir.

Figúrate que al cabo de un tiempo advirtieses que, por algún motivo, frente a ti se había interpuesto un cristal quebrado en el cual no habías reparado anteriormente, y cayeras en la cuenta de que la fragmentación no se encontraba en lo que estabas viendo, sino en ese cristal. Al ver a su través habías atribuido erróneamente la rotura al entorno, porque cuando se mira por un cristal roto todo lo que hay detrás cobra esa misma apariencia.

El entorno roto es lo que llamaremos lo aparente. El cristal, la mente dividida. Lo que hay tras él, lo real. El sueño se da por fragmentación, por una percepción troceada, desintegrada, desmenuzada, inconexa, instalada sin culpa por nosotros en nosotros mismos.

Veamos a continuación cómo se construye el cristal quebrado.

El velo del pensamiento

El pensamiento es una pequeña porción de la mente cuya sobreutilización deriva en la racionalización de un mundo últimamente mágico. Cuando se utiliza de manera abusiva actúa como un denso cedazo, como una retícula cuyos hilos trocean la experiencia en piezas, prototipos, maquetas, pequeños objetos mentales inteligibles por mecanismos lógicos, secuenciales, memorísticos, cartesianos a través de los cuales nos complacemos en entender. Identificamos una forma como árbol, otra como edificio, otra como viento, otra como lápiz, otra como sabor, otra como nube, otra como música, otra como mujer. Para ello hemos de recortar cada input a fin de hacerlo inteligible y colocar cada uno en una casilla preconcebida por factores perceptivos, biográficos, emocionales, educativos, sociales, perfilando una silueta para cada elemento. Así, a través de un severo proceso reductivo, aislamos cada pieza. Una vez armadas las costillas de la percepción, las rellenamos adaptando la realidad a esa forma preconcebida, y al hacerlo, seguros de haberla abarcado, nos sentimos momentáneamente satisfechos. Mediante este proceso inconsciente de colosal reducción olvidamos la riqueza, la interconexión y el misterio de la creación.

Los hilos de esa retícula quedan cristalizados en palabras, formas rígidas cuya función es acuñar conceptos. Las palabras guardadas en la memoria llevan en sí una distorsión implícita. En el momento en que damos nombre a las cosas las sustituimos por conceptos y creemos entenderlas. Entonces nos alejamos de ellas. Sin darnos cuenta comenzamos a ver una realidad dominada por pequeños modelos a causa de los cuales el orbe queda inmensamente empobrecido. Consecuentemente comenzamos a percibir un entorno repetitivo, monótono, gris, mortecino, carente de interés.

Si alguien te dijera que esta mañana ha visto un pájaro, tú inmediatamente extraerías de la memoria tu concepto de pájaro —una imagen, un color, un sonido, una sensación— y pensarías «comprendo lo que has visto». Pero con certeza lo que el otro ha presenciado no ha sido la imagen ni el color ni la sensación que tú tienes en mente, sino una realidad diferente y mucho más honda, aunque tal vez tampoco la haya captado al haberla conceptualizado en su pensar. Fíjate: mientras el pensar siga cribando sin interrupción, el mundo percibido seguirá despojado de significado para ambos.

Esto no quiere decir que el lenguaje y la razón no sean herramientas maravillosas. Cuando se utilizan para apuntar hacia lo innombrable son instrumentos de riqueza inusitada. Sin embargo, cuando se usan para sustituirla por símbolos recortados constituyen una sutil pared entre nosotros y la infinita realidad. Solo darse cuenta de esto es ya una manera de volver a conectar con ella.

Читать дальше
Тёмная тема
Сбросить

Интервал:

Закладка:

Сделать

Похожие книги на «El Alfabeto del Silencio»

Представляем Вашему вниманию похожие книги на «El Alfabeto del Silencio» списком для выбора. Мы отобрали схожую по названию и смыслу литературу в надежде предоставить читателям больше вариантов отыскать новые, интересные, ещё непрочитанные произведения.


Отзывы о книге «El Alfabeto del Silencio»

Обсуждение, отзывы о книге «El Alfabeto del Silencio» и просто собственные мнения читателей. Оставьте ваши комментарии, напишите, что Вы думаете о произведении, его смысле или главных героях. Укажите что конкретно понравилось, а что нет, и почему Вы так считаете.

x